En este momento, elevo mi oración por Ud. y por el bebé. No recuerdo ninguna otra ocasión que hayamos dado seguimiento a todo un embarazo. Recuerdo el momento en que le pregunté si tenía hijos y me contestó que no. No tardo mucho tiempo Ud. en comunicarnos la buena nueva.
Nuestra apuesta sigue en firme..... un hijo , o hija, tiende a ablanarnos el corazón. La mente más racional puede conmover el espíritu y espero que el suyo se vea tal.
Que Dios la bendiga, a Ud. y a la nena.
Nuestra apuesta sigue en firme..... un hijo , o hija, tiende a ablanarnos el corazón. La mente más racional puede conmover el espíritu y espero que el suyo se vea tal.
Que Dios la bendiga, a Ud. y a la nena.