Autor desconocido
REFINADOS COMO LA PLATA
Hace algun tiempo, algunas señoras se renieron en cierta ciudad para
estudiar la Biblia. Mientras que leían el tercer capítulo de Malaquías,
encontraron una expresión notable en el tercer versículo: " y El se sentará
como un refinador y purificador de la plata (Mal. 3:3)." Una de las señoras
propuso visitar un platero y reportarles a las demas lo que el dijera sobre
el tema. Ella fue por consiguiente, y sin decir el objeto de su diligencia
pidió al platero que le dijera sobre el proceso de refinar la plata.
Después de que el la hubiera descrito completamente a ella, le preguntó,
"pero señor, ¿usted se sienta mientras que esta en el proceso de la
refinacion?".
- "Oh, si, señora," contesto el platero;
-"Debo sentarme con mi ojo fijado constantemente en el horno, porque si el
tiempo necesario para la
refinacion se exceda el grado mas leve, la plata sera danada."
La señora inmediatamente vió la belleza, y tambien el consuelo de la
expresión,
- "El se sentará como un refinador y purificador de la plata."
Dios ve necesario poner a sus hijos en un horno; Su ojo es constantemente
atento en el trabajo de la purificación, y su sabiduría y amor obran juntos
en la mejor manera para nosotros. Nuestras pruebas no vienen al azar, y el
no nos dejara ser probados mas alla de lo que podemos sobre llevar. Antes
de que ella se fuera, la señora hizo la pregunta final,
- "¿Cuándo sabe que el proceso esta completo?"
- "Pues, eso es muy sencillo, " contestó el platero.
- "Cuando puedo ver mi propia imagen en la plata, se acaba el proceso de
refinación."
REFINADOS COMO LA PLATA
Hace algun tiempo, algunas señoras se renieron en cierta ciudad para
estudiar la Biblia. Mientras que leían el tercer capítulo de Malaquías,
encontraron una expresión notable en el tercer versículo: " y El se sentará
como un refinador y purificador de la plata (Mal. 3:3)." Una de las señoras
propuso visitar un platero y reportarles a las demas lo que el dijera sobre
el tema. Ella fue por consiguiente, y sin decir el objeto de su diligencia
pidió al platero que le dijera sobre el proceso de refinar la plata.
Después de que el la hubiera descrito completamente a ella, le preguntó,
"pero señor, ¿usted se sienta mientras que esta en el proceso de la
refinacion?".
- "Oh, si, señora," contesto el platero;
-"Debo sentarme con mi ojo fijado constantemente en el horno, porque si el
tiempo necesario para la
refinacion se exceda el grado mas leve, la plata sera danada."
La señora inmediatamente vió la belleza, y tambien el consuelo de la
expresión,
- "El se sentará como un refinador y purificador de la plata."
Dios ve necesario poner a sus hijos en un horno; Su ojo es constantemente
atento en el trabajo de la purificación, y su sabiduría y amor obran juntos
en la mejor manera para nosotros. Nuestras pruebas no vienen al azar, y el
no nos dejara ser probados mas alla de lo que podemos sobre llevar. Antes
de que ella se fuera, la señora hizo la pregunta final,
- "¿Cuándo sabe que el proceso esta completo?"
- "Pues, eso es muy sencillo, " contestó el platero.
- "Cuando puedo ver mi propia imagen en la plata, se acaba el proceso de
refinación."