¿Los creyentes con enfermedades mentales tienen conciencia espiritual?

Benar

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25 Mayo 2025
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El ser humano tiene un cerebro donde guarda todo lo que vive a lo largo de su vida; este cerebro es la base de datos y memoria que le permite a ser humano ser inteligente y funcional, y existen distintas enfermedades que atrofian el cerebro y que hacen que muchas personas pierdan la memoria. Para los no creyentes perder la memoria solo es consecuencia de una enfermedad física, no obstante para los creyentes que llegan a perder la memoria o que sufren enfermedades como alzheimer o demencia senil, que pasa aquí, si sabemos que el hombre fue creado a semejanza espiritual, donde evidentemente esa semejanza con Dios es espiritual, donde el cerebro no es la memoria principal del ser humano, porque de ser así el creyente al morir perdería todo su conocimiento, incluido su conocimiento del salvador del mundo, lo cual sabemos que no es así.

Las evidencias bíblicas nos dicen que los espíritus guardan la memoria, ahí tenemos a Samuel cuando vino como espíritu al rey Saul con plena conciencia de lo que estaba pasando, están los espíritus inmundos que Jesús sacó de distintas personas y que conservaban su memoria, y están los ángeles que son seres espirituales que guardan su memoria en su mismo espíritu.

Muchos creyentes y pastores que sirvieron a Dios por muchos años llegan a padecer de estas enfermedades de pérdida de memoria, y para la familia, es como vivir con una persona totalmente desconocida, la pregunta es: si el espíritu humano conserva la memoria en su espíritu, ¿Qué pasa con estas personas creyentes, tienen conciencia espiritual de lo que está pasando en tiempo real aunque no nos demos cuenta o su misma enfermedad mental les hace que no recuerden nada?
 
En su propio mensaje se halla la respuesta.

Las enfermedades corresponden al cuerpo físico, jamás la Escritura enseña un alma enferma de pérdida de memoria, cuando Pedro dice que en breve debe abandonar el cuerpo en 2P.1:14 él estaba consciente a dónde iba.
 
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Las enfermedades corresponden al cuerpo físico, jamás la Escritura enseña un alma enferma de pérdida de memoria, cuando Pedro dice que en breve debe abandonar el cuerpo en 2P.1:14 él estaba consciente a dónde iba.
Pedro no estaba enfermo.

La referencia es, una persona creyente pastor, por ejemplo, que enferma de la pérdida de memoria, y que pasan 2, 3, 10 años en esa condición hasta su muerte, ¿él tuvo conciencia espiritual de lo que pasó en esos 2, 3, 10 años, o cuando muere ese tiempo su memoria fue borrada física y espiritualmente?
 
El ser humano tiene un cerebro donde guarda todo lo que vive a lo largo de su vida; este cerebro es la base de datos y memoria que le permite a ser humano ser inteligente y funcional, y existen distintas enfermedades que atrofian el cerebro y que hacen que muchas personas pierdan la memoria. Para los no creyentes perder la memoria solo es consecuencia de una enfermedad física, no obstante para los creyentes que llegan a perder la memoria o que sufren enfermedades como alzheimer o demencia senil, que pasa aquí, si sabemos que el hombre fue creado a semejanza espiritual, donde evidentemente esa semejanza con Dios es espiritual, donde el cerebro no es la memoria principal del ser humano, porque de ser así el creyente al morir perdería todo su conocimiento, incluido su conocimiento del salvador del mundo, lo cual sabemos que no es así.

Las evidencias bíblicas nos dicen que los espíritus guardan la memoria, ahí tenemos a Samuel cuando vino como espíritu al rey Saul con plena conciencia de lo que estaba pasando, están los espíritus inmundos que Jesús sacó de distintas personas y que conservaban su memoria, y están los ángeles que son seres espirituales que guardan su memoria en su mismo espíritu.

Muchos creyentes y pastores que sirvieron a Dios por muchos años llegan a padecer de estas enfermedades de pérdida de memoria, y para la familia, es como vivir con una persona totalmente desconocida, la pregunta es: si el espíritu humano conserva la memoria en su espíritu, ¿Qué pasa con estas personas creyentes, tienen conciencia espiritual de lo que está pasando en tiempo real aunque no nos demos cuenta o su misma enfermedad mental les hace que no recuerden nada?
TODAS las enfermedades son parte y resultado de la caida del hombre como descendientes de Adan. Eso incluye las enfermedades que afectan la mente.

Los hombres seran juzgados de acuerdo a sus hechos en relacion a la ley de Dios. Aquellos que vivieron en la fe de Cristo permanecen en en rebaño de Dios a la espera de la resurreccion despues de la muerte. Una mente dañada es una mente que no funciona y por tanto no es competente. No hay nada en las escrituras que nos indique que el alma de esa persona peligra al ser afectada por una afliccion mental.

Saludos.
 
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Una mente dañada es una mente que no funciona y por tanto no es competente. No hay nada en las escrituras que nos indique que el alma de esa persona peligra al ser afectada por una afliccion mental.
No estoy hablando de eso. Evidentemente una mente que esta dañada y es creyente, su salvación está asegurada.

Existen testimonios de personas que estuvieron en coma, y que después de meses o años, volvieron a recobrar la conciencia, y esas personas, dan testimonio de que ellos veían cuándo y quiénes los visitaban, incluso declaran sentir el amor que le daban estando en esa condición, es decir, su espíritu estaba plenamente consciente aunque estuviera en coma. Una persona que perdió la memoria no conoce a sus hijos, padres, hermanos, y si es creyente, pues se le olvida lo que un día fue, todo esto por el daño que tiene su cerebro, la pregunta es: su espíritu está guardando la información de lo que pasa en sus alrededores o simplemente ese tiempo es un vacío de información.

Si en este tiempo de enfermedad, una persona de su familia lo maltrata, esa persona tiene conciencia espiritual para declararlo en el juicio de Dios, o simplemente ¿será un vacío de información?
 
No estoy hablando de eso. Evidentemente una mente que esta dañada y es creyente, su salvación está asegurada.

Existen testimonios de personas que estuvieron en coma, y que después de meses o años, volvieron a recobrar la conciencia, y esas personas, dan testimonio de que ellos veían cuándo y quiénes los visitaban, incluso declaran sentir el amor que le daban estando en esa condición, es decir, su espíritu estaba plenamente consciente aunque estuviera en coma. Una persona que perdió la memoria no conoce a sus hijos, padres, hermanos, y si es creyente, pues se le olvida lo que un día fue, todo esto por el daño que tiene su cerebro, la pregunta es: su espíritu está guardando la información de lo que pasa en sus alrededores o simplemente ese tiempo es un vacío de información.

Si en este tiempo de enfermedad, una persona de su familia lo maltrata, esa persona tiene conciencia espiritual para declararlo en el juicio de Dios, o simplemente ¿será un vacío de información?
El Juez del Universo es omniciente y El sabe absolutamente TODO lo que sucede en el universo y cuando llegue el momento todos los hechos de los seres humanos estan disponibles en la mente de Dios. Es lomismo que un bebe que sea maltratado y no tiene memoria ni consciencia de lo mismo. Pero Dios si conoce en detalles y juzgara de acuerdo.

El segundo juicio es el de los incrédulos. Este ocurrirá al final de los tiempos, después del milenio y la rebelión final de Satanás en la tierra. Este juicio de los malvados se llama el juicio del gran trono blanco (Apocalipsis 20:11-15). Este juicio tampoco determina la salvación. Todos los que están en el gran trono blanco son incrédulos que han rechazado a Cristo en vida, y su destino ya está sellado. Apocalipsis 20:12 dice que los incrédulos serán juzgados «según lo que hayan hecho, según está escrito en los libros». Quienes hayan rechazado a Cristo como Señor y Salvador serán juzgados únicamente por sus obras, y ninguna obra humana puede expiar el pecado ni ganar la salvación: «Por las obras de la ley nadie será justificado» (Gálatas 2:16). Todos sus pensamientos, palabras y acciones serán medidos según el estándar perfecto de Dios, y serán hallados faltos. No habrá recompensa para los incrédulos, solo condenación y castigo eternos.

Saludos.
 
El ser humano tiene un cerebro donde guarda todo lo que vive a lo largo de su vida; este cerebro es la base de datos y memoria que le permite a ser humano ser inteligente y funcional, y existen distintas enfermedades que atrofian el cerebro y que hacen que muchas personas pierdan la memoria. Para los no creyentes perder la memoria solo es consecuencia de una enfermedad física, no obstante para los creyentes que llegan a perder la memoria o que sufren enfermedades como alzheimer o demencia senil, que pasa aquí, si sabemos que el hombre fue creado a semejanza espiritual, donde evidentemente esa semejanza con Dios es espiritual, donde el cerebro no es la memoria principal del ser humano, porque de ser así el creyente al morir perdería todo su conocimiento, incluido su conocimiento del salvador del mundo, lo cual sabemos que no es así.

Las evidencias bíblicas nos dicen que los espíritus guardan la memoria, ahí tenemos a Samuel cuando vino como espíritu al rey Saul con plena conciencia de lo que estaba pasando, están los espíritus inmundos que Jesús sacó de distintas personas y que conservaban su memoria, y están los ángeles que son seres espirituales que guardan su memoria en su mismo espíritu.

Muchos creyentes y pastores que sirvieron a Dios por muchos años llegan a padecer de estas enfermedades de pérdida de memoria, y para la familia, es como vivir con una persona totalmente desconocida, la pregunta es: si el espíritu humano conserva la memoria en su espíritu, ¿Qué pasa con estas personas creyentes, tienen conciencia espiritual de lo que está pasando en tiempo real aunque no nos demos cuenta o su misma enfermedad mental les hace que no recuerden nada?
El mejor ejemplo de locura mental y restauración en la Biblia fue el caso del rey Nabucodonosor.

Dios mismo le anunció por sueño y poella interpretación del profeta en Daniel 4 que iba a ser derribado y humillado y andaría como un animalito en el campo comiendo hierba. Con la mugre y el mal olor sobre su cuerpo, sólo bañado por el rocío y su pelo y uñas largas como una bestia.

7 tiempos pasaron sobre Nabucodonosor, 7 años, tiempo en el que no recordaba nada quién era. Hasta el fin de ese tiempo fue que reconoció que Dios gobierna sobre todos y el rey dijo 2 ocasiones: "Mi razón me fue devuelta" en Dn. 4:34 y 36

En el verso 34 testificó:

"Y alcé mis ojos al cielo y bendije al Altísimo, y alabé y glorifiqué al que vive para siempre, cuyo dominio es sempiterno, y su reino por todas las edades"

Y en el verso 36 añadió algo más, luego que le fue devuelta la razón:

"y la majestad de mi reino, mi dignidad y mi grandeza volvieron a mí, y mis gobernadores y mis consejeros me buscaron; y fui restablecido en mi reino, y mayor grandeza me fue añadida"

Lo más probable era que no recordaba quien era en 7 años, pero en su espíritu seguro que si lo sabía, todo lo recordaba y lo que se piensa y sospecha, según es que este hombre se volvió a Dios de todo corazón por el testimonio de sus palabras y la grandeza que le fue devuelta de su reino.


 
No habrá recompensa para los incrédulos, solo condenación y castigo eternos.
Madre del amor hermoso, si antes abro un hilo, antes me encuentro con esa crítica que hice al anti evangelismo de la condenación y castigo eterno apocalípticos ¡simplemente por no creer!
¿Qué clase de amor es ese?

Cuando a Tomás se le dice "bienaventurados los que creen sin ver", no condena a los que no creen sin ver, sino que ensalza la fe de los que aún incapaces de ver, creen.
Esto es muy profundo, no se nos exige creer en dogmas, religiones o ídolos, sino en lo que representa Cristo y su Palabra.

Tal como afirmas la fe, estás en tesis parecidas a los creyentes del Islam en ramas que interpretan el Corán de mala manera, tratando como impíos incluso a creyentes en Dios. ¿Qué significa creer?, ¿en qué debemos creer?

Prefiero plantear preguntas y que cada cual reflexione.
 
TODAS las enfermedades son parte y resultado de la caida del hombre como descendientes de Adan. Eso incluye las enfermedades que afectan la mente.
Esto es una falacia de la fe, con la que no concuerdo en nada, y esto precisamente me "expulsa" del catolicismo, pues me alineo con el Islam en el sentido de que NO creo en el pecado original, si en la desobediencia de origen, es decir, de esos primeros "homos" que siendo conscientes del mal que ejercían, decidieron seguir haciéndolo por intereses egoístas, ¡ahí si que vino el pecado al mundo!

Puedo alinearme con este dogma por otras vías, aceptando por ejemplo un "pecado estructural", de hecho cada día se tiende a racionalizar mejor lo que pervierte la armonía de este mundo, que es la falta de amor (la gran revelación de Jesucristo) en las acciones, en los actos, en los pensamientos.
Pero niego dos aspectos, uno es esencial: nadie nace en pecado, somos "contenedores" vacíos, que enseguida nos llenamos del entorno, y ahí si nace ese pecado estructural, por una vía u otra terminamos en una clase social, un entorno social, un entorno ideológico y un entorno cultural, repleto de errores, imperfecciones y egoísmos, que pueden naturalmente conducirnos a pecar, pero ese mismo entorno también nos dota de herramientas salvíficas y liberadoras, o al menos lo procura mediante la educación, la sana religión, la ética y esos principios que todos desde el corazón comprendemos, porque a veces nuestras acciones causan daño, hemos por tanto de tener empatía para ir poco a poco salvando y armonizando nuestras acciones para/con los demás (principios puramente evangélicos).

Puede que mis palabras hagan daño, sin embargo no son mis palabras las que dañan, sino las concepciones que otro tiene que pueden verse alteradas o amenazadas por mis palabras, eso nunca es pecado, mis concepciones expuestas con educación y respeto jamás serán pecado, de ahí nace la libre expresión.

Las enfermedades, incluidas las mentales, son fruto de la imperfección de un mundo sujeto al esclavismo espacio-temporal, la finitud en definitiva, porque se sujetan a reglas materiales (ley física) y por definición, esa ley intrascendente es consecuencia de materializar, en ese preciso momento entran en juego las reglas neutras, amorales y no arbitrarias que regulan de manera precisa nuestro devenir. En esa imperfección pueden producirse mutaciones o accidentes que causan errores (¡no son pecado!) en el ADN y trastocan la armonía natural.

Por eso la naturaleza busca perfeccionarse a sí misma, nosotros nos liberamos del "darwinismo" trascendiendo las leyes físicas y vamos a las naturales que incorporan además la ética, la moral (cambiante) y un principio liberador que es la gracia de Dios, esta impulsa (si se actúa con bondad) grandes descubrimientos que permiten poner remedios a las enfermedades.