¡ES INCREÍBLE!
UN “EJÉRCITO DE SALTAMONTES”
«El ángel del Abismo
es el jefe de los saltamontes.
En hebreo se llama Abadón,
y en griego se llama Apolión;
en ambos idiomas,
su nombre quiere decir «Destructor».
Ese fue el primer desastre,
pero todavía faltan dos.
[…]
Entonces el sexto ángel
soltó a los cuatro ángeles,
para que mataran a la tercera parte
de los seres humanos,
pues Dios los había preparado
exactamente para esa hora, día, mes y año.»
Apocalipsis 9:11-12, 15 TLA
«Será un día de gran oscuridad,
un día de nubes y de sombras.
»Un ejército grande y poderoso
se extenderá sobre los montes,
y caerá sobre toda la tierra
como las sombras al anochecer.
No hubo antes, ni habrá después,
otro ejército que se le parezca.
Ese ejército es como el fuego,
que quema todo lo que encuentra:
antes de su llegada,
la tierra es un paraíso;
después de su llegada,
la tierra queda hecha un desierto.
¡No hay nada que se le escape!
»Ese ejército de saltamontes
ataca como la caballería;
cuando saltan sobre los montes,
el ruido que hacen se parece
al que hacen los carros de guerra;
son como el crujido de hojas secas
que se queman en el fuego;
son como un ejército poderoso
que está listo para el ataque.
»Estos saltamontes parecen
una banda de ladrones,
son como un ejército que ataca
por sorpresa la ciudad,
y siempre ataca de frente.
Escalan las murallas,
se trepan a las casas,
se meten por las ventanas,
sin chocar unos con otros.
Todos mantienen el paso,
jamás rompen la formación,
¡jamás dan un paso atrás!
¡Ni una lluvia de flechas
puede hacer que se detengan!
Al ver estos saltamontes la gente tiembla
y se pone pálida de miedo.»
Joel 2:2-9 TLAI
«No se dejen engañar
por lo que dicen.
Pues aquel día no vendrá
hasta que haya
una gran rebelión contra Dios
y se dé a conocer
el hombre de anarquía,
aquel que trae destrucción.»
2 Tesalonicenses 2:3 NTV
«¡Ay de ti, destructor no destruido;
traidor no traicionado!
Cuando acabes de destruir,
serás destruido,
cuando acabes de traicionar,
serás traicionado.»
Isaías 33:1 DHH94I