-El Señor Jesús pudo haber hecho el buen vino desde el vacío de las tinajas de piedra en las bodas de Caná, pero no lo hizo así, sino con la mucha agua con que fueron llenadas.
-Pudo haber provisto de alimento suficiente transformando las muchas piedras, pero multiplicó lo muy poco de panes y peces hasta saciar a la multitud que lo seguía.
-La única vez que pidió agua, no leemos que la samaritana se la hubiera dada.
-El cristiano se distingue por dar en silencio sin reprocharle a los demás que ellos no dan.