primer secreto fatima

lunas

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25 Julio 2005
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Hola a todo el primer screto de fatima dice lo siguiente:

"Ustedes han visto el infierno donde van las almas de los pobres pecadores. Para salvarles, Dios desea establecer en el mundo devoción a mi Inmaculado Corazón."

Alguien me lo podria explicar mas a detalle?
 
Re: primer secreto fatima

DIOS Y ALMAS

Querido hermano Lunas:

Primero que nada, le recomiendo el libro de la narración de las Apariciones de Fátima de Icilio Felici.

Es un libro muy agradable y explicativo al respecto (refiere acontecimientos previos a la Aparición, durante ésta y después).

En cuanto al Mensaje de la Virgen dado en Portugal, es importante entender el contexto al respecto: recordemos que a finales del Siglo XIX y principios del XX se estaba propagando en toda Europa la ideología materialista en su variante marxista, la cual ya estaba comenzando a afectar seriamente a la sociedad.

Debido a ésto es que la Virgen en Sus Apariciones les reitera la importancia de no perder de vista que nosotros no estamos aquí "eternamente", sino que vivimos aqúi de paso para la vida eterna, y por ésto les advierte que muchas almas se estaban perdiendo por su desidia en el pecado (que básicamente es lo mismo que estamos viendo actualmente: la pérdida del sentido del pecado por el individualismo y el materialismo).

Lo importante del Mensaje en sí no es propiamente "la visión del Infierno" sino que recordemos los medios tradicionales de combate al pecado:

- La oración y la meditación (y recordemos que el Rosario es una conjunción de ambas)

- El ayuno y los sacrificios personales

- La vida Sacramental

Así es como la espiritualidad del Inmaculado Corazón de María nos guía a cada uno de nosotros de vuelta a la fidelidad del camino de Dios.

Espero que ésto le sea "clarificador".

De hecho por la lectura de el libro que ya le he referido, es que yo mismo inicié "el retorno del hijo pródigo a la Casa del Padre".

ALABADO SEA JESUCRISTO
 
Re: primer secreto fatima

DIOS Y ALMAS

Encontré el escrito original de Sor Lucía al respecto de la visión del Infierno y su explicación, escrito el 31 de Agosto de 1941, que a continuación cito textualmente:

"Tendré que hablar algo del secreto, y responder al primer punto interrogativo.

¿Qué es el secreto? Me parece que lo puedo decir, pues ya tengo licencia del Cielo. Los representantes de Dios en la tierra me han autorizado a ello varias veces y en varias cartas; juzgo que V. Excia. Rvma. conserva una de ellas, del R. P. José Bernardo Gonçalves, aquella en que me manda escribir al Santo Padre. Uno de los puntos que me indica es la revelación del secreto. Sí, ya dije algo; pero, para no alargar más ese escrito que debía ser breve, me limité a lo indispensable, dejando a Dios la oportunidad de un momento más favorable.

Pues bien; ya expuse en el segundo escrito, la duda que, desde el 13 de junio al 13 de julio, me atormentó; y cómo en esta aparición todo se desvaneció.

Ahora bien, el secreto consta de tres partes distintas, de las cuales voy a revelar dos.

La primera fue, pues, la visión del infierno.

Nuestra Señora nos mostró un gran mar de fuego que parecía estar debajo de la tierra. Sumergidos en ese fuego, los demonios y las almas, como si fuesen brasas transparentes y negras o bronceadas, con forma humana que fluctuaban en el incendio, llevadas por las llamas que de ellas mismas salían, juntamente con nubes de humo que caían hacia todos los lados, parecidas al caer de las pavesas en los grandes incendios, sin equilibrio ni peso, entre gritos de dolor y gemidos de desesperación que horrorizaba y hacía estremecer de pavor. Los demonios se distinguían por sus formas horribles y asquerosas de animales espantosos y desconocidos, pero transparentes y negros.

Esta visión fue durante un momento, y ¡gracias a nuestra Buena Madre del Cielo, que antes nos había prevenido con la promesa de llevarnos al Cielo! (en la primera aparición). De no haber sido así, creo que hubiésemos muerto de susto y pavor.

Inmediatamente levantamos los ojos hacia Nuestra Señora que nos dijo con bondad y tristeza:

La Segunda Parte del Secreto:

— Visteis el infierno a donde van las almas de los pobres pecadores; para salvarlas, Dios quiere establecer en el mundo la devoción a mi Inmaculado Corazón. Si se hace lo que os voy a decir, se salvarán muchas almas y tendrán paz. La guerra pronto terminará. Pero si no dejaren de ofender a Dios, en el pontificado de Pío XI comenzará otra peor. Cuando veáis una noche iluminada por una luz desconocida, sabed que es la gran señal que Dios os da de que va a castigar al mundo por sus crímenes, por medio de la guerra, del hambre y de las persecuciones a la Iglesia y al Santo Padre. Para impedirla, vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón y la Comunión reparadora de los Primeros Sábados. Si se atienden mis deseos, Rusia se convertirá y habrá paz; si no, esparcirá sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia. Los buenos serán martirizados y el Santo Padre tendrá mucho que sufrir; varias naciones serán aniquiladas. Por fin mi Inmaculado Corazón triunfará. El Santo Padre me consagrará a Rusia, que se convertirá, y será concedido al mundo algún tiempo de paz."

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El Papa Juan Pablo II fué salvado de muerte milagrosamente en un atentado perpetrado el día 13 de Mayo del 81, que era Aniversario de Fátima, y despúes de ésto pidió que le fuese mostrado el Tercer Secreto.

Después de leerlo, escribió el Acto de Consagración que es no sólo de Rusia sino del Mundo entero y es pronunciado en el Vaticano el 25 de Marzo de 1984, día en que además se publica Redemptionis Donum.

El Ocho de Noviembre de 1989 escribe Sor Lucía, ante cuestionamiento sobre la Consagración:

"Sim, està feita, tal como Nossa Senhora a pediu, desde o dia 25 de Março de 1984."

(traducción al español: "Sí, desde el 25 de marzo de 1984, ha sido hecha tal como Nuestra Señora había pedido")

Por supuesto que a cada persona le toca en lo individual acatar la llamada de arrepentimiento y conversión de Fátima o ignorarla.

Las consecuencias son la vida eterna o la eterna condenación.

ALABADO SEA JESUCRISTO