Ecl. 9:5 Porque los que viven saben que han de morir, pero los muertos nada saben, ni tienen más recompensa. Su memoria cae en el olvido. 6 También perecen su amor, su odio y su envidia; y ya nunca más tendrán parte en todo lo que se hace debajo del sol. (...) 10 Todo lo que te venga a mano para hacer, hazlo según tus fuerzas, porque en el Seol, adonde vas, no hay obra, ni trabajo ni ciencia ni sabiduría.
Is. 38:18 Pues el Seol [Hades] no te exaltará ni te alabará la Muerte; ni los que descienden al sepulcro esperarán en tu verdad. 19 El que vive, el que vive, este te dará alabanza, como yo hoy. (...)
Sal. 6:5 porque en la muerte no hay memoria de ti; en el Seol, ¿quién te alabará?
... 30:9 ¿Qué provecho hay en mi muerte cuando descienda a la sepultura? ¿Te alabará el polvo? ¿Anunciará tu verdad?
... 115:17 No alabarán los muertos a Jah, ni cuantos descienden al silencio
Sal. 146:3 No confiéis en los príncipes ni en hijo de hombre, porque no hay en él salvación, 4 pues sale su aliento y vuelve a la tierra; en ese mismo día perecen sus pensamientos.
Fíjense que las cosas que se escribieron dicen con total claridad que no se hace nada consciente en el Seol, que es lo mismo que el Hades ... ni siquiera se alaba a Dios desde ahí, porque no es un lugar real donde hayan "almas" conscientes de nada. Al morir todos los humanos pierden la consciencia por completo. Así que es evidente que el relato del Lázaro y el rico es una parábola. Si los judios conocían las Escrituras sobre el estado en que están los muertos, ellos habrian entendido a Jesús correctamente y se habrían dado cuenta de que estaba usando una parábola como las otras.
Son los confundidos modernos los únicos que no entienden, porque heredaron la doctrina pagana de la inmortalidad del alma desde que los católicos se la sumaron.
Is. 38:18 Pues el Seol [Hades] no te exaltará ni te alabará la Muerte; ni los que descienden al sepulcro esperarán en tu verdad. 19 El que vive, el que vive, este te dará alabanza, como yo hoy. (...)
Sal. 6:5 porque en la muerte no hay memoria de ti; en el Seol, ¿quién te alabará?
... 30:9 ¿Qué provecho hay en mi muerte cuando descienda a la sepultura? ¿Te alabará el polvo? ¿Anunciará tu verdad?
... 115:17 No alabarán los muertos a Jah, ni cuantos descienden al silencio
Sal. 146:3 No confiéis en los príncipes ni en hijo de hombre, porque no hay en él salvación, 4 pues sale su aliento y vuelve a la tierra; en ese mismo día perecen sus pensamientos.
Fíjense que las cosas que se escribieron dicen con total claridad que no se hace nada consciente en el Seol, que es lo mismo que el Hades ... ni siquiera se alaba a Dios desde ahí, porque no es un lugar real donde hayan "almas" conscientes de nada. Al morir todos los humanos pierden la consciencia por completo. Así que es evidente que el relato del Lázaro y el rico es una parábola. Si los judios conocían las Escrituras sobre el estado en que están los muertos, ellos habrian entendido a Jesús correctamente y se habrían dado cuenta de que estaba usando una parábola como las otras.
Son los confundidos modernos los únicos que no entienden, porque heredaron la doctrina pagana de la inmortalidad del alma desde que los católicos se la sumaron.