Bien, entonces alábale tú según tu opinión, yo alabo su disposición, su entereza, y su entrega, y es bueno hacerlo, porque como sierva fue muy entregada, de la misma manera que son alabables los apóstoles en su disposición, sacrificio y entrega, dignos en verdad de ser imitados, pero de ahí a hacerme una estatua de todos los apóstoles y de María misma y postrarme en su presencia y componerles oraciones, hay mucha distancia; La alabanza entre los hermanos no llega hasta esos límites, no al punto de postrarse delante del otro; Juan mismo cuando recibía la revelación del Apocalipsis al postrarse a los pies del Ángel (vivo) no frente a su estatua, fue reprendido por el Ángel quien le dijo "Mira, no lo hagas; porque yo soy consiervo tuyo, de tus hermanos los profetas, y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios" Eso hermano mío que ustedes hacen al postrarse frente a una imagen representativa, se llama Idolatría, no es la sana alabanza entre hermanos, alabanza de exhortación, de felicitación, de admiración, de ejemplificación..