23Jesús mismo al comenzar su ministerio era como de treinta años, hijo, según se creía, de José, hijo de Elí, [Lc. 3]
1Libro de la genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham.
2Abraham engendró a Isaac, Isaac a Jacob, y Jacob a Judá y a sus hermanos. 3Judá engendró de Tamar a Fares y a Zara, Fares a Esrom, y Esrom a Aram. 4Aram engendró a Aminadab, Aminadab a Naasón, y Naasón a Salmón. 5Salmón engendró de Rahab a Booz, Booz engendró de Rut a Obed, y Obed a Isaí. 6Isaí engendró al rey David, y el rey David engendró a Salomón de la que fue mujer de Urías. 7Salomón engendró a Roboam, Roboam a Abías, y Abías a Asa. 8Asa engendró a Josafat, Josafat a Joram, y Joram a Uzías. 9Uzías engendró a Jotam, Jotam a Acaz, y Acaz a Ezequías. 10Ezequías engendró a Manasés, Manasés a Amón, y Amón a Josías. 11Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, en el tiempo de la deportación a Babilonia.
12Después de la deportación a Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, y Salatiel a Zorobabel. 13Zorobabel engendró a Abiud, Abiud a Eliaquim, y Eliaquim a Azor. 14Azor engendró a Sadoc, Sadoc a Aquim, y Aquim a Eliud. 15Eliud engendró a Eleazar, Eleazar a Matán, Matán a Jacob; 16y Jacob engendró a José, marido de María, de la cual nació Jesús, llamado el Cristo. [Mt. 1]
18El nacimiento de Jesucristo fue así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló que había concebido del Espíritu Santo. 19José su marido, como era justo, y no quería infamarla, quiso dejarla secretamente. 20Y pensando él en esto, he aquí un ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu Santo es.[Mt. 1]
26Varones hermanos, hijos del linaje de Abraham, y los que entre vosotros teméis a Dios, a vosotros es enviada la palabra de esta salvación. 27Porque los habitantes de Jerusalén y sus gobernantes, no conociendo a Jesús, ni las palabras de los profetas que se leen todos los días de reposo,* las cumplieron al condenarle. 28Y sin hallar en él causa digna de muerte, pidieron a Pilato que se le matase. 29Y habiendo cumplido todas las cosas que de él estaban escritas, quitándolo del madero, lo pusieron en el sepulcro. 30Mas Dios le levantó de los muertos. 31Y él se apareció durante muchos días a los que habían subido juntamente con él de Galilea a Jerusalén, los cuales ahora son sus testigos ante el pueblo. 32Y nosotros también os anunciamos el evangelio de aquella promesa hecha a nuestros padres, 33la cual Dios ha cumplido a los hijos de ellos, a nosotros, resucitando a Jesús; como está escrito también en el salmo segundo: Mi hijo eres tú, yo te he engendrado hoy.[Hch. 13]
7 Yo publicaré el decreto;
Jehová me ha dicho: Mi hijo eres tú;
Yo te engendré hoy. [Sal. 2]
5Porque ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás:
Mi Hijo eres tú,
Yo te he engendrado hoy,
y otra vez:
Yo seré a él Padre,
Y él me será a mí hijo?[He. 1]
5Así tampoco Cristo se glorificó a sí mismo haciéndose sumo sacerdote, sino el que le dijo:
Tú eres mi Hijo,
Yo te he engendrado hoy.
6Como también dice en otro lugar:
Tú eres sacerdote para siempre,
Según el orden de Melquisedec.[He. 5]
1Todo aquel que cree que Jesús es el Cristo, es nacido de Dios; y todo aquel que ama al que engendró, ama también al que ha sido engendrado por él.[1 Jn. 5]
18Sabemos que todo aquel que ha nacido de Dios, no practica el pecado, pues Aquel que fue engendrado por Dios le guarda, y el maligno no le toca.[1 Jn. 5]
26Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, 27a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María. 28Y entrando el ángel en donde ella estaba, dijo: ¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres. 29Mas ella, cuando le vio, se turbó por sus palabras, y pensaba qué salutación sería esta. 30Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. 31Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS. 32Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; 33y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin. 34Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será esto? pues no conozco varón. 35Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios. 36Y he aquí tu parienta Elisabet, ella también ha concebido hijo en su vejez; y este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril; 37porque nada hay imposible para Dios. 38Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia.[Lc. 1]