"El Rosario (u oración de "cuentas") fue introducido por Pedro el Ermitaño en el 1090 DC. fue copiado de los hindúes y los mahometanos (sic). Recitar oraciones repetitivamente es una práctica pagana y está condenado explícitamente por Cristo" (Mt 6:5-7)
este es un ejemplo:
LA FE Y y LOS COLLARES de CUENTAS
A pesar de su experimentado andar, El Viajero Ilustrado no deja de conmoverse ante las manifestaciones de fe que observa en sus distintas travesías mientras los creyentes desgranan oraciones. Aunque sólo parezca una sucesión de rezos, El Viajero sabe que a aquella devoción se impone un orden: varias religiones adoptaron un collar con úna cantidad determinada de cuentas para no "perderse" durante la repetición de las oraciones. Católicos, ortodoxos, musulmanes, tibetanos e hinduistas utilizan este tipo de collares, conocidos de este lado del mundo como rosarios.
El rosario musulmán tiene 33 a 99 cuentas de distintos materiales, de los menos costosos a piedras preciosas y hasta marfil. Además, cada 33 piezas se inserta una cuenta diferente. En el caso del culto tibetano, el collar de rezos recibe el nombre de mala y está formado por 108 cuentas y tres o cuatro contadores. Estas pequeñas piezas son elaboradas a partir de las semillas del árbol del bodhi, de sándalo o de loto. Al pasar las cuentas, los devotos tibetanos repiten una oración, mantra en sánscrito o tibetano
Son muchas los matices, costumbres y tradiciones que definen el estilo de estas piezas cargadas de fe. El rosario de la religión católica está compuesto de 50 a 150 cuentas, que habitualmente son de madera. Los rosarios de la iglesia ortodoxa, en cambio, tienen 25 o 50 cuentas y se fabrican en los monasterios. Estos tienen la particularidad de ser elaborados con lana negra varias veces anudada en forma de cruz. Al pasarlo, los devotos de esta religión repiten la Plegaria del Corazón.
Como el budista, el rosario hinduista tiene 108 cuentas y refleja el cosmos.
espero sus comentarios!
este es un ejemplo:
LA FE Y y LOS COLLARES de CUENTAS
A pesar de su experimentado andar, El Viajero Ilustrado no deja de conmoverse ante las manifestaciones de fe que observa en sus distintas travesías mientras los creyentes desgranan oraciones. Aunque sólo parezca una sucesión de rezos, El Viajero sabe que a aquella devoción se impone un orden: varias religiones adoptaron un collar con úna cantidad determinada de cuentas para no "perderse" durante la repetición de las oraciones. Católicos, ortodoxos, musulmanes, tibetanos e hinduistas utilizan este tipo de collares, conocidos de este lado del mundo como rosarios.
El rosario musulmán tiene 33 a 99 cuentas de distintos materiales, de los menos costosos a piedras preciosas y hasta marfil. Además, cada 33 piezas se inserta una cuenta diferente. En el caso del culto tibetano, el collar de rezos recibe el nombre de mala y está formado por 108 cuentas y tres o cuatro contadores. Estas pequeñas piezas son elaboradas a partir de las semillas del árbol del bodhi, de sándalo o de loto. Al pasar las cuentas, los devotos tibetanos repiten una oración, mantra en sánscrito o tibetano
Son muchas los matices, costumbres y tradiciones que definen el estilo de estas piezas cargadas de fe. El rosario de la religión católica está compuesto de 50 a 150 cuentas, que habitualmente son de madera. Los rosarios de la iglesia ortodoxa, en cambio, tienen 25 o 50 cuentas y se fabrican en los monasterios. Estos tienen la particularidad de ser elaborados con lana negra varias veces anudada en forma de cruz. Al pasarlo, los devotos de esta religión repiten la Plegaria del Corazón.
Como el budista, el rosario hinduista tiene 108 cuentas y refleja el cosmos.
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