Se ha dado por hecho en un comentario que el apóstol Pablo alguna vez estuvo casado, y que era viudo en la época que ejerció su ministerio.
Como la Biblia explícitamente no lo afirma ni lo niega, seguramente que hemos de atenernos a ciertas pautas del libro de Hechos así como de sus epístolas.
Todos tenemos derecho a nuestra opinión, y siendo este un curioso detalle que no incide en nuestra fe cristiana como asunto de relevancia, seguramente que la discusión, por polémica que se torne, no hará que la sangre llegue al río.
Es mi posición que Pablo siempre fue soltero y baso mi posición en 1Co 7:
7 “Quisiera más bien que todos los hombres fuesen como yo; pero cada uno tiene su propio don de Dios, uno a la verdad de un modo, y otro de otro. 8 Digo, pues, a los solteros y a las viudas, que bueno les fuera quedarse como yo”.
Quedan pues invitados a participar todos cuantos puedan aportar al tema.
Incluso, puede ser este epígrafe un crisol que pruebe nuestra disposición a cambiar de idea caso que veamos derrumbarse nuestra posición como equivocada y veamos levantarse la opuesta como cierta.
Probablemente hasta podamos dar un buen testimonio ante los TJ de cómo los cristianos bíblicos podemos discrepar entre nosotros sin pelearnos ni que nuestras diferencias de opinión alteren nuestra paz y comunión, por vehemente que se vuelva nuestra discusión.
Indudablemente que ninguno de nosotros querrá ser visto como porfiado, caso que las evidencias contrarias dejen claramente expuesto nuestro error.
Yo, por lo menos, asumo desde ya este compromiso ante todos ustedes.
Solamente que necesitaremos gracia de Dios para ello, ya que por nosotros mismos somos incapaces.
Saludos cordiales