Re: El matrimonio y la sexualidad
En primer lugar Dios los bendiga a todos, tengo 20 años de casada y estoy empezando a seguir la palabra de Dios, pero tengo muchas dudas acerca de lo que es licito y lo que no es licito en la intimidad de una pareja acorde a la palabra de Dios, quiero que alguien cristiano, de preferencia mujer me pudiese orientar sobre mis dudas con base en la palabra de Dios.
Se que es un tema un poco escabroso, y por eso ruego la comprension de todos y si van a poner cosas ofensivas mejor se eximan de hacer su comentario. Dios los bendiga a todos.
Estimada Alicia
Esta inquietud, estimada hermana, es totalmente lícita; y ... no es nueva... También las hermanas corintias recien convertidas a Dios, le preguntaron a Pablo sobre este tema. (
1 Cor. 7)
¿Cual era la inquietud de las hermanas corintias?... Pues, entendiendo que ahora ellas eran "nueva criatura en Cristo", se preguntaban precisamente por la vida sexual que ellas llevaban con sus esposos.... ¿era lícita la vida sexual?...
Pablo contestó diciendoles que los esposos (marido y mujer) no debían negarse el uno al otro, que si el marido deseaba estar en la intimidad con su esposa, debían acceder, porque el varón era dueño del cuerpo de la mujer, como la mujer es dueña del cuerpo del marido. por tanto, para no ser tentados por el diablo (sentirse atraídos hacia otra persona), no debían negarse el uno al otro cuando sentían, o el deseo, o la necesidad de estar con su esposo-a (vers. 4)
Cuando llegamos al conocimiento del Señor, es cierto que Dios nos pide santidad; pero no es menos cierto que la santidad no se mide por si tenemos o no relaciones sexuales con nuestra esposa o esposo. Las relaciones sexuales fueron creadas por Dios, y permitidas en el contexto del matrimonio; por tanto, cuando estamos con nuestras esposas, no estamos cometiendo ningún pecado, ni estamos tampoco perjudicando nuestra santificación.
Sin embargo, NO TODO está permitido en nuestras relaciones sexuales... Dios nos llama ahora a una verdadera santidad;... y santidad, específicamente significa apartarse del mundo para Dios.
De modo que cuando ahora, somos nuevas criaturas, aún el aspecto sexual ya no es el mismo que teníamos antes de conocer a Dios. Y en esto debemos ser cuidadosos para no vivir "con afectos de concupiscencia" como viven los mundanos o los que no conocen a Dios: "
Porque ya sabéis qué mandamientos os dimos por el Señor Jesús. Porque la voluntad de Dios es vuestra santificación: que os apartéis de fornicación; que cada uno de vosotros sepa tener su vaso (esposa)
en santificación y honor; no con afecto de concupiscencia, como los Gentiles que no conocen á Dios" (1 Tes. 4:2-5)
De modo, estimada Alicia, que aún siendo cristianos, no existe ningún problema en mantener una vida sexual en nuestro matrimonio;... pero... ésta debe ser ordenada y cuidadosamente dentro de los márgenes que corresponden a quienes hemos sido hechos nuevas criaturas, y por tanto, aún nuestra vida sexual ahora es diferente a la que practican los mundanos.
Espero esto te ayude y satisfaga tu inquietud.
Dagoberto