Cuenta con Dios; confía en Él. Alábale y
recuérdale continuamente. Él, en verdad, troca
la dificultad en tranquilidad, y la desgracia en
consuelo, y el tráfago en completa paz. Él,
verdaderamente, tiene dominio sobre todas las
cosas.
Abdu'l-Bahá
¡Amén!
Qué bello.
Aprendo que sí uno confía en Dios y lo tiene siempre presente y sigue su amorosa guía entonces la luz, el amor y la verdad de Él haran de nuestra senda un camino maravilloso.
La vida se nos convierte en un gran problema que nos ahoga, que nos impide avanzar en nuestra ilusoria perfección. Los defectos de los demás nos impiden crecer. Nos molestan. Aunque da la impresión y más bien parece que necesitemos de los defectos ajenos para seguir luciéndonos.