Jesús, 3000 años antes de Cristo.

20 Octubre 2004
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Jesús, 3000 años antes de Cristo
Claude-Brigitte Carcenac Pujol



Grijalbo
328 páginas

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El problema de este libro es que promete mucho y luego da poco. Me explico, uno lee el título y echa un vistazo a las ilustraciones y llega a la apresurada conclusión de que existió un Jesús egipcio 3.000 años antes que el "histórico". O, al menos, que el mito cristiano tiene precedentes claros y concretos en la mitología egipcia.

Y no es eso.

Queda, no obstante, la certeza, de que el Cristo descrito en los cuatro evangelios sinópticos es un precipitado de mitologemas anteriores, aunque no queda claro si podemos concluir que son tan sólo un cúmulo de tradiciones anteriores o si los Lucas, Mateo, Juan y Marcos (suponiendo que existieran) "ambientaron" una historia real con los datos de su "sueño cultural".

El problema es que, con tiempo y una caña, es fácil buscar arquetipos comunes entre diversas culturas. Y si tomamos un mito muy concreto en el tiempo y en el espacio, el de Cristo, que se produce en unos 30 años de transcurrir vital y lo contrastamos con 3.000 años de vida mítica y cultual egipcia… lo sorprendente es que no encontráramos similitudes.

Punto por punto, raro es el pasaje novotestamentario que no tiene precedentes, a veces turbadores, en la religión egipcia y es un hecho evidente que la historia de estos dos pueblos antiquísimos, el hebreo y el egipcio, debieron tener a lo largo de los siglos múltiples contactos e intercambios. Mutuas influencias en ambos sentidos, que hacen difícil separar lo que es de cada cual. Al fin y al cabo los hinterland respectivos están muy cercanos, no olvidemos que la brecha de Suez es muy reciente en la historia.

El trabajo de la autora es sistemático y abundan los cuadros comparativos donde se contrastan los cuatro evangelios cristianos con diversos mitos egipcios. Y las similitudes son, frecuentemente, turbadoras…

Enumerarlos sería largo, aunque apasionante. ¿no es acaso san Pedro con sus llaves muy parecido al Anubis Psicopompo?

Ya el griego Atrapan mantuvo en la antigüedad la tesis del origen judío de toda la cultura egipcia. Abraham y Moisés habría sido no sólo líderes hebreos, sino maestros de los egipcios, a quienes hubieran transmitido la astronomía, la filosofía y hasta la escritura jeroglífica.

H. Brunner, entre otros, ya señaló hace tiempo que la narración de la infancia de Jesús en los evangelios es inimaginable sin la influencia de mitos egipcios.

La propia María, sería una Mirjam ("vidente" o "dama"), nombre egipcio que significa "La Amada de Amón".

La huída de Jesús y María hacia Belén recuerda sorprendentemente el viaje de Isis a las tierras del Delta, acogida finalmente en la casa de un modesto pescador.

Sorprende también la anunciación bíblica a los pastores, por cuanto, en Israel, era un gremio bastante desprestigiado y equiparado a los ladrones. De hecho su testimonio no era válido ante un tribunal. Así que resulta extraño que los ángeles los eligieran para "dar fe" de la llegada del Salvador.

También la ofrenda de oro, incienso y mirra, que hacen los Magos, pertenece al mundo egipcio, pues estas son las tres "emanaciones" o secreciones de los dioses.

Hasta la circuncisión parece tener un origen egipcio, aunque no estaba tan extendida como entre los judíos.

Pero es la fábula de Osiris la que más parecidos guarda con la vida de Jesús. Tantos que parece difícil no establecer el origen del mito cristiano en el antecedente egipcio.

La creencia en un Salvador o Mesías (llamado además, El Hijo del Hombre) es recurrente en Egipto, durante siglos.

También Horus (definido como El Camino, la Verdad y la Vida) recuerda mucho a Jesús y otro tanto podría decirse de la "pesca de almas" (representada incluso gráficamente en algunos bajorrelieves egipcios), del Juicio Final (con balance y pesaje de almas incluido), así como el Infierno y el Cielo.

Conceptos tan familiares al cristianismo como es la execración de las riquezas y la condena de los ricos, lo mismo que la exaltación de la pobreza, son también de origen egipcio: "Si una cosa te pertenece, da una parte a Dios, es decir a los pobres" y hay en el mundo nilótico conceptos muy semejantes a las Bienaventuranzas.

Hasta la comunión, con las dos especies, recuerda al consumo de la sangre de Osiris… sino fuera porque es idéntico a los ritos mitráicos, mucho más recientes. (1). Los fieles egipcios, llegados al cielo, degustarán el "pan de la eternidad" y la "cerveza de la eternidad".

Algo más traído por los pelos parece la equiparación entre el episodio en el que el faraón Ramsés II durante una batalla se ve separado del grueso del ejército y está a punto de morir, con el episodio del monte de los Olivos. Aunque Ramsés se sienta abandonado de su padre Amón y se queje amargamente de su soledad (y aunque se ofrezca una comparación estructural: la soledad del personaje principal, el abandono de por sus compañeros, el peligro de muerte, la oración, los reproches dirigidos a los compañeros…) las diferencias son sustanciales.

Los ejemplos, en fin, son tan numerosos, que la mera enumeración se haría muy larga. Algunos de estos "mitologemas estructurales" son muy convincentes y evidencian una hermandad espiritual evidente. Otros, como hemos visto, no tanto.

Este libro, de todos modos, parece inscribirse en una obra investigadora más amplia llevada a cabo por la autora y su marido Llogarí Pujol Boix. Imaginamos que el conjunto de esta obra alcance alguna conclusión mas concreta.

De todos modos las cuestiones planteadas son interesantes y el material recopilado merece una lectura atenta. Claro que no es sólo la cultura egipcia la que puede darnos claves de los mitos novotestamentarios, pero es al menos una línea de investigación de las varias posibles.

© Antonio Ruiz Vega
(1) En este mismo turbador documento, Osiris ofrece su sangre en una copa de vino, a fin de que al beberla Isis no le olvide después de su muerte. El episodio es dramático y se parece muchísimo a la institución eucarística en la que Jesús, como Osiris, al tener presciencia de su muerte, teje, en un último símbolo, lazos postreros con sus allegados y los continuadores de su obra, los apóstoles.


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Re: Jesús, 3000 años antes de Cristo.

Me disculpo por la letra pequeña. Ésa es una crítica al libro del mismo nombre, muy interesante, donde expone las similitudes entre las historias de Jesús y la de la religión egipcia, cuyos paralelismos son impresionantes. El libro reexamina la Biblia con ayuda de la egiptología, encontrando paralelismos impresionantes, desde la anunciación, la huída, el nacimiento, los pastores, los sabios, hasta la circunsición (que, aunque no Universal, era también una práctica egipcia), incluso el bautismo era usado por los egipcios.

Realmente vale mucho la pena que lo examinen cuidadosamente. No es la primer hipótesis sobre una mayor importancia egipcia dentro del cristianismo, ya otros autores afirman que Moises, quien escribió la Biblia, fue adoctrinado por los sacerdotes egipcios recibiendo la educación hermetista igual que cualquier otro miembro de la casa real, aprendió cábala dentro de egipto y luego escribió el libro, inspirado por Dios de modo tal que cada línea develara misterios filosóficos, claro que esta teoría no es más que una hipótesis sin muchas pruebas, mas que las lógicas, como la educación de Moisés, la educación de la casa real que se encuentra documentada, los estudios sobre la filosofía hermetista, etc.

Aún así les invito a que lean este libro de Jesús 3mil años antes de cristo.
 
Re: Jesús, 3000 años antes de Cristo.

esto es facil de descaratar

El dios de Egipto el becerro fue degollado el dia de la pascua en frente de Todo egipto miles de veces......

y creen que todo Egipto fuera insultado por Moises y sus profetas sin influenciar a los Hebreos?

como piensa el ignorante.........aceptan todo disparate irracional pero jamas la verdad!
 
Re: Jesús, 3000 años antes de Cristo.

"Jesús nunca existió, o si existió fué hindú"

"Moisés nunca existió, o si existió fué egipcio"

El odio irracional anticristiano ha reducido la pasada generación de argumentos a una simple y llana negación (el "noexistionisismo").

Lástima que su deconstrucción histórica siempre flaquee a la hora del sustento bibliográfico. Era obvio que nadie podría salir bien librado con un argumento tan débil, y tan fácil como llega, se vá.

Para más información, ver mis aportaciones en todito, donde trato multiplicidad de "nunca existiones".

Que Dios les bendiga.
 
Re: Jesús, 3000 años antes de Cristo.

La teoría es débil, eso es muy cierto. Pero la razón por la que recomiendo el libro no es por las conclusiones apresuradas, o nulas, sino por los paralelismos entre la historia de Cristo y la religión egipcia. Eso es todo.