La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

Paz77

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30 Enero 2010
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Estoy tratando de aprender espanol para escribir esa historia, pero necesito un poco de ayuda... a veces mi gramatica esta equivocada, me gustaria saber si he escrito algo equivocado...gracias. La historia de Carlos es muy impactante ~ ojala que le gusta!!




La vida no tiene sentido sin Dios


Esa es una historia de un joven que descubrió la necesidad de Dios en su vida, él había vivido muchos años sin saber que la única cosa que nos da verdadera felicidad es un encuentro personal con Jesucristo....


1. Primeros años

Carlos nació en el año 1941, poco después sus padres le dejaron en la casa de su abuela, y se fueron a Nueva York en busca de un mejor trabajo. El padre de Carlos era un alcohólico y no quería la carga de un hijo. Así que Carlos tenía que vivir en la casa de su abuela, una anciana cargada con mas de sesenta años, ella era una sincera cristiana que vivia en pobreza pero ella no estaba amargada antes las circunstancias de la vida, siempre vestia con un traje sencillo, y ella cuidaba de Carlos con mucho cariño y le enseño de Dios, pero siendo tan pequeño, él no entendía las palabras de ella, y en poco tiempo él había olvidado mucho de lo que ella le decía, realmente sólo le quedaba el recuerdo de una anciana que le daba dulces y oraba a Dios.
Él vivió con su abuela durante tres años, pero después de eso sus padres tenían que regresar porque su abuela estaba tan enferma que ya no podía cuidar de Carlos. En aquel tiempo sus padres le llevaron a vivir con ellos en Nueva York, y él creció en un ambiente muy diferente que lo de Kentucky donde vivió su abuela. Aquí Carlos aprendió muchas cosas: a patinar, andar en bicicleta, nadar, y a dar y también recibir golpes. Era una guerra continua entre los niños y no era de sorprenderse que tuviera que pelear varias veces al día con los niños en la escuela y en la calle. Carlos tenía que luchar para vivir, pero esa batalla no se puede comparar con la batalla en que él vivió diariamente en su familia. Él no podía defenderse o huir de la constante lucha entre sus padres.
Mientras Carlos creció, también creció dentro de él, un odio profundo y un sentido de rechazo por parte de su padre. Su padre, también llamado Carlos, no quería tener hijos, y por eso, sus hijos sólo se sentían amados por su madre..... La madre de Carlos era una hermosa mujer con ojos morenos y pelo azabache, ella amaba a sus dos hijos con todo su corazón, su
hija, Pamela, nació dos años después de Carlos.


El Gran Fuego

Los fines de semana, la familia viajaba a su cabaña en Nueva York, y Carlos aprendió a cazar en el bosque cerca de la cabaña. Cuando finalmente había matado algún animal con su rifle, lo traía a su madre diciendo, "Mama, ¡mira lo que he hecho!" pero su madre con una mirada de tristeza, susurró, "¡oh no!" "Mira, es una hembra, y probablemente es una mama, ahora ¿Quien va a cuidad de sus bebes? Hace mucho frío en la noche y sus bebes tendrán frío y todos van a sufrir y morir de hambre y frío porque tu has matado a su mama". Después de eso, su madre no le dijo nada y Carlos miró el animal con tristeza, ahora él se sentía avergonzado por haber matado el animal. Desde aquel día Carlos nunca tenía ganas de cazar.
Un día, cuando su familia visitaba la cabaña, el padre de Carlos le dijo, "Carlos, tenemos algunas bolsas de basura en la casa, quiero que tu las lleves afuera para quemarlas".
"¡Él no puede hacer eso!" dijo su madre al oír lo que decía su padre, " Ya sabes que el día esta tan ventoso, Carlos es tan pequeño, y no sabe quemar la basura en esas condiciones, ¡seria fácil encender todo el campo!." Pero el padre de Carlos no la escuchaba, y repitió "¡Carlos, toma la basura, ya eres bastante grande, tu puedes quemarla!".
Carlos se puso muy feliz y mientras tomaba la basura, él miraba su padre con una sonrisa de satisfacción, ¡Por fin su padre tenía confianza en él!
Carlos sólo tenía ocho años en aquel entonces y realmente no entendía el gran peligro delante de él. No había llovido en algunas semanas y todo parecía un desierto, toda la hierba estaba bien marchita. Él no sabia que seria muy fácil prender un fuego y encender todo el campo, y no solamente eso sino el bosque y después de eso tal vez las casas del los vecinos...
Carlos prendió el fuego sin la menor preocupación, y se quedó mirando mientras el fuego ardía más y más fuertemente. Después de un rato, un pedazo de papel, llevado por un soplo de viento, voló hacia un poco de hierva seca y la encendió.
Cuando Carlos se había dado cuenta de eso, él rápidamente empezaba a pisotear el pequeño fuego hasta que sólo quedaba un poco de humo levantando al cielo. Pero después de extinguir ese fuego, él miraba el campo asustado, ahora había otros dos fuegos en diferentes lugares del campo, el pobre niño pisoteaba los pequeños fuegos hasta que sus zapatos se destruyeron por el calor del fuego pero por mas que este intentaba extinguir los fuegos, mas aparecían por todos lados. Carlos se aterrorizó al ver el campo encendido en fuego y empezó a llamar a sus padres. Por algún tiempo nadie oía los gritos de Carlos pero finalmente su madre notó el humo que ascendía del campo y llamo su esposo.....




continuare con la historia luego Que Dios te bendiga mucho
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

Bendiciones en Cristo La Paz77, realmente me encanto , asi que te animo, ha que nos sigas contando esta maravillosa obra narrada , cón preciosa unción y don de nuestro que Padre celestial ha depositado en ti , adelante , te dice Él , en Cristo muchas Bendiciones . Judith
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

ok aqui hay mas de la historia.......


...Al oír su esposa gritando, el padre de Carlos, corrió al campo y se desmayo al ver el fuego corriendo en todas direcciones, y exclamó: "¡Si el fuego encendiera el bosque, nada ni nadie será capaz de pararlo! ¡¿Sabes que ese incendio puede quemar todas las casas de nuestros vecinos!?" Entonces él empezó a tirar agua al fuego rápidamente pero no se veía ningún resultado, y cada momento el fuego volvía mas ardiente como si el agua lo alimentaba. Después de un rato, los vecinos, viendo el humo, venían a ayudar a extinguir el fuego pero pareció como que nada podía parar ese fuego tan grande. Finalmente los bomberos vinieron, y empezaron a apagar el fuego pero al examinar los bosques cercanos decían a todos, "¡No te preocupes por el fuego, se va a quemar sólo el pasto y nada mas, porque en el bosque todo ya esta mojado, ese fuego no puede encenderlo!" Todos se pusieron muy felices al oír las buenas noticias- ahora no había ninguna necesidad de parar ese fuego tan ardiente, todos reposaban y quedaron mirando mientras el fuego consumía el pasto seco, pero alguien notaba que todavía un hombre corría desesperadamente tratando de apagar el fuego, y ese hombre fue el padre de Carlos, él no entendía lo que los bomberos le dijeron y por un momento se volvió loco. Los vecino trataban de calmarlo pero él siguió gritando: "¡Rápido, Agua!! ¡Trae mas agua!!". Y corrió por todos lados tratando de apagar el fuego. Los bomberos lo vieron así y le forzaron a parar, pero aun eso no le dejaba tranquilizarse y él gritaba desconsoladamente : " ¡No, déjame ir! ¡Ese fuego va a destruir muchos hogares, soy un hombre pobre, no tengo suficiente dinero para pagarlos!" Le impedían moverse y trataban de decirle que todo estaba bien, pero el terror y el miedo habían cegado su razón, y él miraba el fuego con gran preocupación y angustia. Cuando finalmente el fuego había quemado todo el pasto, se extinguió cerca del bosque. Al ver que el fuego no hacia ningún daño todos se fueron y la familia de Carlos quedó sola. Después que todos se fueron, el niño, Carlos, pensaba que iba a recibir algún castigo de su padre porque él había encendido ese fuego que había quemado todo el campo pero Carlos se maravilló al ver que su padre no le decía ni una palabra.



Años en la Escuela

Pasaron algunos años y la familia de Carlos se mudo a Arizona, y Carlos tenía que entrar en un colegio diferente, en ese entonces muchas cosas empezaron a cambiar en su vida, y uno de estos cambios fue que sus maestros en Nueva York enviaron algunos papeles a sus nuevos maestros, mostrando su conducta general y su calificación pero también había una nota diciendo que Carlos frecuentemente peleaba y discutía en la escuela. Los maestros en Arizona se sorprendieron grandemente al ver cuantas veces Carlos peleaba en el colegio, y decidieron llamar Carlos para arreglar el asunto inmediatamente.
Cuando Carlos entraba, uno de sus maestros le decía en un tono muy serio : "Vemos que estas acostumbrado a pelear mucho, pero si solo una vez, tu luchas en ésta escuela, quedarás suspendido y te enviaremos a casa con una nota para tus padres. Carlos se estremeció al pensar en lo que haría su padre si él tenía problemas en el colegio, prefería sufrir cualquier castigo en vez de ser castigado por su padre, realmente él no temía lo que sus maestros le pudieran hacer, sólo temía lo que su padre haría.

Después de hablar con sus nuevos maestros, Carlos lentamente caminaba a su clase y se preguntaba a si mismo con gran preocupación: "¿Qué voy a hacer?", él siempre peleaba, y pudo recordar claramente lo que un niño le había dicho años atrás : "Carlitos, tu eres tan tonto- nunca puedes vencer en las luchas porque esperas hasta que alguien te golpee primero-- ¡escúchame bien! Si un muchacho te habla sin respeto, o hace algo que no te agrada-- ¡ahora es tiempo de golpearlo, pero tu debes hacerlo primero, no esperas para nada!"
Desde aquel día, eso fue lo que Carlos siempre hacia pero en ese nuevo colegio, todo era diferente, ahora él fue prohibido de hacer aun un golpecito, no importando lo que los muchachos le hacían. Cuando su familia se mudó a Arizona que lejos estaba él de imaginar que en su nuevo colegio, desde el mas fuerte muchacho hasta el mas débil tendrían autoridad sobre él. En sus primeros días en ese colegio, los muchachos se burlaban de él porque no llevaba la ropa de moda, pero Carlos no les hacia caso, y siempre tomo la actitud de ignorarlos a todos, él los ignoraba de tal manera que los muchachos empezaban a decir que él era un cobarde, y comenzaban a decir que eso fue la razón que él nunca luchaba o decía nada para defenderse. En poco tiempo ese colegio se transformo de un lugar para aprender a un pequeño infierno para Carlos. Le empujaban e insultaban diariamente pero Carlos lo soportó calladamente, pensando que era mas fácil recibir golpes de algunos muchachos que casi no sabían luchar, que recibir el castigo de su padre, un hombre mas grande y mas fuerte que cualquier muchacho en el colegio, y Carlos le temía mas que todo. A veces él miraba algunos muchachos peleando en el colegio y reía a si mismo, pensando: "¡Pobrecitos! No saben luchar, me parecen como niñas luchando." Aun sabiendo eso, Carlos siguió igual y aguanto todo lo que los muchachos le hacían, y ellos le atormentaban todo el año. Después de un tiempo, Carlos tenía fuertes ganas de vengarse, él sólo necesitaba hallar la manera correcta de hacerlo.....


La pulseada

Por mucho tiempo nadie en el colegio respetaba a Carlos, hasta que un día, su maestro tenía que ir por algún tiempo a atender a un asunto importante, y resulto que los muchachos quedaron en la clase solos... Pues, un muchacho se levantó y se jactó que nadie pudiera ganarle una pulseada a él, y todos trataron de ganar la pulseada de ese muchacho, pero fue en vano, nadie pudo ganarle.
Carlos les miraba con cierta curiosidad, él nunca lo había hecho pero estaba seguro de que no podía vencer- el otro muchacho era tan fuerte. Sabiendo eso, Carlos trataba de ocultarse pero en su gran lamento, alguien le había notado y dijo casi a gritos: " ¡oh, Carlos, te toca a ti! Debes tratar de ganar la pulseada como todos." Carlos los miraba un poco nervioso, y respondió: " No quiero hacerlo, ya se que él me puede ganar y yo no quiero tratar de hacerlo."
"¡Debes hacerlo!" dijo el muchacho que había ganado a todos los demás, mientras él se acercaba a Carlos con una sonrisa.
"No, no quiero, ya se que tu me puedes ganar, ¿Por qué necesito hacerlo?"
"No tienes otra opción," decía el muchacho sonriendo sarcásticamente, "Tu tienes que hacerlo, ¿al menos que seas un cobarde?"
Y todos gritaban en coro: " Ooh ¿Eres un cobarde? ¡Si, Carlos es un cobarde!!"
Al oír eso, Carlos consintió en hacerlo, y levanto la mano lentamente. Todos quedaron en silencio por un momento, mientras el otro muchacho empujaba con todas sus fuerzas contra la mano de Carlos, pero Carlos le miraba sorprendido, él no entendía por qué el muchacho no podía mover su mano en lo mas mínimo. Ese muchacho, muriendo de vergüenza, miro a Carlos con ojos asombrados, eso fue lo que menos esperaba- ¡el cobarde parecía el mas fuerte de todos! Cuando Carlos notaba que la cara de su oponente se puso roja y que estaba sudando, él empujo contra la mano y la llevaba a tocar la mesa fácilmente. ¡Carlos le ganó la pulseada sin ninguna experiencia! Ahora todos le miraban sorprendidos, Carlos había ganado la pulseada pero mas que eso- él había ganado un poco de respeto.
Carlos se sorprendió al ver lo que sucedió, él todavía no sabia que tenía una gran fuerza física, pero luego aprenderá que era capaz de hacer muchas cosas..... Y algunos años luego, él aprenderá de la verdadera fuerza- la fuerza de Dios, con eso no hay nada imposible, los enfermos están sanados, los muertos resucitados, y los pecadores están puestos en libertad para servir al Señor, pero en aquel entonces, Carlos no había aprendido nada de eso, primero Dios le estaba preparando para ver su necesidad de un Salvador.



La lucha


Había un muchacho en particular que molestaba a Carlos en todo, él era el más grande muchacho en la clase, un verdadero matón que gustaba intimidar a los demás. Pues, todo el año, ese muchacho disfrutaba en insultar, empujar, aun hasta robar el bicicleta de Carlos, pero Carlos siempre evitaba cualquier conflicto, y le dejaba hacer lo que quería sin resistirle.
Pero ocurrió que el ultimo día en el colegio, antes de la rotura del verano, Carlos decidió que no iba a soportar esa tortura más, : "Es mejor morir bajo el castigo de mi padre que vivir un otro año en ese colegio con todos los muchachos burlándome e insultándome."
Así pensaba Carlos mientras caminaba con pasos fuertes al escritorio del muchacho que le había atormentado todo el año. Cuando Carlos se paró en frente de él, ese muchacho le miró con desprecio y dijo, "¿Qué quieres, cobarde?" Carlos le miró fijamente, y se puso ambas manos sobre su escritorio para acercarse a la cara del muchacho y dijo con autoridad: "Después de la clase, quiero verte afuera."
"¡Ja! ¿Me quieres? ¿Por qué?" exclamó el muchacho en tono de burla.
"¡Te quiero ver afuera porque yo te voy a matar!" Carlos dijo eso con tal pasión que el muchacho le observaba un poco asustado, y no se atrevió a decirle ni una palabra.
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

.....Después de la clase, Carlos, el muchacho, y casi todos los jóvenes en la escuela se marcharon afuera, y cuando todos venían al lugar designado, los jóvenes formaron un circulo alrededor de los dos muchachos--todos querían ver lo que iba a pasar. El otro muchacho era mucho mas alto y mas grande que Carlos, pero eso no se pareciera afectar a Carlos, él miraba a su atormentador con ojos brillando como los de un león iracundo. Todos los jóvenes miraban expectantes, nadie sabia que en Nueva York, Carlos solía luchar contra dos o tres niños a la vez, y esa pequeña lucha realmente no fue nada mas que un juego para él.
El otro muchacho era tan absorto en decirle a Carlos que él iba a vencer que no se dio cuenta de lo que Carlos hacia.... Con un brinco Carlos estaba al lado del muchacho y le tomaba por sus hombros rápidamente, entonces Carlos hizo lo que los niños en Nueva York le habían enseñado: él empujaba el otro muchacho contra el muro de ladrillo que quedaba justo detrás de ese pobre muchacho, y Carlos le empujaba tan fuertemente que su cabeza golpeo contra el muro y repentinamente ese muchacho se cayó al suelo inconsciente, pero para Carlos la lucha empezaba ahí, y él salto sobre el muchacho y le golpeaba salvajemente. Por unos momentos todos le miraban aterrorizados, entonces los jóvenes gritaban desesperados: "¡Él esta muerto!!" "¡Mira lo que has hecho!!" "¡Tú le has matado!!". A Carlos, eso no le importaba, y él se levantó y los miró fijamente diciendo: "¿Quién quiere luchar conmigo ahora? ¿Quién?" Pero nadie querría luchar contra 'El Loco' - desde aquel día eso fue lo que los muchachos en el colegio le nombraron, y después de eso, nadie molestaba a Carlos, aun los mismos muchachos que le habían burlado, se estremecieron al oír su nombre - "El Loco".



--- Carlos se creció con muchos conflictos en su vida, pero él nunca imaginaba que su único problema era si mismo.
Hoy en día es muy impresionante ver la diferencia entre el Carlos que vivía en tinieblas y el Carlos iluminado por la luz del Evangelio. Pero debo seguir poco a poco contando como Carlos fue guiado por la misericordia de Dios a ver su gran necesidad de un Salvador. Él necesitaba un amor que pudiera sanar sus heridas y quitar de su corazón todo el dolor y todos los sentimientos de rechazo que le habían atacado por tantos años.
Él tenía un corazón muy duro, porque desde pequeño nunca se sentía amado por su padre, y eso puede afectar un niño, - un joven, - un adulto- por toda su vida.... todos necesitamos sentir el amor de un padre. Carlos miraba los padres de sus amigos-- ellos trataban a sus niños con tanto amor y cariño, ...." Yo quiero un padre así" decía Carlos a si mismo al ver cuan diferente eran los padres de sus amigos.
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

Su primer amor

A pesar de todas sus luchas, Carlos tenía una personalidad introvertida y tímida, a veces le costaba comunicarse con los demás - especialmente con las muchachas, pero cuando él tenía dieciséis años, le empezaron a interesar las muchachas, y él amaba una muchacha en particular ...Rosa María, ella era muy bellísima, -casi todos los muchachos la querían, así que esa 'especial' muchacha siempre tenía un novio diferente.
Por mucho tiempo Carlos trató de hablar con ella, pero en fin, su timidez nunca le dejaba decirla ni una palabra.
Un día esa hermosa muchacha venia a Carlos y le pidió un favor, <<Ya no tengo nadie que me puede llevar de mi casa a la escuela, y yo sé que tienes un carro.... pues, no quiero molestarte pero ¿Me puedes llevar a la escuela??>>. Carlos estaba mudo de sorpresa por unos segundos --¡Por fin su sueño se hará realidad- Rosa María será su novia! << ¡oh! >> carraspeó Carlos mientras sonreía involuntariamente << ¡Claro que si!! ¡Me gustaría llevarte a la escuela! >>.
De aquel día en adelante, Carlos la llevaba a la escuela, pero ella no parecía interesada en Carlos, sólo le hablaba de sus novios, y lo que iba a hacer con ellos...
Casi dos años pasaron y Carlos todavía la llevaba a la escuela, -en todo ese tiempo su amor por ella había aumentado.... Pero por mucho tiempo, pareció que Rosa María sintió indiferente a sus pequeñas muestras de amor, hasta que el día que ella se encontraba sin novio, entonces Rosa Maria le decía : << Carlos, creo que tu me amas... Me gustaría ser tu novia ¿si tu me quieras??>> El corazón de Carlos le dio un vuelco- << ¡Si! ¡Te quiero mucho, Rosa María!!>>
Ahora Carlos tenía su primera novia pero su timidez todavía no le dejaba hacer nada más que imaginar.... imaginar en besarla, y imaginar en tenerla bien cerca para mostrar todo el amor que él sentía por ella. Sí, imaginar era todo lo que Carlos era capaz de hacer porque él simplemente
no tenía autoestima y siempre temía fracasar.
Un día, Rosa María decidió que quería ir a patinar- ella era una patinadora excelente, y Carlos gustaba mirarla patinar mas que todo, así que él la llevaba a la pista de patinaje. Al llegar a la pista Carlos quería ir inmediatamente a patinar pero la muchacha le detuvo diciendo: << No Carlos, yo quiero quedarme unos minutos en el carro, porque yo necesito hablar contigo...>> << Muy bien>> asintió Carlos un poco nervioso, él no quería hablar... <<¿Qué quieres decir?>> preguntaba Carlos un poco incomodo, pero de repente el desequilibrado adolescente corazón de Carlos dio un latido de más al darse cuente que Rosa María se le acercaba lentamente. Un poco sonrojado él levantó la vista y se encontró con los ojos brillantes de Rosa María.
Él la miró esbozando una sonrisa nerviosa, <¡Me parece que ella me va a besar!! > pensaba Carlos a si mismo -pero él no estaba mentalmente preparado para besar una chica, y lo que en el principio le pareció la mas linda cosa que pudiera ocurrir, se transformó en algo que le aterrorizó -
<¡Tengo que irme de aquí, no puedo besarla!! > ..con ese pensamiento, Carlos trataba de abrir la puerta del carro pero en su desesperación no la podía abrir y la chica empezó a acercarse mas y mas sin entender que Carlos, -siendo tan tímido, buscaba una salida desesperado y finalmente la encontró... Antes de que la muchacha le pudiera besar, Carlos se apresuró a escapar por la ventana abierta de su carro. Su mejor amigo lo vio y reía sin parar -<< ¿Por que no la besó? >> dijo su amigo soltando una carcajada. Carlos no entendía el por qué pero al verla cerca a su lado, un gran miedo invadía su corazón y la única cosa que pensaba era... "¡Debo irme!" Poco después, Carlos se sintió avergonzado de que no la había besado, -él la amaba muchísimo y en fin se determino que iba a besar esa chica no importaba si sentía miedo o no, él no iba a huir otra vez como un niño.
Pronto esa oportunidad se presentó... Rosa María le invitó a ir de picnic con ella, y Carlos la llevó a un parque, pero Rosa María no quería ir al lugar designado para los picnics, ella le rogaba a llevarla a un lugar diferente... un lugar más aislado, un lugar muy lejos de todo. Eso le pareció un poco extraño a Carlos, pero él no la quiso oponer, -él


a hacer todo lo que ella quería. Al llegar a ese lugar, Carlos empezó a preparar la comida, pero esa muchacha no pensaba en comer.... Ella se acercó a Carlos sonriendo y le estrechaba contra su pecho, -- Carlos quiso besarla pero ella quería más que un beso -eso era muy inesperado para Carlos, de repente él entendió lo que ella quería hacer, y en ese momento, Carlos sintió en su interior desvanecerse toda la admiración y amor que sintiera por ella. -Él quería una mujer respetuosa y pura, -- una esposa para cuidar de su familia, definitivamente esa muchacha no era respetuosa o pura...
Por un momento él quedó inmóvil, casi no podía respirar, entonces Carlos reaccionó rápidamente y se desprendió de los brazos de la muchacha. -ella le miró con gran sorpresa y un poco de confusión, << ¡Vamos Rosa María, debemos irnos!>> dijo Carlos sombríamente, y Carlos la llevó a su casa sin decirle otra palabra, él se sentía tan desilusionado que no podía hablar.



El sueño de Carlos- un avión

Carlos caminaba con algunos de sus amigos cuando de repente, él se paró y miró hacia el cielo rápidamente. <<¿Qué ves?>> preguntaba su amigo con cierta curiosidad. << Mira a la derecha, ¡Es un avión!>> contestaba Carlos muy animado. -En aquel entonces la única cosa que le interesaba era lo que pertenecía a los aviones.-
<<oh, un avión.>> dijo su amigo un poco decepcionado. << Algún día, voy a ser un piloto, y voy a volar por todas partes.>> Carlos se quedo mirando el avión hasta que no lo veía más.... Ese sueño de Carlos pronto se transformaría en realidad.
Algunos años pasaron y cuando Carlos tenía 18 años, él vendió todo lo que tenía para obtener suficiente dinero para las clases en la escuela de aviación. También Carlos trabajaba muchísimo-- él tuvo dos trabajos y casi no tenía tiempo libre pero eso no le molestaba porque él necesitaba ese dinero si quería aprender a volar. Nada en este mundo era más importante a para Carlos que pilotear un avión, y sus deseos de volar se reflejaban en sus calificaciones en la escuela de aviación, de pronto, todos notaban que él tenía una gran aptitud para volar -a Carlos le resultaba muy fácil pilotear un avión.



 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

El vuelo solo


Carlos tenía apenas dieciocho años cuando finalmente había ahorrado suficiente dinero para la escuela de aviación, -Al ver su persistencia y dedicación, el padre de Carlos se burlaba de él, porque él no creía que su hijo realmente podría ser un piloto... pero nada ni nadie podía impedirlo de estudiar- después de tantos años de maltrato, Carlos ya era acostumbrado a recibir burlas e insultos de parte de su padre, y por eso, él resueltamente le ignoraba.
Carlos empezó a estudiar todo lo que pertenecía a la aviación, y la meteorología, y se dedicaba a memorizar toda la fraseología radiotelefónico, -día y noche, ese intenso deseo de volar le consumía... En las clases, Carlos era muy atento y curioso, y en fin obtuvo muy buenas calificaciones en todos los examines.

-- Finalmente el día esperado llegó, y Carlos se encontró con su piloto instructor --él era un hombre de aspecto duro, no muy alto pero un poco gordo y hablaba en un tono muy brusco y rudo. Era un ex-militar y volaba en la guerra, su cara se reflejaba que las circunstancias de la vida le habían transformado en un hombre muy duro. Carlos le saludó respetuosamente y ambos subieron al avión. Después de volar por un rato, Carlos se sentía que su preocupación fue disminuyendo poco a poco, y su instructor notó que él era atento y muy apto para volar, su primer vuelo duró una hora y todo parecía bien.
Algunos días más tarde, Carlos y su piloto instructor subieron otra vez al avión, y Carlos siguió aprendiendo rápidamente, parecía que él era un piloto natural. Los días pasaron rápidamente, y Carlos y su piloto instructor subieron al avión por la tercera vez, ese día, Carlos era seguro de que él podría volar solo. -De verdad Carlos no tenía bastante dinero para volar todo el tiempo requerido con su instructor, todo era muy cara para Carlos, y por eso, él tenía que aprender mas rápido si iba a obtener su licencia. Después de volar como treinta minutos, Carlos dio una mirada intranquila a su instructor, entonces él trató de hablar pero por un momento se detuvo indeciso, <<¡ejem!>> carraspeó Carlos nerviosamente y se desvió en seguida la mirada, << Señor, creo que puedo volar solo... ¿No te parece?? >> El piloto instructor se quedó estupefacto al oír esas palabras, << ¡Qué! ¿Crees que puedes volar solo?? ¡Carlos, antes de volar solo, necesitas volar conmigo por doce horas, y tu ya no has cumplido tres horas!!>> eso decía su instructor con gran muestras de irritación. << Pero ya puedo volar bien, puedo hacer cualquier cosa que usted me pide... >> Ahora Carlos miraba su instructor fijamente a los ojos, y ese instructor sabía que Carlos era un piloto serio y responsable, y aunque él no tenía mucha experiencia, verdaderamente él era un piloto excelente y tenía dominio total del avión, pero eso no era suficiente para el piloto instructor- Carlos todavía necesitaba cumplir con los requisitos indicados... Un silencio profundo reinó en el avión mientras su piloto instructor parecía meditar, entonces dijo: << Primero, debes mostrarme que puedes operar ese avión con competencia y seguridad... >>
La intensidad ambiental crecía mas y mas mientras Carlos miraba su instructor, y repitió <<Yo puedo hacer cualquier cosa que usted me pide, ¡Puedo volar solo! >> Al oír eso, su instructor frunció el ceño y dijo bruscamente, << ¡No me atrevería a dejarte volar solo, Carlos! ¿Realmente crees que puedes volar solo?? Entonces, debes mostrarme que eres apto para efectuar un vuelo solo-->> su instructor le miró fijamente y dijo: ¿Puedes volar con control y precisión de maniobras, únicamente con referencia a los instrumentos??? >> Pero Carlos le miraba con una sonrisa y comenzó a volar perfectamente con referencia a los instrumentos... <<Estoy volando bien ¿Verdad?>> preguntó Carlos calladamente después de volar algunos minutos. La cara de su instructor parecía severa, mientras éste tardó largos momentos en contestarle, - Nunca le había sucedido una experiencia semejante.
<< Ahora, quiero ver tres despegues y aterrizajes, normales y con viento cruzado>> -así contestó su instructor, observando las maniobras de Carlos estrictamente, pero Carlos pasó la prueba, cumpliendo todo lo que se le pidió, y llegó en forma segura a tierra. Verdaderamente Carlos era un piloto experto.
<<Estoy seguro que puedo volar solo>> dijo Carlos firmemente.
Entonces su instructor, sabiendo que Carlos ya era capaz de volar, exhaló un profundo suspiro, y dijo: << ¡Oh Carlos! Debo confesar que tú has hecho cada maniobra perfectamente, ahora yo creo que tu puedes volar solo... pero Carlos.. > ahora su instructor habló con entonación solemne << Las condiciones de vuelo no están buenas, me parece que va a llover pronto, y si comienza a llover, tú debes aterrizar rápidamente porque no puedes volar mientras esta lloviendo, ya conozco muchísimos accidentes que sucedieron por falta de visibilidad. ¿Me entiendas, Carlos? >>

<< ¡Si, Señor! >> respondió Carlos tan animado que casi no podía respirar. Entonces su instructor se quito el cinturón de seguridad y bajo del avión... Ahora Carlos estaba la única persona en el avión -- ¡el único en los controles de ese avión! ¡Un piloto!!
Pero antes de que Carlos podía realizar el despegue, un problema grande se presentó... -¡Empezó a llover!! Y Carlos se sentía muy decepcionado al ver que estaba lloviendo pero él no pudiera alterar lo que estaba pasando. En un momento, él giro la cabeza para ver su instructor.... y Carlos casi bajó del avión pero se detuvo unos segundos pensando.. << Estoy muy familiarizado con la meteorología de viento, las turbulencias, los obstáculos que hay... Creo que puedo volar... ¡No importa si esta lloviendo!>> Con ese pensamiento, Carlos empezó a hacer el despegue pero al notar eso, su instructor meneó con la cabeza y dijo con autoridad: << ¡No Carlos, ya te dije que no puedes volar si esta lloviendo!! >> Por un segundo, Carlos vacilaba, temiendo las consecuencias, pero el deseo de volar era mas fuerte que el temor y Carlos se apresuró a tomar los controles para el despegue. Al ver eso, su instructor estaba violento, la cólera le ahogaba y con entrecortadas frases exclamó: << ¡Carlos!! No.... Te dije.... Carlos.. ¡No!! >> su voz rodó por todo el aeropuerto pero ese pobre instructor no pudo detenerlo. Carlos ya había dominado las técnicas básicas de despegue, y de pronto estaba volando... -Y él estaba volando perfectamente. Al principio, su instructor le miraba con gran muestras de agitación, pero esa frustración, poco a poco se transformó en admiración mientras él observó que Carlos podía operar el avión con precisión y seguridad, -Carlos claramente le mostró su habilidad de dominar el avión en cualquier maniobra. En fin, él hizo tres despegues y tres aterrizajes, -Carlos aterrizó de manera precisa y suave, y su instructor se apresuró a felicitarlo por su excelente trabajo, pero Carlos estaba tan nervioso al ver su instructor llegando a su encuentro que agacho la cabeza -no podía ni verlo a la cara. << ¡Era maravilloso, Carlos! ¡Buen trabajo!! >> gritó su instructor sonriendo.
Por unos momentos, Carlos estaba mudo de sorpresa, << Gracias >> contestó él nerviosamente.



------( Ok, finalmente puedo contar el comienzo de la obra de Dios en la vida de Carlos,, poco a poco Dios empezó a hablar a Carlos, ahora voy a contar la primera oración de Carlos. )----


Dios de misericordia

Cuando Carlos tenía diecinueve años, se mudo a Seattle, Washington, -en aquel entonces el sueldo era mejor en Seattle y por eso Carlos decidió a vivir tan lejos de su hogar y de su familia, pero él se sentía un poco triste porque se extrañó a su mama, su primo, y sus amigos muchísimo. - Su primo, Jimmy, siempre disfrutaba en inventar muchas bromas y chistes de Carlos porque Carlos estaba tan delgado y alto, pero esas bromas afectaban a Carlos profundamente -él era tan tímido y introvertido, y finalmente él decidió que iba a hacer ejercicio para robustecerse un poco, y también para engordarse, pero eso no funcionó - Carlos era fuerte pero él siguió estando muy delgado.
(Pero debo aclarar que aunque, a veces, su primo burlaba de él, Carlos le amaba como un hermano.)


En aquel entonces, Carlos tenía diecinueve años y ¡nunca había orado -ni una sola vez! Él nunca se sentía ninguna necesidad para Dios....




.....Carlos no tenía la bendición de Dios en su vida, y por eso él tenía que buscar alegría, tenía que buscar deleite en los placeres de la vida, en lo mundanal, en muchas cosas que no pueden satisfacer el alma, pero sin saberlo Dios estaba mirando a Carlos, Dios tenía un propósito especial para su vida, -Él conoce nuestros corazones y siempre esta dispuesto a mostrarnos su misericordia y amor. Un día, ese Dios de amor, comenzó a moverse en la vida de Carlos, --Carlos y otro piloto volaban en las montañas, y Carlos tenía que aterrizar en un aeropuerto, ubicado en una meseta, era una pista de aterrizaje complicado y difícil pero eso no molestaba a Carlos, él deleitaba en hacer tonterías y trató de aterrizar muy cerca de la montaña. Carlos volaba tan bajito para mostrar su habilidad como piloto pero antes de aterrizar, sopló un fortísimo viento, y ese viento hizo bajar el avión de tal manera que el avión estaba volando hacia la montaña, ¡La enorme montaña estaba directamente enfrente al avión! En ese momento, un sudor frío recorrió la espalda de Carlos, -él sabía que pronto iba a estrellar contra la montaña, -él no podía hacer nada, el avión estaba tan cerca de esa montaña que él no podía levantar el avión. <<¡Voy a morir!!>> pensaba Carlos desesperado, y en un segundo, Carlos, aunque él no sabía orar, comenzó a orar fervientemente, << ¡Dios! ¡Si me ayuda ahorita, mañana iré a la iglesia! >> Después de esa corta oración, un fuerte soplo de viento milagrosamente se levantó el avión, y Carlos se aterrizó cerca de la pista de aterrizaje. ¡Sin duda, Dios contestó su oración!!
Ahora Carlos sabia que Dios hace milagros-- ¡Dios hace milagros!!
El siguiente día era domingo y Carlos recordaba claramente la promesa que hizo con Dios --<< ¡Dios! ¡Si me ayuda ahorita, mañana iré a la iglesia! >> pero él tenía un vuelo en la mañana (Carlos tenía la opción de hacerse piloto instructor y por eso tenía que volar mucho)
¿Qué podía hacer? --Carlos oró otra vez... << Dios, esa mañana tengo que volar pero te prometo que iré a la iglesia esa noche. >> Al llegar la noche, Carlos tenía que volar otra vez, y decidió que tampoco podía ir a la iglesia en la noche.... << Dios, la semana que viene iré a la iglesia, porque esa noche tengo que volar. >>
Y así pasaron varias semanas, Carlos siempre prometió ir a la iglesia pero él nunca cumplió esa promesa, y en fin Carlos olvidó completamente de su promesa con Dios. ¡Sí! ¡Dios le salvo de la muerte pero él nunca cumplió su promesa!!

Después de su conversión, Carlos recordaba la promesa que hizo con Dios y en ese momento, la misericordia de Dios le impactó muchísimo - Dios lo sabe todo, Dios sabía que Carlos nunca iba a cumplir esa promesa pero ¡tengamos un Dios de misericordia!! Dios le salvo de la muerte, sabiendo que nunca cumpliría su promesa. ¡Qué Dios tan maravilloso!
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

Despertando del sueño


Todo parecía diferente... un poco oscuro y confuso, cuando de repente, Carlos empezó a caer, y de un momento a otro, él estaba cayendo rápidamente sin entender el por qué. ¿Estaba él cayendo de algún lugar desconocido? ¿O estaba cayendo de una montaña o de un edificio grande? ¿Qué pasó?
Por algunos largos momentos, Carlos desesperadamente trató de entender lo que estaba sucediendo, pero él no era capaz de entenderlo.
Mientras Carlos caía, su corazón aceleró sus latidos y su alma se estremeció al ver lo que estaba pasando.... Pero antes de caer al suelo, Carlos se despertó, y se encontró en su cuarto. --¡sólo era un sueño! Carlos respiró profundamente, -muchas veces, él había soñado así. Por un momento, se produjo un silencio, roto por sus suspiros y pensamientos de inquietud, -él no comprendía ni veía la razón o causa de esos sueños. Rodeado de sombras, Carlos se levantó de la cama, -él era un hombre alto, no cargado de grasa sino de músculos, tenía la piel blanco, cabello rubio, despeinado, y el pequeño fuego en sus ojos azules, certificaba que él era un hombre que solía luchar... - Por afuera, él luchaba contra los hombres y por dentro, luchaba contra sí mismo. El tiempo no apaciguaba sus sentimientos de rechazo, y muy en el fondo, Carlos se sentía distante de cualquier forma de paz o gozo o amor verdadero.


Carlos era un buen trabajador, él tenía dos trabajos, - en la mañana, él trabajaba en un restaurante y en la tarde volaba como piloto instructor. Pues, en ese entonces, Dios comenzó a moverse en su vida..... Un día, Carlos se encontró con un pastor que quería volar, y Carlos empezó a enseñarle a volar. Poco después, otro pastor quería volar, y luego un otro, hasta que Carlos estaba enseñando tres o cuatro pastores a volar. -¡Dios estaba obrando en su vida!- Eso fue un poco estresante para Carlos, porque le vió forzado a escuchar lo que los pastores le decían... <<¿Vas a la iglesia, Carlos? >> un pastor le preguntó con cierta curiosidad. << No. >> dijo Carlos en voz baja, tratando de evitar la conversación. <<¡Aah! ¡ Entonces quiero invitarte a mi iglesia!! >> exclamó el pastor con gran entusiasmo. Carlos se aclaró la garganta con un carraspeo y dijo rápidamente: <<¡Oh no, no puedo, no puedo ir... uh... tengo cosas que hacer! >> se le quebró la voz.
<< Pues, tal vez la semana que viene, ¿puedes ir a mi iglesia, la semana que viene? >> ahora el pastor le miró fijamente.
<<No sé... tal vez puedo ir. >> respondió Carlos con una sonrisa pero no era una sonrisa como las que solía tener, Carlos no había tenido mucho contacto con pastores y por eso, él se sentía un poco nervioso.
Después de algunas semanas, cada uno de los pastores le habían invitado a sus iglesias, y la preocupación de Carlos se incrementó cada día, -él no quería ir a una iglesia, -un lugar aburrido, dedicado a los hipócritas, Carlos ya sabía que muchos de los 'cristianos' visten de hijos obedientes pero en realidad no lo son, y nada en la religión le interesaba en lo más mínimo, << ¡Soy buena persona! >> pensaba Carlos, << No fumo, ni bebo, nunca he consumido drogas, no quiero salir a fiestas, o estar con muchas mujeres, sólo busco una esposa; siempre estoy trabajando... soy buena persona.>> Y con esos pensamientos, Carlos trató de convencer a sí mismo de que no necesitaba Dios.
- - Usted debe saber que en el restaurante, Carlos trabajaba con muchos borrachos, adulterios, y fornicarios. Así que Carlos siempre pensaba que él era mejor que los demás, un hombre muy especial, Carlos ya no conocía el Dios especial, el Dios de amor VERDADERO!!
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

ok aqui hay mas de la historia.. me alegro mucho que le gustas la historia Judith~ que Dios te bendiga!!!


..Cada día las cosas se fueron poniendo más difíciles para Carlos, pues, los pastores siguieron invitándole a la iglesia...

<<Carlos, tu debes ir a la iglesia>> decía uno de los pastores con un tono marcado de urgencia. Carlos miró el pastor y vio las lágrimas que le llenaban los ojos. <<¿Qué voy a hacer? >> dijo Carlos a si mismo << Soy buena persona, yo no necesito de Dios, y ese pastor siempre me molesta, pidiéndome ir a la iglesia, pero él ama las mismas cosas de este mundo que yo amo, - los aviones, él no es mejor que yo... >>

--Tristemente, ese pastor no pudo convencer a Carlos de que necesitaba de Dios, él realmente no traía ningún convicción a la vida de Carlos, pero pasaron algún tiempo, y Carlos finalmente sentía un poco de vergüenza....

<< ¡Ese pastor siempre me invita a la iglesia, y me da vergüenza seguir diciéndole que no! >> así pensaba Carlos muy preocupadamente. Ese pastor le insistió muchas veces antes de que Carlos aceptara ir a la iglesia, pero en fin Carlos dijo al pastor: << Si, creo que puedo ir a su iglesia ese domingo. >>
<<¡Ah, qué bueno, Carlos!! >> exclamó el pastor muy animado.

Y así pasó, Carlos llegó a la iglesia el domingo, como le había prometido al pastor.... Y Carlos trató de tranquilizarse al entrar en la iglesia porque él estaba un poco nervioso, entonces él dio una mirada a su alrededor, -había mucha gente sentada, algunos hablaban calladamente, y otros guardaron silencio mientras esperaban.... << ¡Ooh, eso es una pérdida de tiempo! ¡La iglesia es tan aburrido! >> pensaba Carlos, suspirando profundamente.

Mientras la congregación cantaba algunas canciones, Carlos estaba observando todo lo que pasaba, pero él se sorprendió grandemente al ver que una anciana estaba sonriendo de oreja a oreja mientras cantaba --<< ¡Qué extraño! Mmm.. me parece que ella le gusta estar en la iglesia.. Ella no esta aburrida. No la entiendo, no entiendo por qué esta feliz. >> por un momento, Carlos estaba muy confundido, y de vez en cuando, se volvía para mirar la anciana sonriente sentada en medio de la congregación. Entonces el pastor se levantó y empezó a predicar... << Buenos días, esa mañana quiero hablar de la maldad de fumar...>>

<<¡Ja! ¡Yo no fumo!! Soy buena persona. >> reía Carlos calladamente.

<< Los cristianos no deben fumar, porque los que fuman están pecando... >> el pastor continuó predicando pero ninguna de sus palabras traía convicción a Carlos.


A menudo Carlos levantaba la cabeza para mirar al reloj << ¡¿Cuándo va a terminar?!! >> Carlos escuchaba lo que el pastor decía, pero entraba por un oído y salía por el otro. Después de algunos minutos, Carlos empezó a mirar el cielo azul por una ventana, -era un día perfecto, << ¡Oh, cómo me gustaría volar ahora mismo! Este es un día tan hermoso... >> durante todo el sermón, Carlos se distrajo en esos pensamientos.

<< .. Y ahora es tiempo de orar, hermanos, vamos a orar al Señor. >> Carlos salió bruscamente de sus cavilaciones al oír el pastor decir eso, y se cerraron los ojos rápidamente mientras el pastor oraba.

<<Amen >> dijo el pastor en fin.

<<Amen >> repitió Carlos lentamente.

Después de la oración, algunos diáconos se levantaron y salían de la iglesia casi huyendo, Carlos lo notó con cierta interés << ¿Por qué tanta prisa? >> pero él no se detuvo ni un momento más, Carlos tenía fuertes ganas de salir corriendo de ese lugar tan aburrido que se levantó y despidió del pastor y algunos otros respetuosamente, y se fue. Pero en el estacionamiento de la iglesia, Carlos vio los hombres que habían salido de la iglesia tan rápidamente, ellos habían formado un circulo << Tal vez, están hablando... >> pensaba Carlos, pero él no podía ir sin saber lo que hacían esos hombres, y invadido por la curiosidad, Carlos se acerco a ellos para ver lo que estaban haciendo.

¿Qué estaban haciendo?? -- ¡ESTABAN FUMANDO!! ¡Sí!! Esos diáconos estaban fumando

<<¡Hipócritas!!! Ellos no escucharon al pastor, él dijo que es un pecado fumar, yo no fumo, yo soy mejor que ellos!! >> así pensaba Carlos, meneando la cabeza un poco indignado.
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

ok aqui hay mas de la historia...


En ese momento, Carlos se dio cuenta de que todo lo que él había oído de las iglesias era verdad, -todos son hipócritas, todos salen de la iglesia igual como entraron.
Los pastores siempre le decían : "Necesitas ir a la iglesia. Carlos, tú necesitas leer la Biblia...." Pero esas palabras no le afectaron porque Carlos creía que tenía moral superior a los demás, y despúes de un tiempo, su corazón se volvió duro como una piedra a todo lo que pertenecía a Dios o a la iglesia, pero muy en el fondo, Carlos se sentía vacío, su alma estaba sedienta de paz interior, y por mucho tiempo, él buscaba algo para llenar ese vacío, pero --¡Las cosas de este mundo no pueden satisfacernos!! Sólo Dios... Carlos sólo necesitaba conocer a Dios.
El mundo se estaba cayendo encima
(Esa parte de la historia es un poco difícil contar, porque yo no sé nada de la primera esposa de Carlos.... Así que no puedo escribir muchos detalles, no sé dónde o cuándo Carlos la conoció, sólo sé que ella era muy hermosa y que Carlos la amaba muchísimo. Después de un año de casados -más o menos- ella dio a luz su primer bebe, una niña, chiquita y preciosa, para Carlos esa niña era el mundo, su mundo.
Ahora, vamos a ver unos momentos horribles en la vida de Carlos....)
Después de trabajar todo el día, Carlos se fue a su casa para ver su niñita preciosa (ella tenía unos meses de edad), al entrar en la casa, Carlos llamó su esposa, pero ella no le respondió... <<Qué extraño. >> pensó Carlos mientras la buscaba. --Este día no era otro día igual que los demás, y después de unos momentos, la vida de Carlos no seguirá siendo lo mismo, -una sombra de cambio había venido para quitarle todo lo que tenía.--
Carlos no pudo hallar su esposa...ella no estaba en casa, y finalmente, Carlos halló un papel doblado en una mesa. Sin demorar un momento, Carlos lo abrió y comenzó a leer las frías palabras de su esposa. Ella le dijo que ya no le amaba y que le había dejado para ir a vivir en Chicago con su ex-novio. Carlos levantó los ojos, de los que corrían gruesos lagrimas, y en su interior, todo parecía descender como en una espiral con cada palabra que leía... Ahora Carlos temblaba, aun su mano temblaba, y él ya no tenía fuerzas, él estaba en un estado de shock, y repentinamente se cayo al suelo. <<¡No! >> <<¡No! >> repitió con más fuerza mientras negaba con la cabeza, << ¡Ella es mía! En las buenas y en las malas, ¡Ella es mi compañera!! ¡Ella es MI esposa!!! >> decía Carlos llorando desesperadamente.
¿Cuánto tiempo permaneció Carlos en tal condición? - Nadie lo sabe.
No hay duda de que una situación como ésta bastaría para destruir a cualquiera pero Dios usó esas circunstancias para hablarle al corazón de Carlos.
~~~

Por mucho tiempo, Carlos habló con su esposa por teléfono, - con súplicas y ruegos, él hizo el intento de persuadir a su esposa de que necesitaba regresar a casa, pero ella no le hizo caso, era evidente que esa mujer verdaderamente no le amaba. ¿Quién puede describir cuánto Carlos sufrió en esos días? Cuando Carlos se hallaba solo consigo mismo, reflexionaba sobre su vida, y él no pudo evitar que muchas lagrimas se acumularon en sus ojos al pensar que su esposa le había abandonado, eso era la desgracia mas cruel que le pudiera sobrevenir. Muchos no saben lo doloroso que es volver a casa y descubrir el silencio, la soledad, y el dolor que se respira en el ambiente cuando uno no tiene a nadie, para Carlos, eso era la misma sensación de rechazo que él había sentido de su padre.
Cuando Carlos llamó a su esposa por teléfono, ella le respondió con frías saludos, y frías palabras, -y esas palabras fueron como espada que penetraron en su corazón.... Un día, conmovido por el profundo dolor, Carlos finalmente se dio cuenta de que su esposa no quiso regresar nunca, él estaba abrumado bajo el peso del dolor; no levantó la cabeza, sino que agachado, dijo con voz baja y trémula: <<¡Ella ya no me ama! >> entonces Carlos hizo una pausa, incapaz de proseguir por un momento, mientras que toda esperanza de tener su esposa y niñita en casa, se hundieron a lo más profundo de un pozo. Durante mucho tiempo, él había estado reprimiendo las ganas de llorar, pero en ese momento, no consiguió soportar la tristeza de su alma, -él sentía una sensación de desesperación tan grande que sus ojos se le llenaron de lagrimas y se dejo oír un sollozo sofocado.
Él intentó amar a su esposa con todo su corazón, y pensaba que aun las muchas aguas no podían apagar ese amor pero el amor terminó siendo pisoteado, y traicionado, en la forma más cruel que uno puede imaginar.

El hombre del circo
En el restaurante, Carlos se río un poco para esconder su propio dolor y tristeza, pero aún así, a veces era imposible ocultar la verdad...
Algunos meses habían pasado desde que su esposa le había dejado cuando Carlos, con el corazón embarcado de dolor, decidió a seguir adelante sin la esperanza de tener su esposa o su niñita regresar.
*****
Un día, cuando Carlos estaba trabajando en el restaurante, aconteció que un hombre del circo estaba comiendo en el restaurante, muchos se emocionaban porque ese hombre podía adivinar cuantos años tenía cualquier persona... Las meseras empezaban a pedirle una tras una, <<¿Cuantos años me echas, Señor? >> y ese hombre del circo pudo adivinar perfectamente sus edades, --a veces él faltaba unos meses, por ejemplo, si una persona tenía 21 años y 6 meses, tal vez él diría <<tienes 22 años >> pero él nunca se equivocó más de 6 meses con cualquier persona. Ese hombre empezó a adivinar la edad de cada una de las meseras, y de los jefes de cocina, y él nunca se equivocaba mas de 6 meses... Carlos se dio cuenta de lo que ese hombre estaba haciendo y él estaba bien impresionado, por fin, una mesera miró a Carlos y exclamó animada: <<¡oh Señor, ¿Cuántos años tiene él? >> El hombre del circo se acercó a Carlos sonriente, y Carlos levantó los ojos y miró frente a frente al hombre del circo, ese hombre le observó fijamente por unos segundos, entonces dijo firmemente : << Él tiene 33 años>> Carlos se quedó atónito por unos segundos y se lo mostró en su cara y en su tono de voz << Es... Eso debe ser una broma...>> dijo Carlos finalmente.
El hombre del circo miró a Carlos con extrañeza, <<¿Qué? >> << ¿Me equivoqué? >> preguntó con un tono un poco incrédula << ¿Tiene usted 34 años? >>.
<<¡No ! >> exclamó Carlos con la voz alterada por sorpresa, << ¡Yo tengo 23 años! >>
En ese momento, todos reían, menos Carlos,
<< ¡No lo creo!! >> respondió el hombre del circo, meneando la cabeza. <<Es verdad, señor, tengo 23 años >> dijo Carlos gravemente. Ahora, algo se agitaba en su interior, -era una insaciable curiosidad que le guiaba a caminar repentinamente al baño. Al llegar al baño, se detuvo ante el espejo, y Carlos suspiró ante la imagen que el espejo le mostraba... sus ojos eran tan graves y serios que era evidente que la esperanza y vida de un joven de sólo veintitrés años, no habitaban en ellos. La tristeza y desaliento habían apoderado de su espíritu, realmente nadie puede vivir una vida feliz si no tiene a Dios bien cerquita para guiarle y quitar todo el dolor y tristeza.
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

El mundo era su hogar


[FONT=Tahoma, Calibri, Verdana, Geneva, sans-serif]Carlos definitivamente era un hombre mundano en todo aspecto de su vida, en ese tiempo, él se vestía con ropa muy lujosa, y aunque él no contaba con mucho dinero, decidió a comprar un coche carísimo, de color rojo --para atraer la atención de todos. Carlos siempre quería más y más, y no se conformaba con lo que tenía, él perdió todo el dinero que tenía para parecer mejor que los demás, pero eso no le llenaba el vacío que tenía y en fin, la única cosa que Carlos realmente tenía era un montón de deudas.
****
Con casi todo su tiempo libre, Carlos se encontraba en el gimnasio porque él quiso ponerse más fuerte. -Desde su juventud, Carlos soñaba con tener suficiente fuerza para doblar un zapato de caballo

[ ojalá que ustedes me pueden entender,, me cuesta trabajo hallar la forma correcta de traducir eso pero no sé si es fácil para ustedes entenderme, en inglés dice: he wanted to bend a horseshoe strait. Pero yo no sé como traducirlo...]
Y después de algunos años de rigurosos ejercicios, Carlos tenía una gran fuerza, y él pudo hacer muchas cosas extraordinarias por causa de esa fuerza. Cuando Carlos tenía 23 años, ¡Él pudo romper una guía telefónica en 16 pedazos! Y por gran sorpresa a todos, él era capaz de doblar un zapato de caballo, -¡La fama fue subiendo para Carlos!! Ahora él tenía un manager y varias periodistas le entrevistaron, todos querían ver lo que él pudiera hacer. En 1964, sólo había tres hombres en los EEUU que pudieran doblar un zapato de caballo, y Carlos era uno de esos hombres.
--Un día, después de hacer algunos examines, un doctor le decía a Carlos que normalmente el músculo del brazo se crece al lado del hueso, entonces el doctor le explicó que su músculo era diferente, esté se rodeó el hueso de una forma fuera de lo común, y el doctor pensaba que eso era la razón que él tenía una gran fuerza física. En ese tiempo, Carlos se sentía muy especial y importante pero él no se sentía feliz.

Algunos pobres muchachos
Un día, Carlos notó que algunos muchachos estaban fumando - <<¡Oh, pobres muchachos! Voy a ayudarles..>> pensaba Carlos, meneando la cabeza mientras que lentamente se acercaba a los muchachos.
<< ¿Qué están haciendo? >> pregunto Carlos sonriendo.
<<Estamos fumando>> respondió un muchacho con arrogancia.
<< ¡ Ooooh, estas fumando!! Entonces ustedes nunca quieren ser hombres fuertes, quieren ser tan débiles como unas niñitas... Ok, te entiendo. >> Carlos decía eso con un tono de burla y lastima a la vez.
<<¡¿Qué?!>> respondió todos en coro << No somos débiles - somos hombres, ya podemos fumar! >>
<< Oh, ¿crees que eres un hombre porque estas fumando? Pues YO soy un hombre, y yo no fumo, y YO soy fuerte, soy tan fuerte que puedo romper un guía telefónica en 16 pedazos. >>
Los muchachos se miraban muy divertidos, y decían sonrientes <<No te creemos, ¡Debes mostrarnos eso!! >>
<< Ah, pero yo no tengo una guía telefónica, yo no p...>>
<< ¡Yo tengo una guía telefónica!! >> gritaba un muchacho muy emocionado.
Y Carlos reía un poco al ver que el muchacho corrió a toda prisa a su casa. En algunos minutos ese muchacho regresó con una guía telefónica.
<< Mmm.. >> decía Carlos al ver el libro grande, << Sabes que no tendrás una guía telefónica después de eso sino 16 pedazos inútiles -¿Estas seguro que tu me quieres romperla??
<< ¡Sí, señor, claro que estoy seguro!! >> respondió el muchacho expectante.
Esos muchachos le miraron incrédulos - ninguno creía que Carlos pudiera romper una guía telefónica. Por un momento, Carlos les miró esbozando una sonrisa, entonces él tomó la guía telefónica, y como muestra de su resolución, él apretó el libro y cerró firmemente la boca. Ahora se produjo un silencio profundo, y los muchachos le miraban casi sin respirar. Los músculos de Carlos se contornaron y tensaron, él tenía el tronco fuerte y con sus brazos gruesos y duros se rompió la guía telefónica y todos los muchachos se quedaron atónitos cuando Carlos les daba 16 pedazos - ya no había una guía telefónica.
Desde aquel día, Carlos empezó a llevar esos muchachos consigo al gimnasio y les enseñaba ejercicios, y por supuesto - ellos dejaban de fumar.
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Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

[FONT=Tahoma, Calibri, Verdana, Geneva, sans-serif]Ok aquí hay mas de la historia.....
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Un hombre negro ~ un cambio milagroso



Un día, Carlos estaba trabajando en el restaurante, --él no sabia que ese día era especial, que ese día iba a cambiar su vida completamente, usted debe saber que posteriormente a ese día, Carlos se sentía autosuficiente, él no creía que necesitaba a Dios, sí, él creía que Dios existía pero hasta ahí no más. Pues, en ese día Dios le desarmó mostrándole algo que nunca antes había conocido: el Amor.
****

<< Carlos, ¿Sabes que hay un nuevo empleado? >>

<< No, no lo sabía >> respondió Carlos indiferente.

<< Pues, él es un hombre de color, creo que él esta lavando los platos ahorita...>>


-- En ese tiempo, Carlos era uno de los jefes de la cocina, y al oír esa noticia, él quiso conocer el nuevo empleado, y se dirigió a dónde lavaban los platos.

<< Mucho gusto señor, mi nombre es Carlos, soy uno de los jefes de la cocina. >>


El hombre negro se volvió la cabeza y le sonrió con una sonrisa cariñosa y le decía amablemente << ¡Mucho gusto, Carlos! Me llamo, Bebel. >>


-- Después de hablar con Bebel por algunos momentitos, Carlos sentía conmovido sin saber el por qué, y mientras Carlos trabajaba, él se sentía crecer un deseo profundo de conocer más sobre la vida de ese hombre. Tal vez ese deseo no era nada más que curiosidad, pero esa 'curiosidad' le conducía una y otra vez a hablar con Bebel, Carlos estaba muy intrigado por la actitud de ese hombre, algo le llamo la atención en él, su manera de tratarle, porque nadie que conociera le había tratado con tanta gentileza y amor, y él tenía una paz interior y un gozo rebosante que se reflejaron en su cara.



<<¿Estás casado, Bebel? >> pregunto Carlos, tratando de entablar cualquier conversación.

Pero al oír eso, Bebel agachó la cabeza un poco y contestó calladamente: << Tenía una esposa.>>

Por un momento, un silencio profundo reinó en la habitación, entonces Carlos le miró fijamente y le preguntó con entonación solemne: << ¿Esta muerta? >>

<< No, no esta muerta. >> dijo Bebel, negando con la cabeza, y mirando a Carlos directamente a los ojos dijo :<< Ella se fue a vivir con otro hombre, ahora ella y mis dos hijitos viven en otro estado con ese hombre. >>



<<Lo siento >> dijo Carlos con la cara vuelta hacia el suelo.


<<¡ Oh no, Carlos! ¡ No estés triste! Todo esta bien - Dios cuida de mi, Dios ha sido tan bueno conmigo. >> Bebel le habló sonriente.


<< ¿Dios? >> pensaba Carlos confundido

- << ¿Eres un cristiano, Bebel? >> pregunto Carlos con sorpresa.


<<Sí, Carlos, yo era un pastor pero cuando mi esposa me dejo, tenía que mudarme aquí en Seattle. El sueldo es mejor aquí y yo necesito dinero porque envío la mitad de mi sueldo para ayudar a mi esposa y a mis hijitos.>>


<< ¡Qué! >> dijo Carlos con asombro, << ¡Tú... tú no necesitas enviarles nada!! ¡Ella te ha dejado!! ¿Por qué envías la mitad de tu suelo a tu esposa? >>


<< Pues, el otro hombre no tiene empleo y mi esposa me llamó por teléfono y me dijo que necesita dinero... >> explicó Bebel con calma.


A Carlos no le preocupaba disimular su enfado, mientras decía : << ¡Bebel!! ¡Mira, eso es una locura!! Si tu esposa te ha dejado, no necesitas enviarle dinero, ¡no necesitas hacer nada para ella!! ¡Ella te ha engañado!! >> Ahora Carlos le miro con enfado y confusión a la vez
-- Jamás en su vida había visto un hombre así.
<< Ese hombre me da la impresión que necesita ayuda - Yo debo ayudarle. >> pensaba Carlos decidido.


<< Carlos, Hay algo que tú no entiendas... Sí, es cierto que mi esposa me ha dejado pero yo tengo dos hijos y no quiero que mis hijos están sufriendo, y si no tienen dinero, yo quiero ayudarles.. ¡Amo a mi esposa! ¡Amo a mis hijos! Aunque mi esposa no me ama, yo la amo. >> Entonces él hizo una pausa, como conmovido por sus propias palabras.


Siguieron unos minutos de silencio, mientras Carlos respiró profundamente, y movió la cabeza en sentido afirmativo, como queriendo decir: Te entiendo.
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Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

Una luz en la tinieblas
Luego, Carlos pensó en las palabras de Bebel, en la seguridad con que las pronunciaba: <- Dios cuida de mi, Dios ha sido tan bueno conmigo. >
Normalmente, la iglesia tiene su terminología particular, y muchas veces ésa era ininteligible a Carlos pero Bebel le hablo simplemente, y él no preocupaba por predicarle a Carlos -su conducta era suficiente sin palabras, Bebel nunca le decía a Carlos : Necesitas ir a la iglesia. Necesitas leer tu Biblia. Necesitas arrepentirse.
Pero su vida era tan ejemplar que Carlos se quedó impactado, << Yo necesito ayudar Bebel, él es tan inocente que todos pueden aprovecharse de él. >> pensaba Carlos al enterarse de que Bebel había ido a una iglesia para preguntar al pastor si había una viuda necesitada que le pudiera alquilar un cuarto.
--Ahora Bebel vivió con una viuda con más de ochenta años, ella era muy pobre y por eso, Bebel la pagaba mucho dinero por el pequeñito cuarto - Bebel vivió ahí sólo para ayudar esa viuda pobre.
Después de trabajar con Bebel por dos días, Carlos se encontraba profundamente pensativa : << Me parece que Bebel es un bobo, él tiene 45 años más o menos y no tiene nada en este mundo, ni dinero, ni familia, ni fama - ¡Nada de nada! Él hace todo para ayudar a los demás pero nunca se preocupa por si mismo. Me parece que su vida no tiene sentido pero.... él esta tan feliz.... él esta tan contento, tan amable, tan lleno de gozo... >> Carlos no comprendía ni veía la razón o causa de ese gozo que tenía Bebel - y él tenía una paz profundo -- " Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús." Filipenses 4:7.
Bebel tenía esa paz. Realmente, Bebel era feliz, su cara siempre se iluminó un gozo indescriptible, y todos saben que la verdadera felicidad no es algo que se puede fingir, o por lo menos, no con éxito.
****
Habían pasado apenas tres días desde que Carlos se conoció Bebel y Carlos se sentía una carga profunda que no se desvanecía, -Dios estaba haciendo algo en su espíritu. Durante toda la mañana, las palabras de Bebel recurrirían a su mente, y Carlos empezó a reflexcionar sobre lo que Bebel había hecho en su vida.
A pesar de los aplausos y de las aclamaciones que se levantaban de todas partes por causa de la tremenda fuerza de Carlos, él se sentía descontento, sentía que pesaba sobre su corazón una tristeza grande, y profunda. Entonces se amontonaron en su mente recuerdos de su vida... su esposa, el odio que sentía, las luchas, el vacío, su egoísmo, sus fracasarías, su soledad.. Todo eso llenaba su mente mientras trabajaba, y aquel deseo de antes de alejarse de Dios, fue reemplazado ahora repentinamente por un intenso anhelo de orar.
<< Tengo que ir al baño...>> decía Carlos calladamente al otro jefe de cocina.
--Mientras Carlos caminaba al baño, su corazón latía fuertemente, y sus ojos se llenaron de lagrimas, de un momento a otro, Carlos se echó a correr, ya no aguantaba el dolor de su corazón, y sin hacer caso a los otros empleados, él corrió desesperadamente al baño.
Al entrar al baño, Carlos se arrodilló, o mejor dicho, se cayó al suelo, esos eran momentos de angustia total para Carlos, él se confesó sus pecados, su arrogancia, y su egoísmo a Dios, -- Entonces...
¡Dios le perdonó!!
¡Dios le lleno con amor y gozo y paz!!


Una nueva vida


Mientras Carlos oraba, todo lo que había hecho mal, todos los pecados de su vida, acudían a su memoria, -así lo permitía Dios, hasta que Carlos llegó a arrepentirse sinceramente, entonces recibió el maravilloso perdón de Dios. Después de orar fervientemente,
Carlos levantó la cabeza, y abrió los ojos en los que ardían lagrimas, pero ahora él sentía una sensación de plenitud tan grande que invadía todo su cuerpo, limpiando su espíritu y dándole una gran paz interior, -- ¡ahora Carlos tenía un gozo y una alegría inexplicable!! Él ya no era lo mismo, porque en ese momento, Dios comenzó a tratar con su corazón, definitivamente algo estaba tomando lugar en él. A partir de esa oración, se subió dentro de él, un deseo y un anhelo de buscar de Dios, en esos momentos, no era posible para Carlos reprimir el gozo que le llenaba, y ese gozo se reflejó en su cara. Después de sentir el perdón de Dios y el gozo del Señor, Carlos se levantó y se fue con paso apresurado a encontrarse con Bebel, pero mientras él caminaba, una voz dentro de él, le dijo: Nunca volverás a entrar en un gimnasio para hacerte más fuerte. -- Eso era lo que Carlos gustaba hacer más que todo, sin embargo, esa noticia no le entristeció, en un instante él había perdido el interés por ir al gimnasio, Carlos había acudido al amor del Salvador y el Señor le llenaba con una satisfacción que nunca había experimentado antes.



<<¡Bebel, ahora soy un cristiano, he orado al Señor, y le dio mi vida por complejo, yo quiero servir al Señor! >> así declaró Carlos con entusiasmo.

<<¡Ooh, me alegro mucho, Carlos!! Ahora necesitas leer la Biblia para aprender lo que Dios quiere que tu haces.>> Bebel le sonría con cariño mientras hablaba.
****


Con gran alegría, Carlos compró algunas Biblias.... Primero compró una pequeña Biblia, y la guardó en su bolsillo para leerla durante el día, y también compró otra Biblia más grande y la leía en su casa, pero en la primera página de la Biblia grande, Carlos notó que alguien había escrito algo muy interesante: --Esa Biblia te apartará del pecado, o el pecado te apartará de esa Biblia.--

Después de leer eso, Carlos se quedó impactado, -él nunca antes había leído la Biblia pero en ese momento, sentía tremendas ganas de leer la Biblia entera, ¡Él quería conocer al Señor y servirle con todo su corazón!
En los siguientes días, Carlos aprovechó cada oportunidad para escapar de todo y leer su nueva Biblia, y mientras la leía, Dios empezó a hablarle a Carlos en lo más profundo de su corazón y mostrarle su voluntad perfecta.



La primera batalla con el pecado


Con todo su tiempo libre, Carlos leía su Biblia... tres días habían pasado desde que Carlos se convirtió, y mientras leía la Biblia, un versículo le impacto muchísimo....

¿Echa alguna fuente por una misma abertura agua dulce y amarga? Hermanos míos, ¿puede la higuera producir aceitunas, ó la vid higos? Así ninguna fuente puede hacer agua salada y dulce.
Santiago 3:11-12

Carlos dejó de leer por un momento, frunció el ceno, y contemplaba.. <<¿Qué significa este versículo? Agua salada... y agua dulce.... Dios, ¿Qué quiere decir?? >>

En esos días, la Biblia le pareció un libro muy misterioso, y a veces, un libro difícil de entender pero Dios le respondió repentinamente, y le mostró el significado de este versículo... << Tú dices que eres un cristiano, -eso es agua dulce, pero también hablas mal y repitas chistes sucios, -eso es el agua salada... Eso no agrada a Dios. >>

Inmediatamente, Carlos se arrepintió de haber dicho malos chistes y le dijo a Dios: << Señor, perdóname, ¡Yo NUNCA voy a contar un chiste malo!>>


El día siguiente.......

Cada mañana, un hombre de la carnicería, traía carne fresco al restaurante, y normalmente ese hombre divertía en decirle a Carlos un chiste sucio, y antes de su conversión, Carlos disfrutaba bastante en repetir esos chistes a los otros empleados, pero ahora todo había cambiado en su vida y ya no quería repetir chistes malos....



<< ¡Buenos días, Carlos!>> decía el hombre de la carnicería, todo sonriente.

<< Buenos días >> saludó Carlos

<<¡Ooh, Carlos, quiero decirte un chiste!!>> dijo el hombre de la carnearía, rápidamente.


<<No, no, señor... Soy un cristiano ahora, y no quiero escuchar chistes malos. >> entonces Carlos le miró firmemente.


<<¡Ja!! ¡Carlos!! Escúchame, ese chiste es muuuy gracioso, por favor, no me digas que eres un cristiano, debes escuchar ese chiste! >> insistió el hombre


<< ¡No! ¡No quiero escucharlo!! >> repitió Carlos insistentemente, casi con vehemencia.


<<¡Oh no, Carlos, debes escuchar ese chiste. Había un hombre que.... >> y el hombre de la carnicería le contó a Carlos el chiste malo. A Carlos ese chiste le pareció muy gracioso pero en fin, él decidió que no iba a repetir un chiste malo, no importa si era gracioso o no.


-- Poco luego, el hombre de la panadería llegó con el pan para el restaurante y Carlos le saludó y habló con él algunos minutos...


<<Pues, debo irme Carlos, ¡hasta luego! >>


<< oh, espérate un momento, quiero decirte ese chiste - ¡Es muy gracioso!! >> entonces, Carlos le contó el chiste malo

***

Pero luego, Carlos recordó su promesa al Señor, y oró al Señor diciendo: << ¡Ooh, Perdóname Señor!!! Dios mío, no sé por qué lo hice, pero había algo en mí que no pude controlar y eso me insistió a repetir ese chiste malo, pero Señor no volveré a hacerlo, ¡no quiero hacerlo!! >>
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

....En el principio, Carlos creía que tenía suficiente fuerza para resolver su problema, pero cada vez que la oportunidad se presentaba, Carlos caía en ese mismo pecado y contó un chiste malo, pero después de hacerlo, Carlos se sentía muy avergonzado y oraba desesperadamente a Dios. <<¡Perdóname Señor!! No quiero contar malos chistes, Perdóname!>>

Algunos días luego, las dudas le asaltaban, Carlos se sentía como si estuviera atrapado en un mar profundo de debilidad y pecado...
<<¡Puedo hacer muchas cosas con mi fuerza pero no soy tan fuerte como para dejar de pecar!!>> así confesaba Carlos a sí mismo.

Carlos estaba tratando de librarse de las trabas del pecado, pero lo que había obtenido era caer más bajo su poder, ahora él se encuentro frustrado y confundido, verdaderamente, las cadenas del pecado habían atado tan estrechamente que no podían ser tan fácilmente quebrantadas...
Anteriormente, Carlos creía que tenía una moral superior a los demás, pero cuando se dio cuenta de que no podía dejar de contar malos chistes a los empleados, se desesperó, y cada vez que quería contar un malo chiste, algo en su interior se agitaba, fue una lucha agónica <<Eso es malo, ¡no voy a hacerlo!! ¡No voy a hacerlo!!>> pero al fin él cayo en el pecado.
La única solución que encontró, fue, irse a Bebel y decirle todo lo que estaba pasando, y Carlos corrió apresuradamente a Bebel mientras estaba trabajando en el restaurante.

<< No sé que hacer, Bebel. No quiero contar malos chistes, sé que eso no agrada a Dios, pero no puedo dejar de hacerlo, he orado al Señor, pero siempre vuelo a contar malos chistes-- ¿Qué puedo hacer?>> Carlos estaba desesperado pero a Bebel le hizo gracia la pregunta, y soltó una risita. - Carlos se enfureció, --en su mano tenía una espátula porque estaba cocinado en la cocina y en su desesperación decidió a correr a Bebel por un momento y preguntarle qué podía hacer, pero al ver que Bebel reía, Carlos se enojó y cómo muestra de su exasperación, tomó la espátula y golpeó la mesa de acero inoxidable tan fuertemente que todos en el restaurante lo oían y las meseras corrían a Carlos asustadas -- << ¿Qué pasó?? Carlos, ¿Qué pasó? >> ellas pensaban que había una explosión o algo parecido pero Carlos, tratando de ocultar su enfado, les aseguró que todo estaba bien, y que no necesitaban preocuparse por nada.
Cuando finalmente todos se fueron, Bebel le miró seriamente y dijo: << Carlos, todo estará bien. Algún día, tú serás avergonzado delante del Espíritu Santo y después de eso, nunca volverás a contar un chiste malo. >>


Al oír esas palabras, Carlos se sentía una sensación que lleno todo su ser, como un rayo atravesándole el cuerpo, con una esperanza inexplicable y se emocionó mucho, al comprender lo que las palabras de Bebel significó....

<< ¿Qué me dices, Bebel?? ¿Seré avergonzado delante del Espíritu Santo??? >> preguntó Carlos lentamente.


<<Así es, Carlos. Tú serás avergonzado delante del Espíritu Santo y después de eso nunca volverás a contar un chiste malo. >> Bebel le habló firmemente, como Dios mismo le había revelado eso.


El cambio en el rostro de Carlos, reflejó que él estaba comenzando a creer lo que Bebel le decía. Ahora Carlos tenía que dar un "salto de fe" y comprender que sólo Cristo puede mover esas montañas en su vida y que por si mismo nunca pudiera dejar el vicio, -- sólo Dios es poderoso - ¡Él hace la obra en nuestras vidas!

Las palabras que Bebel pronunciara en aquel momento, volvían con claridad a su mente, y durante todo el día, Carlos pedía con gran fervor la ayuda de Dios. ****



Poco después, Carlos estaba hablando con una mesera, --pero por un momento, él había olvidado de sus oraciones, de sus peticiones, y de la angustia de su alma -- y Carlos comenzó a repetir un chiste malo a la mesera, y ella le escuchaba atentamente pero antes de cumplir el chiste, la cara de Carlos se puso roja, él se detuvo mientras hablaba... y no volvió a hablar, entonces Carlos se entristeció y se avergonzó como un hombre muriendo de vergüenza.


<< ¿Qué tienes, Carlos? Qué pasó? Por qué no me cuentas el chiste, quiero oírlo, Carlos, ¡cuéntame lo que pasó! >> la mesera le miró largamente, ella estaba confundida, no entendía que Dios estaba obrando en su corazón, y ella no sabia que en ese momento, Carlos estaba recibiendo una visita del Espíritu Santo y que éste le mostraba la gravedad y la suciedad de su pecado, Carlos sentía tan avergonzado delante del Espíritu Santo que no podía hablar.

Él nunca terminó ese chiste y nunca volvió a contar un chiste malo, porque en ese día, las cadenas de ese pecado estallaron en mil pedazos.

¡Gloria a Dios por sus obras maravillosas!!! Somos débiles pero Él es fuerte!





Una prueba dura

Carlos quería decirle al mundo que Jesús era real, que Dios le había cambiado, -ahora el frío interior que siempre le embargaba ya no lo sentía, sino una paz. En ese entonces, él creía sin duda que Dios nunca le dejaría sin respuesta.
****

Cada día, Carlos leía su Biblia muy animado, -él ya había experimentado el poder y el amor del Señor, y sabia perfectamente que... ¡Hay victoria en el Señor Jesús! Pues, cada versículo en la Biblia le afectaba y le enseñaba la voluntad de Dios para su vida, pero un día Carlos leía un versículo en la Biblia que le inquietaba bastante.... Mas yo os digo: No resistáis al mal; antes á cualquiera que te hiriere en tu mejilla diestra, vuélvele también la otra; Mateo 5:39

<< ¡Qué!>> pensó Carlos meneando la cabeza sorprendido, << No, no... yo no puedo hacer eso.>> Carlos reflexiono un momento y en seguida decía a si mismo << ¡Jamás se me bajaron las defensas!! Si yo no pudiera luchar, seguramente yo moriría, yo no entiendo el significado de ese versículo, debo preguntarle a Bebel...>>
***

<<Bebel, mira ese versículo, no puedo comprenderlo, si usted pudiera explicarme lo que significa... >> Carlos lo miró con grave ansiedad mientras Bebel leía el versículo.

<< Carlos..>> Bebel comenzó lentamente << La Biblia nos enseña que debemos volver la otra mejilla... si alguien te golpe, tú no puedes golpearlo, mas debes volver la otra mejilla.>>

Carlos abrió los ojos, asombrado, no esperaba oír eso, en lugar de animarse, como era costumbre al oír el consejo de Bebel, Carlos se puso más sombrío, y le miró como un hombre contemplando lo imposible. Al momento él fue desalentado, pero recobrándose el animo, dijo: << ¡Bebel! No! -yo no puedo hacer eso, alguna persona me mataría si yo hacia algo así. No puedo volver la otra mejilla...>>
Carlos sentía triste y frustrado a la vez, y se apartó con pasos fuertes, perdido entre sus pensamientos, --por un lado, sabía demasiado para retroceder, su espíritu no le dejaría en paz si volvía al mundo, a su antigua vida, pero ¡Esa decisión era tan difícil para Carlos!! Él solía pelear a puños con cualquiera que le incitara a la cólera y ahora tenía que volver la otra mejilla.

Durante todo el día, se amontonaron en su mente recuerdos de sus luchas, --desde pequeño, Carlos había vivido, envuelto en una nube de ira y violencia, él pensaba que no había otra manera de vivir y estremecía grandemente al pensar que un cristiano verdadero no puede defenderse. Después de un tiempo, su corazón ardía y se volvió duro como una piedra, él no quería dejar de luchar, de repente todo era oscuro, la paz y el gozo que él había sentido durante tres días ya no estaba en su corazón sino una fuerza, una solemnidad, una carga, que no se desvanecía, y al fin, Carlos se dio cuenta de que realmente no pudiera abandonar su fe, en su interior, había un impulso que lo obligaba a seguir el camino de Dios, pero Carlos no quería jugar con Dios y vivir por un día, la vida de un cristiano y otro día, vivir como un mundano en peleas y luchas constantes.

Cuando Carlos llegó a su casa, exhalo un suspiro desesperado, y decía : <<Me voy a arrodillarme y orar al Señor y no me levantaré hasta que he decidido a vivir para el Señor o vivir para el mundo, pero no voy seguir estando indeciso.>> -su cara parecía severa y mientras oraba, su voz estaba firme pero un poco trémula con emoción y desesperación, la inquietud en su espíritu le hacia profundamente triste y cansado.
Carlos se arrodilló y se inclino la cabeza y oraba y oraba o mejor dicho él luchaba contra si mismo, contra su carne y contra todo el malo que habitaba en su corazón... No sé cuanto tiempo Carlos permanecía orando pero cuanto se levantó-- ¡Era un Cristiano!!!!! Y él había aprendido a vivir una vida de total dependencia de Dios!!!

La salvación de Dios es tan real y tan precioso, como un tesoro....También el reino de los cielos es semejante al hombre tratante, que busca buenas perlas; Que hallando una preciosa perla, fué y vendió todo lo que tenía, y la compró. Mateo 13:45-46

Carlos se daba cuenta de que necesitaba vender todo para obtener ese tesoro precioso de Dios, él tenía que vender su arrogancia, sus palabras soberbias, su mirado superior, su habilidad de luchar y su manera de defenderse contra cualquier persona... Sí, Carlos tenía que vender todo pero después de eso, él recibió el Tesoro de Dios.
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

Eran las cinco de la mañana, y las puertas del restaurante ya no estaban cerradas, había un cartel colgado en la ventana que decía, -Abierto- y eso invitaba a cualquier a desayunar. Carlos y algunas meseras estaban cocinando y arreglando las mesas del restaurante, aparentemente era un día normal entre la semana; como de costumbre, había pocas personas en el restaurante en la mañana... Pero poco luego, la puerta del restaurante abrió con cierta lentitud, y un anciano entró, -él era un hombre muy delgado, de blanca barba y de aspecto andrajoso, tenía el pelo canoso, evidentemente era un hombre muy pobre pero él tenía una mirada seria y dulce, y unos ojos claros, bondadosos, que emitieron una compasión profunda.

Cada mañana este anciano apareció, comió una rebanada de pan tostado, y bebió un cafe, entonces él se fue calladamente, -Carlos le había visto cada día, durante dos años, pero antes de su conversión, él era tan egoísta que no le importaba los demás, él nunca hubiera notado este pobre anciano, y nunca hubiera querido conocerle pero ahora todo ser humano que Dios le ponía delante, le pareció una oportunidad de dar testimonio del gran amor de Dios. ***

<<María, ¿Quién es ese anciano? >> preguntó Carlos a una mesera.

Pero la cara de María, adquirió una expresión de molestia mientras respondía : ¡Carlos, déjalo en paz! Yo sé que él parece como un vagabundo pero él no hace ningún daño, y él no huele mal, siempre tiene el rostro limpio, aún su ropa andrajosa esta limpio, él es pobre pero realmente es un hombre amable, y no quiero que tú le molestas ¿Me entiendes?

Había visible sorpresa en la cara de Carlos, él agachó levemente la cabeza y dijo: Oh no, María, no quiero molestarle en absoluto, es que hay algo en él que me llamó la atención, y me gustaría hablar con él, eso es todo.



Maria le miraba fijamente por unos momentos, entonces dijo con más calma: Ok, Carlos, pero yo realmente no sé nada de él... cada mañana viene y come la misma comida - una rebanada de pan tostado y un café, él es muy callado.
***


Luego, Carlos se acerco al anciano, diciendo: ¡Hola, Señor! Me gustaría regalarte unos panqués, ¿si los quiere?


Pero el anciano no los quería... Por un momento, Carlos se encontró muy confundido porque podía ver que él era muy delgado y hambriento pero él siguió meneando la cabeza firmemente diciendo: Muchas gracias pero no lo necesito, cada mañana me gusta comer el pan y nada más. No necesito más.



Día tras día, Carlos dedicaba algún tiempo a hablar con este anciano, porque cuando le vió, se le entró una compasión enorme, y preguntaba a si mismo: ¿Qué puedo hacer para ayudar este anciano pobre?

Carlos pensaba que él tenía setenta años, más o menos, sus viejas y maltratadas manos revelaban que él era acostumbrado a hacer duro trabajo, y aunque él era un hombre viejo, él no había perdido su habilidad física, -debajo de sus arrugas, podía encontrar un hombre fuerte y capaz.
Usted pueda decir que este anciano encontró trabajo en el reciclaje, -durante el día, él recogió hierro, papel, plásticos, cartón, vidrio, metales, y muchas otras cosas, y lo llevo a un centro de reciclaje en la ciudad que le pagaban poco dinero por sus esfuerzos.

Poco a poco, Carlos se enteró de algunas detalles de su vida y se quedó impactado -- otra vez, Dios estaba mostrándole una vida ejemplar, un hombre que vivió solamente para servir al Señor. ***


<<Carlos, quiero invitarte a mi casa...>> después de decir eso, el anciano miraba a Carlos seriamente.


<Sí, me gustaría ir a su casa> decía Carlos amablemente
- En ese entonces, Carlos no sabía que Dios estaba obrando en su vida y preparándole a servirle de todo corazón. Verdaderamente, la vida de Carlos había cambiado completamente después de su conversión, las cosas viejas desaparecieron porque Dios estaba haciendo TODO nuevo, pero la obra de Dios es tan profundo, tan perfecto, que Dios tiene que obrar diariamente en nuestras vidas...
Este anciano era un ejemplo vivo de amar al prójimo y Carlos nunca olvidó lo que Dios le revelaba en este día....
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

Tu historia nos tiene emocionados Paz:) Gracias por tomarte el tiempo de compartirla con nosotros. Te sigo atento.


Saludos. Su bendición está contigo:)
 
Re: La conversion de Carlos~ un muchacho sin Dios

me alegro que le gustas la historia!!! La estoy escribiendo poco a poco... tal vez la semana que viene puedo publicar mas :)



Después de la invitación, Carlos y el anciano manejaban a su casa...
<< Aquí esta mi casa. >> decia el anciano señalando con el dedo.

Por unos momentos, Carlos miraba con extrañeza, -sólo había una colina empinada, y todo alrededor de éste parecía desertado, ¿Hay una casa en lo alto de esta colina?? -- pensaba Carlos a si mismo mientras iba cuesta arriba.

Pero después de subir la cuesta, Carlos miraba a todos lados a través de la noche y --no había una casa, no había nada... entonces Carlos volvió la cabeza y se encontraba frente al anciano pobre.
"Aquí esta mi casa." decia el anciano calladamente, "Entra por favor, Carlos, porque yo quiero mostrarte la cosa más preciosa que tengo en este mundo."
En este momento, le invadió un torrente de emoción y Carlos no sabia qué hacer... ¿Realmente voy a entrar en esta 'casa'? pensaba Carlos ansiosamente mientras miraba el anciano humildemente vestido, sin carro sin posesiones comunes y verdaderamente, sin una CASA. -Hay personas que viven en casas grandes, con puertas, y ventanas, y patios enlosados, y portales de columnas pero este anciano no tenía eso, -él había abierto un agujero en la tierra y llamaba este lugar oscuro 'mi casa'.

" ¿Qué voy a hacer? no quiero entrar pero si no lo hago, voy a ofender este pobre anciano. " Carlos vaciló un momento, pero no quería ofender el anciano, así que él lentamente entró a gatas en la 'casa' oscura, -eso era un momento inolvidable para Carlos, porque él no sabia que iba a ver...

Dentro de la 'casa' todo era oscuro pero Carlos notaba que no había mal olor. Él miraba por todos lados pero no alcanzó a ver claramente en aquella oscuridad, entonces el anciano entró y se encendió una lampara para alumbrar la habitación y poco a poco Carlos podía ver mejor las cosas, en un rincón de la habitación, había una cacerola en el piso de tierra, y en la pared había colgada una foto.. Carlos la miraba por unos momentos --era una foto del Señor Jesucristo.

"¿Por qué vives aquí? ¿No tienes suficiente dinero como para alquilar un apartamento?? Yo sé que trabajas mucho ¿por qué no tienes dinero??" Carlos sentía muy apenado al ver un hombre viviendo en tal condición y por eso, las preguntas venían con rapidez y en un tono preocupado, entonces Carlos hizo una breve pausa, y le observaba, esperando la respuesta.

" Yo tengo lo suficiente," empezó el anciano con firmeza, "No necesito un apartamento. Mira, Carlos, en esta ciudad hay muchas personas muy pobres, hay personas que no tienen suficiente comida, ropa y muchas otras cosas y a mi me gustan ayudarles... Quiero dar el dinero que tengo para ayudar esas personas necesitadas. Yo realmente tengo todo lo que necesito." El anciano habló con una pasión que Carlos no podía entender.

" ¿Pobres??!!" pensaba Carlos con asombro. "¿Qué quiere decir este anciano? ¡No conozco nadie tan pobre como él!".


"Carlos, yo quiero mostrarte la cosa más preciosa que tengo.." y cuando Carlos le miró, el anciano tenía en sus manos algo pequeño envuelto en plástico y lo desenvolvió cuidadosamente.

" ¡Aquí esta, Carlos! Eso es la cosa más preciosa que tengo... mi Biblia!" y el anciano levanto un libro muy usado.

Carlos le miraba, impresionado por sus palabras.. ¿La Biblia? ¿Eso es la cosa más preciosa que tiene?

El anciano había renunciado todo lo que el mundo pudiera ofrecerle, y él vivía el mensaje mas sorprendente para la humanidad - que es amar al Señor de todo corazón, de todo entendimiento, de toda el alma, y de todas las fuerzas, y amar al prójimo como á sí mismo. Muchas personas están entregados a la gratificación de sí mismos como el fin de su ser pero este anciano habitaba permanente en un estado de hacer todo su ser una ofrenda a Dios.

Carlos notó cómo una creciente alegría se pintaba en su rostro mientras el anciano hablaba de Jesús. Una y otra vez, le decía cuánto le amaba al Señor Jesús, y Carlos sentía muy conmovido por adentro mientras el anciano le hablaba, -según las apariencias este anciano no tenía nada pero SÍ!!! Él lo tenía todo porque tenía el Señor Jesús!!!!
El anciano le dijo a Carlos que no le faltaba nada en este mundo, --sin casa, carro, muebles, ropa buena, familia, sin un fin de cosas. ¿Qué lo había llevado a vivir así ? ¿Qué lo había hecho perder su vida de tal manera? No había sido una doctrina, o una religión particular sino un amor profundo para el Señor Jesucristo.

Mateo 16:24-26
Entonces Jesús dijo á sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese á sí mismo, y tome su cruz, y sígame. Porque cualquiera que quisiere salvar su vida, la perderá, y cualquiera que perdiere su vida por causa de mí, la hallará. Porque ¿de qué aprovecha al hombre, si granjeare todo el mundo, y perdiere su alma? O ¿qué recompensa dará el hombre por su alma?


-- No puedo describir la sensación que Carlos sentía en esa 'casa' y cuando salió, él levantó su rostro, machado por lagrimas, por un momento, sus ojos húmedos trataban de encontrar su carro mientras que su corazón iluminado con una nueva revelación de lo que realmente significa servir al Señor, y vivir para los demás, latía con una sola esperanza --¡Quiero servir al Señor!!