Meditaciones del 27 de noviembre

Oración de Alabanza

Bendito sea Tu Nombre,
¡oh Tú que oyes mi plegaria!
Bendito seas Tú mi Señor
que sacaste mi alma de la fosa,
Tú me has mirado desde
las alturas y has humillado mi alma


Bendita sea Tu Benevolencia
que me llevó a Tu Corazón
para salvarme y hacerme libre.

Dios, Tú eres mi salvación,
mis riquezas, mi vista y mi vida.
Tú, que diariamente encantas mi alma
y regocijas mi corazón

con Tu Presencia,
permíteme aprovechar Tu Presencia:
paz, integridad, amor y

un espíritu de perdón;
que cada fibra de mi corazón
proclame con amor Tu Gloria.


Oye mi oración, ahora que soy
Tu huésped de paso en Tu país
y respóndeme.
Amén.

La Verdadera Vida en Dios
29 de mayo de 1995
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