David hermano, citaré varias veces esta respuesta para ir haciendo algún comentario en relación a la misma, pero por pedazos.Bueno yo no estaba cavilando sobre "el orígen" sino sobre la naturaleza.
Dios no dice "te voveré polvo de aquí en adelante". Adán fué formado de la tierra y lo terrenal es su ser. Si Dios lo hiciera "fantasma" en vez de carne y hueso... Seguiría siendo terrenal. La tierra es el dominio y la dimensión del hombre. El problema es que lo terrenal se contaminó y quedo obsoleto. El plan de Dios es que lo terrenal fuese también espiritual, pero mediante el acto libre de las partes. Pero eso no ocurrió. Pablo arranca desde ese hecho. Lo terrenal ya está intrinsecamente contaminado porque teniendo una debilidad (de otro modo Dios no podía garantizar libre albedrío, creo yo), pero con el pecado esa debilidad se endureció y se volvió insuperable. (El hombre quedó esclavizado en su voluntad y necesita un milagro para ser libre).
El segundo hombre no es celestial solo por su origen, sino por su naturaleza. Viniendo como hombre terrenal, igual a sus hermanos EN TODO excepto en el pecado demostró su naturaleza celestial en su obediencia.
No hay indicador alguno de que Pablo esté separando la venida de Dios como hombre de la vida, obra, muerte y resurrección fe Jesucristo. Dado eso y no lo que pudiese parecer poesía teológica...no me permito crear esas categorías en mi mente ni de forma maquillada, ni directa.
El bebé Jesús es un hombre del cielo.
El Jesús en la letrina es un hombre del cielo.
El Jesús agotado y con sueño es un hombre del cielo.
El Jesús oliendo a sudor y con los dientes amarillos es un hombre del cielo.
El Jesús aterrorizado en la cruz es un hombre del cielo.
Es su naturaleza.
No me es fácil escribir por un accidente que tuve hace unos días pero iré despacio.
Yo creo que el hombre es una "forma" con vida.
Y esa "forma" se hizo con materiales terrenales.
Tengamos en cuenta que quien la hizo no tuvo drama alguno en hacer vino de simple agua.
Para ejemplificar la cruel sencillez de mí creencia voy a invocar a la película Toy Story.
Allí "formas" diversas reciben vida y se comportan como seres vivientes.
Aunque puedan existir allí tres componentes por el momento yo me limitaría solo a dos de ellos, la forma (hombre/juguete) y la vida.
En el caso puntual del hombre (forma), esta es creada de la tierra y más tarde es animada por Dios soplando vida en sus narices.
No hay nada del hombre en el soplo, sino que es el hombre (forma) el que recibe aquel soplo impersonal que le da vida y que le pone en pié.
Si Dios retirara ese soplo, aquel hombre volvería a ser lo que era antes de recibirlo.
Dicho esto ahora me animaría a definir aquel tercer elemento.
Tenemos entonces a A que es el hombre o el juguete, o sea la forma.
Tenemos a B que es el poder de Dios impersonal que da la vida y...
una vez que aquel soplo entra en el hombre o el juguete, tenemos C que es una instanciación particular y concreta de aquella forma, una forma viviente.
Tenemos un individuo vivo, una voluntad, una conciencia y hasta una historia.
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