Se trata de dos situaciones diferentes aunque en nuestra lengua la expresión “perdonar”suene igual.
Primero vamos a hablar de quien ha cometido un pecado.
El poder de atar y desatar es el ejercicio de un potestad que se traduce en el perdón de los pecados. Y que no puede ser ejercido por cualquiera sino por aquel a quien se le confirió esta potestad haciendolo en nombre de Dios.
El acto, realizado en nombre de Cristo, tiene validez también en el cielo ( que no es un lugar) , o sea, junto a Dios. Tiene validez ahora aquí en la tierra, en cuanto es recibido de nuevo el pecador en el seno de la Iglesia.
Esa potestad que Jesús reivindicó para sí, ha sido comunicado a los doce en el Espíritu Santo; en consecuencia, éstos deben continuar la misión divina desarrollada por encargo del Padre. En efecto, afirma Jesús que así como el Padre le ha enviado a Él, Él los envía a ellos (cfr. Jn 20, 21-23)
Aca estas hablando del ofendido , de la victima .
Cosa distinta en el perdón entre los fieles por las rencillas, odios, rencores mutuos. De eso se trata la cita de Efesios y otras equivalentes, de cultivar el amor y la tolerancia reciprocas.
Perdonar es una decisión unilateral.. personal, , perdono para sanarme, para liberarme del rencor, para anular la venganza..
“Pedro se acercó entonces y le dijo: «Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar las ofensas que me haga mi hermano? ¿Hasta siete veces?» Dícele Jesús: «No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete».( esto quiere decir , perdonar sin limite).
Saludos cordiales
