La asamblea de Dios en la tierra.
El Señor en los días de su Ministerio aquí en la tierra, profetizó que sobre la revelación que Pedro había acabado de recibir, no de carne ni de sangre sino desde el mismo cielo por su Padre Dios, REVELACIÓN que Él llamó la “Roca” … edificaría su Iglesia, leemos:
Mat 16:16 Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Mat 16:17 Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.
Mat 16:18 Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.
Esta revelación está íntimamente ligada a la misma confirmación recibida por otro apóstol llamado Pablo, leemos:
1Co 3:11 Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo.
Cuando llegó la hora del Señor marcharse hacia el mismo Trono de Dios de dónde había descendido para humanarse y efectuar la Obra de la Redención…Él no nos dejó solos, leemos:
Joh 14:15 Si me amáis, guardad mis mandamientos.
Joh 14:16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
Joh 14:17 el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.
Entonces tenemos 3 Personas relacionadas con la Asamblea aquí en la tierra:
El Padre que revela la identidad del Hijo.
El Hijo como el fundamento de su Iglesia.
Y el Espíritu Santo que mora con nosotros y estará en nosotros como el que dirige la reunión de los Santos en Cristo.
Lo que estas Escrituras enseñan no tiene absolutamente nada que ver con otras asambleas o sistemas religiosos de fabricación humana, tal como el Judaísmo Mesiánico, la ICR, la IASD, la Wachtower Society…etcétera.
Lo digo porque debemos ser enseñados exclusivamente por la Palabra de Dios y guiados por su Espíritu; porque como están las cosas en este mundo impío, se puede afirmar que de la Asamblea de Dios y de los hijos de Dios…el mundo religioso nada sabe de esto.
En Mateo 18: 20 claramente encontramos a la Persona del Señor Jesucristo en medio de su asamblea, leemos:
Mat 18:20 Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.
El mundo religioso, sin Cristo y sin su Doctrina se congrega alrededor de una organización o sistema religioso haciendo de la sabiduría humana su fundamento.
Obvio que usan la biblia…pero buscando sus propios intereses económicos y no para los propósitos Divinos, leemos:
Eph 1:9 dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo,
Eph 1:10 de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.
La Doctrina de Cristo es el muro o cerco donde se halla salvaguardada su Asamblea…por tal motivo está escrito:
2Jn 1:9 Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo.
2Jn 1:10 Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis: ¡Bienvenido!
2Jn 1:11 Porque el que le dice: ¡Bienvenido! participa en sus malas obras.
En el próximo segmento veremos cuál es la Doctrina de Cristo que es ignorada o desconocida por el mundo denominacional.
Natanael1
El Señor en los días de su Ministerio aquí en la tierra, profetizó que sobre la revelación que Pedro había acabado de recibir, no de carne ni de sangre sino desde el mismo cielo por su Padre Dios, REVELACIÓN que Él llamó la “Roca” … edificaría su Iglesia, leemos:
Mat 16:16 Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Mat 16:17 Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.
Mat 16:18 Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.
Esta revelación está íntimamente ligada a la misma confirmación recibida por otro apóstol llamado Pablo, leemos:
1Co 3:11 Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo.
Cuando llegó la hora del Señor marcharse hacia el mismo Trono de Dios de dónde había descendido para humanarse y efectuar la Obra de la Redención…Él no nos dejó solos, leemos:
Joh 14:15 Si me amáis, guardad mis mandamientos.
Joh 14:16 Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
Joh 14:17 el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en vosotros.
Entonces tenemos 3 Personas relacionadas con la Asamblea aquí en la tierra:
El Padre que revela la identidad del Hijo.
El Hijo como el fundamento de su Iglesia.
Y el Espíritu Santo que mora con nosotros y estará en nosotros como el que dirige la reunión de los Santos en Cristo.
Lo que estas Escrituras enseñan no tiene absolutamente nada que ver con otras asambleas o sistemas religiosos de fabricación humana, tal como el Judaísmo Mesiánico, la ICR, la IASD, la Wachtower Society…etcétera.
Lo digo porque debemos ser enseñados exclusivamente por la Palabra de Dios y guiados por su Espíritu; porque como están las cosas en este mundo impío, se puede afirmar que de la Asamblea de Dios y de los hijos de Dios…el mundo religioso nada sabe de esto.
En Mateo 18: 20 claramente encontramos a la Persona del Señor Jesucristo en medio de su asamblea, leemos:
Mat 18:20 Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.
El mundo religioso, sin Cristo y sin su Doctrina se congrega alrededor de una organización o sistema religioso haciendo de la sabiduría humana su fundamento.
Obvio que usan la biblia…pero buscando sus propios intereses económicos y no para los propósitos Divinos, leemos:
Eph 1:9 dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo,
Eph 1:10 de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.
La Doctrina de Cristo es el muro o cerco donde se halla salvaguardada su Asamblea…por tal motivo está escrito:
2Jn 1:9 Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo.
2Jn 1:10 Si alguno viene a vosotros, y no trae esta doctrina, no lo recibáis en casa, ni le digáis: ¡Bienvenido!
2Jn 1:11 Porque el que le dice: ¡Bienvenido! participa en sus malas obras.
En el próximo segmento veremos cuál es la Doctrina de Cristo que es ignorada o desconocida por el mundo denominacional.
Natanael1