Para todos cuanto quieran crecer
Para todos cuanto quieran crecer
Es nuestro deber pedir constantemente a Dios Padre, nos llene de la verdad de Cristo nuestro Señor. Es necesario el estar llenos de la Palabra de Dios, siendo loable y aceptable el recibir palabra de todos aquellos que nuestro Espíritu entiende son hijos de Dios. Pero es necesidad imperiosa que sea la Palabra que mora en nuestro más profundo interior la que utilicemos para expresar la verdad que tenemos certeza y convicción nos ha sido dada por Dios.
Mientras en nuestro hablar, en nuestro defender, necesitemos de acudir a lo expresado por otros hermanos, esto será indicativo que su verdad dada, no quedo clara en nuestro más profundo ser interior, no penetro conforme a la promesa de Dios, no quedó grabada en nuestro corazón.
Si queremos que Dios nos utilice, Su Palabra y en base a la fe que tenemos, deberá fluir de nosotros y por nosotros para gloria de Dios. Toda palabra aceptada y afianzada en nuestro más profundo interior, será indicativo del sello de Dios, al ser Palabra de Dios que nos da vida y por consiguiente, al expresarla dará vida a nuestro interlocutor, el cual, quizás aparentemente no entendio ni aceptó, pero como las Escrituras dicen: Mi Palabra no volverá a mi vacia.
Acude allí y aquellos donde consideres puedas recibir verdadera Palabra de Dios, pero aprende de ella y conforme obre en ti y te tranforme para gloria de Dios, exprésala al mundo entero, dado toda la gloria a tu único Señor, Cristo, el Hijo unigénito de Dios.
Que Dios les bendiga inmensamente a todos. Y buenas noches.
Para todos cuanto quieran crecer
Es nuestro deber pedir constantemente a Dios Padre, nos llene de la verdad de Cristo nuestro Señor. Es necesario el estar llenos de la Palabra de Dios, siendo loable y aceptable el recibir palabra de todos aquellos que nuestro Espíritu entiende son hijos de Dios. Pero es necesidad imperiosa que sea la Palabra que mora en nuestro más profundo interior la que utilicemos para expresar la verdad que tenemos certeza y convicción nos ha sido dada por Dios.
Mientras en nuestro hablar, en nuestro defender, necesitemos de acudir a lo expresado por otros hermanos, esto será indicativo que su verdad dada, no quedo clara en nuestro más profundo ser interior, no penetro conforme a la promesa de Dios, no quedó grabada en nuestro corazón.
Si queremos que Dios nos utilice, Su Palabra y en base a la fe que tenemos, deberá fluir de nosotros y por nosotros para gloria de Dios. Toda palabra aceptada y afianzada en nuestro más profundo interior, será indicativo del sello de Dios, al ser Palabra de Dios que nos da vida y por consiguiente, al expresarla dará vida a nuestro interlocutor, el cual, quizás aparentemente no entendio ni aceptó, pero como las Escrituras dicen: Mi Palabra no volverá a mi vacia.
Acude allí y aquellos donde consideres puedas recibir verdadera Palabra de Dios, pero aprende de ella y conforme obre en ti y te tranforme para gloria de Dios, exprésala al mundo entero, dado toda la gloria a tu único Señor, Cristo, el Hijo unigénito de Dios.
Que Dios les bendiga inmensamente a todos. Y buenas noches.
