Cuando Dios se sentó en nuestra asamblea

piscineros

Finito en la infinitud
23 Diciembre 2024
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"Percibí con claridad que estaba participando en un evento histórico verdaderamente significativo, donde se había alcanzado un consenso con respecto al valor supremo de la persona humana, un valor que no se originó en la decisión de un poder temporal, sino en el hecho mismo de existir – lo que dio origen al derecho inalienable de vivir sin privaciones ni opresión, y a desarrollar completamente la propia personalidad. En el Gran Salón... había una atmósfera de solidaridad y hermandad genuinas entre hombres y mujeres de todas las latitudes, la cual no he vuelto a ver en ningún escenario internacional."

"El Dr. Chang era un pluralista y mantenía de una manera encantadora que existía más de un tipo de realidad concluyente. La Declaración, decía, debería reflejar ideas que no se identificaran únicamente con el pensamiento occidental y el Dr. Humphrey tendría que saber aplicar un criterio ecléctico. Su comentario, aunque dirigido al Dr. Humprhey, en realidad estaba dirigido al Dr. Malik, quien no tardó en replicar explicando detenidamente la filosofía de Tomás de Aquino.El Dr. Humphrey se sumó con entusiasmo al debate, y recuerdo que en un momento dado el Dr. Chang sugirió que tal vez convendría que la Secretaría dedicara algunos meses a estudiar ¡los fundamentos del confucianismo!."


El mayor logro de la Humanidad tuvo lugar el 10 de diciembre de 1948, una fecha que debiera estar impresa en nuestra psique como expresión máxima de la fraternidad universal que Jesucristo logró vislumbrar dos mil años antes.

No hemos vuelto a lanzar bombas nucleares contra semejantes, los muertos en guerras han llegado a los mínimos niveles históricos, la nación judía recibió el apoyo unánime para tratar de encaminarles a tener un lugar en este mundo, por una vez pareció hacerse presente el Reino de Dios.

En 23 años se cumplirá el centenario de ese irrepetible momento que marcó un antes y un después.

Los problemas de hoy son los de ayer y será los de mañana, el Evangelio pretendía evitar tantos acontecimientos que tuvieron lugar a lo largo de dos milenios, sus garantes siempre han sido bellas y santas personas, pues el Evangelio sale del propio Evangelio e ilumina desde siempre buscando hacernos ver que somos una familia humana, una hermandad sin fronteras donde no hay naciones, ni razas, ni credos, solamente una relación entre hermanos con un único Padre o Madre, que es la Verdad misma, el Verbo que nos hizo y que en nuestra fe encarnó Jesús de Nazaret.

Cuando Dios colgado del madero con su Hijo contempló nuestras actitudes, nuestro odio, nuestra insensatez gritó: "Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen."

Creo que Jesús estaba vislumbrando un montón de posibles acontecimientos, pudo observar en milésimas de segundo millones de almas muriendo en medio de nuestras cruces, nuestros delirios de grandeza, nuestra arrogancia nacionalista, nuestra tribalidad.

La semilla de mostaza dio y dará frutos, sigue plantada en nuestros corazones, es nuestra sombra y nuestro cobijo. Resucitemos con Jesús a una nueva y verdadera Vida.