Estimado Cristiano B.
En su último mensaje:
Usted toma una frase aislada, supone y cita la Escritura, escribiendo:
Rogelio, dijo usted:
"El Israel Fiel y la Iglesia nunca estuvieron disociados..."
Supongo que no se refiere al "Israel espiritual" de (Rom 9:6), el cual somos todos los creyentes miembros de la Iglesia: "No que la palabra de Dios haya fallado; porque no todos los que descienden de Israel son israelitas, NI POR SER DESCENDIENTES DE ABRAHAM, son todos hijos......”
Respondo ahora:
La frase que usted cita está fuera del contexto completo de mi mensaje. Lo que se ha escrito es lo siguiente:
""La hermosa enseñanza que El Señor le encomendó a Pablo y que nos muestra la unidad espiritual de Israel y de la Iglesia, como lo comenta Berkof en cuanto a Romanos 11 y Efesios 2, es muy importante, porque no solo nos muestra que el Israel Fiel y la Iglesia nunca estuvieron disociados, sino que también explícitamente nos enseña que la incorporación de los gentiles creyentes a la Iglesia existente en el Cristo Eterno y por tanto entre los Judíos Fieles, se traduce en que los gentiles son incorporados a lo que ya existe, de hecho Pablo nos muestra que los gentiles creyentes son sustentados por la Rica Raíz del olivo y que ellos de sí mismos no sustentan nada........""
Y esto, es apenas la introducción de todo lo que se ha escrito en el mensaje que usted cita de forma sesgada e incompleta.
Ahora bien, si usted no quiere tomar el mensaje completo y sobre el mostrar sus creencias personales, entonces como mínimo debería explicar a este foro, lo enseñado por el Apóstol Pablo por Encargo del Señor Jesucristo, es decir, mostrarnos en detalle que es lo que usted entiende, en cuanto a lo que se enseña, específicamente, en Romanos 11:11-18 y Efesios 2:11-16. Porque sobre eso trata el mensaje completo.
Usted dice:
Porque usted, se refirió al Israel descendiente según la carne, por raza o sangre humana.
Respondo:
Está usted citando aquí, otro mensaje, y nuevamente toma una frase aislada de mi respuesta a su pregunta y que ni siquiera comentó. El contexto de lo escrito es el siguiente:
Usted preguntó:
Si la Iglesia ya existía, ¿para qué vino Cristo?
Se le Respondió:
Para desgajar de Ella a los hijos de Satanás y réprobos en cuanto a la fe. Para confirmar en Ella a los Hijos de Dios, del linaje de Abraham. Para incorporar en Ella a todos los gentiles que estaba establecido desde antes de la fundación del mundo que fueran arrebatados a Satanás, porque eran Santa Propiedad de Cristo. “Para derribar la pared intermedia de separación, aboliendo en la carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz, y mediante la cruz reconciliar con Dios a ambos en un Solo Cuerpo, matando en ella las enemistades”. (ref. Ef.2)
Respondo ahora:
Si definitivamente no quiere replicar la respuesta, de forma completa, ordenada y sin sesgo, a la pregunta que usted mismo formuló, entonces Cristiano B., explique a este foro que es lo que usted entiende por Hijo de Dios, y cuales son sus reparos en cuanto a que; efectivamente dentro de los hombres que eran linaje de Abraham, evidentemente según la carne, se encontraban muchos que eran Hijos de Dios en Jesucristo y que de hecho muchos de ellos creyeron al Cristo de Dios.
Dice usted:
Pero, aún así, es errada su afirmación transcrita inicialmente, pues cuando la nación de Israel tenía el ministerio antes de Cristo, todavía no existía la Iglesia, luego no pudieron estar "disociados" pero tampoco "asociados" pues en ese tiempo no convivieron.
Respondo:
Estimado Cristiano B., confunde usted al lector:
Veamos;
¿Cual afirmación transcrita inicialmente según su opinión es errónea?
1- La que usted supone, en base a la cita de una frase aislada y fuera de contexto de la introducción de un mensaje que no puede o no quiere comentar.
2- La que usted mal entiende al tomar una cita aislada, de mi segundo mensaje, en cuanto a los que efectivamente son Hijos de Dios y que provienen del linaje de Abraham.
Dice usted:
Es evidente, que después de Cristo, cuando nació la Iglesia, estuvieron "disociados" desde el comienzo, pues la Iglesia siempre fue perseguida por la nación judía. No doy citas, porque son muchísimas. Persiguieron a la Iglesia desde antes de que mataran a Jesucristo, su cabeza y fundador: "Y por esta causa los judíos perseguían a Jesús, y procuraban matarle" (Juan 5:16); y en Hechos de los Apóstoles puede usted comprobar como siguió persiguiendo a la Iglesia la nación de Israel: "Y Saulo asolaba LA IGLESIA, y entrando casa por casa, arrastraba a hombres y a mujeres, y los entregaba en la cárcel" (Hech 8:3). Miren como Pedro explica a los judíos (la Casa de Israel) lo que es la Iglesia y como debían hacer para ingresar a ella: "Sepa, pues, ciertísimamente toda LA CASA DE ISRAEL, que a este Jesús a quien vosotros crucificasteis, Dios le ha hecho Señor y Cristo. Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: Varones hermanos, ¿qué haremos? Pedro les dijo: ARREPENTÍOS, Y BAUTÍCESE CADA UNO DE VOSOTROS en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo. Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare. Y con otras muchas palabras testificaba y les exhortaba, diciendo: SED SALVOS DE ESTA PERVERSA GENERACIÓN. Así que, LOS QUE RECIBIERON SU PALABRA FUERON BAUTIZADOS; Y SE AÑADIERON AQUEL DÍA como tres mil personas. Y perseveraban EN LA DOCTRINA DE LOS APÓSTOLES, en la comunión unos con otros, en el partimiento del pan y en las oraciones. Todos LOS QUE HABÍAN CREÍDO estaban juntos, y tenían en común todas las cosas
Y EL SEÑOR AÑADÍA CADA DÍA A LA IGLESIA LOS QUE HABÍAN DE SER SALVOS" Luego "la Casa de Israel" (la nación judía) no era salva, ni mucho menos era Iglesia, era una generación perversa, tuvieron que arrepentirse y bautizarse para añadirse a la Iglesia y ser salvos. ¿Cómo era que el Señor añadía a la Iglesia, de entre los judíos, a los que habrían de ser salvos? Luego, no eran de la Iglesia los judíos (ni aún los piadosos, que estaban en Jerusalén durante esa fiesta de Pentecostés) como usted pretende.
Respondo:
Mi única pretensión, estimado Cristiano, es que usted se atreva a comentar sin sesgo y en su contexto los mensajes que se han puesto en esta apertura. De forma que avancemos ordenadamente, el lector no se confunda y este excelente tema sirva de edificación.
En Cristo
Rogelio