DLB a TODOS
Aui simplemente hago un CUT&PASTE de algo sobre los primeros cristianos.
Algunas citas de los grandes maestros cristianos de los primeros siglos, que no encajan precisamente con las ideas de los cristianos evangélicos del siglo XXI:
"...mirándome después dijo: 'Enterrad este cuerpo en cualquier parte, ni os preocupéis más de su cuidado; solamente os ruego que os acordéis de mí ante el altar del Señor estéis donde estéis'" (San Agustín , Confesiones, 9, 11, 28)
Son palabras que Santa Mónica dirige a su hijo Agustín y a su hermano antes de morir. Como se ve en el siglo IV se ofrecen oraciones y el sacrificio del altar por los difuntos.
"No creería en el Evangelio, si no me moviera a ello la autoridad de la Iglesia católica"
(San Agustín, fund. 5, 6)
San Agustín (354-430)
"Esta fe que hemos recibido de la Iglesia, la guardamos con cuidado,
porque sin cesar, bajo la acción del Espíritu de Dios, como un
contenido de gran valor encerrado en un vaso excelente, rejuvenece y
hace rejuvenecer el vaso mismo que la contiene"
(San Ireneo de Lyon, har. 3, 24, 1)
San Ireneo nació en el 140 y desarrolló toda su actividad en el siglo II
"Nadie puede tener a Dios por Padre si no tiene a la Iglesia por
madre" (San Cipriano*, unit.eccl.: PL 4, 503A).
San Cipriano de Cartago (200-258)
"Cada fiel tiene a su lado un ángel como protector y pastor para
conducirlo a la vida" (San Basilio*, Eun., 3, 1)
San Basilio el grande(329-379)
"(María) fue virgen al concebir a su Hijo, Virgen durante el
embarazo, virgen en el parto, virgen después del parto, virgen
siempre" (San Agustin, serm. 186, 1)
«Levántate, tú que antes estabas tumbado,durmiendo... Levántate y ven corriendo a la Iglesia: aquí está el Padre, aquí está el Hijo, aquí está el Espíritu Santo» (San Ambrosio, In Lucam, VII).
San Ambrosio de Milán (337-397)
"Nosotros adoramos a Cristo porque es el Hijo de Dios; en cuanto a los mártires, los amamos como discípulos e imitadores del Señor, y es justo, a causa de su devoción incomparable hacia su rey y maestro; que podamos nosotros, también nosotros, ser sus compañeros y sus condiscípulos" (San Policarpo de Esmirna, mart. 17)
San Policarpo de Esmirna fue discípulo directo del apóstol Juan. Murió poco después de su regreso a Roma en el 156
"Si en la Iglesia no hubiera remisión de los pecados, no habría ninguna esperanza, ninguna expectativa de una vida eterna y de una liberación eterna. Demos gracias a Dios que ha dado a la Iglesia semejante don" (San Agustín, serm. 213,8)
Te pido, te pido, oh Virgen Santa, que yo obtenga a Jesús de aquel Espíritu de quien tú misma lo has engendrado. Reciba mi alma a Jesús de Aquel Espíritu, por el Cual tu carne ha concebido al mismo Jesús...Que yo ame a Jesús con Aquel mismo Espíritu en el Cual tú lo adoras como Señor y lo contemplas como Hijo (San Ildefonso de Toledo, s. VI, La virginidad perpetua de María, 12)
Dios te salve, llena de gracia. Y en verdad que es llena de gracia, porque a los demás se da con medida, pero en María se derramó al mismo tiempo toda la plenitud de la gracia. Verdaderamente es llena de gracia aquella por la cual toda criatura fue inundada con la lluvia abundante del Espíritu Santo (SAN JERÓNIMO, Sermón sobre la Asunción de la Virgen).
San Jerónimo (331-419)
Y acabo con un par de citas muy buenas de dos de los más grandes Papas de toda la historia:
Reconoce, cristiano, tu dignidad y, puesto que has sido hecho partícipe de la naturaleza divina, no pienses en volver con un comportamiento indigno a las antiguas vilezas.
(San León Magno, Papa: Sermón 1 en la Navidad del Señor, 1-3)
En el tiempo de Navidad, la Iglesia pone ante los ojos de nuestra alma la maternidad de María, y lo hace el primer día del año nuevo. Lo hace para poner también de relieve la dignidad de toda madre, para definir y recordar el significado de la maternidad, no sólo en la vida de cada hombre, sino también en toda la cultura humana. La maternidad es la vocación de la mujer.
(JUAN PABLO II, Aloc. 10-1-1979).
Aui simplemente hago un CUT&PASTE de algo sobre los primeros cristianos.
Algunas citas de los grandes maestros cristianos de los primeros siglos, que no encajan precisamente con las ideas de los cristianos evangélicos del siglo XXI:
"...mirándome después dijo: 'Enterrad este cuerpo en cualquier parte, ni os preocupéis más de su cuidado; solamente os ruego que os acordéis de mí ante el altar del Señor estéis donde estéis'" (San Agustín , Confesiones, 9, 11, 28)
Son palabras que Santa Mónica dirige a su hijo Agustín y a su hermano antes de morir. Como se ve en el siglo IV se ofrecen oraciones y el sacrificio del altar por los difuntos.
"No creería en el Evangelio, si no me moviera a ello la autoridad de la Iglesia católica"
(San Agustín, fund. 5, 6)
San Agustín (354-430)
"Esta fe que hemos recibido de la Iglesia, la guardamos con cuidado,
porque sin cesar, bajo la acción del Espíritu de Dios, como un
contenido de gran valor encerrado en un vaso excelente, rejuvenece y
hace rejuvenecer el vaso mismo que la contiene"
(San Ireneo de Lyon, har. 3, 24, 1)
San Ireneo nació en el 140 y desarrolló toda su actividad en el siglo II
"Nadie puede tener a Dios por Padre si no tiene a la Iglesia por
madre" (San Cipriano*, unit.eccl.: PL 4, 503A).
San Cipriano de Cartago (200-258)
"Cada fiel tiene a su lado un ángel como protector y pastor para
conducirlo a la vida" (San Basilio*, Eun., 3, 1)
San Basilio el grande(329-379)
"(María) fue virgen al concebir a su Hijo, Virgen durante el
embarazo, virgen en el parto, virgen después del parto, virgen
siempre" (San Agustin, serm. 186, 1)
«Levántate, tú que antes estabas tumbado,durmiendo... Levántate y ven corriendo a la Iglesia: aquí está el Padre, aquí está el Hijo, aquí está el Espíritu Santo» (San Ambrosio, In Lucam, VII).
San Ambrosio de Milán (337-397)
"Nosotros adoramos a Cristo porque es el Hijo de Dios; en cuanto a los mártires, los amamos como discípulos e imitadores del Señor, y es justo, a causa de su devoción incomparable hacia su rey y maestro; que podamos nosotros, también nosotros, ser sus compañeros y sus condiscípulos" (San Policarpo de Esmirna, mart. 17)
San Policarpo de Esmirna fue discípulo directo del apóstol Juan. Murió poco después de su regreso a Roma en el 156
"Si en la Iglesia no hubiera remisión de los pecados, no habría ninguna esperanza, ninguna expectativa de una vida eterna y de una liberación eterna. Demos gracias a Dios que ha dado a la Iglesia semejante don" (San Agustín, serm. 213,8)
Te pido, te pido, oh Virgen Santa, que yo obtenga a Jesús de aquel Espíritu de quien tú misma lo has engendrado. Reciba mi alma a Jesús de Aquel Espíritu, por el Cual tu carne ha concebido al mismo Jesús...Que yo ame a Jesús con Aquel mismo Espíritu en el Cual tú lo adoras como Señor y lo contemplas como Hijo (San Ildefonso de Toledo, s. VI, La virginidad perpetua de María, 12)
Dios te salve, llena de gracia. Y en verdad que es llena de gracia, porque a los demás se da con medida, pero en María se derramó al mismo tiempo toda la plenitud de la gracia. Verdaderamente es llena de gracia aquella por la cual toda criatura fue inundada con la lluvia abundante del Espíritu Santo (SAN JERÓNIMO, Sermón sobre la Asunción de la Virgen).
San Jerónimo (331-419)
Y acabo con un par de citas muy buenas de dos de los más grandes Papas de toda la historia:
Reconoce, cristiano, tu dignidad y, puesto que has sido hecho partícipe de la naturaleza divina, no pienses en volver con un comportamiento indigno a las antiguas vilezas.
(San León Magno, Papa: Sermón 1 en la Navidad del Señor, 1-3)
En el tiempo de Navidad, la Iglesia pone ante los ojos de nuestra alma la maternidad de María, y lo hace el primer día del año nuevo. Lo hace para poner también de relieve la dignidad de toda madre, para definir y recordar el significado de la maternidad, no sólo en la vida de cada hombre, sino también en toda la cultura humana. La maternidad es la vocación de la mujer.
(JUAN PABLO II, Aloc. 10-1-1979).