Re: ¿Y qué del purgatorio?
Por supuesto que la salvación para los que se convierten al señor es un regalo gratis, pero eso no niega que cuando muera el cuerpo del creyente su alma será purificada de los pecados cometidos en vida para poder entrar al cielo y salvarse definitivamente. Esto refuerza y garantiza la salvación de los creyentes. La biblia da muchos indicios de esta purificación post-mortem.
Nadie ni ningún creyente es tan santo como para nunca pecar en vida y puede morir con algún pecadillo a cuestas. Luego Jesús hace la prueba de fuego para determinar la calidad de toda la obra que el creyente hizo sobre el fundamento. Si las obras se queman y no pasan la prueba, el creyente sufrirá una pérdida por ello, pero de todas formas se salvará así como por fuego.
Esto es lo que garantiza que el creyente al final tenga salvación.
Ese es el principio de la salvación pero no es el culmen.Deduzco que tu piensas que la salvacion no la concede Dios si no hasta despues de la muerte, si es asi te comunicaré buenas nuevas.
La salvación, la redención, el perdón de pecados y recibir la Vida Eterna es un paquete regalo gratis que Dios nos da ipsofacto al momento de convertirnos a El, es decir confesar nuestros pecados y dejar de andar de espaldas a Dios, recibir posteriormente su E.S. y hacer su voluntad, la salvación es por fe y por Gracia de Dios, ese es el comienzo de una gran salvación Heb cap 2
No es necesario que el cuerpo muera físicamente para recibir la salvación, pero si tenemos que morir a nuestra vana forma de vivir anteriormente o sea al morir al pecado y recibir a Cristo ya somos salvos y somos justos delante de Dios, pero no por nuestros meritos sino por que la sangre de Jesucristo derramada en el Calvario nos cubre y ya no nos ve Dios a nosotros con nuestos pecados, so no que nos ve recubierto en Jesucristo y su obra redentora, por tanto a partir de entonces tenemos vida eterna, por que la vida es Jesucristo y ya vive en nosotros, portanto no tenemos que esperar a la muerte física para recibir salvación, pero si que estamos sujeto a pruebas que acarrean un juicio diario (en el creyente) Heb. 10:30 Pues conocemos al que dijo: Mía es la venganza, yo daré el pago, dice el Señor. Y otra vez: El Señor juzgará a su pueblo.
10:31 ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo! Este juicio se lo dice a los vivos no a los muertos.
Los ateos o incrédulos ya tendrán su juicio en el Juicio Final
Heb. 9:27 Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio,
Si después de esto no te queda claro por mas que te diga no querras ver.
Por supuesto que la salvación para los que se convierten al señor es un regalo gratis, pero eso no niega que cuando muera el cuerpo del creyente su alma será purificada de los pecados cometidos en vida para poder entrar al cielo y salvarse definitivamente. Esto refuerza y garantiza la salvación de los creyentes. La biblia da muchos indicios de esta purificación post-mortem.
Nadie ni ningún creyente es tan santo como para nunca pecar en vida y puede morir con algún pecadillo a cuestas. Luego Jesús hace la prueba de fuego para determinar la calidad de toda la obra que el creyente hizo sobre el fundamento. Si las obras se queman y no pasan la prueba, el creyente sufrirá una pérdida por ello, pero de todas formas se salvará así como por fuego.
Esto es lo que garantiza que el creyente al final tenga salvación.