Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Ana , el adventismo como el protestantismo liberal en general, niega todos los sacramentos y en especial el de la Eucaristia, lo que consideran una "figura" algo meramente simbolico y representativo de la pasion, pero nada mas. Esas por tanto son religiones puramente naturales, pero no hay mucho de sacramental en estos grupos.
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Ya sabadv, te lo ha explicado mejor que yo.
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

toni dijo:
Y os puedo asegurar otra cosa, yo estaré con el Señor para siempre.

Pues si estás tan seguro de te salvación te recomiendo leer:

1Corintios 9:25-27
Los atletas se privan de todo; y eso ¡por una corona corruptible!; nosotros, en cambio, por una incorruptible.
Así pues, yo corro, no como a la ventura; y ejerzo el pugilato, no como dando golpes en el vacío,
sino que golpeo mi cuerpo y lo esclavizo; no sea que, habiendo proclamado a los demás, resulte yo mismo descalificado.


Filipenses 2:12
Así pues, queridos míos, de la misma manera que habéis obedecido siempre, no sólo cuando estaba presente sino mucho más ahora que estoy ausente, trabajad con temor y temblor por vuestra salvación,


Pablo no estaba seguro, porque el buscaba la excelencia, el no solo buscaba salvarse, sino ser de los mejores ante Dios.

El que se cree salvado desde ya, se queda estancado no evoluciona, es como un niño que nunca crece y necesita que siempre se le de comida de niños:


Saludos
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Pues si estás tan seguro de te salvación te recomiendo leer:

1Corintios 9:25-27
Los atletas se privan de todo; y eso ¡por una corona corruptible!; nosotros, en cambio, por una incorruptible.
Así pues, yo corro, no como a la ventura; y ejerzo el pugilato, no como dando golpes en el vacío,
sino que golpeo mi cuerpo y lo esclavizo; no sea que, habiendo proclamado a los demás, resulte yo mismo descalificado.


Filipenses 2:12
Así pues, queridos míos, de la misma manera que habéis obedecido siempre, no sólo cuando estaba presente sino mucho más ahora que estoy ausente, trabajad con temor y temblor por vuestra salvación,


Pablo no estaba seguro, porque el buscaba la excelencia, el no solo buscaba salvarse, sino ser de los mejores ante Dios.

El que se cree salvado desde ya, se queda estancado no evoluciona, es como un niño que nunca crece y necesita que siempre se le de comida de niños:


Saludos


Lea y medite con atención los sigientes textos bíblicos y observe el tiempo verbal en el que se hallan escritos:


De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, TIENE VIDA ETERNA; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida.(Juan 5:24)

Porque en esperanza FUIMOS SALVOS; pero la esperanza que se ve, no es esperanza; porque lo que alguno ve, ¿a qué esperarlo? 25Pero si esperamos lo que no vemos, con paciencia lo aguardamos.(Romanos 8:24-25)

Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis; 2por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, SOIS SALVOS, si no creísteis en vano.(1 Cor 15:1-2)

PORQUE POR GRACIA SOIS SALVOS por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; 9no por obras, para que nadie se gloríe.(Efesios 2:8-9)

El que cree en el Hijo TIENE VIDA ETERNA; pero el que rehúsa creer en el Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios está sobre él.(Juan 3:36)

De cierto, de cierto os digo: El que cree en mí, TIENE VIDA ETERNA.(Juan 6:47)

Y YO LES DOY VIDA ETERNA; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano(Juan 10:28)


3Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que SEPÁIS QUE TENÉIS VIDA ETERNA, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios.(1 Juan 5:13)




Amigo, no haga mentiroso a Dios ni desconfíe de sus promesas. Dios es Fiel.

Si su iglesia le enseña otra cosa, tenga por seguro que es un evangelio diferente.


:elcaminan
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Varios ex-sacerdotes católico-romanos, escriben y hacen llegar a sus casas una excelente revista. Solícitela.


http://www.enlacallerecta.es/
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Estimada AnaMS,
gracia y paz sean derramadas abundantemente en su preciada vida.

Antes que nada, y siendo esta la primera vez que vamos a intercambiar comentarios en los foros, quiero decirle que espero que todo lo que podamos compartir nos sea de mutuo provecho, pero sobre todo que sea para la gloria de Dios y honre Su Palabra y no nuestras posiciones personales.

Ahora si, paso a comentar una parte de uno de sus aportes, misma que lammó mi atención. Es la siguiente:
Los católicos que se van de la Iglesia, son pesimos católicos, ignorantes del gran talento que se les dió, de la riqueza y fuerza de los sacramentos.
AnaMS, con todo respeto, pero también de manera muy directa, debo decirle que esta afirmación suya, además de exagerada y cargada de subjetividad, está totalmente equivocada. Para empezar, no veo la manera en que usted pueda asegurar, así como lo hace, que todos los que han dejado las filas de la iglesia católico-romana fueron pésimos católicos e ignorantes de la doctrina católica ¿Tiene usted acaso registro de cada uno de ellos? ¿Conoce su vida y obra dentro del catolicismo que dejaron atrás? Sino, su afirmación no pasa de ser una opinión, muy respetable, pero muy suya, y que dista mucho de estar apegada a la realidad.

Muchos de los que dejan las filas del catolicismo son personas que conocían la doctrina, que eran practicantes de la misma, muchos, es más, pertenecían al clero, y hay casos documentados de ello, como se da en todos lados. Pero lamentablemente, debe usted saber que muchos de los que dejan las filas católicas lo hacen para engrosar las filas del ateismo, o del humanismo o de alguna filosofía extraña y/o ajena al cristianismo, y peor aún, muchos de los que se dicen católicos y que forman parte de la feligresia (que se siguen bautizando a sus hijos, que siguen yendo a misa los domingos, que se casan "por la iglesia", que ayunan durante la cuaresma, que celebran al santo patrono de su localidad, etc.), se mueven por creencias y opiniones personales, muchas de las cuales se aparta de la enseñanza de Jesucristo, son catolicos, si, pero no son cristianos. Eso si que es grave.

Así que, AnaMS, la próxima vez busque que sus afirmaciones sean más objetivas, y basadas en datos que usted haya verificado.

Atte.
Joaco <><
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Sabadv, Gracias por tu respuesta!. y Joaco, Tienes razón en que muchos supuestos "católicos" son un antitestimonio de cristianismo. Pero un verdadero católico no dejaría la Iglesia, porque realmente entendería y amaría el gran Talento que se le dió y por el cual Jesús le va a preguntar que tesoros espirituales le lleva por hacerlo fructificar, que hizo de él, lo enterro? lo desprecio? lo rechazo?. Ese gran tesoro es: EL VERDADERO CUERPO Y SANGRE DE JESUS EN LA EUCARISTIA, ESE MISMO CUERPO QUE ESTUVO EN EL CALVARIO!!!! Un católico no lo dejaría por NADA del mundo. Los que se van, obviamente no entienden la gran entrega del Señor, su gran locura de amor, su presencia Viva y Real que cubre toda la tierra. En las Iglesias del mundo, está Jesús en Cuerpo, Alma, Sangre y Divinidad, y desde allí su Fuerza de Amor Infinito sostiene a la tierra y a sus habitantes. Cada 30 segundos en cualquier parte del mundo, se está celebrando una eucaristía, allí Jesús, a travez del corazón herido de amor del sacerdote, corazón ungido, revive su sacrificio de amor y por el Sacrificio Eterno, el pan se convierte en su Cuerpo y el vino en su Sangre.

Un supuesto católico que cree en la reencarnación, se devuelve mas de 4000 años, y desperdicia la sangre del pueblo judio, la sangre del Señor Jesús y la sangre de todos los mártires que tuvieron que ser sacrificados para que hoy, nosotros pudieramos nacer católicos y recibir el gran milagro de amor el Cuerpo y la Sangre de Dios. Un católico que sale de la Iglesia a una iglesia separada, rechaza cenar en la mesa de la Casa Paterna, el Maná Divino que en su entrega de amor se esfuerza por alimentarlo y vitalizarlo y hacerlo fructificar para la gloria de Dios y el bien de sus hermanos.

POR ESO A TODO CRISTIANO, SOBRE TODO A LOS EX-CATOLICOS, EN EL NOMBRE DE JESUS, LES PIDO QUE PROFUNDICEN EN LAS ESCRITURAS SOBRE EL CUERPO Y LA SANGRE DEL SEÑOR EN LA EUCARISTIA.



Encuentro con la Eucaristía

Por Fernando Casanova. Pastor Evangélico. Ph D en Teología.

Aceptando el reto lanzado por un fraile capuchino fui a ver una Hora Santa. El religioso me enteró de una comunidad “muy eucarística”, que tenían exposiciones del Santísimo programadas, y que se aprestaban esa misma noche a celebrar una adoración eucarística. Y me remitió a la parroquia Santa Bernardita, de Country Club, esa misma noche a las 7:30.

Quedé absorbido de inmediato por los detalles de ambientación y embellecimiento del altar, la ornamentación majestuosa del presbítero, una custodia hermosísima, incienso por el altar, luces de escenario, música sublime… y la disposición y devoción de aquellos fieles no tenían precedentes en mi memoria.

Hasta que caí en la cuenta de lo que hacían: ¡adoraban un trozo de pan!

Y para colmo el sacerdote le oraba con tanta seguridad y confianza, muy solemne, pero con familiaridad, similar a mis oraciones, pero él oraba con más convicción, como si de veras estuviera frente al Señor. Ese cura, y las cerca de 200 personas que le acompañaban, estaban convencidos de que lo que estaba colocado en la custodia los escuchaba, y de que era Jesucristo.

Se me ocurrió que si esas personas estaban equivocadas, y yo deseaba que lo estuvieran, entonces lo que me habían enseñado de niño era cierto a fin de cuentas: los católicos son idólatras. Durante algunos años me tuvieron a la defensiva con los temas y circunstancias que narraba al principio, pero ya no. Era imposible que estuvieran en lo correcto. Era increíble para mí que pensaran que adoran a Jesús y que se lo puedan comer.

Pero… y si están en lo correcto. El capuchino era un joven muy inteligente y creía sin ambigüedades en la antiquísima doctrina de su Iglesia al respecto.

No obstante, por alguna razón, sentía que ahora sí los había atrapado. Había analizado el punto de vista de la crítica protestante a la Iglesia Católica en este asunto y no le encontraba posibilidad a esa idea de la presencia real y verdadera del cuerpo y la sangre de Cristo en la misa, y mucho menos en los altares para culto de adoración. No podían tener la razón, ahora no.

De momento el sacerdote se levanta en procesión y comienza a ser seguido por sus acólitos. Tenía la custodia, la llevaba en solemne desfile. Las luces le seguían y el humo del incienso le precedía. A medida que se acercaba se escuchó el tintineo insistente de de unas campanitas. Y una vez más la excelente música y la voz bellísima de una joven se juntaron para cantarle a la presencia. Cuando tuve el Santísimo como a 10 pies de distancia se me ocurrió una idea para romper de una vez por todas con el catolicismo: “Si logro demostrar fuera de toda duda razonable, por la Biblia, que esta gente esta adorando a un trozo de harina cosida, y no a Jesucristo, entonces serán en realidad unos idólatras, unos alucinados que han estado confundidos o engañados por no atenerse a la realidad de los sentidos y por desconocer las escrituras. ¡Esto no esta en la Biblia!”

Y retomé la Biblia para contradecir y desenmascarar la falsedad de esa práctica idolátrica. Mi temor se convirtió en un apabullante optimismo, pues estaba seguro de que había descubierto la puerta para salir del atolladero en el cual me tuvo el catolicismo por los pasados tres años. Tramé primero desbaratar la legitimidad de esa práctica mediante el estudio bíblico, y luego, con el entusiasmo de aquella indudable victoria sobre la idolatría católica, podría volver a encarar los otros temas que me tenían a la defensiva frente al catolicismo.

Esta coyuntura fue para mí la posibilidad de lograr al menos un empate: “Si los protestantes estamos mal, ellos también, y si ambos estamos equivocados alguna salida habrá, como el agnosticismo o incluso otra religión.” Así estaban las cosas en mi corazón.



La Eucaristía según los evangélicos



Yo enseñaba teología sistemática en dos instituciones evangélicas y había repasado bien la noción de la Santa Cena en el ámbito de nuestras iglesias. Nuestra celebración de la Santa Cena respondía a una idea accesoria (=adjunta, accidental) de una imagen secundaria (no esencial o determinante) del partimiento (o fracción) del pan o de la eucaristía, según la cultura religiosa que fluía en nuestra tradición de parte de los grupos wesleyanos y bautistas de los cuales salieron nuestras denominaciones pentecostales. En consonancia con nuestra parca y escueta doctrina sobre este tema enseñábamos que la Santa Cena (o partimiento del pan o Eucaristía) era una remembranza de la cena pascual que tuvo Jesús con sus discípulos, que tenía un valor simbólico que aludía al sacrificio expiatorio de Cristo y cuya excelsitud estribaba más en el hecho de ser ordenanza (“hagan esto en recuerdo mío”) que de todo lo demás que pudiera constatarse en la Biblia, los Padres de la Iglesia y hasta en las iglesias de la Reforma protestante: «Celebramos de vez en cuando la Santa Cena porque Él lo mando como un acto simbólico (complementario [no necesario] a la predicación) de la muerte del Señor y porque ?y he aquí la gran aportación del pentecostalismo? era posible recibir un milagro de sanidad en ese momento.



La Eucaristía según San Pablo



Este profesor creía que el único texto eucarístico importante era 1 Co 11, 23-34, pero sobre todo los versículos 23 al 26; los demás (en especial del 27 al 34) eran consideraros como una explicación de las consecuencias de referirse al símbolo de la Cena sin gozar de la plenitud de la gracia divina. Para la celebración utilizábamos los versículos 23-26, y eran por lo tanto los que conocían nuestros fieles. Confieso que comencé a preocuparme cuando me percaté de la ineptitud de mi tradición, de los teólogos evangélicos y de mis primeros profesores pentecostales, al no tomar en consideración textos importantes con un inequívoco sabor eucarístico. Para comenzar, ni siquiera contábamos con una reflexión coherente de nuestros maestros y líderes con relación a las terribles consecuencias de enfermedad y muerte de 1 Co 11, 27-24 por causa del mal entendimiento de un símbolo, de algo que según nosotros era prescindible de la sustancia y la definición pentecostal del culto cristiano. Y otro tanto de desesperación me invadió cuando di al traste con la poca consideración que dábamos a los relatos de la institución de la Eucaristía (Mt 26, 26-29; Mc 14, 22-25; Lc 22, 19-20) ni de su sugestivo contexto pascual, ni de su trasfondo sacerdotal (Gn 14, 17-20) y soteriológico (Ex 12), y mucho menos nos habíamos enterado del consenso que siempre ha existido en la opinión de que Jn 6, 25-59 y Lc 24, 13-35 son textos eminentes que destacan un valor trascendental a la Eucaristía, o la Cena del Señor, o como hayamos querido llamarle.

Pero, en cuanto a nuestro pasaje preferido de 1 Co, lo increíble es que tampoco subrayáramos su contexto literario, imposibilitando de esta manera el descubrimiento de otros aspectos, riquezas y beneficios de la Eucaristía. Y este contexto literario que añade significado al mencionado texto es 1 Co 10. Este capítulo 10 sirve a la intención de Pablo de exigirle a sus lectores que frente a la mesa eucarística ellos tienen que decidirse (10, 20-21): la mesa del Señor o la mesa de los demonios. Con esto quiere matizar que frente a este acontecimiento cumbre del culto cristiano, todos tienen que tomar una decisión definitiva y radical. Luego, al combinarlo con el capítulo 11, pude comprender el valor de la Cena según San Pablo, al señalarla como signo de contradicción (en el capítulo 10): motivo excelente de conversión y razón de ser de una vida íntegra delante del Señor y de los hermanos, y esto, porque en este acontecimiento del partimiento del pan y de la “copa de bendición” tenemos comunión (común?unión) con el cuerpo y la sangre del Señor (10, 16).

Entonces pude ir sobre el capítulo 11, en especial por los versículos enigmáticos del 27 al 31. Tomemos el 29: dice que en esta Cena (que para mi era un recuerdo por referencia simbólica) se es juzgado por Dios si no se discierne el cuerpo y la sangre del Señor. Este no es el lugar para discurrir sobre disquisiciones exegéticas del texto en cuestión, pero la realidad es que “discernir” (diakríno) se refiere aquí a “darse cuenta” (determinar; decidirse por la realidad de lo que está de fondo; distinguir la verdad de lo que está frente a uno) de la presencia que subyace frente a uno en la mesa del Señor. En la antigüedad el cernidor (del verbo “cernir”) era un instrumento para separar (o para dis-cernir) el trigo de los demás componentes de la planta y de la tierra, pero también de otras plantas que podían confundirse como verdadero trigo. El discernir con el cernidor era la acción de darse cuenta, de identificar, de establecer un juicio certero de que lo que quedó después del ejercicio discernidor fue el trigo de verdad, lo que en realidad se buscaba, lo que importaba y daba sentido a la búsqueda. En otras palabras, el que no se da cuenta del verdadero cuerpo (mé diakrínon tó sóma [v. 28]) del Señor, el que no descubre esa realidad maravillosa que es Cristo mismo, se está metiendo en un grave problema que puede costarle la salud o la muerte (11, 30) ?Ahora sí tenía sentido eso de las consecuencias nefastas de enfermedad y muerte para los profanadores, es decir, para aquellos que menospreciaban, que no distinguían, que no se decidían, que no se daban cuenta del auténtico cuerpo de Cristo. El Dios del nuevo testamento no iba a matar a alguien simplemente por haber mal interpretado un mero símbolo?.



La Eucaristía según San Juan



Lo próximo fue el capítulo 6 de San Juan, versículos 22-71. ¡Increíble!: más de 40 versículos que versan sobre la Cena del Señor. Un pasaje bíblico impresionante que el catolicismo utiliza para sustentar su fe inamovible en la presencia real de Jesucristo en la Eucaristía.

Las referencias anti-presencia real a las que había recurrido veían un sentido “oscuro” este capítulo, o sea, no evidente o claro, sino que la plática de Jesús a sus interlocutores incrédulos debía entenderse siempre en sentido figurado. Una vez más se recurría al símbolo, a la Eucaristía como una representación, sólo como una referencia pedagógica tipo metáfora y cuya observancia de nuestra parte (no muy frecuente, por cierto) mostraba el grado de cumplimiento de un deseo del Señor: “hagan esto”.

Pero ahora, yendo sobre el pasaje en cuestión y mientras me refería a la otra cara de la moneda, es decir, cuando decidí ir sobre las palabras, escudriñándolas y tomando en serio la repercusión de la intransigencia del Señor y del empecinamiento de San Juan evangelista, pude descubrir el verdadero sentido de Jn 6, 22-71.


Lo primero que me señaló una interpretación literal de Jn 6 fue el sentido natural y recurrente de las palabras del Señor a través de todo el capítulo, de manera insistente y sin importar la resistencia de los incrédulos, ni las consecuencias para el éxito numérico de su ministerio o la reacción de sus simpatizantes (cf, 6, 2-3. 14. 22-23. 60.): “yo soy el pan vivo bajado del cielo”, “quien come de este pan vivirá para siempre”, “y el pan que voy a dar es mi carne, la cual entregaré por la vida del mundo”, “mi carne es verdadera comida… mi sangre es verdadera bebida”, “el que come mi carne y bebe mi sangre, permanece en mí y yo en él”, “el que me coma vivirá por mí”, “si no coméis la carne del Hijo del hombre y no bebéis su sangre no tenéis vida en vosotros”, “el que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna”, etcétera. Esta obstinación, reiterada y con tanta fuerza, no sólo desde el punto de vista de la interacción de los personajes en cuestión, sino también desde la óptica del lenguaje tenaz, gráfico, directo y sin ambigüedad de ningún tipo, se hace patente aquí en Jn 6; no hay precedente que pueda sugerir que una narrativa y diálogo como estos aludan a un entendimiento exclusivamente simbólico.
Junto a este sentido natural y demandante que anuncia la significación literal del pasaje en cuestión, y que por lo tanto lo señala como evidencia de la presencia real de Cristo en la Santa Comunión, tenemos el hecho de que Jesús no corrige la interpretación literal de sus oyentes. Esto es importantísimo porque es harto conocido y aceptado que una característica de este evangelio es que cuando, o cada vez que el Señor es mal interpretado o mal entendido, Él siempre corrige. Siempre: 3, 5; 4,34; 7, 38-39; 21, 21-23 (y hasta en Mt 16, 6ss). Pero aquí, de manera atípica, y por lo tanto desconcertante para mí, El Jefe no corrigió, no se echó para atrás, no lo echó a votación ni les dijo que cada cual podía tener su propia idea o interpretación porque, total, somos hijos de un mismo Padre y le servimos a un mismo Dios. Algunos dirían: “¡qué falta de perspectiva democrática, y de pluralidad, y de diálogo, y de tolerancia!... ¡pero qué nivel de intransigencia, y de integrismo, y de arrogancia!... ¡no está a la altura de los tiempos, carece de enfoque histórico crítico, no es capaz de un discurso estructuralista consecuente con la mentalidad de los que no piensan como él! ¡Es un fundamentalista!” El Señor es un buen maestro y quiere que todos lleguen al conocimiento de la verdad, y por lo mismo, ahora, cuando tiene una multitud cautiva de 10 mil personas que lo seguían, se vuelve a ellos para decirles lo que él cree, lo que quiere, la verdad, de frente, duro, sin tapujos ni relativismos acomodaticios: tenían que comérselo y bebérselo.
Lo tercero que me señaló una interpretación literal de Jn 6 fue que no encontré en toda la Biblia algún precedente que exprese a pan y vino como símbolos de cuerpo y sangre. En efecto, lo pude corroborar: no existe ninguna referencia bíblica que proponga una comparación espacial semejante, no hay ni siquiera una sola identificación simbólica de pan y vino como cuerpo (“carne”) y sangre… ninguna, nada de nada. Lo próximo fue el versículo 51b, que según la versión evangélica de mi Biblia Reina-Valera de 1995, decía: “y el pan que yo daré es mi carne, la cual entregaré por la vida del mundo”. Volví a leerlo. Lo meditaba y estudiaba, y pude así encontrar su repercusión literal ?o “literalista”, como señalábamos despectivamente a la versión católica?, a tono con todo lo que ya había desenvuelto.
Sabemos que Juan tenía una lucha acérrima en contra del gnosticismo, una herejía que circundaba la comunidad para la cual escribía y que enseñaba, entre otras cosas peligrosas para la supervivencia de la fe cristiana, que Cristo había venido en apariencia, en espíritu, porque la carne era mala (la prisión del espíritu y del alma y la coartadora de la verdadera y más conveniente divinización, que era la meta de los aventajados por una condición inherente a su superioridad espiritual). Pensaban que el Verbo de Dios no pudo haberse manchado mediante el contacto con el principio de corruptibilidad, con la materia, con carne, en un cuerpo humano convencional, limitante, no divino. Por lo tanto, Cristo, como Verbo encarnado, no murió en la cruz. “Lo perfecto es eterno, espiritual, no corpóreo, no físico, no puede morir: Cristo no murió” ?El apócrifo gnóstico de Tomás dice que el Señor les hizo pensar que murió, y que comía y dormía, pero él más bien los engañaba?. No es difícil para ninguno de nosotros suponer el riesgo que esta corriente representaba si se infiltraba y repercutía en el cristianismo, sobre todo si entendemos a este último como la expresión de la verdad de Dios que deviene a partir de la versión judía de la revelación, y que logra su cumbre y sentido total en las personas y la palabra de Jesucristo, sus apóstoles y la Iglesia (el nuevo Israel). Es decir, que este “detalle” de la peligrosidad gnóstica es entendible para nosotros, los que aceptamos la naturaleza judeo-cristiana de la verdad que nos condiciona y define (revelación, alianza (pacto, testamento); encarnación (a propósito, ver alusión a la encarnación del verbo de 1, 14, en 6, 41-42, y cómo los judíos que resienten el lenguaje literal de Jesús son propuestos como no elegidos [v. 43]), vida, pasión, muerte y resurrección corporal de una persona 100 por ciento Dios y 100 por ciento humano), que todos tenemos acceso a los beneficios de Dios, en y por Cristo, y no solamente unos cuantos privilegiados y sabiondos de una cierta provisión misteriosa , como aducían los gnósticos. Pues bien, la repercusión de Jn 6, 51b es que la carne que se nos dará para comer es la misma que padeció en el Gólgota. Y esto, teniendo presente la disyuntiva del evangelista con la herejía gnóstica. Juan estaba muy consciente de que la carne que daría Jesús para comer no podía ser mal entendida como algo etéreo e incorpóreo, y por lo tanto tan indeterminado como un fantasma. Juan, en línea con la predicación apostólica, pregonaba la vida humana, pasión, muerte y resurrección de un hombre de carne y hueso llamado Jesús de Nazaret. Ése mismo es el que se da como pan, se da a sí mismo, tal real y literal como lo tenía fijado el evangelista en su mente.
Lo siguiente que me señaló una interpretación literal de Jn 6, fue la imposibilidad de encontrar en la Biblia un precedente simbólico de comer la carne y beber la sangre que fuera coherente con el relato de Jn 6, 22-71, y que pudiera fundamentar una salida alegórica a este problema ?Ya lo consideraba un gran problema y estaba muy asustado. «La verdad católica de nuevo»?.
Resultó que siempre que la Biblia habla simbólicamente de comerse la carne o beberse la sangre de alguien (cf. Is 49, 26; M 3, 3), implica perseguir sangrientamente o destruir a una persona o a un pueblo”. Si era consistente con este antecedente simbólico y lo aplicaba al pasaje de Jn, tendríamos al Señor diciendo que aquellos que lo persigan, castiguen, le falten el respeto, lo injurien y lo destruyan, serán recompensados con la vida eterna (viz., 6, 50. 54.), tendrán vida en ellos (v. 53), vivirán por el Señor (v. 57) y vivirán para siempre (v. 51. 58.). Sólo un loco podría aceptar una aplicación tan disparatada. Entonces, una identificación simbólica de las afirmaciones comer y beber carne y sangre, tal y como aparecen en Jn 6, es imposible.
Otro hallazgo que me señaló una interpretación literal de Jn 6, fue el cambio de verbo ocurrido en el versículo 54. Hasta el v. 53 el Señor habla de comérselo, y para ello Juan utiliza el verbo fagéin (afagon, fáge, fagete), que es la palabra más común para designar el acto de comer, como consumir o ingerir alimentos. Ustedes saben que el nuevo testamento se escribió en griego koiné, y que se trata de una lengua muerta que no guarda correspondencia exacta con los idiomas que han bebido de él, como el español, por ejemplo. Pues lo que pasa aquí es que no hay un conseguimiento preciso de este cambio de conceptos, y por eso no aparece dicho cambio en nuestras versiones modernas. Sin embargo, se da un cambio significativo. Verán.
Fue en el instante más neurálgico de la discusión, cuando lo judíos lo impugnaban ?¡por última vez en el capítulo!? preguntándose “¿cómo puede éste darnos a comer su carne?, que El Jefe cambia la palabra comer, de fagéin y sus derivados, a trógon (ho trógon mou tén sarka), lo cual implica una matización mucho más radical aún que señala indudablemente un sentido literal franco e indefectible. No me quedó más remedio que reconocer la verdad que tenía de frente: Ahora, en este preciso momento de incredulidad y de minusvalía de parte de los judíos hacia Jesús, este se atreve a cambiar, de comer o ingerir su carne, a morder, mordisquear, mascar, mascullar, roer; denota un proceso lento de carcomer, supone un énfasis perentorio en el acto de comer, como si se estuviera avanzando conscientemente en la ingestión inflexible de un alimento.
Busqué si se repetía el término en este evangelio y lo encontré en 13, 18, una vez más, en contexto eucarístico, mientras se efectuaba la última cena de Jesús con sus discípulos. Supe que me estaba metiendo en un problema. La Eucaristía como símbolo no tenía fundamento en Jn 6.
Y se me hizo patente cuando me aferré a cierta idea de los partidarios de la interpretación simbólica de Jn 6. Me sentí tan ridículo cuando descubrí la idiotez de esa posibilidad simbólica de cierto versículo del capítulo 6 de San Juan.
¿Y cuál era el argumento que presentaba a la Eucaristía como símbolo en jn 6? Pues el versículo 63: “El espíritu es el que da vida; la carne no sirve de nada”.

Desconcertante, ¿ah? ¿Con que el Señor a estado diciendo que su carne y su sangre son para vida eterna y comunión con el Padre y con él, y ahora se contradice para significar que su “carne no sirve de nada”? Es insólito hasta dónde son capaces de llegar algunos para defender lo indefendible, porque cuando empecé a auscultar la opinión de algunos colegas ministros me respondían con el argumento de Zwinglio, ese de que Jesús se contradecía para decir que la carne que padecerá por nosotros y por la cual seremos alimentados para vida eterna, no vale nada, es nada, como basura, igualito que los gnósticos. Entonces aquella herejía era la verdad, si es que son consecuentes en su interpretación y continúan con la misma apreciación de la frase “El espíritu es el que da vida”. Esto sería incluso un intento atroz de preferir una noción heterodoxa y por lo tanto dañina, con tal de menguar un principio de literalidad como sentido correcto de un texto bíblico por el simple hecho de que no me conviene, o porque se supone que los católicos siempre estén mal.

Ya me había metido bastante con el evangelio de Juan y sabía a qué se refería el Señor en el versículo 63.

Las palabras en cuestión se refieren a uno de dos sentidos por los cuales Juan usa sarx (carne): como sinónimo de mentalidad o actitud carnal, como una mente dominada por las cosas materiales, que juzga según los sentidos (cf., 8, 15) ?esos sentidos que esbozábamos como lo concluyente en materia de la presencia real y la Eucaristía?, que se aferra a lo natural y por lo tanto no descubre la verdad espiritual que determina los asuntos divinos. Por eso, lo que se devela aquí es más bien otra prueba de la noción literal de presencia real, y así lo remacha sin duda el final del versículo 63: “Las palabras que os he dicho son espíritu y son vida.” O sea, las palabras del Señor con relación al pan de vida expresan una realidad divina que sólo el Espíritu es capaz de hacernos comprender y que por lo mismo es brote de vida eterna para los creyentes (cf., Jn 1, 33; 14, 26).

Tuve que reconocer que este acontecimiento que ha celebrado la Iglesia Católica por 2,000 años, con tanta fe y a un costo tan alto, supone una poderosa presencia especial de Dios. Una presencia que tiene que producir una excelente oportunidad de conversión. Esta oportunidad que provee Dios en la Eucaristía se constituyó para mí en una fuente reconciliación y de liberación también.

Y de esta manera tuve que actuar de acuerdo a mi conciencia, convencido y poseído de esta gran verdad de la Iglesia del Señor: una, santa, católica y apostólica. No me quedó más remedio. Tuve que renunciar a mi ministerio. Sufrí mucho.


http://www.alianzaformativa.com/
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

AnaMS,
Gracia y paz.

Muchas gracias por el tiempo que se ha tomado en leer y responder al mensaje que le dirigí, aquí le correpondo.

Joaco, Tienes razón en que muchos supuestos "católicos" son un antitestimonio de cristianismo.
Ana, disculpeme, pero no es eso lo que dije. Lo que le señalé es que muchos que se identifican y reconocen así mismos como católicos y que forman parte de la feligresia, siendo practicantes de los ritos y tradiciones del catolicismo, se mueven en sus vidas cotidianas por creencias y opiniones personales, muchas de las cuales se aparta de la enseñanza de Jesucristo. Dije que son catolicos, si, pero no son cristianos. Porque definitivamente ser católico o evangélico no es de ninguna manera sinónimo de ser cristiano. Uno puede saber muchas cosas de Jesús, de la Biblias, atender a ritos y tradiciones, y aún así no haber nacido de nuevo.

¿Entiende ahora?

Pero un verdadero católico no dejaría la Iglesia, porque realmente entendería y amaría el gran Talento que se le dió y por el cual Jesús le va a preguntar que tesoros espirituales le lleva por hacerlo fructificar, que hizo de él, lo enterro? lo desprecio? lo rechazo?
El don más grande que Dios nos ha dado es Jesucristo mismo, y a Él es al que, si en verdad se le ha conocido, no se le dejará. En Él es en quien está la vida y es por quien tenemos acceso al trono de gracia y por el que somos hechos hijos de Dios, justificados y santificados. No es por la iglesia en la que nos congreguemos, sino por la gracia y misericordia de Dios mostradas en Cristo Jesús.

No hay iglesia que salve, ya que la iglesia, cualquiera que esta sea, no salva, quien salva es Jesucristo, y quien es salvo pertenece a Jesús y busca reunirse y mantenerse con aquellos que también le pertenecen, para ayudarse y apoyarse en el proceso de ser conformado a la imagen de Él, de ahí que sea llamado Cristiano, y ser Cristiano es vivir como Él, obedeciendo al Padre Celestial, permaneciendo en Su Palabra, ser Cristiano no es seguir una serie de ritos y tradiciones, pues cada iglesia puede tener los suyos, mas esto es lo que muchas veces sirve para separar a los Cristianos en lugar de unirnos en Su amor.

Muchos dicen que la iglesia sirve para agradar a Dios, eso es verdad, pero el asistir a una, la que sea, no es garantía de nada, se requiere de la obra redentora de Jesucristo en la vida de cada persona para poder ser verdaderamente hijos de Dios y ser verdaderamente parte de Su cuerpo, y nuestra calidad como hijos es lo que nos lleva a realizar las cosas que agradan a Dios, no nuestra filiación religiosa.

Se equivoca quien suponga que hay una organización o institución a la que hay que afiliarse para ser hijos de Dios, eso no es así, Él no vino a fundar instituciones u organizaciones religiosas, Él vino a darnos vida eterna y Él es el único camino al Padre. De nuevo: Quien salva es Jesucristo, NO el pertenecer a determinado grupo o Iglesia, o profesar tal o cual religión. No soy salvo por pertenecer a la Iglesia "X" sino que pertenezco a la Iglesia de Cristo por haber sido salvado. La diferencia es sutil, pero fundamental.

Ese gran tesoro es: EL VERDADERO CUERPO Y SANGRE DE JESUS EN LA EUCARISTIA, ESE MISMO CUERPO QUE ESTUVO EN EL CALVARIO!!!!

Un católico no lo dejaría por NADA del mundo.
Nuestro gran tesoro es la vida que nos ha sido dada en Cristo Jesús, misma que no se acaba, misma que nos capacita para ser obedientes al Padre y que nos transforma para ser más y más como Jesús. El gran tesoro que tenemos es la presencia de Dios en nosotros, es la relación que ahora guardamos con Él.

Escrito está: "Mas venido el cumplimiento del tiempo, Dios envió su Hijo, hecho de mujer, hecho súbdito á la ley, Para que redimiese á los que estaban debajo de la ley, á fin de que recibiésemos la adopción de hijos. Y por cuanto sois hijos, Dios envió el Espíritu de su Hijo en vuestros corazones, el cual clama: Abba, Padre. Así que ya no eres más siervo, sino hijo, y si hijo, también heredero de Dios por Cristo" (Galatas 4:4-7)

Los que se van, obviamente no entienden la gran entrega del Señor, su gran locura de amor, su presencia Viva y Real que cubre toda la tierra.
Nuevamente usted hace una afirmación cargada de subjetivismo y de exageración ¿Cómo puede usted saber con certeza que los que dejan el catolicismo no entienden la entrega, amor y presencia del Señor? ¿Acaso usted puede ver el corazón de todos ellos?

Dejeme decirle AnaMS, que yo soy uno de esos que dejó el catolicismo, y por lo que escribe se que usted no conoce en lo absoluto a los que toman esa decisión, tal vez conozca a unos cuantos, y tal vez en ellos suceda lo que usted señala, pero definitivamente no conoce a todos, así como no me conoce a mí.

Y porque no me conoce, permitame presentarme con usted:

Mi nombre es Joaquín Sánchez, cristiano por la Gracia de Dios, y siervo de Jesucristo, al cual sea la Gloria y el honor por siempre. Soy mexicano, tengo 33 años de edad, con una hermosa familia, a Dios gracias, conformada por mi esposa y dos pequeñínes (varocitos) de 3 y 5 años. Durante la mayor parte de mi vida formé parte de la feligresía católica e incluso participé activamente en diversos grupos parroquiales: movimiento de jornadas juveniles de vida cristiana, apostolado juvenil, por mencionar algunos. Conocía bien la doctrina católica, mucho mejor que el católico promedio, conocía de Jesús, había escuchado muchas veces hablar de Él y de lo que había hecho, pero, no tengo temor de decirlo, no le conocía personalmente, a pesar de haber participado infinidad de veces en la eucaristía.

Pero un día, un gloriosos día, la Palabra del Señor llegó a mi vida con poder, tan nueva como si nunca la hubiera escuchado, como si nunca hubiera sabido de la fuente limpiadora llena con la sangre que fluye de las venas de nuestro Salvador y escuche en mi corazón la voz de mi Señor tan sorprendentemente fresca. Y en ese momento, mi estimada Ana, ante tan maravillosa revelación, pude, por primera vez, sentir profundamente la abrumadora deuda que tenía con la justicia de Dios, me ví tal cual era y pude tomar conciencia de la realidad en la que vivía, una vida de pecado.

Pero luego, recibí lleno de gozo la información de la gracia de que todas mis deudas habían sido pagadas y escuché la tierna voz de la misericordia que me dijo: "He borrado como niebla tus rebeliones, y como nube tus pecados" y en ese momento, supe lo que significa ser completamente absuelto, estar ante Dios sin miedo, aceptado en el Amado, recibido como un hijo querido, cubierto con la justicia de Cristo. Ese día, mi querida Ana, fue el día en que nací de nuevo para la gloria de Dios y dejé atrás mi religiosidad para darle paso a la novedad de vida guiada por El Santo Espíritu de Dios.

Ese día descubrí que Cristo no es una religión, que el pertenecer a Él no es lo mismo que formar parte de una institución religiosa, sino tomar conciencia de mi necesidad de Él, de que fuí comprado a un alto precio, precio de sangre que mi Creador derramo a causa de mi pecado.

Y entonces Ana, lo que sabía sobre el catolicismo, lo digo honestamente, chocó con esta maravillosa realidad, y todo aquello en lo que confiaba (que había sido bautizado de pequeño, que pertencía a una familia católica, a la iglesia con más miembros en el mundo, a la que estaba dirigida por el Papa -el "Vicario de Cristo en la Tierra"-, la que tenía la tradición apostólica, que participaba activamente en ella por medio de sus grupos parroquiales, que asistía a misa, me confesaba y comulgaba cada domingo), mis propios meritos y mis "buenas" acciones, que para mí eran ganancias, los consideré como nada por amor de Cristo. Y ciertamente, aun considero todas estas cosas pérdida por el eminente conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo téngo por basura, para ganar á Cristo, y ser hallado en Él, no teniendo mi justicia, que es por mis obras, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe.

Y ahora, más que nunca, es que entiendo la gran entrega del Señor por mí, Su gran amor para mi en Cristo Jesús, Su presencia viva y real en mí.

En las Iglesias del mundo, está Jesús en Cuerpo, Alma, Sangre y Divinidad, y desde allí su Fuerza de Amor Infinito sostiene a la tierra y a sus habitantes.
Lo que yo sé, y vivo, es que Jesús vino a mi vida y mora en mí, llenandome de Su Paz, de Su gracia y de Su amor, y que de la misma manera Él mora en el corazón de todos aquellos que le han recibido como Señor y Salvador.

Cada 30 segundos en cualquier parte del mundo, se está celebrando una eucaristía, allí Jesús, a travez del corazón herido de amor del sacerdote, corazón ungido, revive su sacrificio de amor y por el Sacrificio Eterno, el pan se convierte en su Cuerpo y el vino en su Sangre.
Escrito está: "Tanto de mejor testamento es hecho fiador Jesús. Y los otros cierto fueron muchos sacerdotes, en cuanto por la muerte no podían permanecer. Mas éste, por cuanto permanece para siempre, tiene un sacerdocio inmutable: Por lo cual puede también salvar eternamente á los que por Él se allegan á Dios, viviendo siempre para interceder por ellos. Porque tal pontífice nos convenía: santo, inocente, limpio, apartado de los pecadores, y hecho más sublime de los cielos; Que no tiene necesidad cada día, como los otros sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus pecados, y luego por los del pueblo: porque esto lo hizo una sola vez, ofreciéndose á sí mismo" (Hebreos 7:22-27)

Y también: "Por lo cual, entrando en el mundo, dice: sacrificio y presente no quisiste; Mas me apropiaste cuerpo: Holocaustos y expiaciones por el pecado no te agradaron. Entonces dije: Heme aquí (En la cabecera del libro está escrito de mí) Para que haga, oh Dios, tu voluntad. Diciendo arriba: Sacrificio y presente, y holocaustos y expiaciones por el pecado no quisiste, ni te agradaron, (las cuales cosas se ofrecen según la ley,) Entonces dijo: Heme aquí para que haga, oh Dios, tu voluntad. Quita lo primero, para establecer lo postrero. En la cual voluntad somos santificados por la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una sola vez. Así que, todo sacerdote se presenta cada día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pecados: Pero éste, habiendo ofrecido por los pecados UN SOLO SACRIFICIO PARA SIEMPRE, está sentado á la diestra de Dios, Esperando lo que resta, hasta que sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies. Porque CON UNA SOLA OFRENDA HIZO PERFECTOS PARA SIEMPRE A LOS ANTIFICADOS. Y atestíguanos lo mismo el Espíritu Santo; que después que dijo: Y este es el pacto que haré con ellos Después de aquellos días, dice el Señor: Daré mis leyes en sus corazones, Y en sus almas las escribiré. Añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados é iniquidades. Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por pecado. Así que, hermanos, teniendo libertad para entrar en el santuario por la sangre de Jesucristo, Por el camino que Él nos consagró nuevo y vivo, por el velo, esto es, por su carne; Y teniendo un gran sacerdote sobre la casa de Dios, Lleguémonos con corazón verdadero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua limpia. Mantengamos firme la profesión de nuestra fe sin fluctuar; que fiel es el que prometió: Y considerémonos los unos á los otros para provocarnos al amor y á las buenas obras; No dejando nuestra congregación, como algunos tienen por costumbre, mas exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que aquel día se acerca" (Hebreos 10:5-25)

Tal cual está escrito, así es.

Un católico que sale de la Iglesia a una iglesia separada, rechaza cenar en la mesa de la Casa Paterna, el Maná Divino que en su entrega de amor se esfuerza por alimentarlo y vitalizarlo y hacerlo fructificar para la gloria de Dios y el bien de sus hermanos.
Bien lo dice, sale de la pretendida "Unica Iglesia verdadera" para ir a un iglesia separada: separada de Roma, del papa, de los dogmas y tradiciones de hombres. Si, separada, por y para Cristo, comprada, redimida y santificada (separada, apartada) para Él y Sus propósitos, y no para los de una institución religiosa ambrienta de poder.

Ciertamente estamos separados de Roma y de las pretenciones papales, más no de Cristo.

POR ESO A TODO CRISTIANO, SOBRE TODO A LOS EX-CATOLICOS, EN EL NOMBRE DE JESUS, LES PIDO QUE PROFUNDICEN EN LAS ESCRITURAS SOBRE EL CUERPO Y LA SANGRE DEL SEÑOR EN LA EUCARISTIA
Descuide Ana, lo hacemos, profundizamos en las Escrituras diariamente, para conocer más a nuestro bendito Dios y Padre, la cual cada día estamos más agradecidos y anhelamos amarle y servirle mejor.

Y si a usted le interesa ver lo que el Señor me ha mostrado en la meditación y lectura diaria de Su bendita Palabra, aquí le comparto unos testimonios de ello, junto con los de un par de hermanos de estos foros, que juntos tuvimos un tiempo de ayuno, oración y lectura de la Palabra sobre este tema:

http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=245090&postcount=48
http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=245206&postcount=50
http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=245397&postcount=51
http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=245402&postcount=52
http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=245535&postcount=57
http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=246039&postcount=58
http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=246048&postcount=59
http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=246364&postcount=60

Los aportes completos están en este epígrafe, por si le interesa:
¿El fin de la Transubstanciación?

Así como los aportes que hice sobre el tema en un epígrafe de estos mismos foros:

Intento de profanar ostias por unos jovenes

Estos son sólo un par de ejemplos de ellos:
http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=275160&postcount=218
http://forocristiano.iglesia.net/showpost.php?p=276097&postcount=227

Espero le sean de provecho y edificación, y si tiene algo que le gustaría comentaramos sobre ellos, o sobre el tema adelante, ahí estan ambos epígrafes para que podamos conversarlo en alguno de ellos, en el que le parezca más conveniente.

Atte.
Joaco <><
 
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Reacciones: Daniel Flores
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Un saludo a todos los que visitan y leen este epígrafe.

Esperando que la gracia y paz de Dios sean derramadas abundantemente en sus vidas, les compartó aquí una reflexión sobre el ausnto de las iglesias (porque son varias) que se dicen "La única y Verdadera Iglesia de Cristo".

Las iglesias que no entienden claramente el Evangelio tienden a eregirse en mediadoras entre sus miembros y Cristo Jesús. Tienden a reclamar para sí mismas un singular papel que les concede identidad y les capacita para hacer cumplir los decretos de la iglesia. Considérese cómo se llaman así mismas algunas de estas iglesias, buscando proclamar sus identidades y, de esta manera, el papel que juegan en las vidas de sus miembros:

- "La única Verdadera Iglesia"
- "La verdadera iglesia de Jesucristo"
- "La Iglesia Remanente"
- "La iglesia Universal del Reino de Dios"
- "La Verdadera Religión"
- "La iglesia de Dios"
- Etc, etc, etcetera, pues la lista es larga.

Estas iglesias han sido mediadoras en el sentido de que la organización eclesiástica se interpone entre el miembro y Jesucristo. Han sido exclusivas en el sentido de que la salvación y las bendiciones especiales de Dios generalmente se reservan sólo para sus propios miembros. La membresía en su iglesia se considera sinónima con la membresía en el Reino de Dios.

Las iglesias que reclaman una identidad singular a menudo requieren respeto para su profeta particular o guía espiritual al cual, en un sentido práctico, se le ha conferido autoridad final en cuestiones espirituales. Generalmente, estos individuos no vacilan en afirmar que reciben mensajes directamente de Dios aparte de la Biblia, y generalmente afirman que hablan en nombre de Dios. Esto les da autoridad para imponer rigurosamente su voluntad sobre sus propios miembros.

Ahora bien, según la Biblia, la autoridad máxima para los cristianos, cada persona que ha recibido a Jesús como su Señor y Salvador personal ha llegado a ser hijo de Dios (Juan 1:12). El mismo Espíritu de Dios vive en ellos y da testimonio de la verdad de que ya son hijos de Dios (Romanos 8:16, 17) y que nada ni nadie les puede separar del amor divino (Romanos 8:28, 29).

Entonces, los miembros de la iglesia son personas que se han arrepentido de sus pecados, han nacido de nuevo y han dado testimonio público de esto, siendo bautizados por inmersión en agua. Dios es su Padre celestial y son "herederos de Dios y coherederos con Cristo".

Una iglesia local es una familia de fe. Es un compañerismo espiritual de cristianos que se han unido y desean practicar las enseñanzas de Jesús y llevar a cabo sus propósitos en la tierra. Creen que la base de la fe y práctica cristianas es la Biblia y que el único mediador entre Dios y los hombres es Jesucristo (1 Timoteo 2:5).

El Espíritu Santo de Dios vive en cada creyente y le comparte su amor divino (Romanos 5:5). Este fruto del Espíritu llega a ser la característica principal de la iglesia (Juan 15:35; Gálatas 5:22, 23). El Espíritu Santo también les reparte dones a cada miembro de la familia de Dios. Cada uno es responsable ante Dios por el ministerio que ha de desarrollar como parte vital del cuerpo de Cristo (Romanos 12:1-8).

¿Quién gobierna la Iglesia? No hay ningún hombre nombrado para gobernarla. Es Jesucristo mismo la cabeza de Su iglesia (Colosenses 1:17, 18). El Nuevo Testamento enseña que cada iglesia tiene dos oficios -el del pastor y el de los diáconos. Ellos son los siervos de Cristo y de la iglesia local (2 Corintios 4:5). Cada pastor ha de cuidar a los miembros de su congregación como un pastor cuida su rebaño. Los líderes han de orar, predicar, enseñar, aconsejar y servir en tal manera que todos los miembros sean equipados para poder cumplir con Dios en llevar a cabo el ministerio total de la iglesia (Efesios 4:11, 12) y servirle como el "Real sacerdocio" de Dios (1 Pedro 2:9).

En cada iglesia local DIOS MANDA. Dios es el que gobierna. Entonces la iglesia es UNA MONARQUIA en donde el Rey es Jesucristo Nuestro Señor. Pero en los asuntos prácticos que no se estipulan en la Biblia, la iglesia descubre la voluntad de Dios por medio de la democracia, esto es: todos los miembro tiene las mismas responsabilidad y los mismos privilegios, y asimismo, cada uno de los miembro tiene el derecho de dar su opinión y su voto en la toma de decisiones. (Hechos 6:1-7; 13:1-3, 15:1-41).

No existe “élite” entre los miembros de la iglesia, todos los miembro son iguales y tienes la misma capacidad espiritual para su funcionamiento en el cuerpo de Cristo (2 Co. 12:13). Todos los miembro son “MINISTROS” que Dios ha capacitado para realizar la obra del ministerio (1 Pedro 4:10, Efesios 4:11-12). Los pastores son “Ministros Oficiales” y cada miembro un ministro general.

Los pastores en la iglesias tienen una autoridad que les fue delegada por la iglesia local, por lo tanto su liderazgo no es jerárquico, sino de función, de liderazgo educativo, ejemplar y de servicio.

La autoridad está en el desarrollo de su trabajo más que una posición (Hebreos 13:7).

La iglesia esta comisionada por Jesús mismo a compartir el mensaje de la salvación con todo el mundo. El mensaje que proclama es que Dios ama a todo el mundo y quiere que tenga la vida abundante y eterna (Juan 3:16). El pecado separa a cada persona de este amor (Romanos 3:22, 23). Por eso Jesús vino al mundo y murió en la cruz y allí pagó el precio completo de la salvación (Romanos 5:8) y resucitó mostrando Su poder y voctoria sobre el pecado y la muerte y que puede dar vida a quien se llega a Él (Juan 5:21; 10:18). Cada pecador puede aceptar la muerte de Jesús como el pago por sus pecados, arrepentirse y volver a Dios. La vida abundante y eterna es una dádiva que Dios ofrece a todos a través de Cristo Jesús (Romanos 6:23).

Atte.
Joaco <><
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Un saludo a todos los que visitan y leen este epígrafe.

Esperando que la gracia y paz de Dios sean derramadas abundantemente en sus vidas, les compartó aquí una reflexión sobre el ausnto de las iglesias (porque son varias) que se dicen "La única y Verdadera Iglesia de Cristo".

Las iglesias que no entienden claramente el Evangelio tienden a eregirse en mediadoras entre sus miembros y Cristo Jesús. Tienden a reclamar para sí mismas un singular papel que les concede identidad y les capacita para hacer cumplir los decretos de la iglesia. Considérese cómo se llaman así mismas algunas de estas iglesias, buscando proclamar sus identidades y, de esta manera, el papel que juegan en las vidas de sus miembros:

- "La única Verdadera Iglesia"
- "La verdadera iglesia de Jesucristo"
- "La Iglesia Remanente"
- "La iglesia Universal del Reino de Dios"
- "La Verdadera Religión"
- "La iglesia de Dios"
- Etc, etc, etcetera, pues la lista es larga.

Estas iglesias han sido mediadoras en el sentido de que la organización eclesiástica se interpone entre el miembro y Jesucristo. Han sido exclusivas en el sentido de que la salvación y las bendiciones especiales de Dios generalmente se reservan sólo para sus propios miembros. La membresía en su iglesia se considera sinónima con la membresía en el Reino de Dios.

Las iglesias que reclaman una identidad singular a menudo requieren respeto para su profeta particular o guía espiritual al cual, en un sentido práctico, se le ha conferido autoridad final en cuestiones espirituales. Generalmente, estos individuos no vacilan en afirmar que reciben mensajes directamente de Dios aparte de la Biblia, y generalmente afirman que hablan en nombre de Dios. Esto les da autoridad para imponer rigurosamente su voluntad sobre sus propios miembros.

Ahora bien, según la Biblia, la autoridad máxima para los cristianos, cada persona que ha recibido a Jesús como su Señor y Salvador personal ha llegado a ser hijo de Dios (Juan 1:12). El mismo Espíritu de Dios vive en ellos y da testimonio de la verdad de que ya son hijos de Dios (Romanos 8:16, 17) y que nada ni nadie les puede separar del amor divino (Romanos 8:28, 29).

Entonces, los miembros de la iglesia son personas que se han arrepentido de sus pecados, han nacido de nuevo y han dado testimonio público de esto, siendo bautizados por inmersión en agua. Dios es su Padre celestial y son "herederos de Dios y coherederos con Cristo".

Una iglesia local es una familia de fe. Es un compañerismo espiritual de cristianos que se han unido y desean practicar las enseñanzas de Jesús y llevar a cabo sus propósitos en la tierra. Creen que la base de la fe y práctica cristianas es la Biblia y que el único mediador entre Dios y los hombres es Jesucristo (1 Timoteo 2:5).

El Espíritu Santo de Dios vive en cada creyente y le comparte su amor divino (Romanos 5:5). Este fruto del Espíritu llega a ser la característica principal de la iglesia (Juan 15:35; Gálatas 5:22, 23). El Espíritu Santo también les reparte dones a cada miembro de la familia de Dios. Cada uno es responsable ante Dios por el ministerio que ha de desarrollar como parte vital del cuerpo de Cristo (Romanos 12:1-8).

¿Quién gobierna la Iglesia? No hay ningún hombre nombrado para gobernarla. Es Jesucristo mismo la cabeza de Su iglesia (Colosenses 1:17, 18). El Nuevo Testamento enseña que cada iglesia tiene dos oficios -el del pastor y el de los diáconos. Ellos son los siervos de Cristo y de la iglesia local (2 Corintios 4:5). Cada pastor ha de cuidar a los miembros de su congregación como un pastor cuida su rebaño. Los líderes han de orar, predicar, enseñar, aconsejar y servir en tal manera que todos los miembros sean equipados para poder cumplir con Dios en llevar a cabo el ministerio total de la iglesia (Efesios 4:11, 12) y servirle como el "Real sacerdocio" de Dios (1 Pedro 2:9).

En cada iglesia local DIOS MANDA. Dios es el que gobierna. Entonces la iglesia es UNA MONARQUIA en donde el Rey es Jesucristo Nuestro Señor. Pero en los asuntos prácticos que no se estipulan en la Biblia, la iglesia descubre la voluntad de Dios por medio de la democracia, esto es: todos los miembro tiene las mismas responsabilidad y los mismos privilegios, y asimismo, cada uno de los miembro tiene el derecho de dar su opinión y su voto en la toma de decisiones. (Hechos 6:1-7; 13:1-3, 15:1-41).

No existe “élite” entre los miembros de la iglesia, todos los miembro son iguales y tienes la misma capacidad espiritual para su funcionamiento en el cuerpo de Cristo (2 Co. 12:13). Todos los miembro son “MINISTROS” que Dios ha capacitado para realizar la obra del ministerio (1 Pedro 4:10, Efesios 4:11-12). Los pastores son “Ministros Oficiales” y cada miembro un ministro general.

Los pastores en la iglesias tienen una autoridad que les fue delegada por la iglesia local, por lo tanto su liderazgo no es jerárquico, sino de función, de liderazgo educativo, ejemplar y de servicio.

La autoridad está en el desarrollo de su trabajo más que una posición (Hebreos 13:7).

La iglesia esta comisionada por Jesús mismo a compartir el mensaje de la salvación con todo el mundo. El mensaje que proclama es que Dios ama a todo el mundo y quiere que tenga la vida abundante y eterna (Juan 3:16). El pecado separa a cada persona de este amor (Romanos 3:22, 23). Por eso Jesús vino al mundo y murió en la cruz y allí pagó el precio completo de la salvación (Romanos 5:8) y resucitó mostrando Su poder y voctoria sobre el pecado y la muerte y que puede dar vida a quien se llega a Él (Juan 5:21; 10:18). Cada pecador puede aceptar la muerte de Jesús como el pago por sus pecados, arrepentirse y volver a Dios. La vida abundante y eterna es una dádiva que Dios ofrece a todos a través de Cristo Jesús (Romanos 6:23).

Atte.
Joaco <><


Bienaventurado eres varón, porque no te lo ha revelado carne ni sangre, sino nuestro Padre que está en los cielos.

Amén y amén.

Gracias por traernos tu testimonio, similar al de tantos miles de creyentes que un día tuvieron la dicha de encontrar una relación con Cristo y abandonaron su religión, mecánica y plena de ritualismos.


:elcaminan
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

En el siguiente link estan los más de 430 programas de "journey home" donde entrevistan a Judios, hindues, evangélicos de todas las denominaciones o sin denominación, adventistas, budistas, sorprendidos por la verdad en la Iglesia del Señor, la Católica. Eso me ha ayudado a amar y admirar mas a las personas de todas las religiones, su entrega verdadera, su capacidad de renuncia y sacrificio, su unión con el Espiritu Santo que les mestra la verdad completa. Los católicos que se van de la Iglesia, son pesimos católicos, ignorantes del gran talento que se les dió, de la riqueza y fuerza de los sacramentos. Las personas de otras religiones que se vuelven católicos son doctorados en teología, pastores, ministros, misioneros, muy preparados y estudiados, sobre todo de la Iglesia primitiva donde encuentran su camino a casa.

Los programas estan en ingles!

http://www.ewtn.com/vondemand/audio/seriessearchprog.asp?pgnu=15&SeriesID=-6892289

--------------------------------------------------​

... sorprendidos por la verdad en la Iglesia del Señor, la Católica.

¿Te refieres a esta?

Descarga Abusos Sexuales y el Vaticano (2006)

---------------------------------------------------​

Este sacerdote, pedofilo, con quien empieza y termina el video, cuando le preguntan: ¿Que le ocurrio como consecuencia de dichos abusos?, responde: La verdad es que nada. La vida siguio igual. ¿Acaso los que aman a Dios, la verdad y la justicia pueden quedarse callados como si no pasase nada?

<a href="http://www.esnips.com/doc/32c72786-26cf-47c6-9769-1e7503fb3ff2/Abusos-Sexuales-y-el-Vaticano-(2006)/?widget=large"><img border="0" alt="Abusos Sexuales y el Vaticano (2006)" title="Abusos Sexuales y el Vaticano (2006) on eSnips.com" src="http://www.esnips.com/widget/?objectType=docthumbstampped&objectUUID=32c72786-26cf-47c6-9769-1e7503fb3ff2&resourceName=medium"></a>

Pinchen sobre la imagen del sacerdote pedofilo si quieren ver el video o descargarlo. Por cierto este sacerdote esta hoy en dia en su Irlanda natal en libertad y no tiene restringido su trato con niños. Todo un exito para la ICAR, maxime cuando los psicologos dicen que es un pedofilo irrecuperable. ¿Que les podra decir la ICAR a los familiares de los niños abusados, quizas, que ellos son la verdadera iglesia de Dios y que fuera de ellos no hay salvacion?

Que Dios les bendiga a todos

Paz
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Originalmente enviado por Joaco
Un saludo a todos los que visitan y leen este epígrafe.

Esperando que la gracia y paz de Dios sean derramadas abundantemente en sus vidas, les compartó aquí una reflexión sobre el ausnto de las iglesias (porque son varias) que se dicen "La única y Verdadera Iglesia de Cristo".

Las iglesias que no entienden claramente el Evangelio tienden a eregirse en mediadoras entre sus miembros y Cristo Jesús. Tienden a reclamar para sí mismas un singular papel que les concede identidad y les capacita para hacer cumplir los decretos de la iglesia. Considérese cómo se llaman así mismas algunas de estas iglesias, buscando proclamar sus identidades y, de esta manera, el papel que juegan en las vidas de sus miembros:

- "La única Verdadera Iglesia"
- "La verdadera iglesia de Jesucristo"
- "La Iglesia Remanente"
- "La iglesia Universal del Reino de Dios"
- "La Verdadera Religión"
- "La iglesia de Dios"
- Etc, etc, etcetera, pues la lista es larga.

Estas iglesias han sido mediadoras en el sentido de que la organización eclesiástica se interpone entre el miembro y Jesucristo. Han sido exclusivas en el sentido de que la salvación y las bendiciones especiales de Dios generalmente se reservan sólo para sus propios miembros. La membresía en su iglesia se considera sinónima con la membresía en el Reino de Dios.

Las iglesias que reclaman una identidad singular a menudo requieren respeto para su profeta particular o guía espiritual al cual, en un sentido práctico, se le ha conferido autoridad final en cuestiones espirituales. Generalmente, estos individuos no vacilan en afirmar que reciben mensajes directamente de Dios aparte de la Biblia, y generalmente afirman que hablan en nombre de Dios. Esto les da autoridad para imponer rigurosamente su voluntad sobre sus propios miembros.

Ahora bien, según la Biblia, la autoridad máxima para los cristianos, cada persona que ha recibido a Jesús como su Señor y Salvador personal ha llegado a ser hijo de Dios (Juan 1:12). El mismo Espíritu de Dios vive en ellos y da testimonio de la verdad de que ya son hijos de Dios (Romanos 8:16, 17) y que nada ni nadie les puede separar del amor divino (Romanos 8:28, 29).

Entonces, los miembros de la iglesia son personas que se han arrepentido de sus pecados, han nacido de nuevo y han dado testimonio público de esto, siendo bautizados por inmersión en agua. Dios es su Padre celestial y son "herederos de Dios y coherederos con Cristo".

Una iglesia local es una familia de fe. Es un compañerismo espiritual de cristianos que se han unido y desean practicar las enseñanzas de Jesús y llevar a cabo sus propósitos en la tierra. Creen que la base de la fe y práctica cristianas es la Biblia y que el único mediador entre Dios y los hombres es Jesucristo (1 Timoteo 2:5).

El Espíritu Santo de Dios vive en cada creyente y le comparte su amor divino (Romanos 5:5). Este fruto del Espíritu llega a ser la característica principal de la iglesia (Juan 15:35; Gálatas 5:22, 23). El Espíritu Santo también les reparte dones a cada miembro de la familia de Dios. Cada uno es responsable ante Dios por el ministerio que ha de desarrollar como parte vital del cuerpo de Cristo (Romanos 12:1-8).

¿Quién gobierna la Iglesia? No hay ningún hombre nombrado para gobernarla. Es Jesucristo mismo la cabeza de Su iglesia (Colosenses 1:17, 18). El Nuevo Testamento enseña que cada iglesia tiene dos oficios -el del pastor y el de los diáconos. Ellos son los siervos de Cristo y de la iglesia local (2 Corintios 4:5). Cada pastor ha de cuidar a los miembros de su congregación como un pastor cuida su rebaño. Los líderes han de orar, predicar, enseñar, aconsejar y servir en tal manera que todos los miembros sean equipados para poder cumplir con Dios en llevar a cabo el ministerio total de la iglesia (Efesios 4:11, 12) y servirle como el "Real sacerdocio" de Dios (1 Pedro 2:9).

En cada iglesia local DIOS MANDA. Dios es el que gobierna. Entonces la iglesia es UNA MONARQUIA en donde el Rey es Jesucristo Nuestro Señor. Pero en los asuntos prácticos que no se estipulan en la Biblia, la iglesia descubre la voluntad de Dios por medio de la democracia, esto es: todos los miembro tiene las mismas responsabilidad y los mismos privilegios, y asimismo, cada uno de los miembro tiene el derecho de dar su opinión y su voto en la toma de decisiones. (Hechos 6:1-7; 13:1-3, 15:1-41).

No existe “élite” entre los miembros de la iglesia, todos los miembro son iguales y tienes la misma capacidad espiritual para su funcionamiento en el cuerpo de Cristo (2 Co. 12:13). Todos los miembro son “MINISTROS” que Dios ha capacitado para realizar la obra del ministerio (1 Pedro 4:10, Efesios 4:11-12). Los pastores son “Ministros Oficiales” y cada miembro un ministro general.

Los pastores en la iglesias tienen una autoridad que les fue delegada por la iglesia local, por lo tanto su liderazgo no es jerárquico, sino de función, de liderazgo educativo, ejemplar y de servicio.

La autoridad está en el desarrollo de su trabajo más que una posición (Hebreos 13:7).

La iglesia esta comisionada por Jesús mismo a compartir el mensaje de la salvación con todo el mundo. El mensaje que proclama es que Dios ama a todo el mundo y quiere que tenga la vida abundante y eterna (Juan 3:16). El pecado separa a cada persona de este amor (Romanos 3:22, 23). Por eso Jesús vino al mundo y murió en la cruz y allí pagó el precio completo de la salvación (Romanos 5:8) y resucitó mostrando Su poder y voctoria sobre el pecado y la muerte y que puede dar vida a quien se llega a Él (Juan 5:21; 10:18). Cada pecador puede aceptar la muerte de Jesús como el pago por sus pecados, arrepentirse y volver a Dios. La vida abundante y eterna es una dádiva que Dios ofrece a todos a través de Cristo Jesús (Romanos 6:23).

Atte.
Joaco <><



Bienaventurado eres varón, porque no te lo ha revelado carne ni sangre, sino nuestro Padre que está en los cielos.

Amén y amén.

Gracias por traernos tu testimonio, similar al de tantos miles de creyentes que un día tuvieron la dicha de encontrar una relación con Cristo y abandonaron su religión, mecánica y plena de ritualismos.


:elcaminan
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Bienaventurado eres varón, porque no te lo ha revelado carne ni sangre, sino nuestro Padre que está en los cielos.
¡Alabado sea su Santo Nombre! porque a pesar de mi indignidad me ha hecho experimentar Su gracia, Su amor y Su perdón.

Gracias por traernos tu testimonio, similar al de tantos miles de creyentes que un día tuvieron la dicha de encontrar una relación con Cristo y abandonaron su religión, mecánica y plena de ritualismos.
Y todo gracias a que Dios tuvo misericordia de nosotros, y que, aún siendo pecadores, enemigos Suyos, por Su gran amor con que nos amó nos hizo renacer a una speranza incorruptible, gracias al sacrificio perfecto de Jesucristo en la cruz del calvario.

Un fuerte abrazo amado hermano, que el Señor continue derramando abundantes bendiciones en tu vida siendo canal de Su amor y Su verdad.

Atte.
Joaco <><
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.
Efesios 2:8-9
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Pues si estás tan seguro de te salvación te recomiendo leer:

1Corintios 9:25-27
Los atletas se privan de todo; y eso ¡por una corona corruptible!; nosotros, en cambio, por una incorruptible.
Así pues, yo corro, no como a la ventura; y ejerzo el pugilato, no como dando golpes en el vacío,
sino que golpeo mi cuerpo y lo esclavizo; no sea que, habiendo proclamado a los demás, resulte yo mismo descalificado.


Filipenses 2:12
Así pues, queridos míos, de la misma manera que habéis obedecido siempre, no sólo cuando estaba presente sino mucho más ahora que estoy ausente, trabajad con temor y temblor por vuestra salvación,


Pablo no estaba seguro, porque el buscaba la excelencia, el no solo buscaba salvarse, sino ser de los mejores ante Dios.

El que se cree salvado desde ya, se queda estancado no evoluciona, es como un niño que nunca crece y necesita que siempre se le de comida de niños:


Saludos

Preocupate por ti cariño, que yo se muy bien en Quien he creído.
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Estas conversiones se vienen dando con mucha frecuencia, sobre todo en los EE.UU donde las iglesias protestantes historicas, se van secularizando con una velocidad alarmante. Hoy es normal encontrarse con cientos de exsacerdotes anglicnaos, y expastores luteranos que vienen a la Iglesia de siempre, buscando lo que nunca han encontrado en sus grupos:la Eucaristia, la plenitud de la revelacion, la autoridad apostolica, el minsiterio valido, los sacramentos, el amor por Maria y los santos, la vida consagrada...y tantas otras bendiciones que solo se pueden encontrar en la Iglesia del Dios vivo. A El la gloria y la alabanza por siempre.:baby:

De anglicanos y luteranos ya no me sorprende nada, de hecho por ahí dije que en cualquier iglesia evangélica participaría de la comunión, menos en estas dos que señalaste, gracias por corroborar lo que dije.

Shalom!!
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Joaco, Gracias por todo lo que respondes y compartes Ya leí uno de los vínculos y voy a leer el resto para poder compartir sobre este tema tan especial de la Nueva Alianza, celebrada en cada Eucaristia. Un abrazo grande y paz!


La Nueva Alianza desde el Antiguo Testamento​

Se habla de la fiesta de la pascua en Ex Cáp. 12, 1-20. pero la pascua era una fiesta mucho mas antigua. Y en ese texto están unidas dos fiestas, la de la pascua y la de los “asimos”. La pascua era una fiesta que celebraban los pastores en la fecha mas cercana al equinoccio de primavera y le pedían al Dios de los pastores (según su mentalidad) que El diera fecundidad a todos sus trabajos especialmente al trabajo con las ovejas y ellos para asegurar la fecundidad entonces sacrificaban un cordero y comían la mitad de ese cordero como una comunión con ese Dios y la sangre la untaban para alejar de sus campos, de sus cosechas, toda clase de males, era como un signo de protección.

El texto Ex Cáp. 24, 1-11. Es la ratificación de la Alianza y dice: “Dijo Yahvé a Moisés, sube donde Yahvé tú, Aarón, Nabal e Abú con 70 de los ancianos de Israel, os prestaréis desde lejos. Solo Moisés se acercará a Yahvé, ellos no se acercaran, tampoco el pueblo subirá con ellos”.

Hay un llamado de Dios en estos dos primeros versículos para establecer la Alianza. La alianza no supone necesariamente la igualdad entre las dos partes, sino que el más fuerte garantizaba la protección del más débil. Muchas veces nosotros hemos entendido la alianza como un contrato, pero la palabra Alianza quiere decir Diateque que quiere decir donación. Dios se dona y garantiza al pueblo que va a cuidar de el, que va a hacer de el algo hermoso que lo va a llevar a la felicidad. Pero Dios espera la fidelidad del pueblo para poderlo proteger. Toda Alianza se sellaba siempre con la sangre.

Versículos siguientes

“Vino pues Moisés y refirió al pueblo todas las palabras de Yahvé y todas sus normas y todo el pueblo respondió a una voz, cumpliremos todas las palabras que ha dicho Yahvé”

En este texto hay dos vertientes espirituales y están unidas. Las palabras son el decálogo o los Mandamientos. Para poder Dios garantizarle al pueblo su protección, su voluntad quería que el pueblo fuera fiel en eso para asegurar su protección. A estas palabras también se le llamaba el libro o las palabras de la Alianza. Cuando Moisés las dijo al pueblo y respondió a una voz, cumpliremos todas las palabras de Yahvé

Versículos siguientes

“Entonces escribió Moisés todas las palabras de Yahvé y levantándose de mañana alzó al pie un altar y 12 estelas por las 12 tribus de Israel”. Al aceptar esa donación de Dios, esa Disposición de Dios, Moisés hace un rito y dicen los biblistas que probablemente las 12 estelas eran 12 piedras y probablemente estaban en círculo, y en el centro estaba el altar. El altar representaba al Señor, pero también cada una de las piedras materializaban la presencia de Dios y Dios estaba en el altar en el centro, indicando que el pueblo colocaba en el centro de su vida a Dios.

“Luego mando a algunos jóvenes de los Israelitas que ofreciesen holocaustos e inmolaran novillos como sacrificio de comunión para Yahvé. Todavía no aparecen los levitas que eran los encargados del culto, sino aparecen unos jóvenes que sacrifican una victima, un animal como un rescate. En el antiguo testamento la paga de un pecado tenía que cubrirla un animal, al morir el animal el pagaba el pecado que el hombre había cometido. Por eso ellos hicieron eso, ofrecieron las victimas para rescatar a las personas del pecado. La sangre en le Biblia tiene un valor sagrado, porque cuando un animal se desangraba moría, entonces para ellos la sangre era la vida, perder la sangre era perder la vida, de manera que ellos usaban la sangre en la mayoría de ritos (Lev cap 17 ver 14) Está que la sangre era valiosa y la utilizaban en muchas cosas, con la sangre consagraban los objetos, también con la sangre se consagraban los levitas que eran los que iban a servir al culto, también el altar era consagrado con la sangre. Entonces se realizaban todos estos sacrificios de los animales para el perdón, para lograr el perdón de los pecados, entonces la muerte de un animal era la sustitución de un hombre que merecía la muerte.

“Moisés hace este rito, lo envía a través de los jóvenes que se haga y dice el texto “inmolaron novillos como sacrificio de comunión para Yahvé. Tomó moisés la mitad de la sangre y la echo en vasijas, la otra mitad la derramó sobre el altar”. La sangre es regada sobre el altar mostrando que el pecador puede volver a la presencia de Dios, que podría entrar nuevamente el su presencia porque un animal había muerto en su lugar y la sangre que era esparcida sobre el pueblo, indicaba que su castigo había sido pagado. Y por lo tanto podía reunirse con Dios y gozar de todas las bendiciones de Dios, poder disfrutar de todas las gracias de Dios. En otras palabras se establecía un vínculo sagrado entre Dios y el pueblo. Es decir que Dios compartía la misma vida y la misma suerte del pueblo. Esto es hermoso porque esta alianza dice que Dios comparte las luchas, las batallas, las cosas buenas, las cosas difíciles con el pueblo y lo hacia a través de este vinculo de sangre. El hombre no mantiene su promesa frente a Dios, pero Dios no se da por vencido, no se rinde y nos hace una promesa grande en el libro de Jeremías Dios promete una nueva alianza porque el pueblo no fue fiel a la primera alianza y porque la alianza el pueblo la lleno de otras normas y leyes que taparon los mandamientos, era como letra muerta con tantos preceptos, era temor.

Nueva alianza y promesa de Dios, Jeremías Cáp. 31 31-34. “He aquí que vienen días oráculo de Yahvé en que Yo pactaré con la casa de Israel y con la casa de Judá una nueva alianza, no como la alianza que pacte con sus padres cuando les tomé de la mano para sacarlos de Egipto, ellos rompieron mi alianza y yo hice estragos con ellos, sino que esta será la alianza que yo pactaré con la casas de Israel después de aquellos días: Pondré mi ley en su interior y sobre sus corazones las escribiré y Yo seré su Dios y ellos serán mi pueblo. Ya no tendrán que adoctrinar mas el uno a su prójimo y el otro a su hermano diciendo: “conoced a Yahvé”, pues todos ellos me conocerán desde el más chico hasta el más grande, oráculo de Yahvé, cuando perdone sus culpas y de sus pecados no vuelva a acordarme”


Esta nueva alianza consiste en que Dios va a obrar en el interior del hombre y va a borrar su inclinación al pecado, va a borrar el pecado del hombre.

Dios en Ezequiel Cáp. 36 24-27 Nos vuelve a hacer esta promesa de la nueva alianza diciendo. “Os tomaré de entre las naciones, os recogeré de todos los países y los llevaré a vuestro suelo, os rociaré con agua pura y quedaréis purificados de todas vuestras inmundicias y de todas vuestras basuras os purificaré y les daré un corazón nuevo, infundiré en vosotros un espíritu nuevo, quitaré de vuestra carne el corazón de piedra y os daré un corazón de carne” Diariamente va a obrar esto el Señor. Pero no solamente estas dos promesas de nueva alianza hay en la Biblia. Hay una tercera en el libro de Isaías Cáp. 53 1- y esa promesa de Dios donde anuncia que va a enviar a su Hijo que nos iba a rescatar del yugo del mal, de la opresión del enemigo, que el iba a traer todas las bendiciones del cielo, esta promesa muchos la esperaron y nosotros somos partícipes de ella, somos dichosos de esta bendición.

Isaías 53-1 “Quien dio crédito a nuestra noticia? Y el brazo de Yahvé a quien se lo reveló? Creció como un retoño delante de El, como raíz de tierra árida, no tenía apariencia, ni presencia, le vimos y no tenia aspecto que pudiera estimar, despreciable deshecho de hombres, varón de dolores y sabedor de dolencias, como ante quien se oculta el rostro, despreciable y no le tuvimos en cuenta y con todo eran llevadas nos nuestras dolencias las que El llevaba y nuestros dolores los que soportaba, nosotros le tuvimos por azotado, herido de Dios y humillado. El ha sido herido por nuestras dolencias, molido por nuestras culpas, El soportó el castigo que nos trae la paz y con sus llagas hemos sido curados.

Todo el texto de la palabra de Dios hace alusión a Jesucristo, nos esta hablando de su pasión, nos esta diciendo que el cargó con nuestros sufrimientos, con nuestras dolencias, con nuestras enfermedades, con nuestros fracasos, con nuestro dolor, con nuestra tristeza, que El iba a venir a llevar sobre sí el peso del hombre, la miseria humana y por eso dice, por sus llagas hemos sido curados. Aquí se habla de Jesús como el cordero de Dios, porque los corderos del antiguo testamento eran sacrificados como expiación por nuestros pecados. “Fue oprimido y el se humillo, y no abrió la boca como un cordero al degüello y como oveja que esta muda antes de que la trasquilen, así tampoco abrió la boca.”

Vemos la bondad de Dios y el amor y la misericordia de Dios manifestado desde el Antiguo testamento. Ahora en el Nuevo testamento.

San Marcos, Cáp. 14 22-25. En este texto y en los paralelos es en el único que aparece la palabra “alianza” en el nuevo testamento.

“Y mientras estaban comiendo, Tomo pan, lo bendijo, lo partió y se lo dio a sus discípulos y dijo “tomad, este es mi cuerpo” tomó luego una copa y dadas las gracias se las dio y tomaron todos de ella y les dijo “esta es mi sangre de la alianza, que es derramada por muchos, yo les aseguro que ya no beberé del producto de la vid hasta el día aquel en que lo beba de nuevo en el reino de Dios”. Entonces Jesús con su sangre realiza la nueva alianza, su sangre bendita es la nueva alianza. Y al hacer esta nueva alianza Dios no le coloca condiciones al pueblo como había ocurrido en el antiguo testamento, sino que la nueva alianza es Jesús, Jesús es el vínculo pactante, no hay un nuevo código. Tener a Jesús en el corazón es estar en la nueva alianza. El es la nueva alianza, por eso nos ofrece su sangre y nos ofrece su cuerpo y cuando dice “Este es mi cuerpo” hay que entender que en la Biblia no hay división cuando se habla del cuerpo es la totalidad del ser y “Esta es mi sangre” pero dice que es una sangre derramada, cuando en la Biblia se usa ese término “sangre derramada” está haciendo alusión a la muerte. Por eso cuando tu participas de la eucaristía, estas no solamente recibiendo el Cuerpo de Jesús, es decir la Vida de Jesús, y la sangre es decir la Muerte de Jesús. Se esta recibiendo la Totalidad de Jesucristo, Sangre derramada, la muerte de Jesús supera el pecado por iniciativa del amor misericordioso de Dios.

En otras palabras, la alianza del nuevo testamento no es un pago, no es que Dios haya descargado su ira en Jesús, en la palabra de Dios dice en varios pasajes “Este es mi Hijo Amado”. Entonces el Padre Celestial manifiesta el amor EXTREMO, a través de su Hijo Jesucristo. La nueva alianza se dio en el altar de la cruz y el banquete es la última cena. Por eso hermanos queridos, esta alianza, esa entrega de Jesús fue dada libre y voluntariamente, “En cada eucaristía se está realizando una nueva alianza. Y me esta recordando que Jesús me amó y se entregó por mi. (Gálatas 2, 20). Esta es una de las verdades más grandes de la palabra de Dios. Más hermosas. No solamente Jesús se entregó por amor a mí, sino que la sangre de Jesús destruyó el pecado. Destruyó el poder del mal sobre nosotros. La sangre de Jesús nos purifica de todo pecado. La sangre de Cristo nos dejó libres para servir a Dios, la sangre de Cristo nos hizo nuevos, la sangre de Cristo nos vivificó. La Sangre de Cristo es la vida de Dios para vivificar a los hombres, la vida de Dios para hacer nuevos a los hombres, la vida de Dios que nos trajo la eternidad. Por eso Jesús dice, “Mi Sangre es VERDADERA bebida” No es un símbolo, es REAL. Muchos asisten a la eucaristía pero esta verdad se queda como si fuera una mentira. Romanos Cáp. 3, 23-25: “La sangre de Jesús fue dada a nosotros, para vivificarnos, para renovarnos, para transformarnos” “Todos pecaron, y están privados de la Gloria de Dios y son justificados en por el don de su gracia en virtud de la redención realizada en Cristo Jesús. A quienes sirvió Dios como instrumento de propiciación por su propia sangre mediante la fe para mostrar su justicia, habiendo pasado por alto los pecados cometidos anteriormente”. Es decir la SANGRE DE JESUS TRANSFORMA NUESTRAS VIDAS Y NUESTROS CORAZONES DESDE ADENTRO.
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

AnaMS,
saludos cordiales. Que la gracia y la paz de Dios sean derramadas en su vida.

Agradeciendole el tiempo que ha dedicado a este intercambio, espondo aquí al mensaje que me dirige.

Joaco, Gracias por todo lo que respondes y compartes
Es un gusto poder proclamar lo que dice la bendita Palabra de Dios y lo que Él ha hecho en mi vida. Sólo espero que lo que le he compartido le sea motivo de reflexión, a pesar de que no me comenta ni responde nada de lo que le compartí, por lo que no sé si está o no de acuerdo con lo que he expresado.

Ya leí uno de los vínculos y voy a leer el resto para poder compartir sobre este tema tan especial de la Nueva Alianza, celebrada en cada Eucaristia.
Ana, la nueva Alianza es conmemorada en la cena del Señor, pero está fue llevada a cabo por Cristo en la cruz del calvario al derramar Su preciosa Sangre, una sóla vez y para siempre (Hebreos 7:22-27; 10:5-25).

"Porque esto es mi sangre del nuevo pacto, la cual es derramada por muchos para remisión de los pecados" (Mateo 26:28)

"Y les dice: Esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada" (Marcos 14:24)

"Asimismo también el vaso, después que hubo cenado, diciendo: Este vaso es el nuevo pacto en mi sangre, que por vosotros se derrama" (Lucas 22:20)

Jesucristo derramó Su sangre en la cruz del Calvario a fin de dar perdón de los pecados y salvación. Su muerte en la cruz estableció un nuevo pacto entre Dios el Padre y todos los que reciben a Su Hijo Jesucristo como Señor y Salvador. Los que se arrepientan de sus pecados y se vuelvan a Dios mediante la fe en Jesucristo recibirán vida espiritual: serán perdonados, liberados del poder de satanás, hechos hijos de Dios y bautizados en el Espíritu Santo, y tendrán acceso a Dios en cualquier momento a fin de recibir misericordia, gracia, fortaleza y ayuda.

La cena del Señor es un memorial -gr. anamnesis- (Lucas 22:19; 1 Corintios 11:23-26) de la muerte de Jesucristo para redimir al creyente del pecado y de la condenación. Mediante la cena del Señor, el creyente se confronta con la muerte salvadora de Jesucristo y la importancia redentora que tiene para la vida del ser humano. la muerte de Jesucristo es la motivación fundamental para no caer en pecado y para evitar toda clase de mal (1 Tesalonisenses 5:22).

Es también acción de gracias -gr. eucaristía- por las bendiciones y la salvación que Dios provee gracias al sacrificio de Jesucristo en la cruz (Mateo 26:27-28; Marcos 14:23; Lucas 22:19; 1 Corintios 11:24).

La cena del Señor es también comunión -gr. koinonía- con Jesucristo y participación en los beneficios de Su muerte expiatoria, así como comunión con los demás miembros del cuerpo de Cristo (1 Corinstios 10:16-17).

Es reconocimiento y proclamación de nuevo pacto -gr. koine diatheke- por lo cual los creyentes reafirman el señorío de Jesucristo en sus vidas y su consagración a hacer Su voluntad, a permanecer fieles, a resistir el pecado y a identificarse con la misión de Jesucristo (Mateo 26:28; Marcos 14:24; Lucas 22:20; 1 Corintios 11:25).

La cena del Señor es además una anticipación del futuro reino de Dios y del futuro banquete mesiánico cuando todos los creyentes estarán en la persencia del Señor (Mateo 8:11; 22:1-14; Marcos 14:25; Lucas 13:29; 22:17-18, 30)

Pero lo que la cena del Señor no es, es un sacrificio o una repetición de Su muerte en la cruz.

Respecto al escrito que compartió (La Nueva Alianza desde el Antiguo Testamento), espero leerlo y analizarlo con calma el día de hoy y, mañana, si Dios me presta vida, estare dandole mis comentarios sobre el mismo.

Atte.
Joaco <><
 
Re: Video: De Mormón a Evangélico y de allí a la Iglesia de Cristo

Joaco, un saludo! yo tambien voy a enviarte los comentarios de lo que escribiste el las respuestas anteriores. Estoy de acuerdo con muchas cosas, y con otras no. También mañana te estaré respondiendo. Un abrazo de paz!

Ana María.