PRUEBA, NADA QUE VER CON EL EPIGRAFE
Voy a probar con un texto largo, pues veo que no puedo pegar aquí lo que deseo.
Juan, el autor
Al leer el Evangelio de Juan, no encontrará el nombre de alguien que se identifique como autor del mismo. Así ocurre también con los otros tres Evangelios: Mateo, Marcos y Lucas. Pero hay dos evidencias que indican que Juan es el autor del cuarto Evangelio.
La primera evidencia es interna: lo que el texto del Evangelio revela acerca del autor. Un personaje que aparece como «uno de sus discípulos, al cual Jesús amaba» se menciona a menudo a través del Evangelio. Y si bien se nombra a la mayoría de los doce discípulos, a este no; y uno de los discípulos que no se mencionan es Juan. De modo que mediante el procedimiento de eliminación, las pruebas internas llevan a la conclusión de que el discípulo «a quien Jesús amaba» era Juan.
La segunda evidencia es externa: la que se ocupa de lo que la tradición de la iglesia afirma acerca de la paternidad de este Evangelio. Y esa tradición presenta de manera sistemática a Juan, unode los hijos de Zebedeo, como el autor del cuarto Evangelio. Una de estas fuentes históricas, Ireneo, que era obispo de Lyon en la segunda mitad del segundo siglo y que estaba vinculado con Policarpo, que había conocido a Juan, le oyó testificar de que este discípulo del Señor publicó el Evangelio de Juan mientras vivía en Efeso.
De manera que las evidencias son bastante contundentes en el sentido de que Juan, el discípulo amado del Señor, escribió el Evangelio que lleva su nombre. (A propósito, también escribió 1, 2 y 3 Juan y Apocalipsis.)
En el Nuevo Testamento en general puede obtenerse más información acerca de Juan. Busque los pasajes que se indican abajo para ver qué puede aprender sobre él.
Marcos 1.19
Mateo 4.21; Lucas 5.10
Mateo 27.56; Marcos 15.40 (cf. Jn 19.25)
Juan 1.35–42
Juan 2.2
Mateo 4.19–21
Marcos 3.17; Lucas 9.54
Mateo 17.1
Juan 13.23
Juan 19.26, 27
Hechos 3.1–11
Hechos 4.5–21
Hechos 8.14–25
Gálatas 2.9
1 Juan 1.1–4
Apocalipsis 1.9
Fe viva
De lo que ha descubierto acerca de Juan, ¿qué es lo que encuentra más significativo? ¿Encuentra rasgos que le gustaría que caracterizaran su propia persona? Escriba sus respuestas aquí, luego pídale al Señor que comience a trabajar en su vida a fin de hacer que esos rasgos impriman huellas a su vida de fe.
Los destinatarios y el propósito del Evangelio
Varios de los libros del Nuevo Testamento indican a quiénes estaban destinados originalmente. Romanos fue para los creyentes de Roma, mientras que 1 y 2 Corintios se escribieron para abordar asuntos de la iglesia de Corinto. El Evangelio de Juan no indica en la misma forma quiénes serían sus lectores. Si bien expresa con claridad una preocupación por el pueblo judío fuera de la tierra de Israel (1.41; 4.25; 7.35; 10.16; 11.52; 20.31), su tono es más universal e incluye a los cristianos gentiles y a todos los incrédulos. Juan dice que fue escrito: «[…] para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre» (20.31). De modo que este es un libro para cualquiera que necesite a Jesús o que necesite profundizar su relación con Él. Imposible abarcar más.
Cuándo y dónde
Mientras que algunos eruditos bíblicos fechan la composición del Evangelio de Juan alrededor del año 70 d.C. o antes, la mayoría lo ubica entre el 85 y el 90 d.C., o por lo menos antes de la finalización del primer siglo.
La tradición eclesiástica, como ya lo hemos expresado, dice que este Evangelio fue escrito por Juan en la ciudad de Éfeso.
Información adicional
Lea la carta a los Efesios en el Nuevo Testamento y vea qué más puede descubrir acerca de Éfeso y la iglesia allí consultando algunos diccionarios o enciclopedias bíblicos. Descubrirá con rapidez lo difícil que era ser cristiano en la pagana Éfeso.
Fe viva
Es muy común que algunas personas se quejen de lo difícil que es ser cristiano en su comunidad. ¿Es usted una de ellas? ¿Qué ha encontrado hasta ahora en este estudio que quizás le indique que debe proceder para cambiar de actitud y perspectiva?
¿Qué le parece? ¿Está dispuesto a cambiar?
El mensaje de este Evangelio
Si alguna vez ha leído los Evangelio Sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas), sabe que tienen buena parte de su contenido en común, y que básicamente presentan la misma cronología de la vida y el ministerio, la muerte y la resurrección, de Jesús. El Evangelio de Juan es muy diferente. Su orden es más temático que cronológico. Y cuando presenta una cronología, aparece relacionada con el calendario religioso judío, mostrando a Jesús en muchas de las principales festividades religiosas, generando controversias sobre quién afirma ser y sobre lo que hace. Busque los versículos que se indican abajo y anote a qué celebración religiosa asiste Jesús, y lo que ocurre cuando lo hace.
2.13–25
5.1–18
6.4–15
7.2–52
10.22–39
11.55–12.43
13.1–5
18.1–19.42
Fe viva
¿Cree que los cristianos deben quedarse a la orilla del mar y no crear olas? Jesús no pensaba así. Su ejemplo deja bien en claro que estaba dispuesto a meterse en una situación y a remover las cosas, no por amor a la controversia, sino para despertar el interés y para extender el Reino de Dios. ¿Cuándo fue la última vez que la expresión de su fe generó una santa conmoción? Si ha pasado mucho tiempo, es posible que tenga que ocuparse en reflexionar sobre sí mismo para descubrir el porqué. Siéntase libre de escribir aquí lo que piensa.
Fe viva
Teniendo en mente esta información como telón de fondo, es hora de leer todo el Evangelio y de obtener una visión más clara del retrato que hace Juan de Jesús. Considere la posibilidad de adoptar como proyecto para esta semana la lectura de tres capftulos diarios y preparar su síntesis de lo que abarca cada día. Una media hora por día le proporcionará esta fructífera panorámica y lo ubicará en buena posición para las próximas sesiones de estudio.
¿Qué le impresionó más profundamente en esta panorámica de Juan?
¿Por qué cree que resaltan estas cosas en su caso?
Dedique un tiempo ahora mismo a presentar estas cosas ante Dios. Pídale que le muestre la importancia de estos asuntos y lo que quiere enseñarle por medio de ellos. Considere también su disposición para permitir cambios en su vida en estas áreas. Si no se siente dispuesto, de todos modos ponga al Señor al tanto de esta situación.
Editor General: Hayford, Jack W.; Autor: Watkins, William D., Una vida más allá de lo ordinario: El secreto de una vida abundante [Estudio de Juan], (Nashville, TN: Editorial Caribe) 1995