ORAR EN VANO

25 Agosto 2002
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El Espíritu Santo nos dice claramente a través del Apóstol Pablo, que debemos rogar y orar por todos los hombres, porque Dios quiere que todos lleguen a conocer la verdad: Sólo Hay un Dios y un mediador, JESUCRISTO.

Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias por todos los hombres, por los reyes y por todos los que tienen autoridad, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. Esto es bueno y agradable delante de Dios, nuestro Salvador, el cual quiere que todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad, pues hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres: Jesucristo hombre, (1ª Carta del Apostol Pablo a Timoteo 2: 1-5)

Si seguimos lo dicho por la PALABRA DE DIOS, estamos haciendo lo bueno delante de Dios. Y la Palabra de Dios nos dice, que todo lo que pidamos EN SU NOMBRE (el de Cristo), el nos lo concederá, segúne está escrito en el evangelio de San Juan 16:24JESUS DIJO: Hasta ahora nada habéis pedido en mi nombre; pedid, y recibiréis, para que vuestro gozo sea completo.

El papa decide invocar a María y solicitar su intercesión (mediación) en vez de la de Jesucristo, nuestro mediador para con Dios

Al concluir mis palabras quiero invocar a María, la estrellaluminosa que anuncia eldespuntar del Sol que nace delo Alto, Jesucristo:¿Dios te salve, María,llena de gracia!Esta noche te pido por losjóvenes de España, jóvenes llenos de sueños y esperanzas.Ellos son los centinelasdel mañana,el pueblo de lasbienaventuranzas;son la esperanza viva de laIglesia y del Papa.Santa María,Madre de los jóvenes,intercede para que sean testigos de Cristo Resucitado,apóstoles humildes y valientes del tercer milenio,heraldos generosos delEvangelio.Santa María,Virgen Inmaculada,reza con nosotros,reza por nosotros. Amén

Si seguimos el EJEMPLO DEL PAPA, estamos realizando una oración en vano, al no solicitar la mediación de Jesucristo, el Hijo de Dios, al cual Dios le ha dado toda la potestad sobre la tierra y en el cielo, según el evangelio de San Mateo 28:18
 
:llorando:


¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán ambos en el hoyo? (Lucas 6:39)