¿Estás preocupado por tus hijos?

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5 Septiembre 2001
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¿Estás preocupado por tus hijos?

"TODOS TUS HIJOS SERÁN ENSEÑADOS POR EL SEÑOR, Y SE MULTIPLICARÁ LA PAZ DE TUS HIJOS" (Isaías 54:13)

El 85 % de todos los hijos criados por padres que oraron por ellos desarrolla una fe personal fuerte antes de los 13 años. "¡Pero mis hijos ya son mayores!". El Nombre de Dios es "Redentor", Él puede darte una nueva oportunidad. Arrepiéntete y entrega tu vida a Cristo; así ciclos generacionales de fracaso fueron destruidos. "Pero estoy preocupado sobre traer un hijo a este mundo tan malvado...". Los "hijos de la luz" son los que hacen retroceder las tinieblas. La promesa de Dios para ti es: "Mi Espíritu que está sobre ti y mis palabras que puse en tu boca, no faltarán jamás de tu boca ni de la boca de tus hijos ni de la boca de los hijos de tus hijos... desde ahora y para siempre" (Isaías 59:21). "Pero ¿cómo puedo competir con las influencias negativas de mi alrededor?". Todos los estudios confirman que los padres tienen la mayor influencia -mucha más que los amigos, la escuela o los medios de comunicación- en determinar el carácter y la trayectoria de un niño.

¡Piensa en ello como una carrera de relevos! El éxito no está basado en lo bien que corras como individuo, sino en lo bien que pases el testigo. Sólo cuando la historia de las generaciones venideras sea contada, sabrás si has ganado o perdido. David dijo: "Me enseñaste... desde mi juventud... Aun en la vejez y las canas..., no me desampares, hasta que anuncie tu poder a la posteridad, tu potencia a todos los que han de venir..." (Salmo 71:17,18). ¡No dejes caer el testigo! Haz que sea tu meta el criar hijos que tomen tu legado de fe para llevarlo más lejos que tú. Cuando te cometas a hacerlo, ¡Dios obrará contigo!

¡Jesús es el Señor!

Bob y Debbie Gass
 
Re: ¿Estás preocupado por tus hijos?

Deuteronomio 6,5-7

5 Amarás a Yahveh tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu fuerza.
6 Queden en tu corazón estas palabras que yo te dicto hoy.
7 Se la repetirás a tus hijos, les hablarás de ellas tanto si estás en casa como si vas de viaje, así acostado como levantado;


nadie ama lo que no conoce...

la paz,

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