
UNA VELA ANTE EL INFINITO
Hace años, en un pequeño pueblo latinoamericano, un joven de apenas 23 años entró a una funeraria y pidió ver los ataúdes. No era morbo ni desesperación. Quería recordar, cada día, que es mortal, que el tiempo no regresa. Colocó un ataúd en su habitación como recordatorio constante: ¡Memento Mori! – Recuerda que morirás.Otro creyente, anciano, encendía una vela frente al espejo en noches de oscuridad, multiplicando la luz en el reflejo. Decía: “Así es la vida: breve y frágil como una llama, pero multiplicada en lo eterno, ilumina más allá de sí misma.”
El propósito no es deprimir, sino sacudirnos: ¡Despierta! Vive con urgencia, propósito, reverencia y pasión. Que tu vida refleje la eternidad, no la rutina del día a día.
DESARROLLO BÍBLICO PROFUNDO
La Biblia grita su verdad ante nosotros: “¿Qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece” (Santiago 4:14).No estamos aquí para construir imperios, sino para temer a Dios y guardar sus mandamientos.
El apóstol Pablo exhorta: “Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos, y te alumbrará Cristo” (Efesios 5:14).
La Escritura advierte: “Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí” (Isaías 29:13).
La iglesia contemporánea ha cambiado el “Memento Mori” por “Vive tu verdad”. Púlpitos llenos de mensajes motivacionales


Jesús lo declara sin rodeos: “¿De qué le sirve al hombre ganar el mundo entero, si pierde su alma?” (Marcos 8:36).
Eclesiastés 7:2 lo repite: “Mejor es ir a la casa del luto que a la casa del banquete; porque aquello es el fin de todos los hombres, y el que vive lo pondrá en su corazón.”
El remedio es claro y radical: “Si me amáis, guardad mis mandamientos” (Juan 14:15).
El orgullo, la tibieza y la autosuficiencia anestesian la iglesia. Cristo confronta: “Tú dices: Yo soy rico… y no sabes que eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo” (Apocalipsis 3:17).
Imagina un reloj de arena. Cada grano que cae es un segundo acercándote al fondo, y ninguno puede detenerlo. ¿Ignoras el paso del tiempo, o vives con urgencia y temor santo a Dios?
En una sala oscura, un hombre entre demonios escucha la agenda del enemigo: “No es urgente.” El diablo no necesita destruirte con pecados evidentes; basta anestesiarte con religión y distracción. ¡Despierta!
Hoy, mientras lees esto, el Espíritu Santo te llama:





Hebreos 9:27 sentencia: “Está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio.”
Apocalipsis 3:2 ordena: “Sé vigilante y afirma las otras cosas que están para morir; porque no he hallado tus obras perfectas delante de Dios.”
Lucas 12:40 exhorta: “Así también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis.”
Apocalipsis 2:4-5 te llama: “Vuelve a tu primer amor… arrepiéntete y haz las primeras obras.”
No hay éxito más grande que terminar la carrera en santidad. No hay victoria más gloriosa que oír: “Bien, buen siervo y fiel…” (Mateo 25:21).
Ahora es tu momento. El reloj


Porque si mueres sin Cristo, lo pierdes todo. Pero si mueres en Él, lo ganas todo.
Solo hay una vida, y pronto pasará…
RECUERDA: ¡Solo lo que se hizo para Cristo durará!
PREGUNTAS CONFRONTADORAS
- ¿Qué cambiaría hoy si supieras que mañana estarás delante del trono de Cristo?
- ¿Estás acumulando tesoros en el cielo, o decorando tu jaula de oro en la tierra?
- ¿Vives para complacer a Dios… o solo buscas que Él bendiga tus propios planes?