La juventud y la drogadicción

29 Noviembre 2003
26
0
:peepwallA “¿Tenían que morir?”
Esta pregunta apareció en la portada de la revista brasileña veja junto a las fotografías de varios jóvenes de aspecto sano y agradable que habían fallecido como consecuencia de su adicción a los estupefacientes. PESE a los consabidos peligros que entrañan las drogas, la gente sigue tomándolas y, por consiguiente, arruinando su vida. En Estados Unidos, la drogodependencia genera gastos de unos 100.000 millones de dólares anuales relacionados con la atención médica, el bajo rendimiento laboral y los sueldos no percibidos, y la delincuencia. Pero quizás sean los jóvenes —o los niños— los que paguen el precio más elevado. Según un estudio brasileño que publicó el periódico Jornal da Tarde, el 24,7% de los jóvenes de entre 10 y 17 años de las diez ciudades más importantes de Brasil han probado algún tipo de droga.
Aunque la drogadicción juvenil parece haber disminuido en Estados Unidos durante los últimos años, todavía hay allí un alarmante número de jóvenes que consumen drogas. Fíjese, por ejemplo, en los estudiantes del último curso de secundaria. Una investigación reveló que el 37% había probado la marihuana el año anterior y que 1 de cada 5 la había consumido en el último mes. Además, casi 1 de cada 10 había probado durante el pasado curso la droga sintética conocida como éxtasis, y más de un 6% había tomado LSD.
“La droga está destruyendo a la sociedad, fomentando el delito, esparciendo enfermedades como el sida y acabando con nuestros jóvenes y nuestro futuro.”—KOFI ANNAN, SECRETARIO GENERAL DE LA ONU
De todo el mundo llegan datos desalentadores. El Office for National Statistics de Gran Bretaña indicó que en ese país “el 12% de los alumnos de entre 11 y 15 años había consumido drogas el pasado año [...]. El cannabis [marihuana] fue, con mucho, la más utilizada”. Especialmente preocupante es el hecho de que “a más de un tercio de estos jóvenes (el 35%) les habían ofrecido una o varias clases de droga”.
Un informe respaldado por la Unión Europea revela también que entre la gente joven “es cada vez más habitual beber hasta emborracharse”. El informe añade que el “alcoholismo tiene, a corto plazo, consecuencias nefastas, tales como accidentes, violencia y envenenamiento, así como problemas sociales y del desarrollo”. Un estudio realizado en Japón señala que “las drogas más utilizadas por los adolescentes del país son los disolventes orgánicos, que pueden inducir al uso de otras sustancias”.
Con frecuencia, los toxicómanos se ven envueltos en el tráfico de estupefacientes y en asesinatos. Asimismo, son víctimas de la violencia o tienen relaciones sexuales de riesgo no planeadas.
Si cree que su familia es inmune a este problema, piénselo dos veces. Un informe del gobierno de Estados Unidos señaló: “La drogadicción no es solo problema de los pobres, las minorías o los barrios bajos. [...] Afecta a personas de toda clase social y del país entero. Es un problema de todos”.


Aun así, muchos padres no perciben el peligro hasta que es demasiado tarde. Ese fue el caso de una joven brasileña. “Ella solía tomar bebidas alcohólicas —cuenta su hermana, Regina-, pero a mi familia le hacía gracia. Sin embargo, a raíz de ello comenzó a drogarse junto con sus novios. Como mis padres nunca le hicieron ver las consecuencias de sus actos, la situación se les fue de las manos. Varias veces se marchó de casa y estuvo desaparecida, y siempre que la policía encontraba a una chica muerta, llamaban a mi padre para verificar si era ella. Todos sufrimos muchísimo.”

La Organización Mundial de la Salud apunta cinco razones básicas por las que un joven pudiera verse tentado a consumir drogas:
(1 para sentirse mayor y tomar sus propias decisiones
(2 para ser aceptado
(3 para relajarse y sentirse bien
(4 porque le atrae el riesgo y es una señal de rebeldía
(5 por curiosidad

La facilidad con que se consiguen las sustancias adictivas, así como la presión de grupo, también pueden empujar a un joven a emprender tal proceder autodestructivo. “Mis padres nunca nos explicaron nada sobre las drogas. En la escuela, los profesores solo mencionaban el asunto pero no ahondaban en él”, explica Luiz Antonio, un muchacho brasileño que comenzó a drogarse a los 14 años a instancias de sus compañeros. Más tarde, cuando intentó dejarlo, los “amigos” que le vendían la droga lo obligaron a punta de cuchillo a seguir con el vicio.
 
Re: La juventud y la drogadicción

esta informacion esta tomada de www.ieanet.com una institucion avalada por el gobierno español, que tiene informacion sobre la drogadiccion.

echenle un vistazo por favor.....

......................................................................................................

Etapas en el Proceso de Adicción

Las drogas, todas las drogas, presentan una doble cara. Primero aparecen con la imagen positiva, favorable y que tanto atrae a jóvenes y mayores. Posteriormente, esa cara desaparece. Rápidamente las drogas empiezan a mostrarse tal como son: dolor, problemas, infelicidad y múltiples trastornos.

En esta dualidad que las drogas presentan reside parte de la potencial dificultad para evitar que nuevas personas las consuman y abusen de ellas. Si desde el principio, la cara imperante fuera la negativa, el atractivo y mística que rodea el mundo de las drogas desaparecería.

En muchos sentidos el proceso de adicción ha sido comparado con el de entablar una relación; pero en este caso se trataría de una relación desdichada. A medida que atravesamos las sucesivas etapas, el compromiso se intensifica y el influjo que ejerce sobre el adicto se vuelve más fuerte.

En función de esta analogía el Dr. Arnold M. Washton en su libro 'Querer No es Poder' establece cinco etapas en el proceso de adicción.



1. Enamoramiento

Las primeras experiencias con las drogas suelen dejar una marca grabada. Si este primer contacto ha sido agradable, se produce un enamoramiento o atracción apasionada por volver a tomar la sustancia o realizar la actividad. Esta percepción distorsionada de la realidad, sin embargo, emociona, produce euforia o tranquiliza lo que hace aumentar la probabilidad de que haya una nueva toma u ocasión para consumir. Se produce un cambio de estado de ánimo que, en muchos casos, se experimenta a nivel visceral (todo ello causado por la lógica alteración de la química cerebral) y que genera ese encandilamiento al igual que uno se enamora de una chica/o.

En el juego, una fuerte ganancia inicial incrementa las probabilidades de adquirir adicción al juego.



2. Luna de miel

Una vez que el individuo ha aprendido -a través de su familia, de la sociedad o por experiencia propia- que ciertas actividades o el consumo de ciertas sustancias pueden transportarlo como por arte de magia lejos de cualquier sentimiento o estado de ánimo negativo, el paso a la adicción es muy sencillo.

Al haber 'aprendido' en la etapa 1 que es posible obtener cierto alivio (refuerzo negativo) o placer (refuerzo positivo) a través de la sustancia o actividad adictiva, la persona puede sentirse impulsado a borrar los malos sentimientos o dolorosos con algo positivo. La baja tolerancia a la frustración o la incapacidad para hacer frente a esas adversidades lleva a la búsqueda de 'soluciones mágicas'; entonces se busca el recurso químico que facilite el cambio.

Durante la fase de luna de miel, el futuro adicto experimenta todas las gratificaciones sin ninguna de las consecuencias negativas: siente que ejerce control, que la actividad es inofensiva y que él la merece. Puede sentirse mejor instantáneamente y disfrutar la sensación de olvidarse de todo. Pero de lo que no se da cuenta es de que ninguna relación basada en el engaño y la fantasía puede funcionar bien a largo plazo.



3. Traición

Sin embargo, lo que uno vislumbra durante la luna de miel no es lo que en realidad obtiene. Con el paso del tiempo, es traicionado. Así, además del deterioro sufrido en las principales esferas de su vida, es muy probable que el adicto esté haciendo cosas que normalmente no haría, para matener su adicción (robar, participar en otras actividades ilícitas). Los paraísos artificiales que se le prometían en la fase anterior se tornan en oscuros callejones repletos de trampas. La traición es real y el declive comienza.


4. En la ruina

Ahora el adicto debe consumir cada vez más para evitar que los crecientes sentimientos y estados de ánimo negativos profundicen en su conciencia y para tratar de mantener los efectos positivos que cada vez son menores. Está desarrollando tolerancia y tiene que consumir no para obtener placer o alivio sino para evitar el malestar asociado al síndrome de abstinencia. La dependencia física creada químicamente por la acción de la sustancia sobre el sistema nervioso tiene apresado al individuo. Psicológicamente, la estrategia de afrontamiento desarrollada hasta ahora sigue manteniéndose con lo cual, los problemas lejos de resolverse se acrecientan aún más.


5. Aprisionados

Con el tiempo, el adicto llega a un estado de desesperación en su relación con la sustancia o actividad adictiva, dejando de lado todo lo demás. Se comporta de manera cada vez más impulsiva e incontrolada, preso de su adicción. Esta etapa de la relación adictiva es un descenso a la desesperación y la destrucción personal. El servilismo ante las drogas no permite tregua y esta espiral tiende a autoperpetuarse, a menos que suceda algo que la detenga. El retorno, no obstante existe, aunque sea un proceso también duro y difícil.
 
Re: La juventud y la drogadicción

Les pido perdon por sacar a flote este tema pero yo soy un defensor acerrimo del cañamo tanto pa fines terapeuticos como pa fines ludicos,lo que e leido respecto al cannabis me suena a los tipicos argumentos prohibicionistas.
Primero:hay drogas legales muchisimo mas peligrosas que el cannabis y nadie se escandaliza.
Segundo:la historia de la medicina no conoce un solo caso de muerte por consumo de cannabis mientras que por culpa del alcohol hay unas 30000 muertes anuales y del tabaco unas 50000.
Tercero:la llamada escalada y sindrome amotivacional es desmentido por los estudios antropologicos,por la experiencia holandesa y miles de consumidores.
Cuarto:el cañamo se prohibio por motivos socio politicos y economicos y toda la informacion que empezaban a dar sobre ello era sensacionalismo haciendose pasar por datos medicos cientificos(desmentidos por la ciencia actual aunque todavia se siguen ultilizando).Por eso la prohibicion es absurda ya que es algo que perdura en el tiempo por inercia historica.

pd.espero que no me echeis del foro por opinar de otra manera.