Re: ¡¡Terremoto!! ¿Instrumentos musicales en la alabanza?
Estimados hermanos
Reconozco lo extenso de éste aporte, pero le ruego lo lea detenidamente.
Paralelamente a que existan o no versículos en el Nuevo Testamento de usar o no los instrumentos musicales en la adoración a Dios; debemos considerar varios puntos que vienen a ser demasiado importantes como para ignorarlos, aún a pesar de nuestras distintas posiciones.
1.- Ya he dicho que si no existe ningún versículo que indique que debemos usar los instrumentos; es más que suficiente para entender que no se autoriza ni proclama su uso en el N. T.
2.- Es más que significativo que aparte de no existir respaldo por las Escrituras para el uso de ellos, también en la práctica, no existe absolutamente ningún indicio siquiera que el Señor, los apóstoles o los primeros creyentes usaran los instrumentos.
3.- Igual de significativo es que por otra parte sí el Nuevo T. registra, tanto en la enseñanza (citas bíblicas) como en la práctica, citas y ejemplos para el uso del canto o alabanza de labios. (En la enseñanza: “cantar con el espíritu y también con el entendimiento”; [/B]“cantando entre vosotros con Salmos e himnos y cánticos espirituales” etc. En la práctica: Nuestro Señor y los apóstoles cantaron (Marcos 14:26; Mateo 26:30) Pablo y Silas cantaban etc.
4.- El cambio de “Santuario” (lugar de adoración a Dios) implica también cambio de adoración; como se lo hiciera saber Jesús a la mujer samaritana. Tomando en cuenta que: el Santuario del Antiguo Pacto (en donde se adoraba a Dios con instrumentos musicales) era “Santuario mundano” (terrenal) “Tenía empero también el primer pacto reglamentos del culto, y santuario mundano” (Hebreos 9:1 Antig. Vers. Reina Valera 1909) y el Santuario que establece Jesús es “Santuario divino o celestial” “Ministro del Santuario, y de aquel verdadero tabernáculo que el Señor asentó y no hombre” (Heb. 8:2)
Con un claro entendimiento de estos puntos; siempre y cuando dejemos de lado posiciones partidistas y estemos dispuestos a examinar y escudriñar las Escrituras, como lo hicieron los bereenses “por ver si estas cosas eran así”; nos daremos cuenta claramente que la verdadera adoración a Dios, dista bastante de la adoración que nosotros hacemos a Dios actualmente.
Es demasiado obvio que la grandeza e infinita superioridad del Santuario divino que se establece en el Nuevo Pacto, requiere también una adoración mucho más altruista y ojalá perfecta; que por sobretodo, (por sobre nuestras posiciones, argumentos, interpretaciones etc.) la adoración sea conforme a la voluntad de Dios, que sea del agrado de Dios, precisamente porque él exige que sea así.: “porque también el Padre busca adoradores que le adoren en Espíritu y en verdad” (Juan 4:23)
Nuestro Señor Jesucristo dio a entender claramente que la adoración en éste tiempo sería distinta, y la particularidad de ello, es que sería exclusivamente espiritual.
Lo distinto: “Más la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque tales adoradores busca que le adoren” (Juan 4:23) Es decir, existen muchos adoradores; pero solo algunos, por su tipo de adoración; espiritual y conforme a la voluntad de Dios, llegarán a ser “verdaderos adoradores”.
Lo espiritual: “Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que le adoren”, esta sola expresión deja claramente de lado cualquier elemento materia que deseemos usar para adorar a Dios; en todos los tiempos los creyentes han adorado con el corazón; por lo tanto no es eso a lo que Jesús se refería; sino, a excluir lo material (ritos, ofrendas, elementos, instrumentos etc.) de la adoración que debe ser espiritual para un Dios espiritual.
Hebreos nos entrega una tremenda y contundente enseñanza en cuanto a esto mismo; y nos dice que al contrario de lo que se hacía en el Antiguo pacto, Antiguo Testamento o en la Ley; ahora se hace con una concepción distinta y con elementos también distintos.
Hebreos dice que nosotros, los creyentes del Nuevo pacto o del tiempo de la gracia; NO NOS HEMOS ALLEGADO A; “Porque no os habéis llegado al monte que se podía tocar, y al fuego encendido, y al turbión, y a la oscuridad, y a la tempestad, y al sonido de la trompeta, y a la voz de las palabras” (Hebreos 12:18,19) Es sorprendente y maravillosamente significativo que toda esta lista que ofrece Hebreos, nos señala elementos materia en su mayoría o visibles al ojo humano.
Y por otro lado Hebreos nos señala que nosotros SI NOS HEMOS ALLEGADO A; “Más os habéis llegado al monte de Sión; y a la ciudad del Dios vivo, Jerusalén la celestial, y a la compañía de muchos millares de ángeles, y a la congregación de los primogénitos que están alistados en los cielos, y a Dios el juez de todos, y a los espíritus de los justos hechos perfectos, y a Jesús el mediador del Nuevo testamento, y a la sangre del esparcimiento que habla mejor que la de Abel” (Hebreos 12:22,23,24) TODA esta lista es de elementos o cosas exclusivamente espirituales y no visibles al ojo humano; y éste es el verdadero Santuario celestial al cual nos hemos allegado para presentar allí nuestra adoración “espiritual” sin elementos materia; ya he dicho en otro lugar que nosotros ahora somos los “instrumentos” y Dios quien nos toca por su Espíritu Santo.
Cuando puse el tema y escribí: ¡¡Terremoto!! No fue sin sentido; estas enseñanzas fundamentadas fielmente en las Escrituras, causan un verdadero terremoto en aquellos que usan los instrumentos musicales; porque eso implica primero, reconocer estar equivocados, y luego cambiar profundamente esquemas y estructuras que caracterizan a muchas iglesias; es una quimera que algun ministro o iglesia cambie su posición y estructura, sería como pretender que los católicos reconozcan estar errados y cambién su postura; y por lo tanto, difícilmente alguien querrá meterse en éste terremoto. Por lo tanto no pasará de ser una espinita que estará punzando y molestando a quienes usan instrumentos en la adoración a Dios, y un tema más de un foro.
Dios les bendiga