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Publicación de la sección testimonios.- Noviembre 2002
Esculpidos en sus Manos
Isaías 49:16 He aquí que en las palmas te tengo esculpida:...
(La Santa Biblia Reina Valera 1909.)
~~~~~~~~~~~~~~ * ~~~~~~~~~~~~~~
En cierta oportunidad en que había fallecido un familiar, tuve que viajar a una ciudad e ir al entierro del mismo en el cementerio.
Gracias a Dios dicho familiar era creyente en Cristo, por lo cual el consuelo del Señor, estuvo presente, y además la oportunidad de que el Señor me permitiera traer una palabra de exhortación a los familiares que no eran cristianos.
Luego del entierro recorrí el cementerio con un tío mío, en busca de la tumba de una tía que había fallecido en el
Señor hacía varios años.
*** ( Esta tía, era la que me había conducido a los pies de Cristo, siendo yo de casi doce años.
Recuerdo de que cuando la vi por ultima vez, tenía una enfermedad terminal. Yo había viajado a su ciudad para encontrarme con ella.
Estuvimos hablando de muchas cosas, yo tenía que regresar... pero antes de irme, me tomó de las manos y me dijo: - Esta posiblemente se la última vez que nos veamos...
Con emoción le contesté: - Quizá sea la última vez en esta tierra... pero nos volveremos a ver en cielo.
Ella me dijo sonriente a pesar de los muchos dolores que la aquejaban: -Así es, Nos volveremos a ver!
Y así fue... al mes falleció, y pude tener en el funeral unas palabra de recordación. ) ***
Ahora años después, ya que tuve la oportunidad de ir al cementerio, quise buscar su tumba, no como quien busca un triste recuerdo sino con la esperanza que tiene todo hijo de Dios, en que en el día de Cristo allí se llevará a cabo una resurrección.
Una gran cantidad de cruces de cemento pintadas de blanco se extendían por la hierba.
Al acercarnos con mi tío en busca de "cual era la tumba de mi tía"(hermana de él fallecida) nos llevamos la sorpresa de que el transcurrir del tiempo, la lluvia y la erosión, habían borrado los nombres de muchas cruces.
El cementerio en cuestión, es humilde y no ostenta mármoles y lujo.
Sentí cierta tristeza pensar que en medio de todas esas cruces blancas que habían perdido la inscripción, alguna fuera la tumba de mi tía, no pudiendo identificarla.
Pero mi tío repentinamente me dijo: - La encontraremos... la cruz tenía una placa grabada con el nombre.!
Buscamos entonces... hasta que por fín la encontramos.!
Efectivamente tenía una placa "esculpida" la cual por ser así, el transcurrir del tiempo no pudo borrar la inscripción.
En medio de "cruces anónimas despintadas" ahí estaba la tumba identificada de una hija de Dios.!
En ese momento vino a mi mente el versículo de la Palabra, cuando Dios le dice a su pueblo: "en las palmas te tengo esculpida".
Pensé en ese momento en "aquellas tumbas anónimas" en donde seguramente alguna pertenezca a algún creyente que haya fallecido. A las vista de los hombres son desconocidas pero a las vista de Dios no!.
A cada alma que salvó, Cristo la tiene esculpida en sus manos.!
Esas manos esculpidas con los clavos de la cruz para salvación de todo aquel que crea en él.
Querido amigo/a quizás tengas familiares o amigos que hayan partido a la presencia del Señor.
Recuerda que en cada tumba de un hijo de Dios, un día ocurrirá un milagro.
1Te 4:16 Porque el mismo Señor con aclamación, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero:
Los muertos en el Señor, en su venida, serán los primeros en resucitar.!
Las tumbas de incr édulos en el arrebatamiento de la iglesia permanecerán con sus huesos.
Pero la tumba de los creyentes quedarán vacías! Resucitando el creyente con un cuerpo glorificado.!
Cada alma que Dios salvó están esculpidas en las manos de su Hijo, cada nombre está escrito en el libro de la vida.!
No existe mayor consuelo que estas palabras de Cristo:
Juan 11:25
Dícele Jesús: Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
A la memoria de Nemecia B. de Olivetti.quién en vida supo guiar a a su sobrino a los pies de Cristo
por Alejandro Riff
(c) 2002 www.palabrafiel.com.ar permitida su distribución con mención de la fuente.
Publicación de la sección testimonios.- Noviembre 2002
Esculpidos en sus Manos
Isaías 49:16 He aquí que en las palmas te tengo esculpida:...
(La Santa Biblia Reina Valera 1909.)
~~~~~~~~~~~~~~ * ~~~~~~~~~~~~~~
En cierta oportunidad en que había fallecido un familiar, tuve que viajar a una ciudad e ir al entierro del mismo en el cementerio.
Gracias a Dios dicho familiar era creyente en Cristo, por lo cual el consuelo del Señor, estuvo presente, y además la oportunidad de que el Señor me permitiera traer una palabra de exhortación a los familiares que no eran cristianos.
Luego del entierro recorrí el cementerio con un tío mío, en busca de la tumba de una tía que había fallecido en el
Señor hacía varios años.
*** ( Esta tía, era la que me había conducido a los pies de Cristo, siendo yo de casi doce años.
Recuerdo de que cuando la vi por ultima vez, tenía una enfermedad terminal. Yo había viajado a su ciudad para encontrarme con ella.
Estuvimos hablando de muchas cosas, yo tenía que regresar... pero antes de irme, me tomó de las manos y me dijo: - Esta posiblemente se la última vez que nos veamos...
Con emoción le contesté: - Quizá sea la última vez en esta tierra... pero nos volveremos a ver en cielo.
Ella me dijo sonriente a pesar de los muchos dolores que la aquejaban: -Así es, Nos volveremos a ver!
Y así fue... al mes falleció, y pude tener en el funeral unas palabra de recordación. ) ***
Ahora años después, ya que tuve la oportunidad de ir al cementerio, quise buscar su tumba, no como quien busca un triste recuerdo sino con la esperanza que tiene todo hijo de Dios, en que en el día de Cristo allí se llevará a cabo una resurrección.
Una gran cantidad de cruces de cemento pintadas de blanco se extendían por la hierba.
Al acercarnos con mi tío en busca de "cual era la tumba de mi tía"(hermana de él fallecida) nos llevamos la sorpresa de que el transcurrir del tiempo, la lluvia y la erosión, habían borrado los nombres de muchas cruces.
El cementerio en cuestión, es humilde y no ostenta mármoles y lujo.
Sentí cierta tristeza pensar que en medio de todas esas cruces blancas que habían perdido la inscripción, alguna fuera la tumba de mi tía, no pudiendo identificarla.
Pero mi tío repentinamente me dijo: - La encontraremos... la cruz tenía una placa grabada con el nombre.!
Buscamos entonces... hasta que por fín la encontramos.!
Efectivamente tenía una placa "esculpida" la cual por ser así, el transcurrir del tiempo no pudo borrar la inscripción.
En medio de "cruces anónimas despintadas" ahí estaba la tumba identificada de una hija de Dios.!
En ese momento vino a mi mente el versículo de la Palabra, cuando Dios le dice a su pueblo: "en las palmas te tengo esculpida".
Pensé en ese momento en "aquellas tumbas anónimas" en donde seguramente alguna pertenezca a algún creyente que haya fallecido. A las vista de los hombres son desconocidas pero a las vista de Dios no!.
A cada alma que salvó, Cristo la tiene esculpida en sus manos.!
Esas manos esculpidas con los clavos de la cruz para salvación de todo aquel que crea en él.
Querido amigo/a quizás tengas familiares o amigos que hayan partido a la presencia del Señor.
Recuerda que en cada tumba de un hijo de Dios, un día ocurrirá un milagro.
1Te 4:16 Porque el mismo Señor con aclamación, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero:
Los muertos en el Señor, en su venida, serán los primeros en resucitar.!
Las tumbas de incr édulos en el arrebatamiento de la iglesia permanecerán con sus huesos.
Pero la tumba de los creyentes quedarán vacías! Resucitando el creyente con un cuerpo glorificado.!
Cada alma que Dios salvó están esculpidas en las manos de su Hijo, cada nombre está escrito en el libro de la vida.!
No existe mayor consuelo que estas palabras de Cristo:
Juan 11:25
Dícele Jesús: Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá.
A la memoria de Nemecia B. de Olivetti.quién en vida supo guiar a a su sobrino a los pies de Cristo
por Alejandro Riff
(c) 2002 www.palabrafiel.com.ar permitida su distribución con mención de la fuente.