– "Porque, si su rechazo ha sido la reconciliación del mundo, ¿qué será su readmisión sino una resurrección de entre los muertos?"
(Romanos 11:15).
Debemos orar fervientemente que todos los judíos lleguen a la fe en el Hijo Ungido de David, Jesús de Nazaret, Hijo de Dios, hijo de María. ¡Qué día glorioso será ese, cuando los hijos de Abraham según la carne, se conviertan en hijos de Abraham según el Espíritu! ¡Cuando el hermano mayor entre a la casa para cantar junto con el hijo pródigo perdido que fue encontrado!
Entonces cesarán las guerras.
No habrá más hambrunas.
La pobreza será cosa del pasado.
Y el león y el cordero serán amigos.
Entonces la luz de la gloria del Dios de Abraham, Isaac y Jacob iluminará todo rincón del planeta, y seremos realmente una familia: hijos de Adán, hijos de Abraham, hijos de Dios en Jesús.
Hasta entonces, las guerras continuarán.
Hasta entonces, nación se levantará contra nación.
Hasta entonces, los hijos según la carne perseguirán a los hijos según el Espíritu.
Hasta entonces, los malos irán de mal en peor y los justos sufrirán tribulación.
וְשָׁפַכְתִּי עַל-בֵּית דָּוִיד וְעַל יוֹשֵׁב יְרוּשָׁלִַם, רוּחַ חֵן וְתַחֲנוּנִים, וְהִבִּיטוּ אֵלַי, אֵת אֲשֶׁר-דָּקָרוּ; וְסָפְדוּ עָלָיו, כְּמִסְפֵּד עַל-הַיָּחִיד, וְהָמֵר עָלָיו, כְּהָמֵר עַל-הַבְּכוֹר
– "Porque, si su rechazo ha sido la reconciliación del mundo, ¿qué será su readmisión sino una resurrección de entre los muertos?" (Romanos 11:15). Debemos orar fervientemente que todos los judíos...
www.facebook.com