Reposo Dominical

17 Septiembre 2008
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Catecismo de la Iglesia Catolica
«Nos reunimos todos el día del sol porque es el primer día [después del sábado judío, pero también el primer día], en que Dios, sacando la materia de las tinieblas, creó al mundo; ese mismo día, Jesucristo nuestro Salvador resucitó de entre los muertos» (San Justino, Apologia, 1,67).

La obligación del domingo

2180 El mandamiento de la Iglesia determina y precisa la ley del Señor: “El domingo y las demás fiestas de precepto los fieles tienen obligación de participar en la misa” (CIC can. 1247). “Cumple el precepto de participar en la misa quien asiste a ella, dondequiera que se celebre en un rito católico, tanto el día de la fiesta como el día anterior por la tarde” (CIC can. 1248, §1).

2181 La Eucaristía del domingo fundamenta y confirma toda la práctica cristiana. Por eso los fieles están obligados a participar en la Eucaristía los días de precepto, a no ser que estén excusados por una razón seria (por ejemplo, enfermedad, el cuidado de niños pequeños) o dispensados por su pastor propio (cf CIC can. 1245). Los que deliberadamente faltan a esta obligación cometen un pecado grave.”

2182 La participación en la celebración común de la Eucaristía dominical es un testimonio de pertenencia y de fidelidad a Cristo y a su Iglesia. Los fieles proclaman así su comunión en la fe y la caridad. Testimonian a la vez la santidad de Dios y su esperanza de la salvación. Se reconfortan mutuamente, guiados por el Espíritu Santo.

2183 “Cuando falta el ministro sagrado u otra causa grave hace imposible la participación en la celebración eucarística, se recomienda vivamente que los fieles participen en la liturgia de la palabra, si ésta se celebra en la iglesia parroquial o en otro lugar sagrado conforme a lo prescrito por el obispo diocesano, o permanezcan en oración durante un tiempo conveniente, solos o en familia, o, si es oportuno, en grupos de familias” (CIC can. 1248, §2).

Día de gracia y de descanso

2184 Así como Dios “cesó el día séptimo de toda la tarea que había hecho” (Gn 2, 2), así también la vida humana sigue un ritmo de trabajo y descanso. La institución del día del Señor contribuye a que todos disfruten del tiempo de descanso y de solaz suficiente que les permita cultivar su vida familiar, cultural, social y religiosa (cf GS 67, 3).

2185 Durante el domingo y las otras fiestas de precepto, los fieles se abstendrán de entregarse a trabajos o actividades que impidan el culto debido a Dios, la alegría propia del día del Señor, la práctica de las obras de misericordia, el descanso necesario del espíritu y del cuerpo (cf CIC can. 1247). Las necesidades familiares o una gran utilidad social constituyen excusas legítimas respecto al precepto del descanso dominical. Los fieles deben cuidar de que legítimas excusas no introduzcan hábitos perjudiciales a la religión, a la vida de familia y a la salud.

«El amor de la verdad busca el santo ocio, la necesidad del amor cultiva el justo trabajo» (San Agustín, De civitate Dei, 19, 19).

2186 Los cristianos que disponen de tiempo de descanso deben acordarse de sus hermanos que tienen las mismas necesidades y los mismos derechos y no pueden descansar a causa de la pobreza y la miseria. El domingo está tradicionalmente consagrado por la piedad cristiana a obras buenas y a servicios humildes para con los enfermos, débiles y ancianos. Los cristianos deben santificar también el domingo dedicando a su familia el tiempo y los cuidados difíciles de prestar los otros días de la semana. El domingo es un tiempo de reflexión, de silencio, de cultura y de meditación, que favorecen el crecimiento de la vida interior y cristiana.

2187 Santificar los domingos y los días de fiesta exige un esfuerzo común. Cada cristiano debe evitar imponer sin necesidad a otro lo que le impediría guardar el día del Señor. Cuando las costumbres (deportes, restaurantes, etc.) y los compromisos sociales (servicios públicos, etc.) requieren de algunos un trabajo dominical, cada uno tiene la responsabilidad de dedicar un tiempo suficiente al descanso. Los fieles cuidarán con moderación y caridad evitar los excesos y las violencias engendrados a veces por espectáculos multitudinarios. A pesar de las presiones económicas, los poderes públicos deben asegurar a los ciudadanos un tiempo destinado al descanso y al culto divino. Los patronos tienen una obligación análoga con respecto a sus empleados.

2188 En el respeto de la libertad religiosa y del bien común de todos, los cristianos deben esforzarse por obtener el reconocimiento de los domingos y días de fiesta de la Iglesia como días festivos legales. Deben dar a todos un ejemplo público de oración, de respeto y de alegría, y defender sus tradiciones como una contribución preciosa a la vida espiritual de la sociedad humana. Si la legislación del país u otras razones obligan a trabajar el domingo, este día debe ser al menos vivido como el día de nuestra liberación que nos hace participar en esta “reunión de fiesta”, en esta “asamblea de los primogénitos inscritos en los cielos” (Hb 12, 22-23).

Resumen

2189 “Guardarás el día del sábado para santificarlo” (Dt 5, 12). “El día séptimo será día de descanso completo, consagrado al Señor” (Ex 31, 15).

2190. El sábado, que representaba la coronación de la primera creación, es sustituido por el domingo que recuerda la nueva creación, inaugurada por la resurrección de Cristo.

2191 La Iglesia celebra el día de la Resurrección de Cristo el octavo día, que es llamado con toda razón día del Señor, o domingo (cf SC 106.

2192 “El domingo ha de observarse en toda la Iglesia como fiesta primordial de precepto” (CIC can. 1246, § 1). “El domingo y las demás fiestas de precepto, los fieles tienen obligación de participar en la misa”(CIC can. 1247).

2193 “El domingo y las demás fiestas de precepto [...] los fieles se abstendrán de aquellos trabajos y actividades que impidan dar culto a Dios, gozar de la alegría propia del día del Señor o disfrutar del debido descanso de la mente y del cuerpo“ (CIC can. 1247).

2194 La institución del domingo contribuye a que todos disfruten de un “reposo y ocio suficientes para cultivar la vida familiar, cultural, social y religiosa” (GS 67, 3).

2195 Todo cristiano debe evitar imponer, sin necesidad, a otro impedimentos para guardar el día del Señor.
 
Re: Reposo Dominical

 
Re: Reposo Dominical

En el año 363, las reuniones en el sábado como séptimo día fue prohibida por el Canon 29 del Concilio de Laodicea.
El domingo fue proclamado día de reposo (como el sabbat judío) por varias razones, entre las que podemos citar las que

indica Justino Mártir:

se adora en domingo porque es el día en que Jesús, según la Biblia, resucitó; de esta manera se quiere igualar al sabbat;
el domingo, primer día de la semana en el cómputo judío, es aquel en el cual Dios, según la Biblia, creó la luz (Génesis 1:3), anticipando la Resurrección de Cristo, nueva creación y llegada definitiva de la Luz divina al mundo.
en la Biblia no aparece la palabra domingo, como tal, sino primer día de la semana, que se registra ocho veces en el Nuevo Testamento, entre otros: Mateo 28:1;Marcos 16:2;Lucas 24:1;Juan 20:1 (hablando de la resurrección de Jesús).

El 7 de marzo de 321, Constantino I el Grande decretó que el domingo sería observado como el día de reposo civil obligatorio:

En el venerable día del Sol, que los magistrados y las gentes residentes en las ciudades descansen, y que todos los talleres estén cerrados. En el campo sin embargo, que las personas ocupadas en la agricultura puedan libremente y legalmente continuar sus quehaceres porque suele acontecer que otro día no sea apto para la plantación o de viñas o de semillas; no sea que por descuidar el momento propicio para tales operaciones la liberalidad del cielo se pierda.4
 
Re: Reposo Dominical

Catecismo de la Iglesia Catolica
«Nos reunimos todos el día del sol porque es el primer día [después del sábado judío, pero también el primer día], en que Dios, sacando la materia de las tinieblas, creó al mundo; ese mismo día, Jesucristo nuestro Salvador resucitó de entre los muertos» (San Justino, Apologia, 1,67).

La obligación del domingo

2180 El mandamiento de la Iglesia determina y precisa la ley del Señor: “El domingo y las demás fiestas de precepto los fieles tienen obligación de participar en la misa” (CIC can. 1247). “Cumple el precepto de participar en la misa quien asiste a ella, dondequiera que se celebre en un rito católico, tanto el día de la fiesta como el día anterior por la tarde” (CIC can. 1248, §1).

2181 La Eucaristía del domingo fundamenta y confirma toda la práctica cristiana. Por eso los fieles están obligados a participar en la Eucaristía los días de precepto, a no ser que estén excusados por una razón seria (por ejemplo, enfermedad, el cuidado de niños pequeños) o dispensados por su pastor propio (cf CIC can. 1245). Los que deliberadamente faltan a esta obligación cometen un pecado grave.”

2182 La participación en la celebración común de la Eucaristía dominical es un testimonio de pertenencia y de fidelidad a Cristo y a su Iglesia. Los fieles proclaman así su comunión en la fe y la caridad. Testimonian a la vez la santidad de Dios y su esperanza de la salvación. Se reconfortan mutuamente, guiados por el Espíritu Santo.

2183 “Cuando falta el ministro sagrado u otra causa grave hace imposible la participación en la celebración eucarística, se recomienda vivamente que los fieles participen en la liturgia de la palabra, si ésta se celebra en la iglesia parroquial o en otro lugar sagrado conforme a lo prescrito por el obispo diocesano, o permanezcan en oración durante un tiempo conveniente, solos o en familia, o, si es oportuno, en grupos de familias” (CIC can. 1248, §2).

Día de gracia y de descanso

2184 Así como Dios “cesó el día séptimo de toda la tarea que había hecho” (Gn 2, 2), así también la vida humana sigue un ritmo de trabajo y descanso. La institución del día del Señor contribuye a que todos disfruten del tiempo de descanso y de solaz suficiente que les permita cultivar su vida familiar, cultural, social y religiosa (cf GS 67, 3).

2185 Durante el domingo y las otras fiestas de precepto, los fieles se abstendrán de entregarse a trabajos o actividades que impidan el culto debido a Dios, la alegría propia del día del Señor, la práctica de las obras de misericordia, el descanso necesario del espíritu y del cuerpo (cf CIC can. 1247). Las necesidades familiares o una gran utilidad social constituyen excusas legítimas respecto al precepto del descanso dominical. Los fieles deben cuidar de que legítimas excusas no introduzcan hábitos perjudiciales a la religión, a la vida de familia y a la salud.

«El amor de la verdad busca el santo ocio, la necesidad del amor cultiva el justo trabajo» (San Agustín, De civitate Dei, 19, 19).

2186 Los cristianos que disponen de tiempo de descanso deben acordarse de sus hermanos que tienen las mismas necesidades y los mismos derechos y no pueden descansar a causa de la pobreza y la miseria. El domingo está tradicionalmente consagrado por la piedad cristiana a obras buenas y a servicios humildes para con los enfermos, débiles y ancianos. Los cristianos deben santificar también el domingo dedicando a su familia el tiempo y los cuidados difíciles de prestar los otros días de la semana. El domingo es un tiempo de reflexión, de silencio, de cultura y de meditación, que favorecen el crecimiento de la vida interior y cristiana.

2187 Santificar los domingos y los días de fiesta exige un esfuerzo común. Cada cristiano debe evitar imponer sin necesidad a otro lo que le impediría guardar el día del Señor. Cuando las costumbres (deportes, restaurantes, etc.) y los compromisos sociales (servicios públicos, etc.) requieren de algunos un trabajo dominical, cada uno tiene la responsabilidad de dedicar un tiempo suficiente al descanso. Los fieles cuidarán con moderación y caridad evitar los excesos y las violencias engendrados a veces por espectáculos multitudinarios. A pesar de las presiones económicas, los poderes públicos deben asegurar a los ciudadanos un tiempo destinado al descanso y al culto divino. Los patronos tienen una obligación análoga con respecto a sus empleados.

2188 En el respeto de la libertad religiosa y del bien común de todos, los cristianos deben esforzarse por obtener el reconocimiento de los domingos y días de fiesta de la Iglesia como días festivos legales. Deben dar a todos un ejemplo público de oración, de respeto y de alegría, y defender sus tradiciones como una contribución preciosa a la vida espiritual de la sociedad humana. Si la legislación del país u otras razones obligan a trabajar el domingo, este día debe ser al menos vivido como el día de nuestra liberación que nos hace participar en esta “reunión de fiesta”, en esta “asamblea de los primogénitos inscritos en los cielos” (Hb 12, 22-23).

Resumen

2189 “Guardarás el día del sábado para santificarlo” (Dt 5, 12). “El día séptimo será día de descanso completo, consagrado al Señor” (Ex 31, 15).

2190. El sábado, que representaba la coronación de la primera creación, es sustituido por el domingo que recuerda la nueva creación, inaugurada por la resurrección de Cristo.

2191 La Iglesia celebra el día de la Resurrección de Cristo el octavo día, que es llamado con toda razón día del Señor, o domingo (cf SC 106.

2192 “El domingo ha de observarse en toda la Iglesia como fiesta primordial de precepto” (CIC can. 1246, § 1). “El domingo y las demás fiestas de precepto, los fieles tienen obligación de participar en la misa”(CIC can. 1247).

2193 “El domingo y las demás fiestas de precepto [...] los fieles se abstendrán de aquellos trabajos y actividades que impidan dar culto a Dios, gozar de la alegría propia del día del Señor o disfrutar del debido descanso de la mente y del cuerpo“ (CIC can. 1247).

2194 La institución del domingo contribuye a que todos disfruten de un “reposo y ocio suficientes para cultivar la vida familiar, cultural, social y religiosa” (GS 67, 3).

2195 Todo cristiano debe evitar imponer, sin necesidad, a otro impedimentos para guardar el día del Señor.

Lo unico que muestra este mensaje es el origen del domingo como día de reposo, origen humano
 
Re: Reposo Dominical

Tradición persa y romana

El origen remoto del día descanso está en el culto al dios romano Sol Invictus ("Invicto Sol") en el Bajo Imperio romano, cuyo origen se remonta a la religión mistérica persa del Mitraísmo.

Tradición romana y cristiana

Asimilando la tradición romana de culto al sol, Constantino I, legalizador de la religión cristiana, decretó (el 7 de marzo de 321) dies solis, Día del sol (Sunday en inglés, domingo en español) como el día romano de descanso civil obligatorio:
En el venerable día del Sol, que los magistrados y las gentes residentes en las ciudades descansen, y que todos los talleres estén cerrados. En el campo sin embargo, que las personas ocupadas en la agricultura puedan libremente y legalmente continuar sus quehaceres porque suele acontecer que otro día no sea apto para la plantación o de viñas o de semillas; no sea que por descuidar el momento propicio para tales operaciones la liberalidad del cielo se pierda.3
[editar] Tradición judía

En la tradición judía de la torah el día de reposo es el shabat, que significa cese en el trabajo-y se correspondería con el sábado- y que abarca desde el atardecer del viernes hasta la anochecida del sábado (concretamente hasta la aparición de tres estrellas la noche del sábado).

Aunque la mayoría de las confesiones cristianas actuales consideran al domingo como el día del descanso existen algunas Iglesias sabatistas como los Adventistas del Séptimo Día, Bautistas del Séptimo, Iglesia de dios del Séptimo Día, Congregacion de Israel AEMINPU, y judios Mesianicos quienes reivindican el reposo sabático del Antiguo Testamento.
 
Re: Reposo Dominical

¿Que significa la palabra "Domingo"?

En inglés es Sunday, que significa día del sol. En alemán es Sonntag, que significa lo mismo, día del sol, y en Romano se llamaba Dies solis, o día del sol. Se le dió el nombre de Domingo al primer día de la semana en honor al sol.

¿Que advertencias son dadas en Deuteronomio contra el culto al sol?

Dios prohibe la adoración del sol.

Deuteronomio 4:19 No sea que alces tus ojos al cielo, y viendo el sol y la luna y las estrellas, y todo el ejército del cielo, seas impulsado, y te inclines a ellos y les sirvas; porque Jehová tu Dios los ha concedido a todos los pueblos debajo de todos los cielos.

Deuteronomio 17:2 - 5 2 Cuando se hallare en medio de ti, en alguna de tus ciudades que Jehová tu Dios te da, hombre o mujer que haya hecho mal ante los ojos de Jehová tu Dios traspasando su pacto, 3 que hubiere ido y servido a dioses ajenos, y se hubiere inclinado a ellos, ya sea al sol, o a la luna, o a todo el ejército del cielo,lo cual yo he prohibido; 4 y te fuere dado aviso, y después que oyeres y hubieres indagado bien, la cosa pareciere de verdad cierta, que tal abominación ha sido hecha en Israel; 5 entonces sacarás a tus puertas al hombre o a la mujer que hubiere hecho esta mala cosa, sea hombre o mujer, y los apedrearás, y así morirán. 6 Por dicho de dos o de tres testigos morirá el que hubiere de morir; no morirá por el dicho de un solo testigo. 7 La mano de los testigos caerá primero sobre él para matarlo, y después la mano de todo el pueblo; así quitarás el mal de en medio de ti.

¿A quienes vió Ezequiel adorando al sol en el propio templo de Jerusalén?

Ezequiel vió al pueblo de Dios adorando al sol. Hoy día sucede lo mismo; los llamados "cristianos", muchos de ellos, sin darse cuenta, están adorando al sol.

Ezequiel 8:16 Y me llevó al atrio de adentro de la casa de Jehová; y he aquí junto a la entrada del templo de Jehová, entre la entrada y el altar, como veinticinco varones, sus espaldas vueltas al templo de Jehová y sus rostros hacia el oriente, y adoraban al sol, postrándose hacia el oriente.

¿Que hizo el Rey Josías, en su reforma, a las imágenes del sol, introducidas en Jerusalén?

Las destruyó.

(2) Cronicas 34:4 Y derribaron delante de él los altares de los baales, e hizo pedazos las imágenes del sol, que estaban puestas encima; despedazó también las imágenes de Asera, las esculturas y estatuas fundidas, y las desmenuzó, y esparció el polvo sobre los sepulcros de los que les habían ofrecido sacrificios.

(2) Reyes 23:5 - 11 5 Y quitó a los sacerdotes idólatras que habían puesto los reyes de Judá para que quemasen incienso en los lugares altos en las ciudades de Judá, y en los alrededores de Jerusalén; y asimismo a los que quemaban incienso a Baal, al sol y a la luna, y a los signos del zodíaco, y a todo el ejército de los cielos. 6 Hizo también sacar la imagen de Asera fuera de la casa de Jehová, fuera de Jerusalén, al valle del Cedrón, y la quemó en el valle del Cedrón, y la convirtió en polvo, y echó el polvo sobre los sepulcros de los hijos del pueblo. 7 Además derribó los lugares de prostitución idolátrica que estaban en la casa de Jehová, en los cuales tejían las mujeres tiendas para Asera. 8 E hizo venir todos los sacerdotes de las ciudades de Judá, y profanó los lugares altos donde los sacerdotes quemaban incienso, desde Geba hasta Beerseba; y derribó los altares de las puertas que estaban a la entrada de la puerta de Josué, gobernador de la ciudad, que estaban a la mano izquierda, a la puerta de la ciudad. 9 Pero los sacerdotes de los lugares altos no subían al altar de Jehová en Jerusalén, sino que comían panes sin levadura entre sus hermanos. 10 Asimismo profanó a Tofet, que está en el valle del hijo de Hinom, para que ninguno pasase su hijo o su hija por fuego a Moloc. 11 Quitó también los caballos que los reyes de Judá habían dedicado al sol a la entrada del templo de Jehová, junto a la cámara de Natán-melec eunuco, el cual tenía a su cargo los ejidos; y quemó al fuego los carros del sol.

En el siglo III. dc. El emperador Aureliano, hijo de una sacerdotisa del culto al sol y adorador fanático de el, decretó al sol, señor del Imperio Romano, y en su honor instituyó una nueva corporación sacerdotal.

La primera vez que surgió la observancia del día domingo como un deber legal, fué en una Constitución de Constantino en el año 321 dc estableciendo que todas las cortes de justicia, habitantes en todos los pueblos y talleres debían estar descansando el domingo (venerabili dies Solis) con la excepción de aquellos que estaban involucrados en trabajos agrícolas. (Enciclopedia Britanica, edición novena, articulo "Domingo".)

¿Que dicen las iglesias que guardan el domingo, acerca de este problema?

Iglesia Bautista: "No hay evidencia en las Escrituras de un cambio de la Institución del Sábado del séptimo al primer día de la semana". - (Manual Bautista)

"Ha existido y existe un mandamiento que ordena guardar el Sábado, pero el Sábado no era el domingo. Se dirá, sin embargo, y con cierto aire de triunfo, que el Sábado fué transferido del séptimo al primer día de la semana...¿Dónde puede hallarse registrada esa transferencia? No en el Nuevo Testamento-absolutamente no...Por supuesto, bien sé que el domingo comenzó a observarse durante la historia cristiana primitiva...Pero es lamentable que haya venido rotulado con la marca del paganismo y bautizado con el nombre del dios sol, cuando fué adoptado y sancionado por la apostasía papal, y transmitido como un sagrado legado al protestantismo". - (Dr. E. T. Hiscox, autor del Baptist Manual).

Iglesia Católica: "Podéis leer la Biblia desde el Génesis hasta el Apocalipsis, y no encontraréis una sola línea que autorice la santificación del domingo". - (Cardenal Gibbons, La fe de nuestros padres).

Iglesia Cristiana: "No existe en ninguna parte de la Biblia ninguna intimación de un cambio semejante". - (Observancia del primer día).

Iglesia de Cristo: "Yo no creo que el día del Señor...fue cambiado del Sábado al primer día". - (Alejandro Campell, Washington Reporter, Octubre 8, 1821).

Los Metodistas: "Sábado en el lenguaje hebreo significa descanso, y es el séptimo día de la semana...y debe confesarse que no existe ley en el Nuevo Testamento concerniente al primer día". - (Diccionario Teológico de Buck).

Los Congregacionalistas dicen:
Es completamente claro que, por rígida o devotamente que pasemos el domingo, no estamos observando el Sábado". - (Dr. R. W. Dale, en Ten Commandments, pág. 106).
 
Re: Reposo Dominical

Es una lastima que temas como estos mueran.

Bendiciones.

David
 
Re: Reposo Dominical

Es una lastima que temas como estos mueran.

Bendiciones.

David

Estos temas mueren porque a la gente no le gusta que la saquen de la comodidad de las tradiciones y costumbres que tienen, como el culto religioso en domingo.

La gente no quiere ser molestada.

Saludos.
 
Re: Reposo Dominical

Estos temas mueren porque a la gente no le gusta que la saquen de la comodidad de las tradiciones y costumbres que tienen, como el culto religioso en domingo.

La gente no quiere ser molestada.

Saludos.
Realmente es un día de adoración que viene del culto pagano y por tradicion.
 
Re: Reposo Dominical

JESÚS Y EL ORIGEN DEL DOMINGO

Muchos afirman que los controversiales sanamientos de Jesús en día sábado (S. Mateo 12:9-14; S. Juan 5:1-13; 9:1-16) significan que este día de reposo, sino el domingo. Este argumento tuerce la intención que tenía Cristo: aclarar y no anular el significado el cuarto mandamiento de la ley.

Cristo no aceptó la acusación de que violaba el sábado, si no que se defendió y también a sus discípulos citando las Escrituras: “¿No habéis leído…?” (S. Mateo 12:3-5). Su intención era mostrar el verdadero significado del sábado: un día para “hacer el bien” (S. Mateo 12:12), para “salvar la vida” (S. Marcos 3:4), para desatar de las ligaduras físicas y espirituales (S. Lucas 13:16), para mostrar “misericordia” (S. Mateo 12:7) y no una simple religiosidad.
 
Re: Reposo Dominical

LA RESURRECCION Y EL ORIGEN DEL DOMINGO

¿Introdujeron acaso los apóstoles la observancia del domingo para conmemorar la resurrección de Cristo con la Cena del Señor? Esta creencia tan popular no tiene apoyo bíblico ni histórico por las siguientes razones:

Primera.-El Nuevo Testamento no sugiere que la resurrección de Cristo debía celebrarse un día especial.



Segundo.-El Nuevo Testamento llama al domingo “primer día de la semana” y no “día de la resurrección”. Este título lo usa por primera vez Eusebio de Cesárea, historiador cristiano del siglo IV.



Tercera.-La resurrección de Jesús en domingo no señala la conclusión de su ministerio terrenal; esto sucedió el viernes cuando exclamó: “Consumado es” (S. Juan 19:30). Luego descansó en la tumba “conforme al mandamiento” (S. Lucas 23:56). La resurrección da comienzo al nuevo ministerio intercesor de Jesús (Hechos 1:8; 2:33) que, como el primer día de la creación (Génesis 1:1-5), presupone trabajo y no descanso.



Cuarta.-El día de su resurrección Jesús no invitó a sus discípulos a celebrar su resurrección, pero sí les pidió que se ocuparan en actividades varias como viajar a Galilea (S. Mateo 28:10, 19-20).



Quinta.-La Cena del Señor no se comenzó a celebrar el domingo en la mañana, si no de noche en diferentes días de la semana (1Corintios 11:18, 20, 33). Esta Cena conmemora el sacrificio de Cristo y nos recuerda su segunda venida (1 Corintios 11:23-26).



Sexta.-La pascua de resurrección comenzó a celebrarse unos 100 años después de la muerte de Jesús. Antes se celebraba en cualquier día que cayera 14 de Nisán, como un recordatorio de la Pasión.

Séptima.-Las primeras referencias explícitas a la observancia del domingo en los escritos de Bernabé (cerca del año 135) y Justino Mártir (cerca del 150), no mencionan la resurrección como la razón básica para guardarlo.
 
Re: Reposo Dominical

ROMA Y EL ORIGEN DEL DOMINGO

Las evidencias señalan que fue en la iglesia de Roma donde se comenzó a cambiar el sábado por el domingo, alrededor de un siglo después de la muerte de Cristo, durante el reinado del emperador Adriano (117-138).

Las constantes insurrecciones de los judíos hicieron que Adriano pusiera fuera de ley a la religión judía, particularmente la observancia del sábado. Esta represión hizo que la iglesia de Roma cambiara la fecha típica judías –el sábado y la pascua- para hacer distinción entre cristianos y judíos. El sábado se cambió por el domingo y la fecha de la pascua se pasó del 14 de Nisán al domingo inmediato siguiente. Este cambio se hizo sólo por razones socio-políticas.
 
Re: Reposo Dominical

LA ADORACIÓN DEL SOL Y EL ORIGEN DEL DOMINGO

Otra circunstancia que influyó mucho en los cristianos para guardar el domingo fue la popularidad del culto al sol. Este culto era tan popular en Roma, que su culto en el segundo día de la semana fue cambiado al primer día, que era el más importante. Esto sucedió a mediados del siglo II.

Este cambio indujo a muchos cristianos a adoptar este nuevo día de reposo. Una prueba de la influencia del culto al sol puede verse en las justificaciones teologías que hay en los escritos cristianos antiguos en relación con la observancia del domingo: la creación de la luz y la salida del Sol de justicia en el primer día de la semana.

En conclusión, tanto el antijudaísmo como la adoración del sol contribuyeron al cambio del sábado al domingo. Este cambio no fue solamente de números o de nombres, sino de autoridad, de significado y experiencia. Fue el cambio del día santo establecido por Dios para que disfrutáramos de la bendición de su presencia y de su paz, por un día de fiesta establecido por el hombre para gozarse en sus placeres y en sus ganancias personales.

Amigo lector: ¿cuál de estos dos días de reposo escogerás guardar, el de Dios o el de los hombres?
 
Re: Reposo Dominical

Confesiones Catolico Romanas y Protestantes Acerca Del Domingo

La vasta mayoría de las iglesias cristianas en la actualidad enseñan la observancia del domingo, el primer día de la semana, como un día para el descanso y la adoración. Aun así, es generalmente conocido, y libremente admitido, que los cristianos primitivos observaban el séptimo día como día de reposo. ¿Cómo es que sucedió este cambio?

La historia revela que pasaron décadas, después de la muerte de los apóstoles, que un sistema políticorreligioso repudió el sábado de la Escritura e instauró la observancia del primer día de la semana. Las siguientes citas, todas de fuentes católico romanas, reconocen libremente que no hay autoridad bíblica para la observancia del domingo, que fue la Iglesia Romana la que cambió el sábado al primer día de la semana.

En la segunda parte de este folleto hay citas de protestantes. Sin duda, estos pastores, eruditos y escritores guardaron el domingo, pero todos admiten con franqueza que no hay autoridad para el descanso sabático en el primer día de la semana.

CONFESIONES CATOLICO ROMANAS

Cardenal James Gibbons, The Faith of Our Fathers, (La fe de nuestros padres), edición 88, pág. 89:

"Podrás leer la Biblia desde el Génesis hasta el Apocalipsis, y no encontrarás ni una sola línea que autorice la santificación del domingo. Las Escrituras mandan la observancia religiosa del sábado, el día que nosotros nunca santificamos".



Stephen Keenan, A Doctrinal Catechism (El catecismo doctrinal) , 3a ed., pág. 174:

"Pregunta:

Tiene usted alguna otra forma de demostrar que la Iglesia tiene poder para instituir festividades de precepto?

"Respuesta:

Si ésta no tuviera tal poder, no podría haber hecho aquello en lo que los religiosos modernos están de acuerdo con ella -- ella no podría haber cambiado la observancia del domingo, el primer día de la semana, por la observancia del sábado, el séptimo día; un cambio para el cual no hay autoridad de la Escritura".

John Laux, A Course in Religion for Catholic High Schools and Academie (Un curso en la religión para las escuelas secundarias y academias) (1936), vol. 1. pág. 51:

"Algunos teólogos han mantenido que Dios, inclusive directamente, determinó el domingo como el día de adoración en la Nueva Ley, que El mismo ha sustituido explícitamente el sábado por el domingo. Pero esta teoría ha sido abandonada completamente. Ahora es la creencia que Dios sencillamente dio a su IgIesia la autoridad para apartar cualquier día o días que ella crea apropiados como días sagrados. La Iglesia escogió el domingo, el primer día de la semana, y en el transcurso del tiempo añadió otros días como días sagrados".

Daniel Ferres, ed., Manual of Christian Doctrine (Manual de doctrina cristiana) (1916), pág. 67:

"Pregunta:

¿Cómo se puede comprobar que la Iglesia tiene la autoridad para imponer fiestas y días festivos?

"Respuesta:

A través del mismo acto de cambiar el sábado al domingo, lo cual aceptan los protestantes; y, por lo tanto, éstos indulgentemente se contradicen al observar el domingo estrictamente y romper con otras fiestas ordenadas por la misma Iglesia".

Cardenal James Gibbons, arzobispo de Baltimore (1877-1921), en carta firmada:

"¿Es el sábado, el séptimo día de acuerdo con la Biblia y los Diez Mandamientos? Yo contesto, sí . ¿Es el domingo el primer día de la semana, y cambió la Iglesia el séptimo día -- el sábado -- por el domingo, el primer día? Yo contesto, sí . ¿Cambió Cristo el día? Yo contesto, no !

"Fielmente suyo, Card. J. Gibbons".

The Catholic Mirror (El espejo católico), publicación oficial del cardenal James Gibbons, 23 de sept. de 1893:

"La Iglesia Católica ... por virtud de su misión divina, cambió el día de sábado a domingo."

Catholic Virginian (Virginiano católico), 3 de oct. de 1947, pág. 9, art. "To Tell You the Truth" ("Para decirle la verdad"):

"Por ejemplo, en ninguna parte de la Biblia encontramos que Cristo o los apóstoles ordenaran que el sábado fuera cambiado al domingo. Nosotros tenemos el mandamiento de Dios, dado a Moisés, de guardar santo el día sábado, esto es, el séptimo día de la semana. Hoy muchos cristianos guardan el domingo porque nos ha sido revelado por la Iglesia [Católico Romana], fuera de la Biblia".

Pedro Geiermann, C.S.S.R., The Converts Catechism of Catholic Doctrine (Catecismo de doctrina católica de los conversos) (1957), pág. 50.

"Pregunta:

¿Cuál es el día de reposo?

"Respuesta:

El sábado.

"Pregunta:

¿Por qué nosotros observamos el domingo en lugar del sábado?

"Respuesta:

Nosotros observamos el domingo en lugar del sábado porque la Iglesia Católica transfirió la solemnidad del sábado al domingo".

Martin J. Scott, Things Catholics Are Asked About (Cosas que se les pregunta a los católicos) (1927), pág. 136:

"En ninguna parte de la Biblia se declara que la adoración se deba cambiar del sábado al domingo ... Ahora, la Iglesia ... instituyó, por la autoridad de Dios, el domingo como el día de adoración. Esta misma Iglesia, por la misma autoridad divina, enseñó la doctrina del purgatorio mucho antes que la Biblia fuera hecha. Tenemos, por lo tanto, la misma autoridad en cuanto al purgatorio que tenemos en cuanto al domingo".

Peter R. Kraemer, Catholic Church Extension Society (Sociedad Anexa de la Iglesia Católica) (1975). Chicago, Illinois, EE.UU.:

"En cuanto al cambio de la observancia del sábado judaico al domingo cristiano, quisiera llamar la atención a los hechos:

"1) Que los protestantes, quienes aceptan la Biblia como su única regla de fe y religión, deben por todos los medios regresar a la observancia del sábado. El hecho de que no lo hacen, pero, por el contrario, observan el domingo, los pone en rídiculo a los ojos de todo hombre pensante.

"2) Nosotros, los católicos, no aceptamos la Biblia como la única regla de fe. Además de la Biblia tenemos la Iglesia viva, la autoridad de la Iglesia, como una regla para guiarnos. Declaramos que esta Iglesia, instituida por Cristo para enseñar y guiar al hombre por la vida, tiene el derecho a cambiar las leyes ceremoniales del Antiguo Testamento, y, por lo tanto, nosotros aceptamos su cambio del sábado al domingo. Declaramos con franqueza que la Iglesia realizó este cambio, hizo esta ley, al igual que ha hecho muchas otras leyes -- por ejemplo, el viernes de abstinencia, el celibato sacerdotal, las leyes que tienen que ver con los matrimonios mixtos, reglamentación de los matrimonios católicos y mil leyes más.

"Siempre causa algo de risa ver a las iglesias protestantes, en el púlpito y a través de legislación, exigir la observancia del domingo, de la cual no hay nada en su Biblia".

T. Enright, C. S. S. R., en una disertación, Hartford, Kansas, EE.UU., 18 de feb. de 1884:

"Repetidamente he ofrecido $1,000 [dólares] a cualquiera que me pueda comprobar, sólo con la Biblia, que estoy obligado a guardar santo el domingo. No hay tal ley en la Biblia. Es una ley solamente de la Iglesia Católica. La Biblia dice, 'Acuérdate del día sábado para santificarlo'. La Iglesia Católica dice, 'No. Por mi poder divino yo anulo el día sábado y mando a santificar el primer día de la semana.' Y, ¡he aquí! El mundo entero civilizado se arrodilla en reverente obediencia al mandato de la Santa Iglesia Católica".

CONFESIONES PROTESTANTES

Los teólogos y predicadores protestantes de una ancha gama denominacional han sido bastante cándidos en admitir que no hay autoridad bíblica para observar el domingo como el día de reposo.

Anglicana/Episcopal

Isaac Williams, Plain Sermons on the Catechism (Sermones sencillos del catecismo) , vol. I págs. 334, 336:

"Y, ¿dónde se nos dice en las Escrituras que debemos guardar el primer día? Se nos ordena guardar el séptimo, pero en ninguna parte se nos ordena guardar el primer día ... La razón por la cual santificamos el primer día de la semana, en lugar del séptimo, es la misma por la cual observamos muchas otras cosas, no porque la Biblia sino la iglesia las ha prescrito".

Canon Eyton, The Ten Commandments (Los Diez Mandamientos) , págs. 52, 63, 65:

"No hay palabra ni indicación alguna en el Nuevo Testamento en cuanto a abstenerse de trabajar en domingo ... En cuanto al descanso dominical, no hay ley divina ... La observancia del miércoles de ceniza o cuaresma se fundamenta en la misma base que la observancia del domingo".

Obispo Seymour, Why We Keep Sunday (Por qué guardamos el domingo):

"Nosotros hemos hecho el cambio del séptimo al primer día, del sábado al domingo, por la autoridad de la Santa Iglesia Católica".

Bautista

Dr. Edward T. Hiscox, en un documento leído ante una conferencia de ministros en Nueva York el 13 de nov. de 1893, reportado en el New York Examiner, del 16 de nov. de 1893:

"Hubo y todavía hay un mandamiento para santificar el día sábado, pero ese día sábado no era el domingo. Se dirá sin embargo, y con cierta muestra de triunfo, que el día de reposo [el sábado] fue transferido del séptimo al primer día de la semana ... ¿Dónde se puede encontrar el registro de esa transacción? En absoluto no existe en el Nuevo Testamento.

"A mí me parece inexplicable que Jesús, durante tres años de trato con sus discípulos, hablando frecuentemente con ellos en cuanto al asunto del sábado ... nunca hizo alusión a ninguna transferencia del día; tampoco fue insinuada tal cuestión durante cuarenta días de vida después de su resurrección.

"Por supuesto, yo sé muy bien que el domingo vino a ser usado temprano en la historia cristiana ... pero, qué pesar que viene marcado con el estigma del paganismo, y bautizado con el nombre del dios sol, adoptado y sancionado por la apostasía papal, y dejado como un legado sagrado al protestantisimo".

William Owen Carver, The Lord's Day in Our Day (El día del Señor en nuestro día) , pág. 49:

"Nunca hubo un cambio formal o autoritativo del séptimo día judío sabático al primer día de observancia cristiano".

Congregacionalistas

Dr. R. W. Dale, The Ten Commandinents (Los Diez Mandamientos) (New York. Eaton & Mains), págs. 127-129:

"... es muy claro que, no importa cuan rígida o devotamente nosotros pasemos el domingo, no estamos guardando el sábado ... El sábado fue fundado sobre un mandamiento específico divino. Nosotros no podemos abogar por tal mandamiento para la obligación de observar el domingo ... No hay ni una sola oración en el Nuevo Testamento para sugerir que incurramos en alguna penalidad por violar la supuesta santidad del domingo".

Timothy Dwight, Theology: Explained and Defended (Teología: explicada y defendida) (1823), Ser. 107, vol. 3, pág. 258.

"... el sábado cristiano [domingo] no está en las Escrituras, y no fue Ilamado sábado por la Iglesia primitiva."

Discípulos de Cristo

Alexander Campbell, The Christian Baptist (El cristiano bautista) , 2 de feb. de 1824, vol. 1. Núm. 7, pág. 164:

"Pero, dicen algunos, 'fue cambiado del séptimo al primer día'. ¿Dónde? ¿Cuándo y por quién? Nadie lo puede decir. No, nunca fue cambiado, ni podía ser cambiado, a menos que la creación volviera a ser. ¡Pues, la razón por el cambio tendría que ser cambiada antes que la observancia (o el respeto dado a la razón por el cambio) pudiera ser cambiada! Se trata de fábulas de viejas hablar del cambio del sábado del séptimo al primer día. Si fue cambiado, fue aquel personaje solemne que lo cambió -- el mismo que Intenta cambiar las festividades y la ley ex officio -- Creo que se llama Doctor Anticristo ".

First Day Observance (La observancia del primer día) , págs. 17, 19:

"Al primer día de la semana comúnmente se le llama 'sábado'. Esto es un error. El sábado de la Biblia era el día que justamente antecedía al primer día de la semana. Al primer día de la semana nunca se le ha llamado 'sábado' en ninguna parte de las Escrituras. También es un error hablar del cambio del reposo bíblico del sábado al domingo. No hay en ningún lugar en la Biblia insinuación alguna de tal cambio".

Luterana

The Sunday Problem (El problema del domingo) , un libro de estudio de la Iglesia Unida Luterana (1923), pág. 36:

"Hemos visto, gradualmente, como se desvanece la impresión del sábado judío de la mente de la Iglesia cristiana, y cuan completamente el nuevo pensamiento, que es la base de la observancia del primer día, tomó posesión de la Iglesia. Hemos visto que los cristianos de los primeros tres siglos nunca confundieron el uno con el otro, pero durante algún tiempo celebraron ambos".

Augsburg Confession of Faith (La confesión de fe de Augsburgo) , art. 28; escrito por Melanchthon, aprobado por Martín Lutero, 1530; como fue publicado en el Libro de convenio de la Iglesia Evangélica Luterana , Henry Jacobs, ed. (1911), pág. 63:

"Ellos [católicos romanos] se refieren al día sábado como día que fue transformado al día del Señor, contrario al Decálogo, como tal aparece. Tampoco hay ningún ejemplo al cual le den tanta importancia como al cambio del día sábado. iSegún dicen, grande es el poder de la Iglesia puesto que ha hecho caso omiso de uno de los Diez Mandamientos!"

Dr. Augustus Neander, The History of the Christian Religion and Church (La historia de la religión e iglesia cristianas) , Henry John Rose, tr. (1843), pág. 186:

"El festival del domingo, como todos los demás festivales, fue siempre solamente una ordenanza humana, y estuvo lejos de las intensiones de los apóstoles establecer un mandamiento divino al respecto -- lejos de la mismas y de la Iglesia apostólica primitiva -- el transferir las leyes del sábado al domingo".

John Theodore Mueller, Sabbath or Sunday (Sábado o domingo) , págs. 15-16:

"Pero ellos yerran enseñando que el domingo ha tomado el lugar del sábado del Antiguo Testamento y; por lo tanto, debe ser guardado como el séptimo día tuvo que observado por los hijos de Israel ... Estas iglesias yerran en su enseñanza, porque la Escritura de ninguna manera ordenó el primer día de la semana en lugar del sábado. Sencillamente, no hay ninguna ley en el Nuevo Testamento a tal efecto".

Metodista

Harris Franklin Rall, Christian Advocate (Defensor cristiano) , 2 de julio de 1942, pág. 26:

"Considere el asunto del domingo. Hay indicaciones en el Nuevo Testamento de cómo la iglesia vino a guardar el primer día de la semana como su día de adoración, pero no hay ningún pasaje en el que se les mande a los cristianos que guarden ese día, o que transfieran el sábado judío a ese día".

John Wesley, The Works of the Rev. John Wesley, A.M. (Las obras del Rev. John Wesley, A.M.) , John y Emory, ed. (New York: Eaton & Mains), Sermón 25, vol. 1. pág. 221:

"Pero, la ley moral, encerrada en los Diez Mandamientos y reforzada por los profetas, El [Cristo] no la anuló. Su venida no tuvo por propósito revocar ninguna parte de la misma. Esta es una ley que nunca puede ser abrogada ... Cada parte de esta ley tiene que permanecer en vigor sobre toda la humanidad, por todas las edades, sin depender de tiempo o lugar, o cualesquier otras circunstancias propensas al cambio, sino de la naturaleza de Dios y la naturaleza del hombre, y su incambiable relación mutua".

Dwight L. Moody

D. L. Moody, Weighed and Wanting (Pesado y hallado falto) (Fleming H. Revell Co: New York), págs. 47-48:

"El sábado era obligatorio en el Edén, y ha estado en vigencia desde entonces. Este cuarto mandarniento empieza con la palabra 'acuérdate', lo que demuestra que el sábado ya existía cuando Dios escribió la Ley en las tablas de piedra en el Sinaí. ¿Cómo pueden los hombres pretender que sólo este mandamiento ha sido anulado, cuando todavía admiten que los otros nueve todavía siguen vigentes?"

Presbiteriana

T.C. Blake, D.D., Theology Condensed (Teología condensada) págs. 474-475:

"El sábado es parte del decálogo -- Los Diez Mandamientos. Esto de sí solo resuelve la cuestión de la perpetuidad de la institución... Por lo tanto, hasta que se pueda demonstrar que toda la ley moral ha sido abolida, el sábado permanecerá. La enseñanza de Cristo confirma la perpetuidad del sábado".