Una morada de Dios

Estas son las órdenes estrictas de la secta de los Testigos de Jehová, extraído de una de sus revistas:


pariente_01.jpg
 
salsabor.html
 
http://www.escritosparalaconcordia.org/salsabor.html


Cuando la sal se desvirtúa

Vosotros sois la sal de la tierra. Mas, si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará? Ya no sirve para nada más que para tirarla afuera y ser pisoteada de los hombres. Mateo 5: 13.






Mateo incluye estas palabras inmediatamente después de alistar las bienaventuranzas que Jesús pronunció en el marco de lo que conocemos como el Sermón del Monte (Mateo capítulos 5, 6 y 7). En el transcurso de aquel memorable discurso Jesucristo pronunció otras palabras que también viene al caso citar aquí y que muy bien harían los testigos de Jehová en tenerlas muy presentes cuando sus líderes les inciten a tener un comportamiento impropio, no ya de un cristiano, sino de alguien con una pizca de humanidad:

Porque os digo que, si vuestra justicia no es mayor que la de los escribas y los fariseos, no entraréis en el Reino de los Cielos. Mateo 5: 20.

Y si no saludáis más que a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de particular? ¿No hacen eso mismo también los gentiles? Mateo 5: 47.


Guardáos de los falsos profetas, que vienen a vosotros con disfraces de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces. Mateo 7: 15.

Muchas otras cosas enseñó Jesús en aquella ocasión que han de ser una guía, una luz y un patrón para afrontar toda circunstancia con el espíritu del cristianismo verdadero y, por tanto, han de tenerse en cuenta a la hora de aplicar muchos textos bíblicos con el equilibrio necesario. Toda la vida y las enseñanzas de Jesucristo nos muestran que el amor es la regla suprema. Amor a todos los humanos, empezando por las obligaciones bíblicamente ineludibles del entorno familiar. Acudir a textos bíblicos aislados, prescindiendo de un contexto bíblico más amplio necesariamente en armonía con el sentido común humano y humanitario, y utilizarlos como si del Código Penal se tratase, no es más que una manipulación de la Sagrada Escritura o, cuando menos una interpretación sesgada de la misma. Eso fue lo que en diferentes ocasiones les echó en cara a los líderes religiosos de su día Jesucristo cuando afrontó ante ellos cuestiones como la observancia del sábado. Las objeciones de aquellas personas a las obras de Jesucristo en sábado carecían de toda justificación. Con toda justicia Jesús pudo decir: "No penséis que he venido a abolir la Ley y los Profetas. No he venido a abolir, sino a dar cumplimiento". Mateo 5: 17.

Contemplamos cómo pervive hoy aquel espíritu servil a la letra, el mal entendimiento y la perversión de la Sagrada Escritura. Y lo vemos en una organización con un registro récord en fallos proféticos y en interpretaciones erradas de la doctrina y que, aún con toda esa evidencia, no quiere reconocer que carece de apoyo divino. Muy al contrario, no se ocupa en otra cosa que en hacer alardes de ser la destinataria "probada" de tal apoyo. Pero no hay más que examinar un poco su trayectoria para darse cuenta de lo descarriados que andan. Así que no hay razones para considerar que en lo que se refiere a no pocos aspectos de la orientación moral que imparte esa organización haya de ser diferente a lo que le sucede en el aspecto doctrinal. Tanto en un aspecto como en el otro le son aplicables las palabras de Pedro con respecto a las cartas de Pablo, especialmente en lo que tiene que ver don la parousía:

"Es cierto que en éstas se encuentran algunos puntos difíciles, que los ignorantes e inestables tergiversan para su propia perdición, lo mismo que hacen con el resto de la Sagrada Escritura". (2 Pedro 3: 16).
Lo grave del caso que constituye el tema que inmediatamente paso a considerar es que afecta al trato debido a las personas, concretamente a la estrecha relación que debería mantenerse en el seno de la familia por el hecho mismo de ser miembros de esa institución que, sin duda alguna, Dios quiere preservar a toda costa.

Nuestro Ministerio del Reino correspondiente al mes de agosto de 2002, en un suplemento expresamente dedicado a la cuestión, trae a consideración de los miembros en las familias testigos de Jehová el tema "DEMOSTREMOS LEALTAD CRISTIANA CUANDO SE EXPULSA A UN PARIENTE". El tema es considerado en cotorce apartados y rebosa una inhumanidad tal que, de seguirse tal como se requiere de los adeptos, conduce inevitablemente a la destrucción de la relación familiar. Es de hecho, la situación que se da en muchísimas familias de testigos por esa causa. O sea, que muchísimo del mal ya está hecho. Dice el primer párrafo:

Los vínculos familiares pueden ser muy fuertes. Este hecho supone una prueba para el cristiano cuando su cónyuge, un hijo, un padre u otro pariente cercano es expulsado o se desasocia de la congregación (Mat. 10:37). ¿Cómo debe el cristiano leal tratar a ese pariente? ¿Es diferente el trato que se le da si dicha persona vive en la casa del Testigo? Pues bien, repasemos lo que dice la Biblia al respecto, y tengamos presente que sus principios son aplicables tanto a los que han sido expulsados como a los que se han desasociado.
¿En dónde dice la Escritura que los vínculos familiares hayan de constituir una prueba en el sentido de que el cristiano haya de verse obligado a tomar una acción dolorosa en contra de sus familiares, porque alguno de éstos haya emprendido un camino diferente, tal vez guiado por su propia conciencia? Y ¿En dónde se especifica esa distinción en el trato que haya de otorgarse a quienes viven bajo el mismo techo y a los que vivan fuera de casa? Jesucristo reconoció que, por su causa, habría división en el seno de la familia (Mateo 10: 35, 36). Pero dio a entender que serían los familiares no cristianos los "enemigos" del seguidor de Cristo, no que fuera de éste de quien partiera la iniciativa de tomar acción en contra de su familia, constituyéndose él en el "enemigo" de los demás por exigencias de su fe. Se entiende, además, que existiría conflicto, incluso pudiera tratarse de persecución, pero no habla de corte de relaciones por esa causa. Si algo hay claro en el sermón del monte, cumbre en la exposición de la actitud del cristiano ante el mundo exterior, es el aguante ante la injusticia sufrida. Lo que sí estableció con su enseñanza es que: "El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí" (Mateo 10: 37). Eso es algo bien distinto. De ninguna manera supone repudio familiar hacia alguno de sus miembros.

Naturalmente que un cristiano, como tal, nada tiene que ver con "fornicadores", "borrachos", "extorsionadores", etc. (1 Corintios 5: 11, 13). En ese sentido no considerará hermano en la fe a quien esté dominado por esas prácticas. Lo lógico es que sus amigos no sean personas de esa clase debido a sus creencias, principios y estilo de vida. Pero eso nada tiene que ver con las relaciones que se derivan de los vínculos familiares. Por muchos motivos, incluso de orden espiritual, éstas podrán debilitarse, pero la tendencia del cristiano habrá de ser siempre la de mantenerlas a flote en lo que de él dependa. Es su obligación como cristiano dentro del círculo familiar. También son ciertas las palabras de Jesucristo (Mateo 18: 17) con respecto a la consideración de las personas que definitivamente optan por desatender toda instancia para permanecer en la senda correcta. Pero el propio Jesús, que invitó a considerar a esas personas como consideraban a los gentiles y a los recaudadores de impuestos, no puso objeciones para reunirse él mismo y comer con tales recaudadores de impuestos. También hizo lo propio con samaritanos. El hecho de que Jesucristo reflejara en sus palabras la actitud de la gente de su tiempo para con ciertos grupos de personas no quiere decir que incitara a marginarlos por completo y a excluirlos hasta del saludo y de conversar con ellos. El no promovió algo así ni actuó de esa manera. Lo que Jesús pudo dar a entender es que el mundo de quien se mantiene como seguidor suyo es diferente del de aquel desecha las exigencias cristianas. No cabe duda alguna de que la visión de la vida del creyente es muy distinta del que no lo es. Las exigencias no son las mismas, tampoco las aspiraciones y las expectativas, de modo que las consideraciones son diferentes y el cristiano encuentra su afinidad entre sus hermanos en la fe. Pero, de ahí hasta llegar a la conclusión que de todo el razonamiento descrito en el apartado dos de ese suplemento extraen, hay todo un abismo. Dicha conclusión la refleja el apartado tres en estos términos:

Eso significa que los cristianos leales no tienen trato espiritual con nadie que ha sido expulsado de la congregación. Pero hay más implicado. La Palabra de Dios dice que 'ni siquiera comamos con tal hombre' (1 Cor. 5:11). De modo que también evitamos el trato social con tal persona, lo que descartaría ir con ella a una comida campestre, a una fiesta, a un partido, al centro comercial, al cine o sentarnos a comer con ella, sea en el hogar o en un restaurante.
Privar a los miembros de la familia de que, como tal familia, gocen de salidas al campo, tengan juntos una comida en casa o cenen en un restaurante es introducir la discordia en el seno de la misma. Da escalofríos pensar que una madre y una hija o dos hermanos que se quieren profundamente hayan de verse obligados a poner restricción a sus sentimientos por el hecho de que alguno de ellos deje de creer en las enseñanzas de la Watchtower y lo haga público. Lo normal es que hablen entre sí y traten de los mutuos puntos de vista con respecto a sus creencias con toda naturalidad y confianza. Pero eso es lo que la Orgnización trata de impedir al precio que sea. Este apartado tres está moralmente emponzoñado. La Sagrada Escritura no se puede tomar con esa ligereza. Pablo está considerando aquí un caso de incesto consentido entre la congregación corintia (1 Corintios 5). Es evidente que eso no se tolera en la práctica cristiana. Seguro que la congregación en Corinto tomó conciencia de aquella situación y trabajó para corregirla. Pero no hay evidencia alguna de que se emitiera algún tipo de anuncio oficial para que se negara la palabra a tal persona. Los principios no tienen por qué degenerar en reglas estrictas que ahogan el espíritu cristiano. Bastaría con dicho espíritu para resolver, no ya el caso concreto del incestuoso citado por Pablo como ejemplo extremo, sino el hecho de que la congregación estuviera contaminada por inmoralidad y expuesta a la relajación de costumbres comunes en la cultura dominante en la Corinto de la época. Hay que tener en cuenta, además, el hecho de que hubiera fricción y divisiones entre ellos (1 Corintios 1: 11; 2 Corintios 12: 20, 21). Todo ello formaba parte del enfado de Pablo que se expresó en un lenguaje claro y rotundo para transmitir el espíritu de la fe cristiana pura, al margen de la expresión concreta "con esos, ¡ni comer!" (1 Corintios 5: 11). Aquella persona fue restablecida sin que haya constancia de haberse seguido un proceso de prueba estricto en el que se le negara la palabra y el saludo a la manera de lo diseñado por la Sociedad Watch Tower para los testigos de Jehová. Es muy importante leer la Sagrada Escritura, el Nuevo Testamento en especial, con la sencillez y la naturalidad con la que está escrita, ya sea para impartir doctrina como para establecer normas de moralidad y comportamiento. Se trata de extraer la enseñanza fundamental y no dejar que "los árboles nos impidan ver el bosque", extrayendo una sola palabra o expresión para quedarse atrapado en ella y cargar sobre la misma toda la fuerza de la letra, ignorando el espíritu con el que está escrita. En este caso concreto remitiría al lector a que leyera con calma este asunto en una (o varias) buena versión de la Biblia para hacerse un cuadro no restringido por la estrechez de miras de la Sociedad Watch Tower. Creo que son interesantes los pasajes de 1 Corintios capítulos 1, 3 y 5; 2 Corintios capítulo 1: 12 a capítulo 2: 11; 2 Corintios capítulo 7: 5-13, entre otros. A todo esto no quisiera pasar por alto algunas de las palabras concretas de Pablo que arrojan mucha luz en todo este asunto:
"No porque pretendamos dominar sobre vuestra fe, sino porque queremos contribuir a vuestro gozo por vuestra firmeza en la fe". 2 Corintios 1: 24.
Pablo no pretendía un dominio (qué tendrían y qué no tendrían que hacer con todo detalle) sobre la fe de los corintios, sino una contribución a su fortaleza con el gozo consiguiente. Las sentidas palabras de Pablo al optar por el perdon distan mucho de un restablecimiento reglamentado como el que se lleva a cabo en la Organización Watchtower:
"Si alguno me contristó, no me contristó a mí, sino en cierto modo, para no exagerar, a todos vosotros. Bástele a ese la corrección de tantos, pues casi habríamos de perdonarle y consolarle, para que no se vea consumido por excesiva tristeza. Por eso os ruego que públicamente le ratifiquéis vuestra caridad". 2 Corintios 2: 5-8.
De modo que el paso de la tolerancia a la censura y la reprobación de su conducta por buena parte de la congregación de Corinto, algo doloroso para el interesado, fue suficiente y se le debería restablecer el amor que corresponde a todos los miembros de la congregación. Censurar o reprobar la conducta de alguien no implica obligación de negarle la palabra. Un hijo puede ser objeto de reprensión sin que por ello le sea negada la palabra dentro de la familia. Eso sería una injusticia aún mayor, no solo para ese hijo, sino para la familia entera.

He aquí el texto de los párrafos cuatro y cinco:

¿Se puede hablar con un expulsado? Aunque la Biblia no menciona todas las situaciones que pudieran surgir, 2 Juan 10 nos ayuda a comprender cómo ve Jehová el asunto: "Si alguno viene a ustedes y no trae esta enseñanza, nunca lo reciban en casa ni le digan un saludo". La Atalaya del 15 de noviembre de 1981, página 19, comenta: "Decir un sencillo '¡Hola!' a alguien puede ser el primer paso que lleve a una conversación y tal vez hasta a una amistad. ¿Quisiéramos dar ese primer paso respecto a una persona expulsada?".

El mismo número de La Atalaya, en la página 25, agrega: "La realidad es que cuando un cristiano se entrega al pecado y se le tiene que expulsar, pierde mucho: la posición aprobada que tenía delante de Dios; [ ... ] el grato compañerismo de los hermanos, que incluye mucha de la asociación que tenía con parientes cristianos".

El apóstol Juan está describiendo en este pasaje a los anticristos, aquellos que no reconocen al mesías en la persona de Cristo. Las palabras de Juan en todo su contexto son éstas:
"Muchos seductores han salido al mundo, que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Ese es el Seductor y el Anticristo. Cuidad de vosotros, para que no perdáis el fruto de nuestro trabajo, sino que recibáis abundante recompensa. Todo el que se excede y no permanece en la doctrina de Cristo, no posee a Dios. El que permanece en la doctrina, ése posee al Padre y al Hijo. Si alguno viene a vosotros y no es portador de esta doctrina, no le recibáis en casa ni le saludéis, pues el que le saluda se hace solidario de sus malas obras". 2 Juan 7-11.
De ser totalmente consecuentes con la aplicación de la norma de la Watchtower, ésta debería alcanzar también a los cristianos de otras confesiones con creencias o "doctrinas distintas" a las de los testigos de Jehová, no sólo a los que han sido testigos de Jehová. En ese caso, tampoco podrían saludar a ningún creyente de otra religión ni tener trato alguno con él, ya sea amigo, compañero de trabajo o simple vecino. Lo que ocurre es que la visión de la Watch Tower siempre está reducida al círculo bajo su control. Su mensaje no es universal, sino para lo que está bajo su dominio. Y ahí está su "interés". Naturalmente a quienes habría que excluir del trato en primer lugar es a los dirigentes de la Sociedad Watch Tower: ¿No ha sido "otra enseñanza" la doctrina sobre la separación entre "las ovejas y las cabras" que se mantuvo hasta hace bien poco? ¿No lo ha sido la enseñanza sobre "la generación que no pasará"? ¿No lo fue la enseñanza en torno a 1975, el año de jubileo sabático, "la paz de mil años que se aproxima"... todo lo cual influyó para que muchas familias tomaran decisiones perjudiciales por aquellos años? ¿Y el mantener la prohibición de que los jóvenes pudieran participar en un servicio civil alternativo al servicio militar, con el consiguiente sufrimiento en años de cárcel para muchos de esos jóvenes? ¿Es esa la enseñanza de la Palabra de Dios? ¿Lo es acaso la doctrina sobre 1914? ¿Quién es el que se ha excedido, el que se ha adelantado, ha ido más allá de lo escrito y ha divulgdo una doctrina en desacuerdo con las Escrituras? ¿A quién, entonces habría que marginar de todo trato?

Quiero destacar una idea importante en nuestro caso. Se trata de darse cuenta de que vivimos, no en el legalismo del Viejo Testamento basado en la letrade la Ley, sino bajo la Nueva Alianza en la que predomina el espíritu que se desprende de llevar la ley escrita en el corazón (Hebreos 10: 16). Pablo lo expresó así:

"el cual [Dios] nos capacitó para ser ministros de una nueva Alianza, no de la letra, sino del Espíritu. Pues la letra mata, mas el Espíritu da vida. 2 Corintios 3: 6.
Esto no anula la fuerza de las declaraciones bíblicas que comentamos, el cristiano es consecuente con ellas, pero no lo arrastran al extremismo que sobrepasa su significado y conduce a la práctica de la injusticia. Con plena razón Pablo considera el pasado como "ministerio de la "condenación", en comparación con la era cristiana, a la que llama "ministerio de la justicia". 2 Corintios 3: 9.

Los apartados seis, siete y ocho están destinados a considerar la situación de un expulsado o desasociado que vive en casa. Entre otras cosas, allí se dice:

... les toca a los miembros de la familia decidir hasta qué grado lo incluirán cuando coman o participen en otras actividades domésticas. Sin embargo, no querrán dar a los hermanos con quienes se relacionan la impresión de que todo marcha igual que antes de la expulsión.

¿Qué hay si algún expulsado que vive en el hogar quiere estar presente cuando la familia lee la Biblia junta o tiene un estudio bíblico? Los otros pudieran permitirle estar presente para escuchar con tal que no tratara de enseñarles o compartir con ellos sus ideas religiosas".

¡Qué manera más extraña de medir la justicia! Supongamos que el expulsado es el cabeza de familia, el que trae el sustento a casa y sobre el que recae bíblicamente la responsabilidad de dirigir a la familia. Supongamos que su fe está viva y se ha desasociado de la Organización para no manchar su conciencia por difundir enseñanzas falsas (1914, "esclavo fiel y discreto", dos "clases" diferentes de cristianos...). La expulsión o el estar desasociado ni le exonera de tal responsabilidad ni le priva de sus privilegios en el arreglo de Dios. Y ningún otro miembro de la familia está legitimado para asumir ese papel, ni tendría la bendición divina si lo hiciera. Es absurdo que los demás miembros hayan de decidir si se sientan o no con él a la mesa o si le dirigen o no la palabra o si tratan o no temas religiosos y espirituales con él. ¿Por qué no se pueden abordar todo tipo de temas en el seno de una familia, el lugar más apropiado para hacerlo? ¿Quién es la Sociedad Watch Tower para entrometerse en el arreglo dispuesto por Dios para establecer los límites de actuación entre sus miembros y destruir su unidad como tal familia? ¿Qué se supone que tienen que hacer los miembros de una familia para poner de manifiesto ante el resto de la congregación que las cosas han cambiado y el trato (maltrato) dado a quien se ha desasociado de la Organización ya no es el que recibía antes? El arreglo y la armonía familiar no se puede romper, como no se puede romper el vínculo matrimonial, porque uno de los cónyuges piense de diferente manera que el otro y haya sido expulsado de la Organización. De la misma manera que, bajo el punto de vista de Dios, se debe respetar la vida ajena, la propiedad ajena y la mujer del prójimo, independientemente de la ideología y la filiación religiosa de cada uno, igualmente se debe proteger la relación familiar como una obligación de cada uno de sus miembros en cuanto integrantes del arreglo de Dios para esa institución.

Con respecto a los familiares que no comparten el hogar familiar, a quienes están dedicados los apartados 9, 10 y 11, éstos son algunos de los párrafos dedicados a ellos:

Pudiera ser posible eliminar casi todo contacto con tal pariente. Aun cuando hubiera ciertos asuntos de familia que exigieran comunicación, ciertamente esto se mantendría al mínimo", en armonía con el mandato divino de "cesar de mezclarse en la compañía de cualquiera" que sea un pecador impenitente (1 Cor. 5:11).

"¿Qué hay si se expulsa[ra] a algún pariente cercano de una familia, como a un hijo o a un padre que no viviera con ellos en su hogar, y más tarde éste quisiera mudarse al hogar de la familia de nuevo? La familia podría decidir qué hacer, según las circunstancias. Por ejemplo, puede que una madre o un padre expulsado esté enfermo o ya no esté en condiciones económicas o físicas que le permitan cuidar de sí [mismo]. Los hijos cristianos tienen una obligación bíblica y moral de prestar ayuda. (1 Tim. 5:8) [ ... ] Lo que se haga puede depender de factores como las verdaderas necesidades del padre, su actitud y la consideración que el cabeza de la familia le tenga al bienestar espiritual de los miembros de su casa".

Respecto a un hijo, el mismo artículo pasa a decir:
"A veces los padres cristianos han permitido que un hijo expulsado que haya enfermado física o emocionalmente regrese al hogar por un tiempo. Pero en cada caso los padres pueden pesar las circunstancias individuales. ¿Ha vivido por su propia cuenta un hijo expulsado, y ya no puede hacerlo, o quiere volver al hogar principalmente porque sería una vida más fácil? ¿Qué se puede decir acerca de su moralidad y de su actitud? ¿Introducirá 'levadura' en el hogar?
A lo que menos se parece todo esto es a la actitud del padre que se nos muestra en la parábola del hijo pródigo. Las decisiones familiares se toman en el seno de la familia atendiendo al afecto, a las necesidades de toda índole de sus miembros, al sentimiento humanitario, al sentido de la justicia y a las obligaciones inherentes a los lazos de consanguinidad. En todo caso, cualesquiera factores que una familia pueda considerar en casos parecidos a los que en esos párrafos se exponen son tan o tan poco válidos para los familiares afectados independientemente de que estén expulsados o no lo estén. Me remito a los comentarios que he hecho anteriormente sobre las obligaciones inherentes a los miembros de una familia como tal familia. Repito mis argumentos de otra manera. La fornicación es una acción de igual gravedad en una persona expulsada como en una que no lo ha sido. El maltrato a un familiar, físico o psicológico, por acción u omisión es tan grave si se lleva a cabo sobre un familiar expulsado como si no lo está, tanto si vive bajo el mismo techo como si no comparte casa. Eso es exactamente lo que ocurre cuando se actúa de la manera diseñada por la Sociedad Watch Tower para el trato que ha de darse a los familiares expulsados o que voluntariamente se desasocian. Instar a que se corten o restrinjan las relaciones estrictamente familiares por razones religiosas supone un maltrato hacia las personas afectadas, una agresión a la familia, destruir los lazos de unión en la misma.

Hablando en una ocasión con un anciano (cien por cien watchtoweriano) sobre estos asuntos, como no tenía salida lógica, me dijo que toda organización tiene unas reglas y me puso como ejemplo a los partidos políticos. "Quien no está de acuerdo con las normas de un partido lo expulsan de ese partido". Eso podría aceptarse, pero aún las normas de los partidos han de ser constitucionales y no pueden violar los derechos humanos. Nadie dicta normas para que se niegue la palabra a quien ha sido excluido de un partido político ni de una asociación de cualquier índole. Pero, además de eso, en este caso estamos hablando de la congregación cristiana, del pueblo de Dios. Es más, uno puede aceptar que se le expulse de la Organización, pero no que ello conlleve la expulsión de su propia familia. De la misma manera, uno puede repudiar a la Organización, pero ha de seguir amando a los miembros de su familia que permanezcan dentro de ella y seguir cumpliendo fielmente las obligaciones que le corresponden.


Los párrafos que concluyen ese deplorable panfleto que refleja ineptitud, inseguridad, resentimiento y hasta cobardía, están destinados a cerrar una falsa premisa que justifica la inhumana política de extremo rechazo de la Sociedad Watch Tower: lo que ellos proclaman que es "lealtad". A lo largo de esa denigrante exposición va intercalándose periódicamente un mensaje subliminal (es una técnica habitual en los escritos de la Watchtower). Se trata de asociar ese trato a los familiares con la lealtad cristiana y con la lealtad a Jehová. Hasta siete veces se repite esa idea en tan poco espacio, incluyendo el título y el texto final. Pero el razonamiento está viciado de antemano. La Watchtower se apropia literalmente de la voluntad de Jehová, asume la posición de Dios ante sus adeptos en cuanto se autoproclama la "Organización de Jehová". Los argumentos vienen corrompidos por los intereses de la organización. Ha de mantener a sus miembros aislados de una influencia que en muchos casos sería benefactora para ellos. Sería el caso de quienes abandonan la organización motivados por su conciencia, por un servicio a Dios más acorde con la Sagrada Escritura. Hay además una amenaza de perder la relación familiar para quien no se mantenga dentro de esa reglamentación, injusta por inhumana y perversa por querer basarla en el texto sagrado. Es la corrupción del consejo sano por la presión intimidadora, agobiante y destructora de la mente y de los sentimientos. Es tal como el texto bíblico lo declara: "si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará? Ya no sirve para nada más que para tirarla afuera y ser pisoteada de los hombres". He aquí la muestra:

Los beneficios de ser leales a Jehová. Cooperar con la disposición bíblica de la expulsión y evitar a los pecadores impenitentes nos reporta beneficios. Conserva la limpieza de la congregación y nos caracteriza como apoyadores de las elevadas normas morales de la Biblia (1 Ped. 1:14-16).
Y una experiencia triste, muy triste, deprimente, en cuanto que refleja la nefasta influencia que se ejerce sobre las personas:
Tras escuchar un discurso en una asamblea de circuito, un cristiano y su hermana se dieron cuenta de que tenían que hacer cambios en la manera de tratar a su madre, quien no vivía con ellos y llevaba seis años expulsada. Tan pronto terminó la asamblea, él la llamó y, luego de confirmarle su amor, le explicó que ya no le hablarían a menos que surgieran asuntos importantes de familia que los obligaran a ponerse en contacto. Poco después, la madre empezó a asistir a las reuniones y con el tiempo fue restablecida. Además, su esposo no creyente comenzó a estudiar la Biblia y se bautizó.
¿Se imaginan la escena? "Mamá, te queremos mucho, pero a menos que estés en trance de muerte o indigencia extrema no queremos saber nada de ti, porque estás fuera de la Organización. Lo hemos aprendido en la Asamblea". ¿Esto es una experiencia edificante? ¿No se sienten avergonzados de poner como ejemplo una cosa así?

¿Qué tiene de ejemplar el que se corten las relaciones familiares por motivos de creencia? ¿Cómo queda el nombre de Dios en todo esto? ¿Es eso lealtad a Dios, que quiere que la familia se mantenga unida, o es esclavitud a una organización que se ha caracterizado por su inestabilidad y extravagancia doctrinal y moral? Además, si uno lo piensa bien, ¿Se puede considerar genuina la vuelta de esa señora a la Organización después de seis años o como fruto de un solapado chantaje ante semejante llamada?


Pablo dice que el fruto del epíritu es amor, alegría, paz, paciencia, afabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. Gálatas 5: 22, 23. ¿Tan difícil es entender que "no hay ley" que pueda poner en entredicho esos frutos espirituales, especialmente lo que representa el amor entre las personas? Unicamente pervirtiendo el juicio sano puede admitirse una cosa así. Lo triste es que, cuando se admite ese razonamiento, se pierde el sentido de la virtud, del amor, de la justicia. Porque con tal razonamiento esos valores son anulados por un comportamiento que no los tiene en cuenta. Es como cuando la sal pierde el sabor. Ya no sirve para nada.


Romero



18 de agosto de 2002
 
Para VERDAD1968: Sr. sectario quisiera oir la respuesta a esto, y que sea una respuesta inteligente no con evasivas. Bendiciones.
 
Originalmente enviado por: MORRISON
Para VERDAD1968: Sr. sectario quisiera oir la respuesta a esto, y que sea una respuesta inteligente no con evasivas. Bendiciones.

POR QUE NO SE LO PREGUNTA APABLO. QUIERES QUE LO HAGAMOS SRA PAZ. LA QUE LUCHA CONTRA JEHOVA. Y SOLA ? LA DEFENSORA DE LOS BORRACHOS QUE TIENEN UN CONOCIMIENTO Y LO HACEN MOFANDOSE DE JEHOVA.. LA DEFENSORA DE LOS FORNICADORES , MARIPAZ LA DEFENSORA DE LOS ADULTEROS, MARIPAZ LA DEFENSORA DE LO LADRONES , NO SERA USTED SANTA MARIPAZ?

BUENO LE RECUERDO A LOS QUE JEHOVA DESTRUYO EN LOS TIEMPOS DE NOE .
AY LES RECUERDO QUE JESUS LE RECUERDA A USTED QUE ASI COMO ERA EN LOS TIEMPOS DE NOE ASI SERIA LA SENAL DE SU PRESENCIA.


ESTO SE LO ENVIA ALA DEFENSORA DE LOS LADRONES , FORNICADORES BORRACHOS, ADULTEROS , VAROS Y QUE LA SENORA PAZ LOS RECOGE..


MAS BIEN OS ESCRIBO QUE NO JUNTEIS CON NINGUN HERMANO . DUERE FORNICADOR , O AVARO O IDOLATRA O MALDICIENTE , O BORRACHO O LADRON CON TAL NI COMAIS.13PARTE B QUITAD , PUES A ESE PERVERSO DE ENTRE USTEDES .. A QUE SENORA DEFENSORA DE TODA ESTA POLILLA QUE DICE PABLO.

QUIERO PREGUNTARLE NOE TENIA HERMANOS , HERMANAS, SOBRINOS , SOBRINAS, PRIMOS , PRIMAS, LA ESPOSA DE NOE TENDRIA HERMANOS , HERMANAS , TIOS , PRIMOS , SOBRINOS. DONDE ESTAN SENORA MARIPAZ SI SOLO NOE Y SU FAMILIA ESPOSA Y TRE HIJOS Y SUS TRES NUERAS. SRA PAZ ESTO ES BIBLICO Y SABE RECLAMELE A PABLO SOBRE 1CORINTIOS 5:11


AHORA LE PRESENTO LAS PALABRAS DE NUESTRO BUENO DE MI SR JESUCRISTO MATEO 7:21

LUCAS 12:51 PENSAIAS QUE HE VENIDO PARA DAR PAZ EN LA TIERRA? OS DIGO , NO SINO DISENCION .52 POR QUE DE AQUI EN ADELANTE , CINCO EN UNA FAMILIA ESTARAN DIVIDIDOS Y DOS CONTRA TRES.53 ESTARA DIVIDIDO EL PADRE CONTRA EL HIJO Y EL HIJO CONTRA EL PADRE, LA MADRE CONTRA LA HIJA LA SUEGRA CONTRA SU NUERA Y LA NUERA CONTRA SU SUEGRA,

ME GUSTA LO ESTUDIOSA QUE ES CON LA BIBLIA SRA MARIPAZ QUE LA PASA POR ALTO.

AH RECLAMELE A JESUS NO AMI.
 
Originalmente enviado por: VERDAD1968
POR QUE NO SE LO PREGUNTA APABLO. QUIERES QUE LO HAGAMOS SRA PAZ. LA QUE LUCHA CONTRA JEHOVA. Y SOLA ? LA DEFENSORA DE LOS BORRACHOS QUE TIENEN UN CONOCIMIENTO Y LO HACEN MOFANDOSE DE JEHOVA.. LA DEFENSORA DE LOS FORNICADORES , MARIPAZ LA DEFENSORA DE LOS ADULTEROS, MARIPAZ LA DEFENSORA DE LO LADRONES , NO SERA USTED SANTA MARIPAZ?

BUENO LE RECUERDO A LOS QUE JEHOVA DESTRUYO EN LOS TIEMPOS DE NOE .
AY LES RECUERDO QUE JESUS LE RECUERDA A USTED QUE ASI COMO ERA EN LOS TIEMPOS DE NOE ASI SERIA LA SENAL DE SU PRESENCIA.


ESTO SE LO ENVIA ALA DEFENSORA DE LOS LADRONES , FORNICADORES BORRACHOS, ADULTEROS , VAROS Y QUE LA SENORA PAZ LOS RECOGE..


MAS BIEN OS ESCRIBO QUE NO JUNTEIS CON NINGUN HERMANO . DUERE FORNICADOR , O AVARO O IDOLATRA O MALDICIENTE , O BORRACHO O LADRON CON TAL NI COMAIS.13PARTE B QUITAD , PUES A ESE PERVERSO DE ENTRE USTEDES .. A QUE SENORA DEFENSORA DE TODA ESTA POLILLA QUE DICE PABLO.

QUIERO PREGUNTARLE NOE TENIA HERMANOS , HERMANAS, SOBRINOS , SOBRINAS, PRIMOS , PRIMAS, LA ESPOSA DE NOE TENDRIA HERMANOS , HERMANAS , TIOS , PRIMOS , SOBRINOS. DONDE ESTAN SENORA MARIPAZ SI SOLO NOE Y SU FAMILIA ESPOSA Y TRE HIJOS Y SUS TRES NUERAS. SRA PAZ ESTO ES BIBLICO Y SABE RECLAMELE A PABLO SOBRE 1CORINTIOS 5:11


AHORA LE PRESENTO LAS PALABRAS DE NUESTRO BUENO DE MI SR JESUCRISTO MATEO 7:21

LUCAS 12:51 PENSAIAS QUE HE VENIDO PARA DAR PAZ EN LA TIERRA? OS DIGO , NO SINO DISENCION .52 POR QUE DE AQUI EN ADELANTE , CINCO EN UNA FAMILIA ESTARAN DIVIDIDOS Y DOS CONTRA TRES.53 ESTARA DIVIDIDO EL PADRE CONTRA EL HIJO Y EL HIJO CONTRA EL PADRE, LA MADRE CONTRA LA HIJA LA SUEGRA CONTRA SU NUERA Y LA NUERA CONTRA SU SUEGRA,

ME GUSTA LO ESTUDIOSA QUE ES CON LA BIBLIA SRA MARIPAZ QUE LA PASA POR ALTO.

AH RECLAMELE A JESUS NO AMI.



O SE ME OLVIDABA BAMOS A VER LAS PALBRAS DE JESUS SENORA PAZ , PARA QUE TAMBIEN LO TRATE AL DE SECTARIO. 8:21 NOTE UN DISIPULO DE JESUS LO QUE LE DIJO JESUS A ESTE DISIPULO.
8:21 OTROS DE SUS DISIPULOS LE DIJO : SENOR PERMITEME QUE VAYA PRIMERO Y ENTIERRE AMI PADRE 22 JESUS LE DIJO : SIGUEME DEJA QUE LOS MUERTOS ENTIERREN A SUS MUERTOS.

QUE INSESIBILIDAD VERDAD SRA PAZ. O COMO LO LLAMA USTED QUE NI SIQUIERA SE LE PERMITA A ESTE DISIPULO ENTERRAR A SU PADRE ASI LO ENTIENDE USTED?


QUE LOS MUERTOS ESPIRITUALMENTE ENTIERREN A SUS MUERTOS ALOS QUE MURIERON TANTO FISICO COMO ESPIRITUAL . PERO SI ERA SU PADRE. BUENO LUCAS 12:51-52 LE AYUDARA A ENTENDER, RECUERDE NO SE SALGA POR LA TANGENTE , EL DISIPULO D EJESUS TENIA UN CONOCIMIENTO GRANDE PUESTO QUE JESUS LO ENSENO . EXPLIQUEME PARA USTED IMPORTA ALGUIEN QUE PECA DELIBERADAMENTE , AUN CUADO JEHOVA LO CONDENA , APOYA ESO SRA PAZ?
 
POR QUE NO SE LO PREGUNTA APABLO. QUIERES QUE LO HAGAMOS SRA PAZ. LA QUE LUCHA CONTRA JEHOVA. Y SOLA ? LA DEFENSORA DE LOS BORRACHOS QUE TIENEN UN CONOCIMIENTO Y LO HACEN MOFANDOSE DE JEHOVA.. LA DEFENSORA DE LOS FORNICADORES , MARIPAZ LA DEFENSORA DE LOS ADULTEROS, MARIPAZ LA DEFENSORA DE LO LADRONES , NO SERA USTED SANTA MARIPAZ?


Sr ALTERU, usted me ofende gravemente llamándome defensora de los borrachos, que lucho contra Jehová, defensora de los fornicadores, defensora de los adúlteros, defensora de los ladrones...........


¿Puede usted dar referencias sobre mi persona y probar que yo hago tales cosas?


¿Dónde he defendido yo a los pecadores?


Sr ALTERU, usted ha llegado al limite, y espero que el Webmaster tome cartas en el asunto.


¿Es que en la Watchtower solo le enseñan a insultar, a difamar y a mentir?. ¿que le he hecho yo para que usted me agreda de esa forma?


¿Es acaso mentira que a ustedes les prohiben dirigirle la palabra a los que se apartan de la secta? ¿es mentira el documento que he mostrado un poco más arriba?
 
Para VERDAD1968: Sr. falso testigo, ¿que le pregunte a Pablo, que le reclame a Jesús?, ¿como le pregunto a Pablo?, él ya murio, claro a no ser que su secta haya hecho otra falsa profesia, sobre que Pablo iba a volver, como lo hicieron en 1920, cuando dijeron que Abraham, Isaac, Jacob y otros profetas fieles de la antiguedad iban a regresar corporalmente. Los Cristianos que siguen y aman a Cristo, son de Cristo, los criminales que dejan morir un niño sin asistencia medica son del Diablo. Bendiciones.