La vida no es exclusiva de nuestro Planeta
- Autor mapzero
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Lo que tantas veces he dicho de que el ser humano es sumamente antropocéntrico, a ver si dejamos de ser egoístas y permitimos a Dios ser Dios, sin limitarle a nuestros tiempos, espacios o limitaciones.
Dios (sus principios creadores o Verbo) pueden haber creado infinitos mundos habitables, infinitas inteligencias, infinitas formas, infinitas libertades, en consecuencia habrá infinitos seres inteligentes construyendo paz y amor, e infinitos seres inteligentes fomentando guerra y destrucción.
Dejemos al Infinito serlo, y seamos agradecidos de que lo Infinito a veces nos abrace como un Niño que nos respeta y complaciente espera a que le descubramos.
Dios (sus principios creadores o Verbo) pueden haber creado infinitos mundos habitables, infinitas inteligencias, infinitas formas, infinitas libertades, en consecuencia habrá infinitos seres inteligentes construyendo paz y amor, e infinitos seres inteligentes fomentando guerra y destrucción.
Dejemos al Infinito serlo, y seamos agradecidos de que lo Infinito a veces nos abrace como un Niño que nos respeta y complaciente espera a que le descubramos.
Dios nunca fue el problema, los religiosos siempre lo fueron, se creyeron duenios de la verdad, y duenios de Dios! Incendiaron la biblioteca de Alejandria, y dijeron "un libro lo es todo, y fuera de el no hay nada mas", y también dijeron "una religión es la única verdad, y lo es todo", también dijeron "cualquier enemigo es el anticristo", pero nunca pensaron si ellos eran el anticristo! No estaban de parte de Dios, querían someter a Dios, no eran creyentes, sino incrédulos, y así persiguieron a los primeros cristianos, como luego persiguieron a otros cristianos cuando ya eran cristianos! Pero no hay mas ciego que el que no quiera ver, lo dijo Cristo, y ellos leen a Cristo pero no lo escuchan!
No hay nada como leer la bendita Escritura, Dios eligió a un no israelita: Ciro, para libertar a su pueblo, pero ellos en vez de liberarse se seguían a través del profeta Isaías cuestionando sus propios descubrimientos, atribuyendo a Dios la creación de las tinieblas, pese a que el Génesis deja sin lugar a dudas evidenciado que ya estaba allí y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas...
¡Ay de aquel que discute con su Hacedor! ¡Un tiesto más entre los tiestos de la tierra! El barro no le pregunta al alfarero: “¿Qué es lo que haces?” ¿Acaso le señala: “Tu obra no tiene manos”? 10 ¡Ay de aquel que pregunta a su padre: “¿Por qué me engendraste?” O pregunta a su madre: “¿Por qué me diste a luz?”!
11 »Así dice el Señor, el Santo de Israel, el que lo formó: “Pregúntenme por lo que está por venir. Pregúntenme acerca de mis hijos y de la obra de mis manos. 12 Yo hice la tierra; hice también al hombre y lo puse sobre ella. Yo extendí los cielos con mis manos, y di órdenes a todas sus estrellas. 13 A él lo desperté en justicia, y allanaré todos sus caminos; él edificará mi ciudad y pondrá en libertad a mis cautivos, sin dar por ellos nada a cambio. Lo digo yo, el Señor de los ejércitos.”»
Fijémonos qué texto tan contradictorio, entre la libertad de Dios y la dificultad de Isaías de aceptar esa plena libertad, cuando lamenta (sus propias palabras) por aquel que discute con el Hacedor y pregunta a sus padres por sus orígenes, la causa de su ser, ¿qué hacemos aquí, ¿para qué?, las eternas preguntas de la filosofía.
El Señor entonces responde, ¡pregúnteme! no solamente por lo de ahora, si no lo que está por venir. ¿Y qué nos anuncia?, algo que a alguno le impactará, hace mucho recuerdo haber escrito sobre esto y de nuevo ha venido a mi mente...
Dios despertará a un Hombre en Justicia, allanará todos sus caminos, edificará su Ciudad y pondrá libertad a sus cautivos (ley), pero NO dará por ellos nada a cambio (eso del "rescate" en la Cruz fue un mal "invento" de algunos exégetas), y además lo dice el mismo Señor de los ejércitos, esta vez sin la menor de las dudas
11 »Así dice el Señor, el Santo de Israel, el que lo formó: “Pregúntenme por lo que está por venir. Pregúntenme acerca de mis hijos y de la obra de mis manos. 12 Yo hice la tierra; hice también al hombre y lo puse sobre ella. Yo extendí los cielos con mis manos, y di órdenes a todas sus estrellas. 13 A él lo desperté en justicia, y allanaré todos sus caminos; él edificará mi ciudad y pondrá en libertad a mis cautivos, sin dar por ellos nada a cambio. Lo digo yo, el Señor de los ejércitos.”»
Fijémonos qué texto tan contradictorio, entre la libertad de Dios y la dificultad de Isaías de aceptar esa plena libertad, cuando lamenta (sus propias palabras) por aquel que discute con el Hacedor y pregunta a sus padres por sus orígenes, la causa de su ser, ¿qué hacemos aquí, ¿para qué?, las eternas preguntas de la filosofía.
El Señor entonces responde, ¡pregúnteme! no solamente por lo de ahora, si no lo que está por venir. ¿Y qué nos anuncia?, algo que a alguno le impactará, hace mucho recuerdo haber escrito sobre esto y de nuevo ha venido a mi mente...
Dios despertará a un Hombre en Justicia, allanará todos sus caminos, edificará su Ciudad y pondrá libertad a sus cautivos (ley), pero NO dará por ellos nada a cambio (eso del "rescate" en la Cruz fue un mal "invento" de algunos exégetas), y además lo dice el mismo Señor de los ejércitos, esta vez sin la menor de las dudas