Hola a Todos:
Hoy me despido de vosotros, no sé si definitivamente, o solo temporalmente, pero creo que en caso de ser temporal, será una temporada muy larga.
En otro foro donde había anunciado ya mi despedida, han creido que era por el como se me trataba en el, pero eso no tiene nada que ver con mi despedida, ni en aquel, ni en este, ni en cualquier otro foro de los que participo.
Me marcho del foro, pero no me marcho con ningún resentimiento, es más, como alguna vez he comentado, he aprendido mucho en este foro, durante mi participación en el, he ido cambiando, he ido creciendo espiritualmente, no hacia la dirección que la mayoría de vosotros, hubiera querido, pero no ha sido ningún tiempo perdido, he aprendido de lo bueno, y he aprendido de lo malo, he aprendido lo que hay que hacer y decir, y he aprendido lo que no hay que hacer y decir, todavía me queda mucho que aprender, pero lo tendré que aprender en otro sitio y de otra forma.
Yo fui ateo desde los 14 años, hasta los 40, al par de meses de haber vuelto a creer en Dios, perdí mi trabajo como programador en Junio del 1999 (una bendición de Dios, contrariamente a lo que se pueda pensar) desde la muerte de mi madre, y por diferencias con mi progenitor, yo vivia en una casa alquilada, durante casi dos años cobré el subsidio de desempleo, y tuve tiempo de leerme un par de Biblias, la de los TJ, y una Católica, y empecé a participar en foros de religión.
A los pocos días de haber acabado de cobrar el subsidio de desempleo, encontre un trabajo por fin, como peón de carpintero, en el fue la primera vez que se me planteó el trabajar en Sábado, y que yo no acepté, cuando el contrato de tres meses se acabó, no se me renovó el contrato, pues cierto es que la empresa pasó una mala época.
Encontré otro trabajo como fontanero, en el cual yo tenía más de 10 años de experiencia, pero en vez de ser la fontanería casera, se trataba de fontanería industrial, durante ese tiempo que trabajé en esa empresa, no se me dijo nada de trabajar en Sábado, a pesar de que por un compañero, yo sabía que habían épocas, donde también se trabaja en ese día, pero ese trabajo resultaba tan desagradable para mi, que además de trabajar nueve horas todos los días, cuando dormía, me pasaba toda la noche soñando que trabajaba en las labores más desagradables de este trabajo, despertandome por las mañanas, más cansado de lo que me había acostado.
Cuando el contrato se acababa, hablé con el propietario de la empresa, y le expresé mi deseo de no continuar en la empresa, despidiendome yo de este trabajo, pues mi salud "mental" estaba en peligro.
Volví a pedir trabajo en la carpintería, pues la mala época ya había pasado, y a pesar de estar contentos con mi trabajo, no se me volvió a dar trabajo, por negarme a trabajar en Sábado.
Eso fue en dicienbre del 2001, y desde entonces no tengo ningún trabajo. Mi progenitor enfermó, y acudí a cuidarlo, al poco dejé la casa alquilada, pues ya no podía pagarla, y regrese a vivir en casa de mi progenitor.
Cuando era ateo y trabajaba como programador ganaba 170.000 pts. al mes, en los trabajos siguientes cobraba unas 110.000 pts. más las horas extras que hiciera. Hace poco tiempo el ayuntamiento del pueblo solicitó trabajadores a la oficina del paro, y entre ellos fui seleccionado yo, para ayudar en los mantenientos de los jardines del pueblo para cobrar unas 80.000 Pts. al mes (jornal base interprofesional + pagas incluidas) el primer día de nuestro trabajo se nos dió el horario de Lunes a Viernes de 8 a 3, y Sábados de 8 a 2, yo informé inmediatamente de que por motivos religiosos en Sábados no podía trabajar, y ese día se me dijo que podía trabajar por las tardes y así compensar los Sábados que no acudiera, estuve de acuerdo con ello, al día siguiente me dijeron que lo que me habían dicho no podía ser, y que los Sábados que no acudiera a trabajar se me descontarían del jornal, sino había otro forma de hacerlo, también estuve de acuerdo con esas condiciones, pero al finalizar el trabajo el tercer día, se me llamó y se me dijo que se todo lo dicho nada, que o bien tenía que ir a trabajar en Sábado, o bien no tenía que volver a trabajar ningún día más.
Anteayer saqué los últimos 50 euros que me quedaban en el banco.
Desde que volví a creer en Dios, lo que no creo en absoluto es en el "azar", ni en la buena o mala suerte. Yo le he pedido a Dios ayuda para hacer su voluntad, y ahora estoy seguro que desde el principio se me había dado, desde el principio se me había indicado el camino a seguir, pero yo no lo veía o por mi propia comodidad o egoismo, no lo quería ver.
Varias veces he comentado en este foro, lo que yo creo que es el camino correcto.
(Mateo 19:21)
21 --Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Luego ven y sígueme.
Así como Jonás, al que se le encomendó una misión y no quería hacerla, y se le forzó a realizarla, así me encuentro yo ahora.
En un pueblo de 40.000 habitantes, donde resido hace casi 30 años, teniendo 10 años de experiencia como fontanero y 14 años de experiencia como programador de ordenadores, el que ahora no encuentre trabajo ni de peón, incluso negandome a trabajar los Sábados, para mi, no es casualidad, ni mala suerte, sino la voluntad de Dios.
Mis últimas posesiones (equipo fotográfico, ordenador y ciclomotor) no los he vendido, sino que los he regalado, mañana Lunes, cogeré la mochila, el saco de dormir y la tienda de campaña, y saldré a los caminos de Dios, en los dos sentidos lo digo, no sé ni de que viviré, ni sé a ciencia cierta hacia donde iré, no sé si habrá Internet, ni sé si podré darme el lujo de pagarmelo, por eso me despido.
Mis sentimientos en estos momentos, son de ilusión y miedo, y también diría:
(Luke 22:42)
"Padre, si quieres, no me hagas beber este trago amargo;* pero no se cumpla mi voluntad, sino la tuya."
Si a alguien he ofendido en algo, le pido perdón, pues nunca ha sido mi intención hacerlo así, he dicho cosas fuertes, pero no con ánimo de ofender, sino de causar un "shock" para hacer remover las conciencias, y hacer meditar sobre lo que yo escribía, pero tampoco ha funcionado, y por el contrario puede que haya ofendido sin tener esa intención.
Que Dios bendiga a los hombres de buena voluntad.
Hoy me despido de vosotros, no sé si definitivamente, o solo temporalmente, pero creo que en caso de ser temporal, será una temporada muy larga.
En otro foro donde había anunciado ya mi despedida, han creido que era por el como se me trataba en el, pero eso no tiene nada que ver con mi despedida, ni en aquel, ni en este, ni en cualquier otro foro de los que participo.
Me marcho del foro, pero no me marcho con ningún resentimiento, es más, como alguna vez he comentado, he aprendido mucho en este foro, durante mi participación en el, he ido cambiando, he ido creciendo espiritualmente, no hacia la dirección que la mayoría de vosotros, hubiera querido, pero no ha sido ningún tiempo perdido, he aprendido de lo bueno, y he aprendido de lo malo, he aprendido lo que hay que hacer y decir, y he aprendido lo que no hay que hacer y decir, todavía me queda mucho que aprender, pero lo tendré que aprender en otro sitio y de otra forma.
Yo fui ateo desde los 14 años, hasta los 40, al par de meses de haber vuelto a creer en Dios, perdí mi trabajo como programador en Junio del 1999 (una bendición de Dios, contrariamente a lo que se pueda pensar) desde la muerte de mi madre, y por diferencias con mi progenitor, yo vivia en una casa alquilada, durante casi dos años cobré el subsidio de desempleo, y tuve tiempo de leerme un par de Biblias, la de los TJ, y una Católica, y empecé a participar en foros de religión.
A los pocos días de haber acabado de cobrar el subsidio de desempleo, encontre un trabajo por fin, como peón de carpintero, en el fue la primera vez que se me planteó el trabajar en Sábado, y que yo no acepté, cuando el contrato de tres meses se acabó, no se me renovó el contrato, pues cierto es que la empresa pasó una mala época.
Encontré otro trabajo como fontanero, en el cual yo tenía más de 10 años de experiencia, pero en vez de ser la fontanería casera, se trataba de fontanería industrial, durante ese tiempo que trabajé en esa empresa, no se me dijo nada de trabajar en Sábado, a pesar de que por un compañero, yo sabía que habían épocas, donde también se trabaja en ese día, pero ese trabajo resultaba tan desagradable para mi, que además de trabajar nueve horas todos los días, cuando dormía, me pasaba toda la noche soñando que trabajaba en las labores más desagradables de este trabajo, despertandome por las mañanas, más cansado de lo que me había acostado.
Cuando el contrato se acababa, hablé con el propietario de la empresa, y le expresé mi deseo de no continuar en la empresa, despidiendome yo de este trabajo, pues mi salud "mental" estaba en peligro.
Volví a pedir trabajo en la carpintería, pues la mala época ya había pasado, y a pesar de estar contentos con mi trabajo, no se me volvió a dar trabajo, por negarme a trabajar en Sábado.
Eso fue en dicienbre del 2001, y desde entonces no tengo ningún trabajo. Mi progenitor enfermó, y acudí a cuidarlo, al poco dejé la casa alquilada, pues ya no podía pagarla, y regrese a vivir en casa de mi progenitor.
Cuando era ateo y trabajaba como programador ganaba 170.000 pts. al mes, en los trabajos siguientes cobraba unas 110.000 pts. más las horas extras que hiciera. Hace poco tiempo el ayuntamiento del pueblo solicitó trabajadores a la oficina del paro, y entre ellos fui seleccionado yo, para ayudar en los mantenientos de los jardines del pueblo para cobrar unas 80.000 Pts. al mes (jornal base interprofesional + pagas incluidas) el primer día de nuestro trabajo se nos dió el horario de Lunes a Viernes de 8 a 3, y Sábados de 8 a 2, yo informé inmediatamente de que por motivos religiosos en Sábados no podía trabajar, y ese día se me dijo que podía trabajar por las tardes y así compensar los Sábados que no acudiera, estuve de acuerdo con ello, al día siguiente me dijeron que lo que me habían dicho no podía ser, y que los Sábados que no acudiera a trabajar se me descontarían del jornal, sino había otro forma de hacerlo, también estuve de acuerdo con esas condiciones, pero al finalizar el trabajo el tercer día, se me llamó y se me dijo que se todo lo dicho nada, que o bien tenía que ir a trabajar en Sábado, o bien no tenía que volver a trabajar ningún día más.
Anteayer saqué los últimos 50 euros que me quedaban en el banco.
Desde que volví a creer en Dios, lo que no creo en absoluto es en el "azar", ni en la buena o mala suerte. Yo le he pedido a Dios ayuda para hacer su voluntad, y ahora estoy seguro que desde el principio se me había dado, desde el principio se me había indicado el camino a seguir, pero yo no lo veía o por mi propia comodidad o egoismo, no lo quería ver.
Varias veces he comentado en este foro, lo que yo creo que es el camino correcto.
(Mateo 19:21)
21 --Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes y dáselo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo. Luego ven y sígueme.
Así como Jonás, al que se le encomendó una misión y no quería hacerla, y se le forzó a realizarla, así me encuentro yo ahora.
En un pueblo de 40.000 habitantes, donde resido hace casi 30 años, teniendo 10 años de experiencia como fontanero y 14 años de experiencia como programador de ordenadores, el que ahora no encuentre trabajo ni de peón, incluso negandome a trabajar los Sábados, para mi, no es casualidad, ni mala suerte, sino la voluntad de Dios.
Mis últimas posesiones (equipo fotográfico, ordenador y ciclomotor) no los he vendido, sino que los he regalado, mañana Lunes, cogeré la mochila, el saco de dormir y la tienda de campaña, y saldré a los caminos de Dios, en los dos sentidos lo digo, no sé ni de que viviré, ni sé a ciencia cierta hacia donde iré, no sé si habrá Internet, ni sé si podré darme el lujo de pagarmelo, por eso me despido.
Mis sentimientos en estos momentos, son de ilusión y miedo, y también diría:
(Luke 22:42)
"Padre, si quieres, no me hagas beber este trago amargo;* pero no se cumpla mi voluntad, sino la tuya."
Si a alguien he ofendido en algo, le pido perdón, pues nunca ha sido mi intención hacerlo así, he dicho cosas fuertes, pero no con ánimo de ofender, sino de causar un "shock" para hacer remover las conciencias, y hacer meditar sobre lo que yo escribía, pero tampoco ha funcionado, y por el contrario puede que haya ofendido sin tener esa intención.
Que Dios bendiga a los hombres de buena voluntad.