El pontifex Maximus , en la Roma pagana, era también responsable de interpretar y declarar concerniente a lo divino. Desde el punto de vista teológico, proveía desisiones y respuestas (decreta y responsa) que llegaron a constituir el Ius pontifisium (ley pontificia). Tenía responsabilidad general respecto a las ceremonias públicas o del estado, supervisaba sacrificios privados, prevenía cualquier desviación de la tradición, y daba guianza respecto a la adoración y oración adecuadas (festo, ed. Linsay, 1913,p.198) además de esto, los pontifex maximus eran los reguladores del tiempo, pues tenían la máxima autoridad respecto al calendario. Ellos establecian los días sagrados, o decidían también cuando insertar un mes intercalado, y así sucesibamente. Su residencia oficial era el palacio ( Regia)[/I, en el centro del Forum donde se guardaban los archivos pontificios. allí se guardaban también todos los documentos concernientes a la religión pública (sacra publica); la lista de divinidades a invocar, (indigitamenta) ; fórmulas de oraciones (carmina) , par el cumplimiento de votos, dedicaciones, y consagraciones, reglas cúlticas (leges templorum) ; y prescripciones para sacrificios expiatorios (piacula) .