WASHINGTON.- El Departamento de Justicia de EEUU ha informado del desmantelamiento de un grupo cibernético dedicado a la pornografía infantil y que incluía entre sus 7.000 miembros a sacerdotes, policías y maestros. Unos 2.600 de ellos se encuentran fuera de Estados Unidos.
El secretario de Justicia, John Ashcroft, dijo en rueda de prensa que la llamada "Operación Candyman", que se realizó de forma encubierta en los últimos 14 meses, ha logrado destapar "el lado más siniestro de Internet", para proteger a los jóvenes de pederastas y de comerciantes de pornografía infantil.
En la operación, en la que participaron las 56 oficinas regionales del FBI y policías locales y estatales, el Gobierno detuvo a 89 personas en 20 estados, pero se espera capturar a otras 50 en las próximas semanas, dijo Ashcroft.
86 cargos criminales
Entre las personas arrestadas figuran algunos miembros del clero, un conductor de autobuses escolares y un enfermero, pero también profesionales médicos, legales y de la enseñanza, además de técnicos de ligas infantiles deportivas.
Las autoridades les han imputado un total de 86 cargos criminales como resultado de esta investigación.
La operación, que comenzó en enero de 2001, recibe su nombre del grupo cibernético "Candyman", en el que miles de personas, dentro y fuera de EEUU, compartían todo tipo de material pornográfico con menores de edad.
Internet tiene múltiples usos positivos pero, "desafortunadamente", algunas personas han aprovechado el anonimato de Internet "para promover e intercambiar imágenes de niños que son sometidos al abuso sexual y la explotación", dijo Ashcroft.
El secretario de Justicia, acompañado del jefe de la División de Investigaciones Criminales del FBI, Bruce Gebhardt, dijo que la operación logró dar con "verdaderos depredadores sexuales" y que 27 de los arrestados admitieron haber abusado de al menos 36 niños.
El grupo cibernético, que contaba con 2.600 miembros fuera de EEUU, tenía "como único propósito la explotación y degradación de menores" y el FBI mantiene su compromiso de proteger a los jóvenes estadounidenses contra estos pederastas, dijo Gebhardt.
Según el FBI, la compraventa de pornografía infantil en Internet ha aumentado drásticamente en los últimos años. El año pasado, el FBI investigó 1.541 casos de pornografía infantil a través de Internet, en comparación con 113 casos en 1996.
Para algunos analistas, el arresto de los sacerdotes -cuyo número no fue precisado-, agravará la crisis dentro de la Iglesia católica, tras el arresto o proceso judicial de varios religiosos acusados de abuso sexual de menores, asunto que será analizado durante la reunión de la Conferencia Episcopal de EEUU en junio.
EFE
El secretario de Justicia, John Ashcroft, dijo en rueda de prensa que la llamada "Operación Candyman", que se realizó de forma encubierta en los últimos 14 meses, ha logrado destapar "el lado más siniestro de Internet", para proteger a los jóvenes de pederastas y de comerciantes de pornografía infantil.
En la operación, en la que participaron las 56 oficinas regionales del FBI y policías locales y estatales, el Gobierno detuvo a 89 personas en 20 estados, pero se espera capturar a otras 50 en las próximas semanas, dijo Ashcroft.
86 cargos criminales
Entre las personas arrestadas figuran algunos miembros del clero, un conductor de autobuses escolares y un enfermero, pero también profesionales médicos, legales y de la enseñanza, además de técnicos de ligas infantiles deportivas.
Las autoridades les han imputado un total de 86 cargos criminales como resultado de esta investigación.
La operación, que comenzó en enero de 2001, recibe su nombre del grupo cibernético "Candyman", en el que miles de personas, dentro y fuera de EEUU, compartían todo tipo de material pornográfico con menores de edad.
Internet tiene múltiples usos positivos pero, "desafortunadamente", algunas personas han aprovechado el anonimato de Internet "para promover e intercambiar imágenes de niños que son sometidos al abuso sexual y la explotación", dijo Ashcroft.
El secretario de Justicia, acompañado del jefe de la División de Investigaciones Criminales del FBI, Bruce Gebhardt, dijo que la operación logró dar con "verdaderos depredadores sexuales" y que 27 de los arrestados admitieron haber abusado de al menos 36 niños.
El grupo cibernético, que contaba con 2.600 miembros fuera de EEUU, tenía "como único propósito la explotación y degradación de menores" y el FBI mantiene su compromiso de proteger a los jóvenes estadounidenses contra estos pederastas, dijo Gebhardt.
Según el FBI, la compraventa de pornografía infantil en Internet ha aumentado drásticamente en los últimos años. El año pasado, el FBI investigó 1.541 casos de pornografía infantil a través de Internet, en comparación con 113 casos en 1996.
Para algunos analistas, el arresto de los sacerdotes -cuyo número no fue precisado-, agravará la crisis dentro de la Iglesia católica, tras el arresto o proceso judicial de varios religiosos acusados de abuso sexual de menores, asunto que será analizado durante la reunión de la Conferencia Episcopal de EEUU en junio.
EFE