
logosortodoxo;n3182164 dijo:El que trabaja las virtudes por vanagloria, evidentemente busca también la gnosis por vanagloria. Ése no hace ni dice algo para edificación espiritual para los demás, sino que en todo busca y va a la caza de la gloria de parte de quienes lo ven o lo escuchan. El pazos-pasión se manifiesta cuando, alguno de ellos desmerece sus obras o lo acusa por sus por sus dichos, palabras. Entonces él se entristece demasiado, no por el hecho de que éstos no se hayan tenido edificación ni beneficiado, -esto no era su fin-, sino por haber sido despreciado y subestimado.
El problema, es cuando ni siquiera trabajamos las virtudes por vanagloria..., y qué cuando nos desmerecen, mas que entristecernos nos ofendemos, y tratamos de hacer "sentir" lo mismo al otro mediante el mismo procedimiento que presumimos que el otro usó.
Si quieres tener buena conciencia, ser modesto y no ser esclavo del pazos de la presunción o jactancia, busca siempre en los seres aquello que escapa de tu conocimiento-gnosis. Entonces encontrarás que se te escapan muchísimas y variadas cosas que te eran desconocidas, y entonces te asombrarás de tu ignorancia, reducirás tu vanidad y te harás humilde. Y una vez que te hayas conocido a ti mismo, comprenderás muchas cosas importantes y admirables. Porque la gnosis fantasiosa, no deja a nadie a profundizar y progresar a la gnosis pragmática, la divina e increada.
¿Cómo voy a querer una buena conciencia, cuando la esclavitud a esa pasión que ya considero una virtud, me ciega al verdadero conocimiento de mi mismo; y no quiero comprender mas nada, pues presumo conocer ya todo lo necesario para mí?
salmo51;n3182079 dijo:
Hay contumaces que aman el enfrentarse a Dios y jamás se arrepentirían.
No les interesa.
Esa es una conclusión muy radical, y aun temeraria ¿cómo puedes "realmente" saberlo?
Generalmente pedimos clemencia cuando no estamos seguros de la maldad de alguien, pero no creo que a nadie le interese que alguien verdaderamente malo, sufra 5 minutos o eternamente.
Ibid.
La destrucción se nos presenta como algo menos malo, porque en el fondo pensamos que muchos condenados no son lo suficientemente malos para sufrir eternamente.
Yo pienso, que para sostener, tales ideas necesitamos sostener la idea fundamental de que el sufrimiento no cambia a nadie; lo cual es negado por nuestra propia experiencia la cual nos enseña que sí. Todo sufrimiento es transformador.
De hecho, muchos hemos abrazado el evangelio para escapar del Tormento, no experimentado, ¿cómo podemos asegurar que aquellos que no hacen lo mismo por no tener certeza alguna de ello (lo cual de seguro cambiaría su actitud), estando ya ciertamente en los tormentos no cambie de actitud (se arrepienta), cosa que antes lo hubiera "salvado" de tal trance sin experimentar ningún dolor.
¿Cómo podemos asegurar que tal cosa no ocurra, y que necesariamente SÍ TEMNGA que ocurrir el suplicio eterno inaplacable, o la destrucción eterna irrevocable?
El abrazar el evangelio para escapar del tormento demuestra que no hay arrepentimiento del pecado. Cuando se inicia el fuego de Dios, ya no es posible apagarlo HASTA que concluya el castigo. Parecido tenemos en el diluvio, cuando comenzó a llover, quisieron entrar, pero la puerta se cerró desde afuera. En Sodoma no vemos que alguien haya salido corriendo con la camisa prendida en fuego. El tiempo aceptable tiene límites (Isa 49:8); "Si oyeréis HOY su voz,..."Norberto7;n3182229 dijo:Nuevamente, el resaltado es mío.
Yo pienso, que para sostener, tales ideas necesitamos sostener la idea fundamental de que el sufrimiento no cambia a nadie; lo cual es negado por nuestra propia experiencia la cual nos enseña que sí. Todo sufrimiento es transformador.
De hecho, muchos hemos abrazado el evangelio para escapar del Tormento, no experimentado, ¿cómo podemos asegurar que aquellos que no hacen lo mismo por no tener certeza alguna de ello (lo cual de seguro cambiaría su actitud), estando ya ciertamente en los tormentos no cambie de actitud (se arrepienta), cosa que antes lo hubiera "salvado" de tal trance sin experimentar ningún dolor.
¿Cómo podemos asegurar que tal cosa no ocurra, y que necesariamente SÍ TEMNGA que ocurrir el suplicio eterno inaplacable, o la destrucción eterna irrevocable?
Miguel Loayza F;n3182273 dijo:El abrazar el evangelio para escapar del tormento demuestra que no hay arrepentimiento del pecado.
Si el tormento es por causa del pecado, el arrepentimiento del tal está implícito, y es la forma correcta de huir de la ira.
Cuando se inicia el fuego de Dios, ya no es posible apagarlo HASTA que concluya el castigo. Parecido tenemos en el diluvio, cuando comenzó a llover, quisieron entrar, pero la puerta se cerró desde afuera. En Sodoma no vemos que alguien haya salido corriendo con la camisa prendida en fuego. El tiempo aceptable tiene límites (Isa 49:8); "Si oyereis HOY su voz,..."
Me contestas lo mismo que esperaría de Ricardo... Tan parecidos entre sí... y creyéndose sin embargo... tan diferentes a si. Solo que tu presumes que el castigo concluye en aniquilación; Ricardo: es la conclusión que concluyendo siempre... no concluye jamás.
Es justamente, la idea fundamental de la que hablo, y ninguna aclaración a ella.
El tormento no cambiaría su decisión: Apo_16:9 Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria.
Apo_16:11 y blasfemaron contra el Dios del cielo por sus dolores y por sus úlceras, y no se arrepintieron de sus obras.
Ten en cuenta, que esta actitud es en vida y no post mortem.
Además, ¿que tan seguro estás de no poder llegar a eso?... Tu, ¿darías Gloria a Dios si tuvieras que padecer esas plagas?
Mas aún, yo entiendo en estas plagas, un propósito divino conducente al arrepentimiento... que no tendría sentido de no haber tal posibilidad... Dios que es amor, desde luego que no hace nada sin razón.
No obstante sé que hay quienes piensan, que Dios lo hace para demostrar que ellos presumen correctamente, y que (efectivamente) los sujetos de las plagas son (de hecho) incorregibles
Norberto7;n3182229 dijo:1. Esa es una conclusión muy radical, y aun temeraria ¿cómo puedes "realmente" saberlo?
2. Ibid.
3. Yo pienso, que para sostener, tales ideas necesitamos sostener la idea fundamental de que el sufrimiento no cambia a nadie; lo cual es negado por nuestra propia experiencia la cual nos enseña que sí. Todo sufrimiento es transformador.
De hecho, muchos hemos abrazado el evangelio para escapar del Tormento, no experimentado, ¿cómo podemos asegurar que aquellos que no hacen lo mismo por no tener certeza alguna de ello (lo cual de seguro cambiaría su actitud), estando ya ciertamente en los tormentos no cambie de actitud (se arrepienta), cosa que antes lo hubiera "salvado" de tal trance sin experimentar ningún dolor.
4. ¿Cómo podemos asegurar que tal cosa no ocurra, y que necesariamente SÍ TENGA que ocurrir el suplicio eterno implacable, o la destrucción eterna irrevocable?
Una cosa es querer salvarse y otra es estar dispuesto a arrepentirse.Miguel Loayza F;n3182273 dijo:El abrazar el evangelio para escapar del tormento demuestra que no hay arrepentimiento del pecado. Cuando se inicia el fuego de Dios, ya no es posible apagarlo HASTA que concluya el castigo. Parecido tenemos en el diluvio, cuando comenzó a llover, quisieron entrar, pero la puerta se cerró desde afuera. En Sodoma no vemos que alguien haya salido corriendo con la camisa prendida en fuego. El tiempo aceptable tiene límites (Isa 49:8); "Si oyeréis HOY su voz,..."
El tormento no cambiaría su decisión: Apo_16:9 Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria.
Apo_16:11 y blasfemaron contra el Dios del cielo por sus dolores y por sus úlceras, y no se arrepintieron de sus obras.
Otra vez.Norberto7;n3182339 dijo:Lo resaltado en ladrillo fuego, es de vuestro servidor, y una mera reflexión... ninguna presunción, ni mucho menos acusación.
salmo51;n3182413 dijo:Otra vez.
Cuando la palabra de Dios dice que no se arrepintieron, no se trata de la conclusión tonta de un observador humano.
Sino de Dios que ve en lo mas profundo del corazón y que aún ve el arrepentimiento donde nosotros ni siquiera lo notamos.
Dios puede ver arrepentimiento en el corazón mas duro y rebeldía en el corazón mas blandito y humilde del mundo.
Ricardo;n3182640 dijo:-Precisamente, el asunto del tormento eterno de los condenados no tanto tiene que ver con que la misericordia de Dios no pase más allá de la muerte de quien murió en sus pecados, sino de que tras los ardores del infierno, la vergüenza del juicio final y lo que será el lago de fuego, que es la muerte segunda, no hay ya ocasión para el arrepentimiento y la súplica sino únicamente para el aborrecimiento y la blasfemia. El pecado no es acabado por el fuego, sino por el contrario, crece con el tormento.
El verdadero arrepentimiento toma en cuenta que se ha ofendido a Dios, que se han roto sus leyes, que un inocente paga para que el pecador huya de la ira. Si no hubiera el sacrificio de Cristo, el pecador seguirìa pecando, total va a morir; no se arrepentiría. El mejor ejemplo está en Esaú: Heb_12:17 Porque ya sabéis que aun después, deseando heredar la bendición, fue desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas....su arrepentimiento estaba motivado por la pérdida de la primogenitura y no por su pecadoNorberto7;n3182339 dijo:Lo resaltado en ladrillo fuego, es de vuestro servidor, y una mera reflexión... ninguna presunción, ni mucho menos acusación.
Si el tormento es por causa del pecado, el arrepentimiento del tal está implícito, y es la forma correcta de huir de la ira.
Para nada parecidos.Me contestas lo mismo que esperaría de Ricardo... Tan parecidos entre sí... y creyéndose sin embargo... tan diferentes a si. Solo que tu presumes que el castigo concluye en aniquilación; Ricardo: es la conclusión que concluyendo siempre... no concluye jamás.
Ten en cuenta, que esta actitud es en vida y no post mortem.
Dar gloria a Dios implica reconocer el pecado, arrepentirse, apartarse; no lo hicieron mientras vivían. Esd_10:11 Ahora, pues, dad gloria a Jehová Dios de vuestros padres, y haced su voluntad, y apartaos de los pueblos de las tierras, y de las mujeres extranjeras.Además, ¿que tan seguro estás de no poder llegar a eso?... Tu, ¿darías Gloria a Dios si tuvieras que padecer esas plagas?
Repito: Heb_12:17 Porque ya sabéis que aun después, deseando heredar la bendición, fue desechado, y no hubo oportunidad para el arrepentimiento, aunque la procuró con lágrimas.Mas aún, yo entiendo en estas plagas, un propósito divino conducente al arrepentimiento... que no tendría sentido de no haber tal posibilidad... Dios que es amor, desde luego que no hace nada sin razón.
Si alguno más hubiera demostrado verdadero arrepentimiento, habría entrado al arca al oir por 120 años la predicación de Noé que Dios destruiría la tierra y sus moradores por causa del pecado.No obstante sé que hay quienes piensan, que Dios lo hace para demostrar que ellos presumen correctamente, y que (efectivamente) los sujetos de las plagas son (de hecho) incorregibles
salmo51;n3179520 dijo:El infierno no es mi fuerte.
Realmente no he estudiado el tema y no me gusta hablar de lo que no se.
Deberías hablarlo con Ricardo, Oso, Hectorlugo...
De mi no vas a obtener nada preciso.
Personalmente me da igual que los malos dejen de existir o vivan eternamente.
Lo cierto es que para mi sería mas razonable y lógico que vivan eternamente.
Ricardo;n3182640 dijo:-Precisamente, el asunto del tormento eterno de los condenados no tanto tiene que ver con que la misericordia de Dios no pase más allá de la muerte de quien murió en sus pecados, sino de que tras los ardores del infierno, la vergüenza del juicio final y lo que será el lago de fuego, que es la muerte segunda, no hay ya ocasión para el arrepentimiento y la súplica sino únicamente para el aborrecimiento y la blasfemia. El pecado no es acabado por el fuego, sino por el contrario, crece con el tormento.
Martamaria;n3182771 dijo:Yo no sé cómo eres capaz de creer que el infierno es real.
Nadie dice: Voy a hacer maldades, me apetece hacer daño y ofender a DIos. NO. Pero aunque haga maldades por las circunstancias que sean, NINGUNA es tan horrorosa como el infierno. Y las hace por un número de años LIMITADO. ¿No entiendes, que castigarlo con algo tan horrible con el fuego y ETERNAMENTE, ES INHUMANO E INJUSTO?
O sea, que hasta la misma biblia dice ojo por ojo, y diente por diente, para que el ofendido no se cobre más allá que lo que le hizo el ofensor, y Dios resulta que se pasa siete pueblos y castiga por más tiempo y más cruelmente. Imposible de creer.