Saludos. Estás citando Job 19:27 a 27.
Job 19:23–27 (RV1909)
¡Quién diese ahora que mis palabras fuesen escritas! ¡Quién diese que se escribieran en un libro! 24 ¡Que con cincel de hierro y con plomo Fuesen en piedra esculpidas para siempre!
Las palabras que Job habló fueron inspiradas por Dios, entonces estas son las palabras de Dios. Y como palabras de Dios, El determinó que fuesen escrítas en un libro, en la biblia. Y todas las palabras de la biblia son para siempre y no cambian.
25 Yo sé que mi Redentor vive, Y al fin se levantará sobre el polvo la tierra:
Este versículo es interesante porque describe a Cristo como su redentor y dice que su redentor está vivo. Pero Jesús aun no venía como redentor, si nos enfocamos en la cruz como el tiempo de la redención. Pero porque la biblia nos enseña que CRisto murió por los pecados desde la fundación del mundo, entonces estas palabras del redentor que vive se aplica perfectamente porque Cristo resucitó desde la fundación del mundo y estaba vivo desde ese tiempo. Y después de resucitar, el creó al mundo.
26 Y después de deshecha esta mi piel, Aun he de ver en mi carne a Dios;
Este pasaje nos enseña de donde vino la doctrina de la resurección del cuerpo de los hombres salvos. La doctrina que dividió a los Fariseos y los Saduceos.
Hechos de los Apóstoles 23:8 (RV1909)
Porque los Saduceos dicen que no hay resurrección, ni ángel, ni espíritu; mas los Fariseos confiesan ambas cosas.
Y el ultimo versículo que usted citó dice:
Job 19:27 Al cual yo tengo de ver por mí, Y mis ojos lo verán, y no otro, Aunque mis riñones se consuman dentro de mí.
Al punto de la muerte fisica de los seres humanos que fueron salvos, sus cuerpos permanecieron en la tierra, pero sus almas renacidas fueron inmediatamente a estar con Dios. Estos son los hijos de Dios que se presentan delante de Dios. Y esto, antes de la cruz del calvario pero después de la muerte de Cristo por los pecados desde la fundación del mundo.
Job 1:6 (RV1909)
Y un día vinieron los hijos de Dios a presentarse delante de Jehová, entre los cuales vino también Satán.