La clonación de embriones humanos

21 Agosto 2000
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www.bigfoot.com
¿Hay respuestas desde la Sagrada Escritura para los intentos actuales de la biogenética humana?
Creo que sí. La Iglesia Católica se está pronunciado de muchas maneras.
Pero me parece que hay que fundar en una serie de textos bíblicos principios básicos como son:
-la dignidad de la persona humana
-el carácter sagrado de la vida humana
-el embrión humano tiene el estatuto de persona humana indefensa
-el fin no justifica los medios
-hay otras vias ciemtíficas y ténicas posibles que permiten llegar a la clonación de tejidos sin sacrificar vidas humanas
Como mera información os envío unrecorte de agencia
======================
EE. UU. DESTINARA FONDOS PUBLICOS A EXPERIMENTAR CON EMBRIONES HUMANOS
El embrión queda reducido a un «conejo de Indias»

WASHINGTON, 24 agosto (ZENIT.org).- El Gobierno estadounidense autorizó
ayer, por primera vez, el uso de fondos públicos para la investigación con
embriones humanos, y más en concreto, de las células madre (o estaminales).
Estas células, procedentes de la destrucción de embriones, tienen el
potencial de convertirse en casi cualquier tejido humano.

La decisión de Washington es más tímida que la medida propuesta la semana
pasada por el ejecutivo británico, presidido por Tony Blair, quien ofreció
su apoyo a la clonación «terapéutica» --aún pendiente de aprobación por el
Parlamento--. La medida estadounidense, por el contrario, mantiene la
prohibición de la clonación de embriones y establece un proceso burocrático
para la aprobación de fondos que se destinarán a los proyectos científicos
que utilizarán embriones humanos.

La directiva del gobierno estadounidense, anunciada ayer por los
Institutos Nacionales de Salud --National Institutes of Health (NIH)--,
financiará experimentos utilizando embriones congelados en laboratorios y
que han sido abandonados por sus padres biológicos por diferentes motivos
--ya no les interesa tener un nuevo hijo o congelaron varios embriones para
asegurar mayores posibilidades de éxito en la gestación, etc.--. La nueva
normativa prohíbe el pago de compensaciones monetarias a las personas que
faciliten estos embriones. Los padres, cuyos espermatozoides y óvulos han
sido utilizados para la generación de estos embriones humanos congelados,
tendrán que autorizar su donación pero no podrán decidir específicamente su
destino científico final. Estas reglas tienen por objetivo impedir en lo
posible la creación de un mercado negro y bloquear el incentivo de que una
pareja procree una serie de embriones exclusivamente por intereses personales.

Bill Clinton, reconociendo los graves interrogantes morales que plantea la
medida, invitó a la opinión pública a considerar «los asombrosos beneficios
potenciales» de la investigación con células estaminales. Con estas
investigaciones se podrán crear bancos de células madre, capaces de generar
casi cualquier tipo de tejido, desde neuronas a músculos o huesos, lo que a
medio plazo podría convertirse en la solución para combatir enfermedades
degenerativas, reparar órganos dañados o paliar enfermedades como el
Parkinson o el Alzheimer.

El hombre como conejo de Indias
La decisión no ha dejado de suscitar alarma y polémica. Richard
Doerflinger, portavoz de la Conferencia Episcopal Católica de Estados
Unidos ha acusado a la Casa Blanca de haberse aprovechado de las vacaciones
del Congreso para emitir una directiva sobre la que algunos parlamentarios
ya habían anunciado batalla para que no se convierta en ley. «Es una
adulteración de la ciencia en nombre de la política», añadió Doerflinger.
La decisión gubernamental prevé destinar el dinero de los impuestos de los
contribuyentes estadounidenses a eliminar embriones humanos, es decir,
seres con plena dignidad humana, y ser utilizados como conejos de Indias.

Por otra parte, legisladores republicanos, que en el pasado se han opuesto
activamente a subvencionar este tipo de experimentos, han prometido que
esta batalla no se acaba con la normativa publicada ayer por la
Administración Clinton. De hecho, el Parlamento norteamericano ya ha
legislado que ningún fondo público puede ser utilizado en estudios en los
que «embriones humanos sean destruidos, descartados o sujetos a riesgos más
allá de lo mínimo».

Aunque estas restricciones sólo se aplican al ámbito público, también
influirán indirectamente en el sector privado, muy poco regulado, puesto
que las empresas que colaboren con los proyectos del Gobierno «deberán
aplicar las normativas de los Institutos Nacionales de Salud». En estos
momentos, la experimentación privada, liderada por las dos empresas Geron y
Advanced Cell Technologies (ACT), va muy por delante de los proyectos
federales. ACT incluso ha tratado de mezclar material genético humano con
óvulos de vaca.
ZS00082404
 
Yo es que no conozco un avance científico al que el hombre no le haya dado un uso perverso.
Andar jugando con embriones humanos como si fueran pelotas de ping-pong es una muestra de bajeza ética y moral extrema.
Y además, ahora tendremos que escuchar de los de siempre que la Iglesia católica, o la Ortodoxa o todas las protestantes no liberales, al oponerse a el uso "científico" de dichos embriones lo único que demuestra es su intolerancia y su mentalidad arcaica. Como si lo "progre" fuera el usar seres humanos como cobayas.
 
Este es un pais de encuestas : Si los politicos aprueban los experimentos , es porque el pueblo los desea . Asi estan las cosas , pero despues de todo , no hay que extrañarse , Clinton firmo el permiso del " Nacimiento parcial " el mas asqueroso crimen que pueda cometerse con una criatura en el utero .

A veces me hastio tanto por causa de esas mujeres para quienes un hijo es como un tumor canceroso , digno de extirparlo a pedazos , que solo me queda hacerme una pregunta ¿ Hasta cuando ?

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Elisa.
Apocalipsis 22:21
La gracia de nuestro Señor Jesus sea con todos
 
A más copias de lo mismo, menos valor para cada una.

¿Qué vale más: un humano o un oso panda?

Respuesta: un oso panda.

El humano podría poseer (pues no todos tienen) consciencia, inteligencia y venir preparado para desarrollar habilidades especiales; pero sus efectos secundarios podrían ser devastadores para el ecosistema, como lo podemos notar a simple vista.

En cambio el panda es una especie que aunque no es inteligente ni consciente de su propio ser, no provoca daños graves al ecosistema deliveradamente, aunque sufre de los demadres humanos y se encamina hacia su extinción (lo que eleva su valor).

Entre humanos y osos panda... deberían clonar pandas, al menos no hallo cómo clasificar a los pandas como 'plaga'.

De todas formas: se acaban los pandas y la gente trata de acabar con el mundo que tarde o temprano las cucarachas heredarán--uno de los seres catalogados como de menor valor pero de los más resistentes. Así como le echan genes de pescado a los tomates, la respuesta a la prolongación de la vida humana podría hallarse en los genes de cucaracha... y eso es algo que yo no quiero ver: la perpetuación de una superplaga... aunque piénsenlo: todo mundo tendrá pectorales.

Anyways, ¿por qué sacrificar la vida de un inocente animal para nuestro beneficio? Si somos tan listos como creemos entonces debemos conocer cómo ayudarnos a nosotros mismos mediante soluciones que partan de nosotros a nivel físico, anímico y espiritual, en caso de que acabemos con todo lo servible. Yo sé que en una hambruna extrema--como la que viene si seguimos abusando de la naturaleza--tanto cristianos como ateos comerán niños.

¿Aman los cristianos la vida realmente? ¿Por qué entonces no hacen algo para elevar el valor humano? Controlen su reproducción en favor de los otros seres vivientes que comparten el mundo con nosotros y que necesitamos para nuestra supervivencia--muchas especies que podrían tener la solución a nuestros problemas desaparecen, algunas sin siquiera darnos cuenta que existían--; o funden un instituto para la colonización y desarrollo de Marte y Titán, donde no hay nadie y hay mucho qué destruir.

IvyekaWahi Riebba, G.T.

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IAO
 
<BLOCKQUOTE><font size="1" face="Helvetica, Verdana, Arial">Comentario:</font><HR>Originalmente enviado por Elisa:

A veces me hastio tanto por causa de esas mujeres para quienes un hijo es como un tumor canceroso , digno de extirparlo a pedazos , que solo me queda hacerme una pregunta ¿ Hasta cuando ?[/quote]

¿Sabes qué? Yo conozco decenas de tumores cancerosos que caminan...

--Ivye--

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IAO
 
Acaso no es esto una prueba del pronto retorno de Cristo.......

Saludos

HCCH
 
Recomiendo un libro:

"Clonación humana" de Ed. Potavoz


Maripaz
 
En el fondo, San Francisco de Asís tenía razón,
wink.gif
 
Me parece que uno de los textos bíblicos más impresionantes que hablan de Dios misericordioso que ya conoce a su criatura cuando está en el seno de su madre es el siguiente:

Mi embrión tus ojos lo veían; en tu libro están inscritos todos los días que han sido señalados, sin que aún exista uno solo de ellos (salmo 139,16. Versión Biblia de Jerusalén)


Mi embrión vieron tus ojos, Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas Que fueron luego formadas, Sin faltar una de ellas.(salmo 139, 16.Versión Reina Valera 1960)

¿Quién osa no respetar a quien Dios contemple amorosamente?

Laurisilvo
 
Larusilvo, mi esposa Lidia dice que ese es el versículo que más veces ha leído cuando estuvo embarazada de Juan, nuestro segundo hijo, y en el reciente embarazo de nuestra pequeña Rut. A pesar de las dificultades que tuvo en ambos embarazos, cada vez que leía esa Palabra era como si viera en ella la promesa de Dios de que todo iba a salir bien

Bendiciones
 
Hola Hermanos:

Quisiera hacer un aporte sobre el tema de la clonaciòn, a continuaciòn les expongo el siguiente documento:


La clonación humana "terapéutica".


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Documento del Centro de Bioética de la Universidad del Sagrado Corazón de Roma, 12-1-99, (texto íntegro).

El siglo que está a punto de concluir ha sido definido "el siglo biotecnológico". En efecto, las noticias de la invención de nuevas técnicas de intervención sobre la vida vegetal, animal y humana invaden casi a diario la opinión pública, suscitando reacciones a menudo apasionadas y valoraciones opuestas.

Se corre el riesgo de hacer juicios fragmentarios y emotivos, fundados a veces en noticias incompletas y no bien comprendidas, o de acostumbrarse a anuncios sensacionales, sin tratar de formarse una idea precisa del alcance humano y cultural de lo que acontece.

Así pues, es necesario hacer una reflexión documentada, serena y objetiva, y ofrecerla como una debida contribución para información sobre todo de los que no tienen familiaridad con el tema, con el fin de ayudarles a tomar mayor conciencia con respecto a los eventos científicos y biotecnológicos que caracterizan a nuestro tiempo.

Lo que se ha hecho:

Después del anuncio de la clonación de la oveja Dolly, en los primeros meses de 1997 (como se recordará, se trató precisamente de la clonación por fusión de un ovocito desnucleado con una célula somática extraída de la ubre de una oveja adulta de seis años y cultivado en un laboratorio), la alarma se concentró inmediatamente en la posibilidad de transladar ese procedimiento al hombre. Las condenas morales de esta posibilidad fueron numerosas: desde diversas partes, remitiendo a una valoración prudente y competente el juicio sobre el empleo de este procedimiento sobre los animales, se solicitaron normas de ley claras y definitivas en lo referente a la clonación humana.

Ya desde el primer momento, en los diversos comunicados de los organismos internacionales (Unesco, Parlamento europeo, Consejo de Europa, Organización Mundial de la Salud.), se notaban expresiones y matices diversos, que en cualquier caso ponían el énfasis en una condena general de la clonación humana, condena que unas veces era fruto de un acuerdo entre diferentes concepciones antropológicas y éticas, y otras se basaba sólo en posibles consecuencias de dichos procedimientos.

A este respecto se difundían en la opinón pública hipótesis y expresiones que pretendían configurar procedimientos particulares encaminados a la producción de células y tejidos para sucesivos empleos de medicina experimental y clínica, sobre todo en la línea de los transplantes terapeúticos. Se habló de la producción de líneas celulares multipotentes a partir de células estaminales de origen embrional (precisamente células de la masa celular interna del blastocito), procedentes de embriones humanos producidos mediante clonación.

La opinión pública, por motivos de comunicación y por el deseo de ganar fácilmente consenso, fue inducida a creer que se podían producir células y tejidos por clonación de otras células y tejidos, sin considerar por el contrario, que ese procedimiento implicaría necesariamente la generación de embriones humanos, aunque sólo sea en la fase de blastocitos, no destinados a ser transladados al cuerpo de una madre para su sucesivo desarrollo, sino solamente con la finalidad de usar sus células y así destruirlos. Este "malentendido" indujo a muchos a considerar que esos procedimientos debían considerarse lícitos, dado que tenían una finalidad terapeútica de gran valor para la curación de determinadas enfermedades y no dañarían la integridad del individuo humano.

Entre tanto, llegaba el anuncio de que el mismo centro de Escocia que había clonado a Dolly estaba dispuesto a colaborar con una industria estadounidense en la producción de células y tejidos humanos mediante procedimientos de clonación y la formación de bancos de este precioso material.

En el caso se pidió la opinión de la Licensing Authority del Reino Unido, que respondió de forma afirmativa: en los primeros días del mes de diciembre de 1998 dio el visto bueno para ese procedimiento, es decir, se mostró favorable a una clonación con finalidad terapéutica considerada una especie de fruto de la biotecnología "de rostro humano".

Así, como a menudo acontece en estas situaciones, se planteó un dilema: o dar el visto bueno a esa producción, "benéfica", o impedir el avance de la ciencia hacia la victoria sobre enfermedades degenerativas (como la de Parkinson), metabólicas (como la diabetes mellitus con dependencia de la insulina) u oncológicas (como la leucemia).

En esta situación resulta urgente aclarar los términos de la cuestión y examinar de cerca la pertinencia de ese dilema.

Lo que se quisiera hacer

En realidad, lo que la industria biotecnológica pretende realizar mediante ese tipo de tecnología con fines terapéuticos es una auténtica clonación de individuos humanos. En efecto, no se trata de reproducir células idénticas entre si partiendo de una única célula progenitora, como acontece actualmente en el campo de los cultivos celulares; ni se trata simplemente de producir, con la técnica de la proliferación celular in vitro, tejidos destinados a la implantación (por ejemplo, tejido cutáneo, óseo y cartilaginoso), según los procedimientos de la "ingeniería de tejidos". Con esta técnica se toman del cuerpo humano o animal células capaces de proliferar y generar tejidos en laboratorio, con el fin de sustituir tejidos dañados del cuerpo de un paciente, por ejemplo, a causa de una quemadura grave. En efecto, si se tratara de la reproducción de células o de intervenciones de ingeniería de tejidos, no habría propiamente ninguna dificultad ética para admitir la licitud de esas técnicas.

Sin embargo, como saben muy bien los investigadores, aquí de lo que se trata es de la producción de células y tejidos a partir de embriones humanos clonados, es decir, de seres humanos a los que se les va a interrumpir su desarrollo para poderlos utilizar como fuente de "precioso" material biológico, a fin de "reparar" tejidos u órganos degenerados en un individuo adulto.

Es bien conocido que las células del embrión antes de la implantación en el útero y los células estaminales multipotenciales que se encuentran en el organismo humano también en fases sucesivas del desarrollo, tienen capacidad extendida de autorrenovación y de diferenciación, y se quisiera aprovechar esa potencialidad para las múltiples finalidades terapéuticas antes recordadas.

Por lo que se refiere a las células estaminales multipotenciales ya se sabe que pueden encontrarse también en otros tejidos, y no sólo en el embrión precoz. En efecto, se hallan, entre otros lugares, tanto en el saco vitelino, en el hígado y en la médula ósea del feto, como en la sangre del cordón umbilical, en el momento del parto. Cuando se recocojan células estaminales de embriones o fetos abortados espontáneamente o del cordón umbical, en el momento del parto, no existen particulares problemas eticos. Sin embargo, estas células no serían capaces de dar lugar a la variedad de diferenciaciones celulares que, por el contrario, se pueden lograr en las células estaminales obtenidas de embriones y, por consiguiente, al parecer no satisfacen las exigencias del biotecnólogo, el cual busca células numerosas, vitales y seleccionadas en relación con las solicitudes clínicas. Por eso, la producción de un organismo humano en fase embrional de desarrollo mediante clonación sería considerado una fuente preferencial y una reserva de la que se puede disponer en el tiempo, aprovechando la crio-conservación de ese mismo embrión. Además, los tejidos así obtenidos resultarían histocompatibles con los del donante del núcleo, el paciente mismo; este hecho permitiría superar el problema del rechazo propio de los trasplantes con tejidos "ajenos" al paciente.

El uso de la clonación en ese sentido permitiría, por tanto, tener un producto específico y "abundante", capaz de alimentar las esperanzas de una floreciente actividad bioindustrial. Y, si reflexionamos; un momento, podremos caer en la cuenta de que, en efecto, la invitación a emprender el camino de la investigación sobre la "clonación terapéutica", vino precisamente de la industria biolecnológica. Por ejemplo, precisamente una industria estadounidense se mostró muy interesada, anunciándolo por Internet, en la posibilidad de patentar productos para la terapia de enfermededes degenerativas vinculadas a la edad, por lo que se mostró dispuesta a financiar esas investigaciones que lleven a la producción de células estaminales, así como o la identificación de los factores de diferenciación celular tanto para preparar intervenciones de ingeniería genética como para utilizarlos en los transplantes.

El juicio ético

Las implicaciones bioéticas de esos procedimientos, a pesar de los propósitos "humanísticos" de quien anuncia curaciones espectaculares por este camino que pasa por la industria de la clonación, son enormes y requieren un juicio sereno pero firme, que muestre la gravedad moral de ese proyecto y motive su condena inequívoca.

Ante todo, es preciso decir que la finalidad "humanística" a la que se remite no es moralmente coherente con el medio usado; manipular a un ser humano en sus primeras fases vitales a fin de obtener material biológico necesario para experimentación de nuevas terapias, llegando así a matar a ese ser humano, contradice abiertamente el fin que se busca: salvar una vida (o curar enfermedades) de otros seres humanos. El valor de la vida humana, fuente de igualdad entre los hombres, hace ilegítimo un uso meramente instrumental de la existencia de uno de nuestros semejantes, llamado a la vida para ser usado solamente como material biológico.

En segundo lugar, esta manera de actuar cambia totalmente el significado humano de la generación, que ya no se piensa y realiza en orden a la reproducción, sino que se programa con fines médico-experimentales (y por eso también comerciales).

Este proyecto se alimenta con la progresiva despersonalización del acto generativo (introducida con las prácticas de la fecundación extracorpórea), el cual se convierte en un proceso tecnológico que transforma al ser humano en propiedad para uso de quien, en un laboratorio, es capaz de engendrarlo.

En la clonación humana con fines terapéutico-comerciales, se altera la figura misma del "progenitor", reducido al rango de prestador de un material biológico con el que se engendra un hijo-gemelo destinado a ser usado como suministrador de órganos y tejidos de recambio.

Esta manera de actuar es contraria incluso a la Convención europea sobre los "derechos del hombre y la biomedicina", la cual, a pesar de permitir -y se trata de una opción que consideramos lamentable y moralmente ilícita- la utilización de embriones supernumerarios obtenidos con los métodos de fecundación artificial, sin embargo prohibe su producción con fines experimentales (art. 18 b). El hecho de que el Reino Unido no haya firmado aún esa Convención no es motivo suficiente para subestimar el principio expresado por la Convención europea, que sanciona el derecho de todo ser humano a no ser engendrado para fines diferentes de la reproducción misma.

En el caso que aquí estamos examinando, además, no se utilizan los criterios de la experimentación, arriesgada o no arriesgada, sino que se avala el principio según el cual sería legítima una utilización del ser humano que implique su destrucción.

Pero esa manera de actuar está en flagrante oposición con los derechos del hombre, dado que permitiría utilizar a un ser humano vivo para obtener de él células o tejidos, aunque sea para el bienestar de otro individuo, incluso cuando eso implica la muerte del ser humano utilizado.

El principio que de hecho se introduce, en nombre de la salud y del bienestar, sanciona una auténtica discriminación entre los seres humanos según la medida de los tiempos de su desarrollo (así un embrión vale menos que un feto, un feto menos que un niño y un niño menos que un adulto), trastocando el imperativo moral que, por el contrario, precisamente impone defender y respetar con el máximo empeño a los que no son capaces de defender y manifestar su intrínseca dignidad.

La civilización occidental, que ha sabido emanciparse de las discriminaciones raciales y ha sancionado el derecho de todo ser humano a ser tratado como miembro de la familia humana, independientemente de sus condiciones de salud, edad y estado social, ahora corre el peligro de permitir, con la mediación de la tecnología, la llegada de una nueva barbarie.

El proyecto de la clonación humana con fines terapéutico-comerciales manifiesta el regreso del darwinismo social en el que se fundó el racismo poeudocientífico de fines del siglo XIX.

La práctica de la clonación no puede encontrar ninguna legitimación ni siquiera en las discusiones referentes a la identidad individual y personal del embrión obtenido en forma programada en un laboratorio: se trata de un nuevo ser humano, intrínsecamente orientado a su desarrollo y a su plena maduración individual, que se actuaría si no se lo impidieran a sabiendas. Tampoco tiene consistencia la referencia al hecho de que estos seres humanos en fase embrional, destinados a proporcionar células y tejidos, no sean capaces de sentir dolor: la ausencia de dolor no justifica la supresión de un ser humano; matar a un hombre bajo anestesia seguiría siendo un homicidio.

Es demasiado evidente que aquí, apelando al criterio de la salud, se cuenta con la complicidad del egoísmo colectivo: la estrategia lingüística con la que se quiere anular el significado moral de la clonación humana (por lo que hoy se ha introducido el término "cuerpo embrioide" para referirse al embrión construido in vitro mediante la clonación y destinado a ser destruido deliberadamente) manifiesta el disgusto originario frente a la convicción de que se está proyectando engendrar, usar y eliminar a uno de nosotros.

En cambio, es preciso tener la valentía de mirar a través del microscopio electrónico y reconocer que allí no hay una célula cualquiera, no hay un material genético amorfo, sino que hay un ser humano que inicia su camino vital. Los fines terapéuticos, aunque fueran verdaderos y no sólo hipotéticos y sustitutos de delitos reales, no justifican jamás el asesinato programado de un semejante o su producción en serie.

La lógica que domina en este proyecto está vinculada al mercado biotecnológico, y no tiene nada que ver con el momento cognoscitivo propio de la ciencia. No podemos olvidar que a este resultado se ha llegado con la puesta en marcha de la procreación artificial, cuando se procedió a separar el momento y el hecho procreativo de la expresión del amor conyugal y personal: este hecho ha entregado el embrión a la explotación biotecnológica y comercial.

La ciencia ha sabido encontrar, y pensamos que puede encontrar, formas de terapia para las enfermedades de base genética o degenerativa a través de otros procedimientos, como la utilización de células estaminales tomadas de la sangre materna o de abortos espontáneos, prosiguiendo las investigaciones en el campo de las terapias génicas y recurriendo de nuevo al estudio sobre los animales: si, por hipótesis, la única vía posible fuera, por el contrario, la de la clonación humana, entonces sería preciso tener la valentía intelectual y moral de renunciar a este camino, dado que imponer el origen y la muerte de uno de nuestros semejantes para garantizar la salud es un acto de injusticia que lesiona en sus fundamentos nuestra dignidad y nuestra civilización. Roma, 12 de enero de 1999.

La vez anterior traje a colaciòn los cultivos de tejidos fetales, pero no se tomo en cuenta tema tan importante.

Dios los bendiga.
 
El salmo 139: 15-16 dice...

<BLOCKQUOTE><font size="1" face="Helvetica, Verdana, Arial">Comentario:</font><HR>...Bien que en LO OCULTO fui formado, y entretejido en lo más profundo de la tierra. Mi embrión vieron tus ojos, y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas que fueron luego formadas, sin faltar una de ellas.[/quote]

...aquí no dice en ningún momento que Dios comtempla embriones amorosamente; sino que se implica que Dios sabe el desarrollo de estos y lo que eventualmente pasará con ellos--malo o bueno.

--ElWahi Riebba--
...el misterio FUE, la obscuridad FUE.

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IAO
 
Ivyeka : No voy a negar que tienes razon en una buena parte de lo que dices , sobre todo en lo nocivo que somos , aunque no nos lo propongamos en muchos casos , asi somos , y ademas , pesimos mayordomos : Ni se sabe los horrores que hemos hecho y hacemos a diario en nombre de nuestro egoismo .

Si hay algo que me molesta mucho , es la indiferencia aparente de la cristiandad ante toda vida que no sea la humana . Para colmo , ahora asocian la preocupacion por el planeta en general , a la nueva era . Pero somos bastante los que nos preocupamos y amamos la creacion , pero aun asi , es insuficiente lo que podemos hacer . Yo especialmente siento una profunda ternura por los llamados animales inferiores , me resulta imposible , no amar y respetar la inocencia

De algo estoy segura Ivyeka Wahi , que yo me sentiria mas confiada y segura conviviendo con leones , serpientes , y tiburones , que con esos canceres andantes de los que hablas
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Y como abundan . Por aqui por estos foros y otros semejantes , se pasean , se han paseado y se pasearan algunos de ellos ; con su malignidad disfrazada de bondad cristiana . Son los lobos disfrazados de ovejas sobre los que hablo EL MAESTRO

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Elisa.
Apocalipsis 22:21
La gracia de nuestro Señor Jesus sea con todos
 
"En lo oculto fui formado. Conociste mi embrión"
Se trata de "alguien" que Dios conoce, no de "algo".
Por ello pienso que ya vale para quien vive en el seno materno todo lo que dice la Escritura sobre la vida humana.

«Pediré cuentas de la vida del hombre al hombre» (cf. Gn 9, 5):
" Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre " (Gen 9, 5, versión Reina Valera).

Dios se proclama Señor absoluto de la vida del hombre, creado a su imagen y semejanza (cf. Gn 1, 26-28). Por tanto, la vida humana tiene un carácter sagrado e inviolable. Dios se hace juez severo de toda violación del mandamiento «no matarás», que está en la base de la convivencia social. Dios es el defensor del inocente (cf. Gn 4, 9-15; Is 41, 14; Jr 50, 34; Sal 19/18, 15). También de este modo, Dios demuestra que «no se recrea en la destrucción de los vivientes» (Sb 1, 13). Sólo Satanás puede gozar con ella: por su envidia la muerte entró en el mundo (cf. Sb 2, 24). Satanás, que es «homicida desde el pricipio», y también «mentiroso y padre de la mentira» (Jn 8, 44), engañando al hombre, lo conduce a los confines del pecado y de la muerte, presentados como logros o frutos de vida.

Comprendo que en la base de este razonamiento está en ver una persona indefensa en el embrión.
 
"En lo oculto fui formado. Conociste mi embrión"
Se trata de "alguien" que Dios conoce, no de "algo".
Por ello pienso que ya vale para quien vive en el seno materno todo lo que dice la Escritura sobre la vida humana.

«Pediré cuentas de la vida del hombre al hombre» (cf. Gn 9, 5):
" Porque ciertamente demandaré la sangre de vuestras vidas; de mano de todo animal la demandaré, y de mano del hombre; de mano del varón su hermano demandaré la vida del hombre " (Gen 9, 5, versión Reina Valera).

Dios se proclama Señor absoluto de la vida del hombre, creado a su imagen y semejanza (cf. Gn 1, 26-28). Por tanto, la vida humana tiene un carácter sagrado e inviolable. Dios se hace juez severo de toda violación del mandamiento «no matarás», que está en la base de la convivencia social. Dios es el defensor del inocente (cf. Gn 4, 9-15; Is 41, 14; Jr 50, 34; Sal 19/18, 15). También de este modo, Dios demuestra que «no se recrea en la destrucción de los vivientes» (Sb 1, 13). Sólo Satanás puede gozar con ella: por su envidia la muerte entró en el mundo (cf. Sb 2, 24). Satanás, que es «homicida desde el pricipio», y también «mentiroso y padre de la mentira» (Jn 8, 44), engañando al hombre, lo conduce a los confines del pecado y de la muerte, presentados como logros o frutos de vida.

Comprendo que en la base de este razonamiento está el ver una persona indefensa en el embrión.
 
Saludos:

<BLOCKQUOTE><font size="1" face="Helvetica, Verdana, Arial">Comentario:</font><HR>
Éxodo 21,22 ss. :

[22].Si unos hombres, en el curso de una pelea, dan un golpe a una mujer embarazada provocándole un aborto, sin que muera la mujer, serán multados conforme a lo que imponga el marido ante los jueces. [23].Pero si la mujer muere, pagarán vida por vida, [24].ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, [25].quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe.
[/quote]

En este texto, si la mujer muere, se paga vida por vida. Si muere el feto, se paga una indemnización monetaria. Es claro que para la Biblia los fetos no son vida humanani personas. La diferencia en el trato es obvia.


P.D.

Laurisilvo:

"Conociste mi embrión"... es bastante diferente a "Me conociste cuando yo era embrión".

Es absurdo sostener que la biblia considera al embrión como una persona.


Bye!
 
Stauros, no todos los abortos suponen la pérdida de la vida del feto. En caso de que el feto sea tenga las semanas suficientes de gestación, puede sobrevivir.

Dices que "es absurdo sostener que la biblia considera al embrión como una persona"

Yo te digo que la Biblia considera a "lo" que está dentro del seno de la madre como una persona humana. Y es más, TODOS los cristianos están de acuerdo con eso.
 
Si se lee el contexto inmediato de las leyes en que fue dictado este "inspirado" mandamiento, termina resultando evidente que en este caso se refiere al aborto estándard, es decir un aborto, como todos los abortos, en los cuales el feto muere. (No parto prematuro).

Un versículo atrás se dice que si un amo apalea a su esclavo y muere antes de dos días, entonces el amo debe morir, pero que si dura más de dos días, no hay problema porque el esclavo es su propiedad.

¿Con este "inspirado" valor de la vida humana del esclavo (que a todas luces es hombre) vas a decirme que el siguiente mandato se refería a una hipotética y altísimamente improbable supervivencia de un feto?

¡Cómo sería de fácil que un feto de 6 o 7 meses sobreviviera en palestina con el avance científico de la época!

Además, el resto del contexto dice claramente a quiénes se refieren los daños:

23 Mas si hubiere muerte, entonces pagarás vida por vida, 24 Ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, 25
Quemadura por quemadura, herida por herida, golpe por golpe.

¿Acaso tienen dientes los fetos? ¿Acaso un feto podría recibir una quemadura en el interior del útero?

El contexto es claro... La muerte del feto (ABORTO) se pagaba con una indemnización monetaria... el daño a la Madre (PERSONA), con la ley del Talión "divinamente inspirada".

Que estés muy bien.
 
<BLOCKQUOTE><font size="1" face="Helvetica, Verdana, Arial">Comentario:</font><HR>Originalmente enviado por Maripaz:
Recomiendo un libro:

"Clonación humana" de Ed. Potavoz


Maripaz
[/quote]

Estimada señora MaRIpaz:

Me gustarìa leer ese libro y no lo encuentro acà en esta atrasada isla del Caribe en donde no todos los libros llegan.
si ud. desea enviarmelo puede hacerlo a la siguiente direcciòn:

Dr.Kepale
Apartado 3-D.
Estafeta independencia
Santo Domingo
Republica Dominicana

Gracias y aprovecho para escusarme por el asunto de enamorarse de Juan Manuel, ya que al principio creì que ud. era una muchachona rebosante y despues entendì que se trataba DE una honorable señora.

A Dios sea la Gloria.
A nuestro Cristo de la Gloria
 
<BLOCKQUOTE><font size="1" face="Helvetica, Verdana, Arial">Comentario:</font><HR>En cambio, es preciso tener la valentía de mirar a través del microscopio electrónico y reconocer que allí no hay una célula cualquiera, no hay un material genético amorfo, sino que hay un ser humano que inicia su camino vital. Los fines terapéuticos, aunque fueran verdaderos y no sólo hipotéticos y sustitutos de delitos reales, no justifican jamás el asesinato programado de un semejante o su producción en serie.[/quote]


Hola, ¿qué tal?

Estoy de acuerdo con los últimos comentarios de Stauros... muy buenas observaciónes... ¡y con la Biblia en la mano! Felicidades.

Mi granito de arena:

Imaginaós que de aquí a 20 años se consigue crear un banco de tejidos procedentes de la clonación que permiten a otro ser viviente prolongar sus días en esta tierra, ... ¿es esto moral?

Yo creo que aquí no entra la moral, sino la supervivencia humana

¿No es lícito que hechemos mano de la técnica para curarnos? Yo creo que sí.

Ahora va la otraopinión, la cristiana...

El concepto de vida es divino. Nadie puede explicar la vida, porque la vida es un misterio, aún para los científicos. Ahí, en esa esencia jamás podrá penetrar el científico. Lo más que puede hacer es jugar a los soldaditos en casa de un desconocido, y ese desconocido les permite jugar a los soldaditos en su casa, y además no le importa...

...o creíais que el dueño de la casa era tan egoista como para no dejarnos jugar en su casa?


¡Como si por el hecho de jugar a los soldaditos corriera peligro la vida... siquiera la vida que ya está destinada en el Libro...!


DOS (Dios Os Sacuda)


O sino preguntad, preguntad....
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