Mateo 5
13
«Vosotros sois la sal de la tierra. Mas si la sal se desvirtúa, ¿con qué se la salará? Ya no sirve para nada más que para ser tirada afuera y pisoteada por los hombres.
La sal es indispensable para toda comida, ya que , por más condimentos que tengan, la comida no será agradable al paladar sin la sal. - es decir que sin la sal los condimentos no sirven de nada, es como la fe sin obras. del mismo modo un persona que dice tener fe, pero no tiene obras de fe, o sus actitudes no condicen con la fe, lo de "cristiano " es solo un rótulo o una etiqueta.
14
«Vosotros sois la luz del mundo. No puede ocultarse una ciudad situada en la cima de un monte.
No tendría sentido ¿ verdad ?
15
Ni tampoco se enciende una lámpara y la ponen debajo del celemín, sino sobre el candelero, para que alumbre a todos los que están en la casa.
Yo la luz he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas.
Por lo tanto, si alguien dice tener fe,- y la fe es solo para Dios y su palabra, esa fe tiene que manifestarse de alguna forma, como el negarse a si mismo porque con la fe ya tiene todo lo que necesita,
la viuda de Sarepta de Sidón, recibió la visita de Elías el Profeta, por pedido de Dios, y ambos, Elias hizo lo que Dios le mando, y la viuda, hizo lo que le pidió Elías:
Entonces el Señor le dijo a Elías: “Anda y vete a Sarepta de Sidón y quédate ahí, pues le he ordenado a una viuda de esa ciudad que te dé de comer”.
El profeta Elías se levantó y se puso en camino hacia Sarepta. Al llegar a la puerta de la ciudad, encontró allí a una viuda que recogía leña. La llamó y le dijo:
“Tráeme, por favor, un poco de agua para beber”. Cuando ella se alejaba, el profeta le gritó: “Por favor, tráeme también un poco de pan”. Ella le respondió: “Te juro por el Señor, tu Dios, que no me queda ni un pedazo de pan; tan sólo me queda un puñado de harina en la tinaja y un poco de aceite en la vasija.
Ya ves que estaba recogiendo unos cuantos leños. Voy a preparar un pan para mí y para mi hijo. Nos lo comeremos y luego moriremos”.
Elías le dijo: “No temas. Anda y prepáralo como has dicho; pero primero haz un panecillo para mí y tráemelo. Después lo harás para ti y para tu hijo, porque así dice el Señor de Israel: ‘La tinaja de harina no se vaciará, la vasija de aceite no se agotará, hasta el día en que el Señor envíe la lluvia sobre la tierra’ ”.
Entonces ella se fue, hizo lo que el profeta le había dicho y comieron él, ella y el niño. Y tal como había dicho el Señor por medio de Elías, a partir de ese momento, ni la tinaja de harina se vació, ni la vasija de aceite se agotó.
La viuda de Sarepta vio la luz a través del milagro y nosotros la vemos por la palabra de Dios, y también por milagros.
Por la fe en Dios deberíamos transmitir la Palabra como lo hizo Jesús, y no solo transmitirla, también practicarla.
16
Brille así vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
Pregunto: La hambruna era terrible en esos años, y Dios envía a Elias a una pobre viuda que ya no le quedaba nada para que le de de comer, ¿ porque no le envió a personas que tuvieran más que un puñado de harina y unas gotas de aceite ? - podemos sacar en conclusión la caridad de la viuda, pero no es solo eso, el milagro de Dios tiene muchas razones. los hechos en su conjunto, es la razón de nuestras vidas aquí en la tierra, o ¿ acaso solo vivimos bajo la ley del más fuerte ? hasta que la muerte nos arrebate de este mundo ? y ¿después ? - una vida así no tiene sentido, es como una comida con muchos condimentos pero sin sal.