Kaliman:
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Originalmente enviado por: Kaliman
comop nace el mal en Luzbel?? generacion espontanea?
Obviamente este tema es increíblemente controvertido aún en los ámbitos filosóficos y humanistas. Es una pregunta frecuentemente hecha por ateos y agnósticos, pero una pregunta que creo sea justa y digna de ser contestada. (1 Pedro 3:15). Usualmente, el deseo de los humanistas es el de inferir que la maldad contradice la bondad de Dios. Dicen que si Dios creó todo lo existente, y si la maldad existe en el mundo, entonces Dios tiene que haber creado la maldad; y si Dios creó la maldad no es posible que sea bueno (o algo por el estilo).
Claro, uno de los atributos de Dios es que El es Omnisciente. Por lo tanto si es Omnisciente, él debió de saber de antemano que Satanás y el Hombre se rebelarían. Pero el hecho de que Dios lo sabía de antemano no debe confundirse con el hecho de que creó a sus criaturas eternas con capacidad de escoger. Por haberlos creado así los creó con potestad de tomar decisiones por sí mismos. A decir, los creó con libre albedrío. Por lo tanto las siguientes verdades deben de ser tomadas en consideración antes de brincar a conclusiones como hacen los humanistas:
1) La naturaleza de los agentes morales libres.
2) Las consecuencias por sus acciones.
3) La manera y momento en que Dios juzgará el mal y recompensará el bien.
Dios NO CREÓ el mal, criaturas malignas, o criaturas que solamente pueden producir obras malignas. Él creó agentes morales responsables que por sí solos violaron sus atributos de bondad ética y cometieron maldad, que conllevan consecuencias de maldad y juicio. El que la maldad no sea inmediatamente rectificada habla más acerca de la “gracia”, amor y paciencia de Dios, que lo opuesto. Él es Grande en misericordia... un Dios de Amor y Benevolencia.
Cuando la agencia moral humana, el juicio final y reconciliación eventual son considerados, ese problema del mal se evapora:
1. Dios es inherentemente benevolente y su deseo es el derrotar la maldad.
2. Dios es Omnipotente y capaz de derrotar la maldad.
3. La maldad, literalmente aún no ha sido derrotada.
4. Por lo tanto, un día será derrotada.
Lamentablemente muchos asumen erróneamente que Dios creó la maldad. Anteriormente escuche unos buenos ejemplos. Por ejemplo ¿existe tal cosa como la Luz? Sip... claro que existe la Luz. ¿Existe tal cosa como tinieblas, lo opuesto a la Luz? No. Las tinieblas no es lo opuesto a la luz, sino la ausencia de la luz.... y una “ausencia” no puede ser creada (por ello gastamos tanto en nuestra factura eléctrica je, je). Pero Dios sí creó la Luz (Gen 1:3). Si las tinieblas pudiesen ser algo por sí solas, podríamos crear tinieblas, pero no podemos. Solo podemos quitar lo existente... la Luz. Otro ejemplo lo vemos en la temperatura... ¿existe tal cosa literal como el calor? Sip... ¿existe tal cosa literal como el frío? No... La condición que llamamos frío, no es lo opuesto a calor, sino la ausencia de calor.
Si clasificamos la maldad como la ausencia del bien, entonces entendemos que no puede ser una cosa creada, y si no es una cosa creada, entonces Dios no la pudo haber creado.
Ahora, ¿qué tal, pasajes como Isaías 45:6,7? “yo Jehová, y ninguno más que yo, 7 que formo la luz y creo las tinieblas, que hago la paz y creo la adversidad. Yo Jehová soy el que hago todo esto.”
Dios
NUNCA debe de ser visto como el autor de la maldad moral, sino en contraste a la paz de la cláusula anterior. La maldad es la ausencia de lo que Dios creó “Bueno”. En el caso del bien y el mal, estos no pueden existir como cosas que son independientes a las circunstancias, sino que son aquello denominado por las acciones o características que no llenan el requisito de la meta “perfecta.“ Ahora... hay quien quizás este diciendo, “si estas cosas son acciones que pueden ser ejecutadas, entonces tienen que existir autonómicamente. Pero claro... eso NO ES cierto. En cierta ocasión mi hermano se dislocó un brazo horriblemente. Los huesos estaban increíblemente desalineados. Si le fuese posible a mi hermano sufrir el dolor, podría virar el brazo en posiciones imposibles para usted y yo lograrlo
. Nuestros brazos simplemente no se pueden doblar hacia atrás en aquella manera. Por lo tanto, simplemente porque posee esa habilidad, no lo consideramos como una ventaja a obtenerse, sino que lógicamente fuimos a buscarle asistencia médica para así ponerle el brazo en su lugar para que funcionase apropiadamente. Sabíamos que si lo dejábamos en esa posición, sería perjudicial a su habilidad total más que una ventaja.
De igual manera, la maldad y el pecado son el doloroso resultado de la caída o decisión tomada por la creación. El mundo y todo lo creado por Dios era originalmente
BUENO (Gen 1:31), pero la caída del hombre produjo ramificaciones y consecuencias que hasta el día de hoy sufrimos. Estas no son habilidades o metas a alcanzarse, sino que son los términos que utilizamos para transmitir la idea de la
“ausencia” del bien. Es por ello que los que reclaman el hecho de que Dios no puede mentir no le deja ser Omnipotente... porque es incapaz de lograr algo, los hace estar muy, muy equivocados. El acto de mentir es el acto de no ser capaz de decir la verdad. Cuando nos preguntamos porque Dios nos permitió la capacidad de hacer maldad, no estamos siendo justos en nuestra pregunta. Porqué no seguir esa pobre lógica e injustamente preguntar, ¿porqué nos creó con huesos que se quiebran? Pero la realidad es que El no quería que rompiésemos sus estatutos... pero lo hicimos (todos lo hemos hecho)... NOSOTROS lo hicimos … No Dios. Pero una vez lo hicimos, El en su infinito AMOR y BENEVELOENCIA, tomó los pasos para corregir el estado que nosotros escogimos estar.
El estar en Cristo es vital en esta manera. Estamos en una condición espiritual mucho mas peligrosa que un brazo roto... languidecemos por una enferma decisión llamada pecado. Dios mostró su amor por nosotros cuando aún estábamos muertos en nuestros delitos y pecados. Envió la cura para la humanidad al permitir que su Hijo, no solo bueno, sino “perfecto” se diese por nosotros a fin de que obtuviésemos la vida. Aún su tratamiento, lo hizo muy, muy simple. Todo lo que tenemos que hacer es confiar y asirnos de Jesús, creer que El murió por nuestros pecados y tomar una decisión por servirle. De esta manera podemos ser libres de los efectos del pecado para siempre; sin perder lo que inherentemente tenemos, a decir, nuestro libre albedrío. Esto lo llamamos la historia de la redención del hombre.
Dios te guarde rica y abundantemente...