Quien tiene mayor fuerza, un ángel del Señor, o un demonio.

ricardo perales

Lo importante es la salvación de las almas.
23 Abril 2020
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He buscado en la biblia, y he hallado un versículo que indica que un ángel Dios, tiene mayor fuerza y poder que un demonio.
2 Pedro 2:
10 Dios castigará sobre todo a los que siguen deseos impuros y desprecian la autoridad del Señor. Son tercos y atrevidos, y no tienen miedo de insultar a los poderes superiores; 11 en cambio, los ángeles, que tienen más fuerza y autoridad, no se atreven a condenar con insultos a esos poderes en presencia de Dios.

Saludos.
 
El Arcángel Miguel vence a Satanás. Guido Reni (1630-1635).
 
Es igual, la diferencia la hace la asistencia de Dios.
 
Está escrito que los ángeles brillan como el sol (en el apocalipsis), los demonios también?, o Dios aminoró su fuerza, porque si son iguales podrían fácilmente presentarse como un sol y engañar a la gente, yo creo que Dios disminuyó su fuerza.
 
Yo creo que el demonio no puede brillar como un sol, el Señor debió disminuir su fuerza, quizás 1/3 menos es decir como la luna llena.
Poque sino sería fácil que engañe a la gente, si se apareciera. Juan vio un ángel que brillaba como el sol, y lo confudio como un ser divino, y se dispuso a a adorarlo, y el ángel le dijo cuidado, soy consiervo tuyo. Bueno también dice que el demonio se viste como ángel de luz, pero no puede llegar al sol, según mi opinión solo como la luna llena, para confundir a los que no saben nada.
 
Los demonios tienen menos fuerza incluso que un ser humano bondadoso, el único que puede darles poder es el que quiere hacerlo.

Aunque mientan, los demonios (que en realidad son la sombra de nuestro ser, no entes independientes) son muy claros, nunca buscan nuestra felicidad o bienestar, aparentan bienestar y felicidad, pero cuando nos damos cuenta somos esclavos.

Por eso tenemos que ser muy cuidadosos con los términos que aplicamos a Dios, no convirtiéndole en lo que no es: "soy esclavo de Dios", Dios no quiere esclavizar a nadie, la libre adhesión es el punto que distingue a Dios de los intrascendentes demonios, estos lo primero que quieren es tener esclavos, ya sean esclavos de una droga, de un móvil, del sexo, de la fama, de...

Ah, ¡apliquemos lo mismo a la religión!, si una religión te esclaviza, quizás no lo sea, sino que se convierta en un demonio o secta.
Una sana religión provee de hermanos y vida en comunidad, no te aisla.