Los 7 Juicios Finales
Existe cierta controversia interpretativa acerca de los juicios de Dios, unos dicen que son 21 juicios en total empezando por los siete sellos, siete trompetas y siete copas. Pero observo que de los siete sellos, el primero y el quinto en sí, no traen juicios, aunque el séptimo sello trae inclusive los últimos 7 juicios. Es decir, las siete trompetas y aun las siete copas de la ira.
Veo en los juicios de las Trompetas y las Copas de la ira una semejanza y una sincronización sin igual, tal que me atrevo a decir que “son los mismos” y únicos 7 juicios finales de Dios.
Juan vio los 7 juicios finales desde dos perspectivas o ángulos diferentes, uno desde el momento inicial de los juicios, y otro desde el momento total y conclusivo, cuando el juicio ha alcanzado su máximo punto de desarrollo.
Algunos intérpretes creen que los juicios de Dios afectarán solo el área del conflicto, ya que cuando Daniel o Juan hablan de “toda la tierra” se refieren a “toda la tierra hasta ese entonces conocida”.
Yo creo que es posible que los juicios se concentren en el área del conflicto, pero el mundo entero será afectado por los juicios que Dios derramará en los países de los mayores enemigos de Israel.
“Acontecerá que en aquel día, que trillará Jehová desde el río Eufrates hasta el torrente de Egipto, y vosotros los hijos de Israel seréis reunidos uno a uno. (Isaías 28:12).
Además, todos los países del mundo se encontrarán peleando contra la Iglesia de Jesús que esté sobre la tierra y contra Israel en el valle de Armagedón, lo que hace culpable de juicio al planeta entero.
Mientras la media hora de silencio continuaba Juan vio a los “siete ángeles” listos para terminar con el silencio:
“ Y los siete ángeles que tenían las siete trompetas se dispusieron a tocarlas”. (Apocalipsis 8:6).
Estos mismos 7 ángeles aparecen también en el Templo de Dios recibiendo de uno de los querubines las 7 copas de la ira, el Templo se llena de la gloria de Dios, y Dios saca a todos de su presencia para estar solo mientras los juicios se cumplen:
“ Vi en el cielo otra señal, grande y admirable: siete ángeles que tenían las siete plagas postreras; porque en ellas se consumaba la ira de Dios.”
“Y uno de los cuatro seres vivientes dio a los siete ángeles siete copas de oro, llenas de la ira de Dios,...”
“Y el templo se llenó de humo por la gloria de Dios, y por su poder; y nadie podía entrar en el templo hasta que se hubiesen cumplido las siete plagas de los siete ángeles”. (Apocalipsis 8:1,7,8).
Lo más terrible para el mundo está por llegar, los cataclismos cósmicos más destructivos están por descender al planeta, los juicios iniciales que trajeron los sellos no son comparables con los 7 juicios finales que vienen.
Un peligro latente en el espacio
Aunque existe demasiado escepticismo en la mentalidad del hombre de la era espacial, gran parte de ellos finalmente terminarán aceptando el inmenso caudal de conocimiento que Dios volcó en la Biblia por medio de las revelaciones proféticas. Pero el tiempo en que miles de escépticos cambien sus puntos de vista no será como el de hoy, será el tiempo más difícil para la humanidad donde los fuertes y valientes se volverán débiles como una frágil mujer, y los sabios vendrán a ser como el ignorante y falto de conocimiento, sin saber que pensar, ni que hacer.
Fue en el 19 de marzo de 1996 que los científicos empezaron a tener serias preocupaciones por los cuerpos celestes que pasan cerca de nuestra casa terrestre. Descubrieron un asteroide de 400 metros de diámetro a tan solo una semana de su máximo acercamiento con la tierra, si ese asteroide viniera en dirección a la tierra ¿qué se podría hacer para evitar el impacto con tan solo siete días por delante?, o ¿podría saberse con certeza en que lugar caería el asteroide para poder evacuar la zona a tiempo en tan solo siete días?.
Las preguntas saltaron por miles en las mentes de los sorprendidos astrónomos que sintieron la fragilidad del ser humano y de la tierra ante una amenaza de ese tipo.
Los asteroides son cuerpos pétreos y metálicos que vagan por el espacio, sus tamaños van desde 1000 Km de diámetro hasta pequeños fragmentos de tan solo unos cuantos metros. Existen los meteoros su nombre en griego significa “señales cósmicas”, sus proporciones son pequeñas y una buena parte de ellos se desintegran por la fricción que se produce al entrar en contacto con el aire en la atmósfera, el cuerpo se calienta alcanzando altas temperaturas que lo destruyen antes que tenga contacto con la superficie de la tierra.
Según cálculos de los científicos un asteroide de 1 Km de diámetro al estrellarse con la tierra generaría la potencia de un millón de bombas atómicas como la que fue lanzada en Hiroshima.
Se calcula que la población de asteroides de más de 1 Km de diámetro oscila de 500 a 1000 asteroides, unos 300 de ellos están cerca de la tierra. Las consecuencias de un choque con uno de estos viajeros del espacio podrían ocasionar en la tierra una catástrofe global.
Si un asteroide de 1.5 Km de diámetro colisiona con la tierra, el lugar del impacto sería envuelto en una inmensa bola de fuego que generaría temperaturas similares a la del sol, destruiría gran parte del ya mermado ozono. El ozono es el gas que sirve como filtro para bloquear la radiación solar, y evita el recalentamiento de la tierra.
Sin la cantidad de ozono necesaria, las plantas se secan y los seres humanos al igual que los animales expuestos a los rayos ultravioleta del sol recibirían cantidades excesivas de radiación que ocasionarían, desde cáncer en la piel hasta la muerte.
Desataría un incendio de proporciones inimaginables en los bosques (si cae en tierra), y tsunamis (olas) gigantes si caen en el mar que ocasionarían inundaciones a lo largo y ancho de las costas a miles de Km del impacto, las embarcaciones sucumbirían ante el embate de la fuerza de las olas y las regiones costeras serían barridas literalmente.
Una nube de polvo y cenizas ocasionada por el impacto y los gigantescos incendios se dispersaría gradualmente, ayudada por las corrientes de aire hasta cubrir totalmente el planeta, las altas temperaturas desaparecen por la falta de luz solar y en cosa de semanas la tierra entra en lo que se conoce como “efecto invernadero”.
Las bajas temperaturas pasarán el punto de congelación y se producirían enormes tormentas invernales en todo el planeta, grandes nevadas en regiones donde nunca antes nevó y granizadas gigantes por doquier, ¿ficción de una mente religiosa con síndrome apocalíptico?. No, palabras y cálculos de estudios científicos. ¿Lo cree?
Si lo dice un pastor o un evangelista, tiene poco efecto sobre la mente de un intelectual, pero si lo dice un científico tiene un valor incalculable. Y si lo dice Dios ¿cómo lo toma Ud.? Permítame comunicarle esto, antes que los científicos de los años 1990’s hicieran públicos sus estudios y cálculos, ya Dios lo había anunciado hace unos 2700 años a los profetas.
¿Porqué no fue creído antes, sino hoy?, ¿Tendrá el hombre más conocimiento que Dios?, el día del desengaño para los “súper sabios” se acerca mi amado lector.
La Biblia dice:
“y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.
Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria”. (Mateo 24:29,30).
“y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre;
y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento.
Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla.” (Apocalipsis 6:12,13,14).
“Y todo el ejercito de los cielos se disolverá, y se enrollaran los cielos como un libro; y caerá todo su ejercito, como cae la hoja de la parra, y como se cae la de la higuera”. (Isaías 34:4).
Dios hablaba a Juan en un lenguaje que pudiera comprender, hoy sabemos que una estrella no puede “caer a la tierra”, si el Apocalipsis hubiera sido revelado en este tiempo se hubiera escrito; “...y los asteroides caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas...” “y los asteroides del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera...”
Existe cierta controversia interpretativa acerca de los juicios de Dios, unos dicen que son 21 juicios en total empezando por los siete sellos, siete trompetas y siete copas. Pero observo que de los siete sellos, el primero y el quinto en sí, no traen juicios, aunque el séptimo sello trae inclusive los últimos 7 juicios. Es decir, las siete trompetas y aun las siete copas de la ira.
Veo en los juicios de las Trompetas y las Copas de la ira una semejanza y una sincronización sin igual, tal que me atrevo a decir que “son los mismos” y únicos 7 juicios finales de Dios.
Juan vio los 7 juicios finales desde dos perspectivas o ángulos diferentes, uno desde el momento inicial de los juicios, y otro desde el momento total y conclusivo, cuando el juicio ha alcanzado su máximo punto de desarrollo.
Algunos intérpretes creen que los juicios de Dios afectarán solo el área del conflicto, ya que cuando Daniel o Juan hablan de “toda la tierra” se refieren a “toda la tierra hasta ese entonces conocida”.
Yo creo que es posible que los juicios se concentren en el área del conflicto, pero el mundo entero será afectado por los juicios que Dios derramará en los países de los mayores enemigos de Israel.
“Acontecerá que en aquel día, que trillará Jehová desde el río Eufrates hasta el torrente de Egipto, y vosotros los hijos de Israel seréis reunidos uno a uno. (Isaías 28:12).
Además, todos los países del mundo se encontrarán peleando contra la Iglesia de Jesús que esté sobre la tierra y contra Israel en el valle de Armagedón, lo que hace culpable de juicio al planeta entero.
Mientras la media hora de silencio continuaba Juan vio a los “siete ángeles” listos para terminar con el silencio:
“ Y los siete ángeles que tenían las siete trompetas se dispusieron a tocarlas”. (Apocalipsis 8:6).
Estos mismos 7 ángeles aparecen también en el Templo de Dios recibiendo de uno de los querubines las 7 copas de la ira, el Templo se llena de la gloria de Dios, y Dios saca a todos de su presencia para estar solo mientras los juicios se cumplen:
“ Vi en el cielo otra señal, grande y admirable: siete ángeles que tenían las siete plagas postreras; porque en ellas se consumaba la ira de Dios.”
“Y uno de los cuatro seres vivientes dio a los siete ángeles siete copas de oro, llenas de la ira de Dios,...”
“Y el templo se llenó de humo por la gloria de Dios, y por su poder; y nadie podía entrar en el templo hasta que se hubiesen cumplido las siete plagas de los siete ángeles”. (Apocalipsis 8:1,7,8).
Lo más terrible para el mundo está por llegar, los cataclismos cósmicos más destructivos están por descender al planeta, los juicios iniciales que trajeron los sellos no son comparables con los 7 juicios finales que vienen.
Un peligro latente en el espacio
Aunque existe demasiado escepticismo en la mentalidad del hombre de la era espacial, gran parte de ellos finalmente terminarán aceptando el inmenso caudal de conocimiento que Dios volcó en la Biblia por medio de las revelaciones proféticas. Pero el tiempo en que miles de escépticos cambien sus puntos de vista no será como el de hoy, será el tiempo más difícil para la humanidad donde los fuertes y valientes se volverán débiles como una frágil mujer, y los sabios vendrán a ser como el ignorante y falto de conocimiento, sin saber que pensar, ni que hacer.
Fue en el 19 de marzo de 1996 que los científicos empezaron a tener serias preocupaciones por los cuerpos celestes que pasan cerca de nuestra casa terrestre. Descubrieron un asteroide de 400 metros de diámetro a tan solo una semana de su máximo acercamiento con la tierra, si ese asteroide viniera en dirección a la tierra ¿qué se podría hacer para evitar el impacto con tan solo siete días por delante?, o ¿podría saberse con certeza en que lugar caería el asteroide para poder evacuar la zona a tiempo en tan solo siete días?.
Las preguntas saltaron por miles en las mentes de los sorprendidos astrónomos que sintieron la fragilidad del ser humano y de la tierra ante una amenaza de ese tipo.
Los asteroides son cuerpos pétreos y metálicos que vagan por el espacio, sus tamaños van desde 1000 Km de diámetro hasta pequeños fragmentos de tan solo unos cuantos metros. Existen los meteoros su nombre en griego significa “señales cósmicas”, sus proporciones son pequeñas y una buena parte de ellos se desintegran por la fricción que se produce al entrar en contacto con el aire en la atmósfera, el cuerpo se calienta alcanzando altas temperaturas que lo destruyen antes que tenga contacto con la superficie de la tierra.
Según cálculos de los científicos un asteroide de 1 Km de diámetro al estrellarse con la tierra generaría la potencia de un millón de bombas atómicas como la que fue lanzada en Hiroshima.
Se calcula que la población de asteroides de más de 1 Km de diámetro oscila de 500 a 1000 asteroides, unos 300 de ellos están cerca de la tierra. Las consecuencias de un choque con uno de estos viajeros del espacio podrían ocasionar en la tierra una catástrofe global.
Si un asteroide de 1.5 Km de diámetro colisiona con la tierra, el lugar del impacto sería envuelto en una inmensa bola de fuego que generaría temperaturas similares a la del sol, destruiría gran parte del ya mermado ozono. El ozono es el gas que sirve como filtro para bloquear la radiación solar, y evita el recalentamiento de la tierra.
Sin la cantidad de ozono necesaria, las plantas se secan y los seres humanos al igual que los animales expuestos a los rayos ultravioleta del sol recibirían cantidades excesivas de radiación que ocasionarían, desde cáncer en la piel hasta la muerte.
Desataría un incendio de proporciones inimaginables en los bosques (si cae en tierra), y tsunamis (olas) gigantes si caen en el mar que ocasionarían inundaciones a lo largo y ancho de las costas a miles de Km del impacto, las embarcaciones sucumbirían ante el embate de la fuerza de las olas y las regiones costeras serían barridas literalmente.
Una nube de polvo y cenizas ocasionada por el impacto y los gigantescos incendios se dispersaría gradualmente, ayudada por las corrientes de aire hasta cubrir totalmente el planeta, las altas temperaturas desaparecen por la falta de luz solar y en cosa de semanas la tierra entra en lo que se conoce como “efecto invernadero”.
Las bajas temperaturas pasarán el punto de congelación y se producirían enormes tormentas invernales en todo el planeta, grandes nevadas en regiones donde nunca antes nevó y granizadas gigantes por doquier, ¿ficción de una mente religiosa con síndrome apocalíptico?. No, palabras y cálculos de estudios científicos. ¿Lo cree?
Si lo dice un pastor o un evangelista, tiene poco efecto sobre la mente de un intelectual, pero si lo dice un científico tiene un valor incalculable. Y si lo dice Dios ¿cómo lo toma Ud.? Permítame comunicarle esto, antes que los científicos de los años 1990’s hicieran públicos sus estudios y cálculos, ya Dios lo había anunciado hace unos 2700 años a los profetas.
¿Porqué no fue creído antes, sino hoy?, ¿Tendrá el hombre más conocimiento que Dios?, el día del desengaño para los “súper sabios” se acerca mi amado lector.
La Biblia dice:
“y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.
Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria”. (Mateo 24:29,30).
“y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre;
y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento.
Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla.” (Apocalipsis 6:12,13,14).
“Y todo el ejercito de los cielos se disolverá, y se enrollaran los cielos como un libro; y caerá todo su ejercito, como cae la hoja de la parra, y como se cae la de la higuera”. (Isaías 34:4).
Dios hablaba a Juan en un lenguaje que pudiera comprender, hoy sabemos que una estrella no puede “caer a la tierra”, si el Apocalipsis hubiera sido revelado en este tiempo se hubiera escrito; “...y los asteroides caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas...” “y los asteroides del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera...”