Mensaje de L.F. a Karolusin(Primer foro de iglesia net)
"El que anda con sabio, sabio será, mas es que se junta con necios, será quebrantado"
(Prov.13:20)
Tu entiendes la iglesia de Cristo como una organización visible, jerarquizada, en la que hay una cabeza visible (el Papa) y de la cual se han desgajado ciertas ramas a las cuales antes se quemaba y ahora se les llama hermanos separados. Tú entiendes que lo lógico sería que esos hermanos separados volvieran a la “Madre Iglesia” para que todos juntitos seamos uno. ...................
Yo, sin embargo, creo que la Iglesia de Cristo no tiene nada que ver con una organización visible sino que está formada por TODOS aquellos que creen en Cristo como Señor y Salvador y como el ÚNICO mediador entre Dios y los hombres.
Yo conocí a Dios siendo católico. Yo tuve una relación personal con Él siendo católico. Pero cuando Él me mostró los errores de esa iglesia no tuve más remedio que salir porque no es posible que haya comunión entre la luz (el evangelio de Cristo) y las tinieblas (Tradición de origen pagano).
Mi casa no es la iglesia católica. No puedo regresar a una iglesia que ha cambiado el evangelio de la Verdad por una serie de normas, doctrinas y tradiciones que no sólo no tienen nada que ver con el mensaje bíblico sino que se oponen abiertamente a ese mensaje.............
La iglesia católica me enseñó a confiar también en María. Me dijo que ella escuchaba mis oraciones y que las llevaba delante de Dios. Me enseñó que esa mujer tenía poder sobre mi alma y espíritu en el día de mi muerte. Me enseño una oración, el rosario, en la que se daban títulos a María que sólo a Dios corresponden. Esa iglesia también me enseñó que era bueno arrodillarse delante de imágenes de santos y que podemos orar a ellos para que Dios nos oiga. Me enseñó que era bueno y útil para mi salud espiritual el ir en procesión detrás de una de esas imágenes recitando un montón de oraciones............
Yo era un “buen” católico. Mi madre era catequista para los niños que iban a hacer la primera comunión. Yo incluso la ayudaba a veces en esa tarea. Me crié en un colegio escolapio y recibí una educación “exquisita” en cuanto a la religión católica.
Pero llegó un día en el que todo aquello que parecían ganancias y méritos delante de Dios se convirtió en algo que ya dijo Pablo:
“Lo que yo gané lo tengo por basura para ganar aquel tesoro más valioso”
Todos aquellos conocimientos, toda aquellos méritos de buen católico, todas esas doctrinas que pretendían ayudar a Dios para hacerme salvo se convirtieron en pura basura comparados con el conocimiento de mi Dios y Señor Jesucristo, el cual sólo pide mi amor y mi obediencia a su Palabra. Y amar a Dios no tiene nada que ver con estar en una u otra iglesia. Tiene que ver con una relación personal con Él, ni más, ni menos. Y tiene que ver en dejar que el Espíritu Santo sea el Rey de mi vida, dejándole que Él me muestre su santa voluntad. Cuantos menos adornos externos, cuantos menos ritos humanos, cuantas menos tradiciones de hombres sigamos, tanto mejor para nosotros.
Karolusin, yo no soy el típico protestante apegado a tradiciones interpretativas de la Palabra de Dios. Algunos han cambiado una tradición por otra y son incapaces de entender que la Palabra de Dios es viva y no algo muerto al que otros han sacado todo su jugo. Cada generación de cristianos debe buscar el sentido de la Palabra para ellos mismos. Sabemos que Dios no es un Dios de confusión y que sólo el hombre es capaz de hacer que la Palabra de Dios sea motivo de disputas y de guerras, pero aquellos que realmente viven en el Espíritu son capaces de estar por encima de las bajezas humanas y dedican su tiempo en ser luz en un mundo de tinieblas. Difícilmente se puede ser luz cuando se está en unas iglesias (hablo en plural) que son más un montaje para sostener las ambiciones económicas o de poder de sus líderes. Hace ya cierto tiempo que Dios me ha liberado de ese peligro. No seré tan necio de volver al sitio de dónde Cristo me sacó para anunciar las virtudes de su luz admirable.
Y oro para que tú, estés donde estés, alcances a conocer mucho mejor al único que es digno de nuestra alabanza, gloria y honor.
"El que anda con sabio, sabio será, mas es que se junta con necios, será quebrantado"
(Prov.13:20)