POR FAVOR Necesito respuestas

Val37381

Recién registrado
1 Febrero 2021
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Hola, mi nombre es Valeria y tengo 17 soy venezolana.
En mi infancia crecí en un ambiente católico, estudié en colegios católicos hasta que me gradué de bachiller. A mitad de mis 16 años mi hermana llegó a los pies de Cristo, luego mi mamá y luego empecé a asistir también a la iglesia.
Durante toda mi vida estuve consciente de que Dios existía, pero no fue si no hasta que cumplí 16 que empecé a cuestionar a Dios gracias a qué la mayoría de mis amigos son ateos, empecé a ser hipócrita con él pues en las noches le rezaba y otras veces me burlaba de él y empecé a sentir que fuera agnóstica. Hasta que llegué a una iglesia cristiana y me enamoré de Dios, me libro de las cadenas de la homosexualidad (era bisexual) cosa que pensé que no pasaría y hasta llegué a resistirme pero finalmente entendí que Dios es perfecto y sus planes no se equivocan y el modelo de su creación es perfecto.

El Señor me empezó a hablar por revelaciones a través de una hermana de la iglesia, me decía que Él tenía cosas grandes para mí, y una vez me dijo que Él era quién me conocía, que él me iba a cambiar, tomé eso en mi corazón y así fue casi que rápidamente me enamoré de Él y de su palabra, entendí que todo lo que había pasado en mi vida tenía un propósito, así que dejé de hacer las cosas que hacía, los pensamientos homosexuales desaparecieron, dejé de escuchar música que no edificaba, eché a la basura los discos y libros que no edificaba y un montón de cosas que idolatraba. Comencé a sentirme feliz y comencé a leer la biblia, a asistir a vigilias y a los cultos también, y un deseo se insertó en mi corazón de hablar sobre Él a las personas incrédulas y que todos se enamoren también de Él

El primer día de este año me encontraba sola en mi casa mientras veía una predicación y mencionaron sobre el pecado imperdonable la blasfemia contra el espíritu Santo, en ese momento se me vino un pensamiento horrible y me paré de un salto y me alteré horrible, me puse a orar y pedirle perdón a Dios por ese pensamiento. Al día siguiente tenía un compartir con los hermanos, todos estaban felices y yo aún con la terrible inquietud además de que sentía que los pensamientos no se iban. Al llegar a la casa mi mamá sintió mi inquietud y rompí a llorar y con mi hermana me oraron.
Pasaron semanas, el señor seguía hablándome por revelaciones y se me pasó y volví a estar feliz, luego empezó otra vez los pensamientos y volví a sentirme mal, no quería comer, sentía ansiedad y mucho miedo. El Señor volvió a hablarme por revelaciones y me dijo que este año me bautizaria y se me pasó nuevamente.

En las últimas tres semanas estuve en una campaña de 21 días de ayuno, comenzó los pensamientos nuevamente en un ensayo de la iglesia mientras tocaba el piano. Al día siguiente el domingo el señor me confirmo el don de alabanza y me sentí muy feliz y agradecida con Dios, pues una de mis peticiones en los días de ayuno fue que sacará mis dones.

Pasaron los días, los pensamientos venían pero está vez fue más fuerte, me sentía mareada, con una opresión en el pecho, quería leer la biblia y me sentía sin gozo, en los cultos me sentía mareada y muy mal. Le pedí al pastor que me orara y me recomendó leer el salmo 91 y oré y oré como nunca , me desahogué con Dios hasta ahogarme en lágrimas.
El señor volvió a hablarme y me quebrante en el momento, me dijo que estaba agradado con lo que estaba en mi corazón, me dijo que yo era su niña y que le agradaba como le oraba y le alababa, además de que no temiera que él se encargaría de todo, me habló muy lindo. Pero al llegar a la casa me sentía como si eso no fuera pasado, como si no fuera conmigo en realidad y que no era Él quién me había hablado, como si él no existiera y me sentí mal otra vez y con mucha culpabilidad y el gozo se me fue.

No fue si no hasta está última semana , fui a una vigilia y el Señor se manifestó grandemente, pero sentía como si estuviera desconectada sentía que estaba en una crisis de fe, o una especial de crisis existencial pues Dios es mi vida entera. Le pedí nuevamente al pastor que me orara y me dijo que tenía que confiar realmente en el señor, que no le diera cabida a esos pensamientos y que yo era hija del Señor y que nada malo me pasaría.
En el día del culto, mientras el señor volvía a mostrar su gloria y las personas hablaban el lenguas, sentí una aflicción pues no sentía la presencia de Dios, hasta llegué a pensar que en realidad no fuera Dios quién se estaba manifestando, y ahí fue donde me sentí terriblemente mal, pues yo he sentido la presencia de Dios, sus cambios en mi vida y el gozarme en él, además de un miedo de no sentir otra vez la presencia de Dios, de que el se alejara de mí, de no tener amor hacia Él en mi corazón y me sentí mareada, con la opresión en el pecho otra vez y sin ganas de respirar, incluso con ganas de morirme. En todos estos días no he comido, sólo quiero estar acostada y dormir y siento algo horrible en mi pecho.

Me sentía como desconectada de Dios, comencé a leer nuevamente sobre él, a leer salmos, a volver a encontrarme con él y su presencia, busqué también sobre la blasfemia sobre el espíritu Santo y me dio algo de alivio saber que una persona que verdaderamente lo ha hecho no buscaría y no sentiría la necesidad de buscar más de Dios, también me puse escuchar mis canciones favoritas que hablan sobre Él para volver a reencontrarme con él y su esencia, desahogarme con él y leer algunos escritos que hice inspirados en él.

Me gustaría que me dieran consejos sobre como luchar en lo espiritual y a perseveran en la fe, el pastor me dijo que como en mi casa soy la que aún no está bautizada, además de que los planes de que el tiene sobre mi vida, el enemigo buscará alejarme de Dios.

Estoy 100% convencida que nada en este mundo nos dará la paz y felicidad como Dios lo hace, sólo en Él encontramos todo, además también tengo la convicción de que no puedo y no quiero vivir sin él. Pero siento que las dudas, el miedo de no sentir su presencia más y enfriarme, de que pierda mi amor hacia él, perder su amistad, de no sentir al espíritu Santo, los pensamientos blasfemos sobre Dios, su palabra y el espíritu Santo me invaden y es horrible, agobiante.

Pues aún tengo la inquietud de no sentir su amor como en un principio, de no sentir su gozo, su paz y su alegría en mi vida para alabarle de corazón. Eso es lo que inquieta grandemente.

Si pudieran aconsejarme más sobre esto lo agradecería muchísimo.
 
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Hola, soy paisano tuyo.

La calumnia al Espíritu Santo consiste es atribuir al diablo la obra de DIOS. Si ves a alguien cercano decir que "fulanito sana y hace prodigios por obra del diablo" y esa persona sostiene que lo hace a nombre del DIOS cristiano, CUIDADO no emitas juicio tu, tampoco condenes apariciones, sanidades y similares porque no fueron hechos en tu grupo religioso particular.

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Eso que sufres es una opresión diabólica, pasará, pero debes ser constante en la oración, en la alabanza y manteniendo tu corazón limpio. Esto ocurre con la mayoria de nosotros, de hecho, yo sé que tu conversión es genuina porque el diablo está buscando arrebatarte la tranquilidad y la felicidad, asi que ¡Ánimo!

Tengo solo una observación que hacerte: Cuando eras católica la iglesia no te invitaba a hacer el mal, eso lo elegiste por cuenta propia. Te sugiero que no seas como otros expresando medias verdades que a la postre podrían convertirse en lo que mas temes: la calumnia al Espíritu Santo. De resto, ten paz.
 
Gracias
Aún me siento intranquila, con el corazón acelerado y sin apetito.

Cómo si hubiera perdido la visión de quién es Dios, de sus planes, de su amor hacía mí, estoy en medio de una terrible crisis de fe y me siento fuera de lugar, ya no me siento como antes y eso es lo que me aterra.

Siento que si voy a la iglesia me sentiré intranquila viendo como los demás se gozan en él, y yo no poder sentir lo mismo, también que él se manifiesta y yo no poder sentir nada, se me ha venido a la mente dejar todo, pero sé que si me alejo estaré en un estado peor.
Sé que tengo que luchar y seguir adelante. Pero tengo miedo de no sentir más su paz, de no amarlo como en el principio y de perderlo. Estoy buscando como volver a conectarme con él, le estoy pidiendo dirección y le estoy diciendo que si hice algo mal que me lo muestre, que me ayude que sola no puedo con tanto peso, siento que me voy a volver loca y con ganas de quitarme la vida
 
Última edición:
Hola Valeria, me gustaría ayudarte , pese a que yo no sigo tu practica o tipo de movimiento, soy Seguidor De Dios y no tengo prejuicios con quienes tienen su Fe hacia El, ya sean de distinta cultura o religion. He tenido bastantes experiencias espirituales y manifestaciones espirituales con las que he mantenido contacto, tuve buenas y malas experiencias, también mientras me apoyaba en la Fe a través de las escrituras filosóficas.
Tuve dudas como tu y fue entonces cuando decidí, que pese a Santos y Sabios, Angeles y Arcángeles , mi oración solo debía ser enfocada a Dios y a nadie mas por lo tanto me quite oraciones o mantras que alababan a otro que no fuera Dios.

Fue entonces que todas las señales que llevan persiguiéndome años, avisándome, alertando, en sueños , en canalizaciones durante la meditación , tras la oración y el ejercicio de la respiración, en la hora o la television, come en cualquier parte insospechable , cobraron sentido y comenzaron a hilarse entre si.

Tras el apoyo exclusivo en Dios y no enfocando en otros personajes de la historia, fue que Dios quiso hablarme a través de distintos medios que me traían mensajes y aprendi a estar atento y ser suspicaz , a medida que Dios te enseña te cambia la percepción tanto para quienes ya la habían cambiado, como para los que no.

El año pasado ocurrió que me mando un alma y un mensaje consigo, desde entonces la vida tiene sentido, pese a que muchos no creyeron muchas de mis visiones , tampoco las manifestaciones , después de un año de practica espiritual como anteriormente y estudio de este universo tan solo enfocado en Dios , grandes revelaciones se han manifestado y ahora cualquier historia tiene sentido, porque quien conoce la Forma Universal De Dios , conoce como su padre se muestra ante su hijo y cuando comprende su esplendor y su poder , no hay fuerza alguna que lo supere en el Universo , por que Él no es otro que quien las crea y las controla , preservándolas, transformándolas o destruyéndolas, pero cuando el demuestra su fuerza , no hay nada que lo detenga , porque no hay fuerza mente o cosa existente que el no haya creado.

Quizás debamos preguntarnos que representan esas fuerzas en nuestra realidad o universo físico , para saber entender las escrituras, porque del mismo modo las escrituras revelan todas las ciencias, no tengo estudios ni soy nadie en la sociedad , pero Dios te enseña cosas que se aprenden tanto fuera como dentro de la sociedad , enseñándote el sentido de la vida a través del conocimiento Universal , que esta por encima de títulos o expertos que no nos van a salvar y mucho menos nos enseñan.
Trato de no tener prejuicios y respetar las cosas para conocer lo que realmente significan es así que sabemos si esta bien lo que estamos respetando, ya que lo literal puede jugar una mala pasada por no ser realmente comprendido, ya sea por su hermetismo u ocultismo o por otros casos como instrucciones de como rezar .
Me equivoqué mucho y mucho aprendi de ello.
Tu respuesta es Dios, los demás son problemas para dirigirte a el no necesitas ningún nombre , tampoco una figura ni un sello el mismo lo dice .

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Reacciones: Suny
Hola Valeria. Lo primero que tienes que saber es que Dios te ama; Él te ha hecho como eres. Tu color de ojos y de pelo, tu estatura y complexión física, tu género y orientación sexual... todo eso y mucho más ha sido diseñado por Dios para que vivas en su plenitud. Imagínate que el mismo Jesús se encontrara contigo, como lo hizo con la samaritana, o con el leproso, o con el publicano, o con el centurión romano, o con la pecadora... No te despreciaría, te daría un abrazo enorme y te diría que te ama. No pienses en Satanás, ni en un Dios castigador que está esperando a que falles para reprenderte. Dios es Amor. Ora desde ese convencimiento, habla con Jesús y escúchale también, que en lo más profundo de tu ser te habla. Si aceptas quien eres y buscas al Señor dentro de ti, no tendrás más remedio que ser feliz y que anunciar esa Buena Noticia a todo el Mundo. Si quieres que hablemos, escríbeme a mi correo y concretamos la forma de comunicarnos. Yo estoy en Málaga (España). Un abrazo en Cristo y que Dios te de su Paz.
 
Hola, mi nombre es Valeria y tengo 17 soy venezolana.
En mi infancia crecí en un ambiente católico, estudié en colegios católicos hasta que me gradué de bachiller. A mitad de mis 16 años mi hermana llegó a los pies de Cristo, luego mi mamá y luego empecé a asistir también a la iglesia.
Durante toda mi vida estuve consciente de que Dios existía, pero no fue si no hasta que cumplí 16 que empecé a cuestionar a Dios gracias a qué la mayoría de mis amigos son ateos, empecé a ser hipócrita con él pues en las noches le rezaba y otras veces me burlaba de él y empecé a sentir que fuera agnóstica. Hasta que llegué a una iglesia cristiana y me enamoré de Dios, me libro de las cadenas de la homosexualidad (era bisexual) cosa que pensé que no pasaría y hasta llegué a resistirme pero finalmente entendí que Dios es perfecto y sus planes no se equivocan y el modelo de su creación es perfecto.

El Señor me empezó a hablar por revelaciones a través de una hermana de la iglesia, me decía que Él tenía cosas grandes para mí, y una vez me dijo que Él era quién me conocía, que él me iba a cambiar, tomé eso en mi corazón y así fue casi que rápidamente me enamoré de Él y de su palabra, entendí que todo lo que había pasado en mi vida tenía un propósito, así que dejé de hacer las cosas que hacía, los pensamientos homosexuales desaparecieron, dejé de escuchar música que no edificaba, eché a la basura los discos y libros que no edificaba y un montón de cosas que idolatraba. Comencé a sentirme feliz y comencé a leer la biblia, a asistir a vigilias y a los cultos también, y un deseo se insertó en mi corazón de hablar sobre Él a las personas incrédulas y que todos se enamoren también de Él

El primer día de este año me encontraba sola en mi casa mientras veía una predicación y mencionaron sobre el pecado imperdonable la blasfemia contra el espíritu Santo, en ese momento se me vino un pensamiento horrible y me paré de un salto y me alteré horrible, me puse a orar y pedirle perdón a Dios por ese pensamiento. Al día siguiente tenía un compartir con los hermanos, todos estaban felices y yo aún con la terrible inquietud además de que sentía que los pensamientos no se iban. Al llegar a la casa mi mamá sintió mi inquietud y rompí a llorar y con mi hermana me oraron.
Pasaron semanas, el señor seguía hablándome por revelaciones y se me pasó y volví a estar feliz, luego empezó otra vez los pensamientos y volví a sentirme mal, no quería comer, sentía ansiedad y mucho miedo. El Señor volvió a hablarme por revelaciones y me dijo que este año me bautizaria y se me pasó nuevamente.

En las últimas tres semanas estuve en una campaña de 21 días de ayuno, comenzó los pensamientos nuevamente en un ensayo de la iglesia mientras tocaba el piano. Al día siguiente el domingo el señor me confirmo el don de alabanza y me sentí muy feliz y agradecida con Dios, pues una de mis peticiones en los días de ayuno fue que sacará mis dones.

Pasaron los días, los pensamientos venían pero está vez fue más fuerte, me sentía mareada, con una opresión en el pecho, quería leer la biblia y me sentía sin gozo, en los cultos me sentía mareada y muy mal. Le pedí al pastor que me orara y me recomendó leer el salmo 91 y oré y oré como nunca , me desahogué con Dios hasta ahogarme en lágrimas.
El señor volvió a hablarme y me quebrante en el momento, me dijo que estaba agradado con lo que estaba en mi corazón, me dijo que yo era su niña y que le agradaba como le oraba y le alababa, además de que no temiera que él se encargaría de todo, me habló muy lindo. Pero al llegar a la casa me sentía como si eso no fuera pasado, como si no fuera conmigo en realidad y que no era Él quién me había hablado, como si él no existiera y me sentí mal otra vez y con mucha culpabilidad y el gozo se me fue.

No fue si no hasta está última semana , fui a una vigilia y el Señor se manifestó grandemente, pero sentía como si estuviera desconectada sentía que estaba en una crisis de fe, o una especial de crisis existencial pues Dios es mi vida entera. Le pedí nuevamente al pastor que me orara y me dijo que tenía que confiar realmente en el señor, que no le diera cabida a esos pensamientos y que yo era hija del Señor y que nada malo me pasaría.
En el día del culto, mientras el señor volvía a mostrar su gloria y las personas hablaban el lenguas, sentí una aflicción pues no sentía la presencia de Dios, hasta llegué a pensar que en realidad no fuera Dios quién se estaba manifestando, y ahí fue donde me sentí terriblemente mal, pues yo he sentido la presencia de Dios, sus cambios en mi vida y el gozarme en él, además de un miedo de no sentir otra vez la presencia de Dios, de que el se alejara de mí, de no tener amor hacia Él en mi corazón y me sentí mareada, con la opresión en el pecho otra vez y sin ganas de respirar, incluso con ganas de morirme. En todos estos días no he comido, sólo quiero estar acostada y dormir y siento algo horrible en mi pecho.

Me sentía como desconectada de Dios, comencé a leer nuevamente sobre él, a leer salmos, a volver a encontrarme con él y su presencia, busqué también sobre la blasfemia sobre el espíritu Santo y me dio algo de alivio saber que una persona que verdaderamente lo ha hecho no buscaría y no sentiría la necesidad de buscar más de Dios, también me puse escuchar mis canciones favoritas que hablan sobre Él para volver a reencontrarme con él y su esencia, desahogarme con él y leer algunos escritos que hice inspirados en él.

Me gustaría que me dieran consejos sobre como luchar en lo espiritual y a perseveran en la fe, el pastor me dijo que como en mi casa soy la que aún no está bautizada, además de que los planes de que el tiene sobre mi vida, el enemigo buscará alejarme de Dios.

Estoy 100% convencida que nada en este mundo nos dará la paz y felicidad como Dios lo hace, sólo en Él encontramos todo, además también tengo la convicción de que no puedo y no quiero vivir sin él. Pero siento que las dudas, el miedo de no sentir su presencia más y enfriarme, de que pierda mi amor hacia él, perder su amistad, de no sentir al espíritu Santo, los pensamientos blasfemos sobre Dios, su palabra y el espíritu Santo me invaden y es horrible, agobiante.

Pues aún tengo la inquietud de no sentir su amor como en un principio, de no sentir su gozo, su paz y su alegría en mi vida para alabarle de corazón. Eso es lo que inquieta grandemente.

Si pudieran aconsejarme más sobre esto lo agradecería muchísimo.
Hola Valeria, y soy Venezolano al igual que tu, aunque no crecí en una familia Cristiana, siempre estuve rodeado de muchas personas que lo eran y oraban por mi, durante muchas décadas creí que no era real hasta que llegue a los pies de CRISTO porque vivía atado a las cosas de este mundo... y como dice la palabra de DIOS, el enemigo es real y el esta para robar, matar y destruir, y no menospreciemos sus acciones... aunque no comprendía estas palabras porque yo nunca vi al diablo con cachos, un día DIOS me hablo y todo cambio para mi, pero hasta que no hice el acto público del bautismo en aguas, fue que pude ver y percibir las cosas que me tenían atado y me atacaban día a día... hoy doy el testimonio de que el acto más importante en mi vida fue recibir a CRISTO en mi corazón y bautizarme como lo indican las escrituras, hoy comprendo que fue lo que marco un antes y un después en mi vida. Son reales los ataques del diablo y debemos menospreciarlos aunque no los veamos físicamente, pero DIOS es mucho más grande que el que habita en el mundo y una vez seas bautizar, EL ESPÍRITU DE DIOS se posará sobre ti y todo será diferente, porque en la presencia de DIOS todo lo opuesto a EL huye y eso será la PAZ VERDADERA que solo da DIOS a nuestras vidas... te lo digo con propiedad... ¡ DIOS te siga bendiciendo !