Pregunto: ¿Algún forista no sigue estas líneas hoy en día? ¿Por qué?
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PRIMERA APOLOGÍA CRISTIANA.
CARTA DE JUSTINO AL EMPERADOR (año 155)
"Al emperador Antonino Pío y a los hijos adoptivos Marco Aurelio*
y Lucio Vero, al senado y al pueblo romano dirijo esta alocución y súplica
en defensa de los hombres de toda estirpe, injustamente odiados y perseguidos".
A nadie le es lícito participar en la Eucaristía, si no cree que son
verdad las cosas que enseñamos y no se ha purificado en aquel baño que
da la remisión de los pecados y la regeneración, y no vive como Cristo
nos enseñó.
Porque no tomamos estos alimentos como si fueran un pan común o una
bebida ordinaria, sino que así como Cristo, nuestro salvador, se hizo
carne y sangre a causa de nuestra salvación, de la misma manera hemos
aprendido que el alimento sobre el que fue recitada la acción de
gracias, que contiene las palabras de Jesús y con que se alimenta y
transforma nuestra sangre y nuestra carne, es precisamente la carne y la
sangre de aquel mismo Jesús que se encarnó.
Los apóstoles, en efecto, en sus tratados llamados Evangelios, nos
cuentan que así les fue mandado, cuando Jesús, tomando pan y dando
gracias, dijo: "Haced esto en conmemoración mía. Esto es mi cuerpo". Y
luego, tomando del mismo modo en sus manos el cáliz, dio gracias y dijo:
"Esto es mi sangre", dándoselo a ellos solos. Desde entonces seguimos
recordándonos unos a otros estas cosas. Y los que tenemos bienes
acudimos en ayuda de otros que no los tienen y permanecemos unidos. Y
siempre que presentamos nuestras ofrendas alabamos al Creador de todo
por medio de su Hijo Jesucristo y del Espíritu Santo.
El día que se llama día del sol tiene lugar la reunión en un mismo
sitio de todos los que habitan en la ciudad o en el campo.
Se leen las memorias de los Apóstoles y los escritos de los Profetas.
Cuando el lector ha terminado, el que preside toma la palabra para
incitar y exhortar a la imitación de tan bellas cosas [ésta es la parte de la misa que hoy conocemos como Liturgia de la Palabra].
Luego nos levantamos y oramos por nosotros... y por todos los demás
dondequiera que estén, a fin de que seamos hallados justos en nuestra
vida y nuestras acciones y seamos fieles a los mandamientos para
alcanzar la salvación eterna [la actual Oración universal de los fieles].
Luego se lleva al que preside pan y una copa con vino y agua
mezclados [alusión a la preparación de la Presentación de las Ofrendas].
El que preside los toma y eleva alabanzas y gloria al Padre del
universo, por el nombre del Hijo y del Espíritu Santo, y da gracias
largamente porque hayamos sido juzgados dignos de estos dones
[se trata de la parte central de la Liturgia de la Eucaristía, en cuyo núcleo central está la Consagración, momento que Justino -al contrario que Pablo en 1 Cor 11- omite por razones obvias].
Cuando el que preside ha hecho la acción de gracias y el pueblo ha
respondido "Amén", los que entre nosotros se llaman diáconos distribuyen
a todos los que están presentes el pan y el vino "eucaristizados"
[ni que decir tiene que se refiere a la Comunión].
Ver Hechos (2,42) y 1ºy 2º cartaalosCorintios, entre otros textos.
Bendiciones.
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PRIMERA APOLOGÍA CRISTIANA.
CARTA DE JUSTINO AL EMPERADOR (año 155)
"Al emperador Antonino Pío y a los hijos adoptivos Marco Aurelio*
y Lucio Vero, al senado y al pueblo romano dirijo esta alocución y súplica
en defensa de los hombres de toda estirpe, injustamente odiados y perseguidos".
A nadie le es lícito participar en la Eucaristía, si no cree que son
verdad las cosas que enseñamos y no se ha purificado en aquel baño que
da la remisión de los pecados y la regeneración, y no vive como Cristo
nos enseñó.
Porque no tomamos estos alimentos como si fueran un pan común o una
bebida ordinaria, sino que así como Cristo, nuestro salvador, se hizo
carne y sangre a causa de nuestra salvación, de la misma manera hemos
aprendido que el alimento sobre el que fue recitada la acción de
gracias, que contiene las palabras de Jesús y con que se alimenta y
transforma nuestra sangre y nuestra carne, es precisamente la carne y la
sangre de aquel mismo Jesús que se encarnó.
Los apóstoles, en efecto, en sus tratados llamados Evangelios, nos
cuentan que así les fue mandado, cuando Jesús, tomando pan y dando
gracias, dijo: "Haced esto en conmemoración mía. Esto es mi cuerpo". Y
luego, tomando del mismo modo en sus manos el cáliz, dio gracias y dijo:
"Esto es mi sangre", dándoselo a ellos solos. Desde entonces seguimos
recordándonos unos a otros estas cosas. Y los que tenemos bienes
acudimos en ayuda de otros que no los tienen y permanecemos unidos. Y
siempre que presentamos nuestras ofrendas alabamos al Creador de todo
por medio de su Hijo Jesucristo y del Espíritu Santo.
El día que se llama día del sol tiene lugar la reunión en un mismo
sitio de todos los que habitan en la ciudad o en el campo.
Se leen las memorias de los Apóstoles y los escritos de los Profetas.
Cuando el lector ha terminado, el que preside toma la palabra para
incitar y exhortar a la imitación de tan bellas cosas [ésta es la parte de la misa que hoy conocemos como Liturgia de la Palabra].
Luego nos levantamos y oramos por nosotros... y por todos los demás
dondequiera que estén, a fin de que seamos hallados justos en nuestra
vida y nuestras acciones y seamos fieles a los mandamientos para
alcanzar la salvación eterna [la actual Oración universal de los fieles].
Luego se lleva al que preside pan y una copa con vino y agua
mezclados [alusión a la preparación de la Presentación de las Ofrendas].
El que preside los toma y eleva alabanzas y gloria al Padre del
universo, por el nombre del Hijo y del Espíritu Santo, y da gracias
largamente porque hayamos sido juzgados dignos de estos dones
[se trata de la parte central de la Liturgia de la Eucaristía, en cuyo núcleo central está la Consagración, momento que Justino -al contrario que Pablo en 1 Cor 11- omite por razones obvias].
Cuando el que preside ha hecho la acción de gracias y el pueblo ha
respondido "Amén", los que entre nosotros se llaman diáconos distribuyen
a todos los que están presentes el pan y el vino "eucaristizados"
[ni que decir tiene que se refiere a la Comunión].
Ver Hechos (2,42) y 1ºy 2º cartaalosCorintios, entre otros textos.
Bendiciones.