Señor, quiero darte las gracias públicamente por haberte manifestado de forma clara y contundente en medio de todas las dificultades por las que llevo pasando los últimos meses.
No hace falta que entre en detalles pero doy testimonio aquí y ahora de que, aun cuando yo no siempre te soy fiel, tu fidelidad es inquebrantable.
Y si por algo me merece la pena continuar luchando es para ser testigo público de esa gran verdad, de tu misericordia y tu cuidado para con tus hijos.
Sea tu nombre bendito y alabado por siempre
No hace falta que entre en detalles pero doy testimonio aquí y ahora de que, aun cuando yo no siempre te soy fiel, tu fidelidad es inquebrantable.
Y si por algo me merece la pena continuar luchando es para ser testigo público de esa gran verdad, de tu misericordia y tu cuidado para con tus hijos.
Sea tu nombre bendito y alabado por siempre